-Ya lo escuchó Sr. Choi. Seguramente si usted estuviera vivo pondría a Minho de patitas en la calle con Taemin.- después de dos segundos mi mano izquierda, Nana la sostenía a centímetros de su mejilla, sus uñas comenzaron a encajarse contra mi piel. Le iba a dar una cachetada. –Hazlo.- susurró mirando mis ojos, su mirada ya no era la de Dulce Nana, era diferente, más seria, más agresiva. –¡Hazlo!- gritó tan agudo que me noqueé.
Retiré mi mano de ella lastimándome por sus uñas.
-¡Jajaja lo sabía! Te ibas a dar a doblar de nuevo.- perdóname.
-¡Minho!- me di cuenta de que ya tenía el cabello rojo de Nana entre mis manos y a ella en el suelo. –¡¿Qué haces?! Suéltala.- mis manos comenzaron a temblar igual que mis piernas, me giré para dejarme caer al césped.
Sentí la cachetada de Yui girarme le rostro.
-Lo merezco.- dije firme. Si me quieren patear que lo hagan, si quieren lanzarme piedras que lo hagan, pero que sea al lado de mi papá, para estar juntos.
-¿Qué diablos?- preguntó Yui, giré mi pupilas para ver como ayudaba a Nana a levantarse. Cerré los ojos sintiendo de nuevo esas lágrimas caer por mis mejillas.
-Espero que así como tuviste los espermas de hacerme esto frente a tu padre, los tengas cuando estés con Taemin.- tonta Nana, su voz ni siquiera tembló.
-¿Me puedes decir qué diablo está ocurriendo aquí?- cerré los ojos al sentir la brisa fría. Algo cayó sobre mi pecho pero está bien, seguro fue Nana.
-Me quise aprovechar de Minho como todo el mundo lo hace, pero no quiso. Siento envidia de Key, Jonghyun, Taemin, Nicky, Sulli, Yuri, Daniel…-su lista fue interminable de menos para mí.
-¿Pero estás bien?- hipeé tres veces mientras mis ojos dejaban salir lágrimas aun cerrados. Soy tan patético. Golpeando a Nana que no hizo nada más que escucharme y no a Taemin.
-No te preocupes, estoy bien.- me giré para no verlas, para que mi papá no me viera, contraje las piernas y las abracé. Me siento tan solo.
-No fue tu mejor idea.- mordí mi labio inferior hasta hacerlo sangrar. ¿De verdad estoy tan enamorado de Taemin que no miro sus errores? ¿De verdad no fui capaz de golpearlo con todo lo que ha hacho y a Nana sí? Dios, qué clase de persona soy. –Minho, ¿estás bien?- negué pero luego asentí.
-Estoy bien.- susurré para levantarme y limpiar mis mejillas. –No te preocupes.-
-Un avión de papel.- susurró. –Oye, ¿cómo se hace esto? Yo no pudo hacerlo y menos volar.- se levantó de mi lado llevándose el avión de papel, ¿debería de ser metafórico y dejar que Taemin se vaya de mi lado?
-¡No seas tonta!- gritó Nana.
-Mira qué alto vuela.- reí porque Yui lo lanzó.
-…- volteé a ver por encima de mi hombro como Nana miraba con obviedad a Yui.
-Ash. Yo voy por él, no puedo lanzar un simple avión de papel porque ya la gente enloquece.- vi sus pasos alejarse en dirección en donde el avión pretendía caer.
-Perdóname Nana.- susurré sin mirarla.
-Está bien, fue parte del plan.- se arrodilló detrás de mí, también sentí sus brazos rodearme. –Estás tan quebrado que todas las emociones salen a la vez, confundiéndote. Deberías de liberarlas de vez en cuando.- susurró tan dulce que me sentí más estúpido por haberle levantado la mano.
-Perdóname.-
-Estás perdonado. Espero que todo lo que te dije no haya quedado en el aire y de verdad veas lo que Taemin hace por ustedes dos y lo que tú haces. Le veas por donde sea tú pones más. TOP dice que la relaciones de uno no funcionan, me sorprende que la tuya haya durado, ¿cuánto?-
-Un año.- hoy es el año.
-¿Cuanto más aguantarás?- negué lentamente.
-No lo sé.- susurré.
-¿Has visto la lapida del papá de Taemin? Tiene un grabado.- sin dejar de abrazarme empezó a girarse hincada entorno a mí, cuando llegó al frente abrí mis piernas para que pasara entre ellas y así abrazarme mejor de frente.
Tuve el impulso de corresponder fuerte.
-Dice “Tus acciones reflejan quién eres” Minho, si no eres un ángel eres Dios, eres demasiado bueno.- negué lentamente mientras presionaba mi cabello entre sus manos. Llevé las mías a su cintura para presionarla contra mi cuerpo.
-Hay una canción de una colega que dice…-
-Yui, ¡ese era mi dialogo!- suspiré para tranquilizarme, solté su cuerpo para girarme y dejarla libre, además de limpiarme los ojos. Cuando dejé caer mi espalda en el césped Yui me entregó el avión de papel.
-Ay Nana, a lo mejor no es la misma que pensamos. Dilo tú pues.- se sentó en el césped a mi lado, tomó mi mano y me sonrió. –Ponle atención.- presioné su mano.
-“Llora lo más que puedas no importa, eso no te hace débil ni infantil”- reí un poco por eso que dijo Nana.
-Era la misma.- rió Yui. –Minho, ¿sabes el significado de la palaba persona?- Nana también se sentó a mi lado, jalando mi maleta.
-Mascara.- dije.