Tras oir aquello, el pelinegro lo miro perplejo.
- ¿Qué…? –Sasuke lo miro confundo- ¿Me estas jodiendo…? ¿No?
- No. –Naruto le miraba con tristeza.
- Naruto… ¿es enserio? No puedes hablar enserio…
- Te digo que fui yo, y lo siento… pero ya no puedo ocultártelo más, cada vez que te veo, siento la culpa de haberlo hecho, y de que yo ocasione tú accidente…
- No… -Sasuke se detuvo.
- Bueno, en realidad no fui yo, fue mi compañero… y
- Espera, ¿Qué?
- Sasuke… lo lamento.
- No entiendo… no entiendo nada de esto.
- Deja que te lo explique… por favor –le rogo Naruto
Sasuke lo miro con indiferencia, era como si lo que sintiera por él se desvaneciera, no esperaba nada de eso, estaba completamente perplejo.
Decidieron sentarse, eso haría lo haría más fácil, creyó Naruto.
- ¿Y bien? ¿Por qué? -cuestiono el pelinegro.
- Yo… Sasuke yo nunca quise hacerlo… pero… Sombra… él me dijo cosas… me hizo pensar en lo que podría hacer con todo el dinero, creí que si salía bien podría volverme rico, dejar de vagar para comer, que ya no tendría que esconderme de la casera… yo solo quería dejar de ser pobre Sasuke, nunca quise dañarte a ti, todo lo que te paso es mi culpa… -explicaba, mientras algunas lágrimas resbalaban por su rostro.
- Naruto… -la expresión del pelinegro había cambiado, no era indiferente, sino más bien comprensivo.
- Solo deseo que me perdones, no quiero nada más, solo perdóname… no podría vivir si no lo haces…
Sasuke sintió una punzada en el corazón, y el fuerte deseo de llorar.
- N-Naruto, ¿y el dinero…? ¿Y las cosas? –pregunto, evitando que las lágrimas cayeran de sus ojos.
- Lo que yo tenía… -limpio su rostro, aunque sin mucho sentido porque seguía llorando- lo ocupe para pagar por ti en el hospital… no sé qué habrá hecho Sombra.
El pelinegro se había sonrojado un poco al escuchar que lo gasto en él, no estaba enojado con Naruto, en realidad no podía estarlo. Después de todo su apoyo, de su compañía, se sentía bien a su lado, y simplemente no podía enojarse, aunque estuviera en todo su derecho de hacerlo.
- ¿Quién… es Sombra? –evitaba por completo que su voz cambiara la tonalidad seria, quizá así pensó, el rubio se abriría más.
- Él tuvo la idea… el me busco para que lo ayudase…
- Él te extorsiono. –Sasuke concluyo.
Después de eso, el pelinegro tomo las manos del rubio y le sonrió, era la primera vez que Naruto lo veía sonreír. Así lo calmo, entonces, se puso de pie e instó al otro a hacer lo mismo. Sin decirme más, ambos siguieron el camino hasta la casa de Sasuke, siempre iban a casa de Sasuke.
Ya estando allí, el dueño de casa corrió a la cocina, tomo el teléfono de red fija y comenzó a hacer miles de llamadas. Naruto no entendía mucho de lo que decía por el teléfono, así que el solo decidió quedarse en el salón.
Al fin terminada la llamada, Sasuke con rostro triunfante se dirigió hacia el salón, para hablar con Naruto.
- Meteremos a ese desgraciado a la cárcel, el abogado de mi hermano dice que si dices que te extorsiono para entrar a robar con él, tú pasarías a ser otra víctima más de su delito. A lo más te pondrían algunos cargos por utilizar el dinero, que con gusto yo podría pagarte y…
- Sasuke –lo interrumpió- no entiendo, ¿Por qué me ayudas? Después de todo lo que…
- No me has hecho nada. Solo ha sido obra del karma, o alguna serie de eventos desafortunados. Pero sabes, si no hubieses hecho lo que hiciste, jamás te habría conocido, llámalo destino, llámalo casualidad, pero algo hizo que nos conociéramos, y fue ese robo…
Los ojos de Sasuke parecían algo conmovidos; tomo a Naruto de los hombros y fijamente continúo diciendo
- Además… Naruto, tú me has ayudado mucho, veras… nunca he sido bueno demostrando sentimientos… Cuando mi madre murió no llore, al morir mi padre solo sentía decepción… y saber lo de mi hermano en verdad me destrozo… Pero tu estuviste allí, y quizá no te des cuenta pero… -esta vez, su voz se quebró, y sus ojos se pusieron llorosos- todo lo que siento ahora es por ti, ahora yo me expreso mejor, porque tú me has hecho esto, tú me has ayudado, de muchas maneras… no me importa lo que hiciste porque…
Naruto lo miraba con expectación, sus ojos brillaban como nunca, su corazón latía cada vez más rápido, Sasuke siempre despertaba esas emociones en él, Sasuke lo había despertado, tal como el mismo lo había hecho con Sasuke.
No podía seguir escuchando, sus instintos y deseos eran más fuertes. Mientras más lo oía mas lo deseaba, el deseaba besarlo.
Así que lo interrumpió, rápidamente rozo los labios de Sasuke. El pelinegro, aunque sorprendido, le correspondió.
En ambos, un fuerte sentimiento crecía, ese sentimiento era de amor. A pesar de todo, a pesar de los sucesos pasados, ellos se tenían, ellos se necesitaban mutuamente, ellos eran lo que cada uno necesitaba.
El beso temeroso de Naruto, pronto se volvió uno más apasionado, abriéndose paso con la lengua, para solo separarse porque necesitaban respirar.
Ambos se sonrieron, ambos se querían, era lo que ambos querían.