–Tendrá que ser tu mejor amigo.- ¿mejor amigo? Tengo una idea de lo que podría ser. –Asegúrate de llevar más de uno por si la aventura se torna intensa jejeje.- también reí con él. Nunca llegamos a ser pareja oficial porque no me gustaría arruinar la amistad que tengo con él.
Pero tampoco somos amigos con derecho o algo similar, solo amigos que cuando se embriagan pasas cosas raras jajaja.
-Estaré de regreso en unos días. Espero que sea el miércoles. No todos los días la vida te ofrece la oportunidad de ir a Isla Jeju con todos los gastos pagos, por así decirlo.- mi casa está a un par de metros más, aun falta para que Luhan llegue a la suya, posiblemente lo acompañe hasta dos cuadras antes, así los dos caminaremos lo mismo hasta llegar a nuestra casa.
-Suho puede…-
-Y con comida de la Familia Kim.- completé. Si bien Suho puede pero no comería comida de la Familia Kim a menos de que el hotel en donde nos hospedemos tenga el servicio de ellos, o en su caso, que en su casa cocinen los de Kim.
-Tienes un punto.- dijo. –Aun así no me agrada mucho la idea de que te vayas.- pasamos mi casa y seguimos andando hasta que se completen las dos cuadras.
-¿Por qué? Recién te mudaste de Beijín a Seúl, nunca me incomodó la distancia no sé por qué ahora que solo serán tres días en Isla Jeju no estés de acuerdo.- ni cuando regresaba de China a Seúl él se quejó pero ahora sí.
-Es diferente.- cortó así que asentí incomodo. –De cualquier manera, espero que te vaya bien, ten cuidado con las sirenas.- repitió ese consejo y puede de que lo dijeran en doble sentido. –No te asolees más, me gusta ese tono canela de tu piel.- sonrió y nos detuvimos, aquí es el punto en el que lo dejo para regresar a mi casa.
-Intentaré no asolearme mucho.- pero si vamos a Jeju podría ser hasta imposible, quiero conocer y no lo haré desde el cuarto del hotel.
-Entonces nos vemos.- me volteó a ver, puso su mano en mi hombro para acercarme a su cuerpo, luego me dio un beso en la mejilla. –Cuídate por favor, buenas noches.- me soltó y se giró para seguir caminando hacia su casa.
Aunque me toqué la mejilla igual que él me giré de regreso a la mía. Cuando llegué cerré bien la puerta pues ya nadie más entrará o saldrá. Cené y luego me fui a mi cuarto, verifiqué que tuviera todo en orden dentro de mis maletas, mañana me levantaré muy temprano para poder estar listo en el muelle a la hora que me indicaron.
Me quité el suéter para ponerme la pijama y recordé lo que Luhan metió en mi bolsillo así que introduje mi mano hasta sentir el sobre. Lo saqué y era una pequeño cuadradito metálico, sonreí al ubicar lo que era. Lo necesitaría quizás, pero seguro este no sirve pues lo sacó de su billetera. Pero no lo puedo tirar en casa, mi mamá lo puede ver.
End Pov’s Kai
Por su parte…
Pov’s Minho
Creí que bailaría con Taemin en la recepción, pero fue imposible pues no paraba de perderlo. Lo encontraba, lo mantenía a mi lado por diez quizás quince minutos y luego se volvía a desaparecer.
Miré por la ventana del auto buscándolo de nuevo, me había dicho que ya era hora de irse, pasaba las 11 de la noche nos quedan un aproximado de 40 minutos para llegar a la casa de Taemin sin que su madre lo regañe.
-Ya llegué, ¿me tarde?- abrió a puerta del auto y luego entró. Se puso el cinturón de seguridad y luego me miró. -¿Estás enojado?-
-No.- contesté mientras encendía el auto, si hubiera sabido que así de atropellada seria la recepción mejor ni vengo. –Estoy cansado.- eché en revesera para poder salir y cuando lo hice suspiré. -¿Crees que tu mamá esté despierta?- le pregunté mirándolo por el rabillo del ojo.
-Seguramente, me llamó y dijo que mi tía le había pedido que cuidara de sus hijos así que salió de casa. Aun así me dijo que le llamara cuando estuviera en casa.- bueno eso justifica una de las tantas veces que desapareció. –Tenemos casa para los dos solos.- me miró juguetón. –Dime ¿qué me harás cuando lleguemos?- ahora su tono de voz cambió a uno más seductor que reí levemente.
-Te haré una banana milk y luego dormirás calientito, mañana tienes que estar muy temprano en el muelle para salir a Jeju. Entre más rápido te duermas será mucho mejor.- contesté girando en una de las calles para dar hacia el centro de la ciudad y de ahí conducir libremente hacia la casa de Taemin.
-¿Una banana milk y dormir calientito?- preguntó así que asentí pero luego negué por el tono de voz que usó. –Me encantará.-
-No es lo que estás pensando, me refiero a licuar un plátano y leche, y que te arroparé cuando duermas. No a otra cosa.- le aclaré para que no espere algo más, aunque extraño esos encuentros. Últimamente siento que Taemin tiene más hormonas; en la escuela no paraba de insinuarse, de usar el doble sentido e incluso mandar aviones pornosos. Tuvo una leve pausa por esto de la graduación y el campeonato pero puede darle más fuerte.
-Yo no me refería a otra cosa, Minho~ no te proyectes.- por el espejo vi como mis mejilla se hacían rojas y la risa de Taemin no se hizo esperar. –¡Pervertido!- sacudí mi cabeza para despejarme de eso y regresar a la seriedad del momento.
-¿Entonces no está tu mamá?- pregunté para que se le olvidé el otro tema.
-Minho~ ¡estás ardiendo! Primer me dices que me darás mi banana milk y me mandarás a la cama caliente, ¡¿ahora me preguntas si mi madre está en casa?! ¡Au! ¡Au! ¡Au~!- mi cara empezó a arder completamente mientras él reía pero con las piernas contraídas de la emoción supongo, ese gesto también lo tenía Nana.