-Sí.- contestó tomando mi mano para atraerme a su cuerpo. –Aunque MinTae suena mejor.-
-Gracias susurré abrazándolo por su cintura. –Las cosas se pondrán mejor, te lo aseguro.- sonreí apapachándolo.
-No tiene que ponerse mejor, sólo disfrútalas más.- me encaminó hacia mi puerta, una vez que tomé la perilla él me dejó a abrazar. –Hasta la cena.- dijo esperando a que abriera la puerta.
-Hasta la cena.- dije. –Gracias Minho.- le sonreí.
-Nada qué agradecer.- dijo sonriendo. –Ya entra a tu casa para que te arregles a la cena.- espero que traiga un clavel…. ¡Para mi mamá! claro, porque a mí no me gustan las flores.
-Nos vemos.- abrí mi puerta pero antes de entrar tomé sus mejillas para besarlo rápido, luego me giré y entré, cerré la puerta para recargarme contra ella y reír. Extrañaba esos besos.
Qué fiesta fue esa. Me incorporé para ir hacia mi habit… TioTae.
-Bienvenido a casa. Sobrino.- cerró la cortina y caminó hacia mí. Presioné los ojos ligeramente asustado y reprendiéndome, ¡¿por qué no lo vi antes?!
End Pov’s Taemin
Por las carreteras hacia Seúl…
Pov’s Key
Suspiré mientras apretaba el volante entre mis manos, relajé mis hombros para des estresarme, Minsoo no pudo echarme de su fiesta como a todos por lo que invitó a una parrillada post fiesta, pero eso no le agradó mucho a Jonghyun, sobre todo porque volví a caer a la piscina pero esta vez no fue él quien me ayudó.
Sobre todo porque fue un balón lo que me mandó al fondo. No puedo decir que me asusté porque estaba inconsciente, sólo que al despertar no era Jonghyun ni Onew quien me salvó, sino Sungmin.
Y de fondo estaba Jonghyun, mirándome, ¡fusilándome!
Cómo si yo me hubiera caído “accidentalmente” y fingido mi muerte sólo para que Sungmin me salvara.
Parece que mejor me hubiera quedad en cama hoy porque nada sale bien.
Lo único que agradezco es que Yuri no se haya aparecido, porque entonces sí iría a mi baño por esa navaja. Si ya estábamos bien, ya habíamos hablado y todo pero parece que no, que tiene muchas ganas acumuladas de hacerme el pleito por eso volvió a explotar contra mí.
Menos mal ahí estaba Minsoo que casi lo puso en paz, pero ahhhh~
Se me hace curioso que pese a todo lo que Jonghyun dijo de mí, al terminar la parrillada dijera “Te espero en el auto, Kibum” y en efecto, está en el asiento del copiloto, ammm… comiendo una banderilla a medio dormir, o dormido comiendo una banderilla a medias.
Como cuando lo vi en la escuela, cuando el Festival de la graduación de Onew, él estaba componiendo algo con un plátano a medio dormir. Eran días buenos.
Moví mi fleco para estar menos caluroso, entramos a Seúl no sin antes pasar por el desvió que nos llevaría a su cabaña, apreté el volante molesto, ¿por qué si todo estaba bien tenía que pintar todo tan mal?
Aceleré para estrellarnos en un árbol y terminar con todo esto, lo haría pero el auto está recién salido del taller, además mancharía mi ropa. Jejeje, ¿qué patrañas piensas Kibum? Reí por la estupidez mientras me estacionaba en la acera de la casa de Jonghyun.
-Jonghyun.- susurré pare despertarlo, él se movió y tiró la banderilla al suelo del auto.
-Oh…- bostezó y se talló los ojos. –¿Llegamos?- preguntó mirando alrededor.
-Ya lo hicimos.- contesté. –Te traje a tu casa.- lo miré para sonreírle.
-Tenemos una charla pendiente y en mi casa están mis papás, no la podremos tener como quiero.- ¿cómo quieres? ¿Atacarme con sus palabras ponzoñosas?
-Entiendo.- susurré encendiendo el auto. –Mi papá iba a visitarme así que date prisa.- en un santiamén estábamos en mi casa, esperando a que saliera porque yo ya iba caminado a mi puerta, la abrí y le dejé pasar.
-¿A qué hora viene tu papá?- ¿ya no es tu suegro?
-No sé.- contesté en mi cocina. –Sólo me dijo que iba a venir.- serví un vaso con agua para mirarlo. -¿Quiere café? ¿Soda? ¿Agua?-
-No te hagas el tonto.- asentí girándome para tomar un vaso de cristal y llenarlo con agua. Tras llenarlo salí de la cocina para ir con él y entregarle su vaso.
-Estaba entre date agua o soda, pero recordé tu dieta calórica y preferí servirte agua.- le dije sonriéndole para girarme pero antes de hacerlo escuché que el cristal se estrelló contra el suelo. Asentí mientras suspiraba para relajarme.
-Mira Jong.- me giré para verlo.
-No, ¡mira tú…!- ¡¿me gritó?!
-¡No me estés gritando!-
-¡Te gritó porque…!- alcé una ceja para que siguiera hablando. –Porque parece que no me entiendes.- susurró bajando la mirada, pateando el suelo y hasta metiendo sus manos a las bolsas de su pantalón.
-Yo, ya te expliqué mil veces cómo fue que sucedió.- lo miré, quise acercarme a él pero mis pies no me dejaron. –Estás interpretando todo a tu beneficio.- él negó riendo bajo, eso me dice que se puede poner más intenso.