…
-Ah~- jadeó Minho doblando hacia la derecha, la pequeña lengua de Taemin estaba dando embestidas a su orificio mientras sus labios presionaban su glande.
La cabellera de Taemin se elevaba sin golpear el volante para volver a bajar permitiendo que su garganta tocara el glande de Minho. Sus labios seguían haciendo presión provocando que las manos de Minho temblaran, por un segundo quitó una del volante para ponerla sobre los cabello de su Muñeco.
Pero no, ambas manos en el volante. Eso decía su suegro así que de inmediato la retiró.
Taemin se daba gusto succionando el miembro de Minho, ¡hace tanto tiempo que no hacia! Extrañaba su sabor salado amargo, seguía sin consumir dulces, la textura lisa pero con algunas venitas marcadas, su tamaño ahora que llegaba de nuevo a su garganta seguía sin poder tragarlo por completo. ¿Morder el glande? Eso no era humano.
Pero de igual manera lo intentó, rozando con sus dietes la piel de Minho causándole un escalofrió, esos dientes los recordó en su clavícula y que después de esa sensación venía la mordida.
-No lo hagas Taemin.- pronunció Minho sacándole una sonrisa al nombrado.
En la pequeña división que se le formaba a Minho producto de la circuncisión presionó con sus dientes.
Tuvo que frenar tan brusco que Taemin logró golpearse contra el volante incluso él, mañana tendría la marca del volante en su pecho pero el dolor que pudo haber causado esa mordida fue apaciguado con el orgasmo. Toda la esencia de Minho fue a dar directo a la garganta de Taemin, quien entró en pánico ¡se le había olvidado cómo hacerlo!
Conservando la calma dejó que Minho expulsara toda su semilla acumulándola en sus mejillas. Pasó cuidadosamente ese líquido caliente excepto una pequeña gota que él sacó por una de sus comisuras. Se aseguró de dejar sin rastros de semen el pene de Minho, de dejarlo brillosito por su saliva. Después como si se tratara de una muñeca de porcelana, lo guardó con cuidado dentro del pantalón de su novio hasta que subió el cierre y abrochó el botón.
Se irguió para mirar a Minho, estaba recostado en el respaldo su pecho subía y bajaba apresurado por el orgasmo. La mano de Taemin fue hasta su mejilla haciendo que lo mirara.
-¿Te cansé?- preguntó, fu entonces cuando las pupilas de Minho notaron esa gotita blanca que escurría por la comisura de Taemin. Llevó su mano para limpiarle con el pulgar y posteriormente a sus labios.
-Solo un poco.- contestó tomando su nuca para besarlo y darle esa última gota que le había faltado de tragar. El beso esta vez no sabía a la saliva de Taemin ¡con justa razón! Pero eso no le quitó lo pasional o divertido que podía llegar a ser, al contrario, al mismo inicio sus lenguas comenzaron a pelearse por el control o por la gota de semen.
Ambos asomaron su lengua para rozarlas en el viento.
Si un oficial de tránsito lo miraba seguro los infraccionaba.
¿Oficial de Tránsito? ¿Suegro? ¿Papá?
Las estrellas en el cielo seguían brillando, mirándolos. Así se sentían.
-Nos meteremos en problemas.- dijo Minho sintiendo la pistola eléctrica de nueva cuenta contra su nuca.
-Nada que sea eterno.- contestó Taemin reanudando el beso.
-Tengo una idea.- susurró Minho.
-Dime.- contestó emocionado Taemin.
-Espera aquí.- dijo Minho abriendo la puerta para salir. –No tardo.- le sonrió saliendo del auto.
¿Qué acaso ahora Minho quería ser un nudista?
Se recargó en el respaldo del asiento mirando el sitio en donde había frenado, no conocía ahí. ¿Qué no iban camino a casa de Donghyun? Pero sí Minho no sabía la dirección… ni él.
Se apresuró a mandarle un mensaje a YoungMin pidiéndole ayuda, necesitaba esa dirección cuanto antes. Luego recordó que YoungMin no estaba con ellos. Así que le mandó el mismo mensaje a Niel, quería que fueran más cercanos, bueno, nada como un mensaje a las 2 am preguntándole por la dirección.
Aunque eso podría ser un abuso, mejor le mandó el mismo mensaje a Kai. Haber quien el contestaba antes de que Minho regresara al auto. Lo que era mejor, él tomaría el volante después de un orgasmo un se siente casando y no quería tener un accidente así que salió del auto, rodeó por adelante hasta llegar al siento del piloto.
Se puso el cinturón de seguridad y la pantalla de su celular se iluminó.
Era un mensaje de YoungMin, seguramente le reclamaría por el horario y le recordaría que no fue con ellos. Abrió el mensaje y alzó las cejas “Avenida Caracol 96045, la única casa, grande de portales blancos y palmeras” tan eficiente como solo YoungMin sabe. “No te preocupes no estaba dormido, conocí a otro par e copias jaja ellos sí son copias. Quizás luego te las presente. Buenas noches. Salúdame a KwangMin.” ¿Por qué YoungMin sigue despierto a esas horas de la mañana?
Estaba por contestarle cuando otro mensaje llegó esta vez era de Niel.
“No soy YoungMin pero es Avenida Caracol 96045. La que tiene estatuas en el patio y una caja de pizza en la puerta. Buenas noches también.” ¿Una caja de pizza? Seguramente Kai y su aventura se estaba tornando seria.
Uno más llegó.
“Dime en dónde estás, le diré a D.O para ir por ti.” ¿D.O? ¿Quién diablos….el pizzero? Chilló emocionado por su amigo, solo esperaba que no fuera una aventura de tres días pero tampoco quería dejar a Kai en Jeju, ni modo, se tendrían que llevar la pizzero.