Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La no tan normal vida del cazador por Allure

[Reviews - 258]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ni Supernatural ni sus personajes me pertenecen...bla,bla,bla...

No quería despertar, aun respirar se le hacía algo difícil pero el repentino recuerdo de la calidez que se había extendido por su cuerpo hizo que abriera los ojos para poder darle un rostro a la presencia que sabia le salvara la vida, sin embargo, estaba solo en una habitación de hospital ,miro a su alrededor tratando de recordar lo que sucediera después que la vampiresa lo atacara pero todo era tan difuso, lo único que recordaba era que la muy perra iba a atacar a Dean…Sam no podía creer que había olvidado que su hermano y su sobrinita estaban en peligro, quiso ponerse de pie pero se sentía un tanto mareado todavía, iba a hacer otro esfuerzo por salir de la camilla cuando la puerta de su cuarto se abrió apareciendo en el umbral su hermano mayor que al verlo despierto casi corrió hasta su lado

—Sammy… ¿estás bien?—el menor se alegro de ver a su hermano, aunque lo que más lo alegro fue verle en buen estado, al parecer Alyssa había fallado—esa puta intento asesinar a mi nena—

—Lo sé…me lo dijo después que me clavo la jeringa en el cuello, me alegro que no le resultara, Castiel te ayudo ¿verdad?—Sam rio al ver a su hermano dar un salto cuando el ángel apareció a su lado—Hola, Cass… ¿Cómo te va todo?—

—Bien—el castaño estaba más que acostumbrado a que su cuñado tuviera el carisma de una roca así que aquella respuesta no le pareció tan extraña—pero quien rescato a Dean fue Gabriel, no yo—

— ¿¡Q—Que!?¡Maldita sea, Cass! Te ordene que no le dijeras eso a Sam—un pequeño sonrojo apareció en el rostro del rubio quien quejándose de su ángel salió de la habitación, Cass y Sam se quedaron mirando el lugar por donde el rubio desapareciera

—No sé si sea por el embarazo pero está más sensible que antes, odia a Gabriel y el que él lo haya salvado no debe haberle hecho muy bien a su orgullo—comento acomodando la almohada tras su cabeza—pero me alegra que lo único dañado sea su tonto orgullo y no mi sobrina—

—A mí también me alegra—sonrió Castiel sorprendiendo a Sam que por poco no llama a su hermano para que compruebe que el ángel es quien dice ser—pero ahora tenemos problemas más graves—

—Dime que el cielo no se ha enterado aun del bebe—el ángel negó pero aun así el rostro lleno de preocupación hizo que se le cortara un poco la respiración al cazador— ¿es algo relacionado a la presencia que sentiste en el estacionamiento del motel?—

—La bruja que los ataco…está viva—Sam se levanto como si tuviera un resorte en la espalda, no podía creer lo que el ángel estaba diciéndole pero bien sabia que el ojiazul estaba negado en eso de la mentira—regrese a investigar y descubrí que la mujer a la que salvaron estaba del lado de esa criatura, le dio una especie de poción a Dean con la que el pudo quedarse embarazado—

—Pero… ¿Por qué haría tal cosa? Jamás en nuestra vida nos habíamos topado con algo así—su mente estaba trabajando a mil por segundo en un intento de recordar algo sobre la criatura en todos los libros que alguna vez leyera— ¿Por qué hizo que mi hermano se embarazara de ti?—

—Quiere devorar a mi hija…no sé porque razón…pero al estar allí, le pedí ayuda a Bobby y el me informo que esa mujer llamada Megan había sido asesinada la misma noche que la rescataron por un tal Edward—Castiel bajo la mirada mientras hablaba, sentía la ira burbujear dentro de su pecho al recordar lo que la criatura le dijera—al parecer sabía que mi relación con Dean era muy cercana y se aprovecho de eso…esa criatura es quien asesino a la hermana del monstruo que ataco a Dean—

—Eso quiere decir que todo este tiempo ha estado tras nosotros y no nos hemos dado cuenta de nada—esta vez le toco a Sam sentirse enfadado aunque más consigo mismo que con la criatura esa—es posible que ahora mismo este observándonos—

—Es muy probable, me mantendré cerca de Dean en cada momento—el ángel se quedo mirándolo fijamente como intentando adivinar algo en su cara—no te preocupes, Gabriel también esta vigilándolos…fue él quien te salvo a ti también—

Sin decir nada mas el ángel desapareció para volver a aparecer al lado del rubio que se encontraba sentado en el asiento trasero del impala, para estar embarazado se movía bastante rápido, iba a comentárselo al rubio pero recordando el consejo que su hermano mayor, Gabriel le diera sobre la extrema sensibilidad que podían llegar a tener las mujeres embarazadas, aunque sabía que Dean no era una mujer si sabía que el rubio se había puesto un poco más sensible respecto a su físico, así que se guardo cualquier comentario sobre esa parte, Dean se quedo mirándolo en silencio mientras se acariciaba distraídamente la barriga

—La doctora West me examino y dice que la niña está muy bien…te lo digo por si querías saberlo—el rubio desvió su mirada hacia el suelo sintiéndose muy tonto por decirle aquello al ángel, de verdad estaba a punto de convertirse en una mujer—me siento como una mierda…hasta Gabriel debe salvarme—

—No hay nada de malo en que Gabriel te ayude, no veo el problema—el ángel puso su mano sobre la mano con la que el humano estaba acariciándose el estomago parando su movimiento—Me siento feliz que ustedes estén bien—

—Ya…pero eso no borra el hecho que soy un inútil—suspirando el humano se soltó de la mano del ángel quien recurriendo a toda su paciencia volvió a coger su mano esta vez apretándola más firmemente—Cass, déjame…tengo que llamar a Bobby para decirle que terminamos el caso—

—Dean, no debes avergonzarte del hecho que alguien te ayude…eres importante para mi—un gran sonrojo apareció en las mejillas del humano que dejo de intentar que el otro soltara su mano, definitivamente Castiel podía llegar a ser demasiado adorable—Creo que Sam quería hablar con Bobby respecto a…ciertas cosas—

—Bien por el…ahora tengo un antojo que necesito que me cumplas—si el ángel estaba pensando que el rubio iba a pedirle comida se dio cuenta inmediatamente que el humano no se refería exactamente a comida…al parecer tenía otro tipo de antojo…Dean acerco la mano que aun sujetaba la suya hasta su boca y comenzó a lamer la suave piel del ángel que se removió inquieto en el asiento mientras la sensación de la lengua del ojiverde le llenaba los sentidos, cuando el otro le soltó la mano empezó a darle suaves lametones a cada uno de sus dedos.

Castiel estaba seguro que había leído por ahí que el deseo sexual de muchas mujeres se incrementaba muchísimo mientras estaban embarazadas y el rubio le estaba confirmando aquello mientras comenzaba a chupar su dedo índice como si de un dulce se tratara, deslizaba la lengua por toda su extensión, sus miradas se encontraron los escasos segundos en los que Castiel soporto que su dedo estuviese siendo succionado de la misma forma que otra parte de su recipiente estaba comenzando a necesitar casi a gritos…Dean siempre conseguía hacerle encender de una manera casi automática su libido y esta vez se merecía un trofeo o algo porque esa expresión en su rostro estaba antojándosele demasiado erótica…ante el enfado del cazador alejo sus dedos de la boca de Dean, lo cogió por los hombros para acercarlo hacia si mismo y robarle un beso que lo dejo sin aliento, las manos del cazador no se quedaron quietas mientras Castiel le besaba, las bajo por su pecho palpándolo, buscando los botones que desabrocho para tener mejor acceso a la piel bajo aquella molesta camisa

—Maldita sea…—gimió contra su boca al sentir como las manos del ángel al igual que las suyas tampoco habían podido mantenerse quietas, después de acomodarse en el asiento llevo su mano a la entrepierna del rubio apretando la erección que el humano ya tenía en su pantalón, sin bajarle el cierre se dedico a masajear aquella parte consiguiendo que Dean se moviera inquieto en el asiento—Cass… ¡mete tu mano, demonios!—

El ángel oculto la sonrisa que se formo en su rostro al oírle tan ansioso, se sentía demasiado bien ser el causante del estado del cazador, le daba igual lo que sus hermanos o el mismísimo Dios pensara de el por enamorarse de un humano, nada le importaba si podía tener a Dean…haciendo caso al rubio bajo el cierre de su pantalón, desabrocho el botón e introdujo su mano notando de inmediato el calor y la suavidad aterciopelada de su piel…a pesar de la pasión que estaba sintiendo sabia que debía contenerse o le haría daño al rubio, esa era una de las desventajas de ser un ser con fuerza sobrehumana, con solo un empujón podía herirlo gravemente y no había cosa en el mundo que Castiel quisiese menos que hacerle algún mal a Dean… comenzó a masturbarle, haciendo énfasis en la punta de su pene ,algo que sabia le gustaba mucho, aparto la ropa del cazador lo suficiente para poder acariciarle mejor.

Castiel estaba besándolo y masturbándolo... ¿se podía pedir algo mejor? Abrió las piernas un poco más para darle espacio a la mano del ángel, sin embargo, no podía ver lo que estaba haciéndole y si había algo digno de ver por horas eran los largos y elegantes dedos del ojiazul acariciándole, su estomago le impedía verle y sin querer soltó un gruñido.

— ¿Te he hecho daño?—Castiel ceso por completo su movimiento y se alejo del humano para verle mejor— ¿estás bien, Dean?—

—Sí, no tenias que parar…es solo que…no puedo verte—el ángel lo miro un poco confundido por aquella vaga respuesta, Dean sabía que debía explicarse mejor pero… ¿¡Como le dices al ángel que está haciéndote la mejor paja del mundo que no estás disfrutándolo porque tu barriga no te deja verlo!?...tomo algo de oxigeno antes de intentar responderle—Cass…cuando tu….cuando me tocas…me gusta ver como lo haces…y mi estomago no me deja…quizás debamos parar…—

—No es necesario…conozco un lugar—antes que Dean pudiese preguntar a que se refería el ángel con eso de conocer un “lugar” se vio transportado hasta una cama totalmente desconocida en una habitación igual de desconocida, Castiel volvió a besarlo esta vez empujándolo contra las sabanas pero Dean lo detuvo mirándolo algo enfadado.

— ¿En dónde estamos?—el cazador se incorporo y miro a su alrededor descubriendo que el lugar en el que ahora se encontraban era una habitación bastante grande decorada con mucho lujo, obviamente no era un cuarto de motel, pero lo que más le llamo la atención fue el gran espejo que se encontraba frente a la cama—Cass… ¡dame una buena explicación en este momento!—

—Esta es la casa de una de esas personas a las que  los humanos llaman estrellas—el ángel también se levanto aunque para salir de la cama, al verle Dean pensó que se había molestado pero en vez de marcharse y dejarle, comenzó a quitarse la gabardina que dejo caer en el suelo luego fue el turno de la chaqueta y la corbata, que pasaron a hacerle compañía al abrigo en el suelo—esa persona no está aquí, así que no creo que le importe que usemos su cama ¿no lo crees?—

Si Dean tenía alguna queja la envió al carajo nada más ver como el otro comenzaba a desvestirse, quizás Cass no tuviera el erotismo de una stripper para quitarse la ropa pero no negaría que verle haciéndolo lo puso a mil, la supuesta “estrella” podía irse al mismo lugar porque él y su angelito disfrutarían por ella su cama, le regalo una sonrisa al ángel y llevo su propia mano a su entrepierna para tratar de aliviarse el mismo el calentón de ver al ojiazul quitarse la ropa, con la otra se bajo el pantalón hasta las rodillas…pero no pudo hacerlo mucho tiempo pues valiéndose de sus poderes Castiel se materializo a sus espaldas y  continuo con la labor que empezara en el impala aunque esta vez el ojiverde no le detuvo por no poder ver lo que su querido ángel estaba haciendo pues el espejo ubicado estratégicamente frente al lecho le mostro la imagen con lujo de detalles.

—C-Cass…joder…más lento—Dean se sentía en una clara situación de desventaja, su cuerpo estaba siendo atacado por dos frente y el no podía o quería hacer algo al respecto, el castaño estaba besándole el cuello, mordiendo y succionando su piel de una forma que estaba seguro le dejaría una gran marca mientras que sus dos manos estaban bastante ocupadas, con la izquierda estaba masajeándole los testículos mientras que su derecha le recorría el miembro frotándolo y friccionándolo con movimientos rápidos y precisos, se sentía un poco morboso verse en el espejo pero eso no le quitaba el placer de ver al ángel tras el besándole en aquella parte tan sensible de su cuello…mención aparte tenían sus manos ¿en qué momento Cass se había vuelto tan bueno en eso?

Los movimientos se aceleraron cuando el ángel sintió crecer en su mano el miembro del rubio, la respiración había vuelto a disparársele y junto a uno que otro jadeo le avisaron que estaba a punto de terminar, volvió a pegar su boca a su cuello para besarle un poco mas mientras mantenía sus ojos fijos en la imagen que el bendito espejo estaba obsequiándole del lindo cazador :tenía los ojos cerrados, el rostro cubierto de una capa de sudor y los labios entreabiertos…el ojiverde gemía y jadeaba mientras temblaba entre los brazos del ángel…con un gemido que debió oírse hasta en el cielo Dean comenzó a correrse manchándose el pecho y la cama, Castiel siguió acariciándole hasta que termino de descargarse.

— ¡Diablos, Cass!...uuff aun no puedo pararme—después de algunos minutos de rememorar una de sus mejores experiencias sexuales Dean bajo de su cielo particular y se quedo mirando al ángel a través del espejo—tendrás que darme unos segundos si quieres continuar con esto—

—Te daré lo que quieras, Dean—respondió el ángel sonriéndole y los minutos que Dean necesitaba para recuperarse se transformaron en segundos…las sonrisas del ángel eran escasas y en opinión del humano…verdaderos estimulantes sexuales, sin perder más tiempo se giro y lo beso metiéndole la lengua, estaba seguro que se iría al infierno por corromper a un ángel del señor pero no lo haría sin antes disfrutarlo, quería a Castiel y al que no le gustara bien podía irse a la mierda que él no desaprovecharía ningún segundo junto a su propio ángel.

——————————————0—————————————

Sam estaba comenzando a preguntarse que estarían haciendo el ángel y su hermano cuando Gabriel hizo su arribo al cuarto de hospital, el pelilargo se quedo mirándolo extrañado de verle allí ya que Castiel no estaba presente, se enderezo para verle mejor y no parecer tan maleducado.

—Castiel…el no está aquí—

—Lo sé, Sammy, solo quería saber cómo estabas—el rubio camino hasta quedar a unos cuantos centímetros de la cama—no tuve tiempo de curarte adecuadamente—

— ¿De qué hablas? Me salvaste la vida a mí y a Dean, no tengo forma de agradecértelo—se sentía un poco extraño estando a solas con el arcángel y más después que Cass le dijera que había sido él quien lo rescatara— ¿puedo hacer algo por ti?—

—De hecho hay mucho que puedes hacer por mí—

Notas finales:

Continuara...


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).