Con delicadeza se dispuso a despojarse de su propia ropa, moviéndose de una manera tan sexy, que uno jamás imaginaria que se trataba de Choi SeungHyun, apoyado en sus rodillas, justo sobre el abdomen de su dongsaeng; El corazón de Daesung estaba inquieto, latiendo más rápido que nunca, cambiando su llanto dolido, para, por el contrario, arrojar lagrimas de felicidad por todo su rostro.
-No quiero interrupciones...
Antes de zafarse de su pantalón, SeungHyun se aseguro de cerrar bien la puerta; Bajar las cortinas, e intensificar la oscuridad en aquel lugar que sería testigo de una nueva experiencia.
Seung volvió a la cama. No dijo nada, y tan solo se sentó en la orilla de esta; Bajo el cierre, y llevo su cuerpo ligeramente hacia atrás, apoyándose sobre la palma de una de sus manos, mientras que con la otra, estimulaba su pene
-Ven Dae, siéntate aquí...
Tímidamente, Daesung fue a gatas a donde su hyung. Lo miro a los ojos con un fuerte sonrojo en sus mejillas, para lentamente sentarse con las piernas abiertas sobre él, viéndolo de frente.
-Se gentil conmigo...
-Lo que mi ángel quiera
SeungHyun comenzó a arrancar la camisa de Daesung con los dientes, a la vez que sus dedos se paseaban en los costados del menor, acariciando suavemente.
Daesung gimió.
El tacto era delicado, tanto que le causaba escalofríos.
Una vez con el pecho descubierto, las manos del mayor no dudaron en tocarlo todo, pellizcando casi sin fuerza los pezones, y lamiéndole el cuello con ansiedad.
La espalda de Daesung se arqueo.
-Mmmh... h...hyung...
Rodeándolo por la cintura, inclino su cuerpo al frente, dejando a Daesung en el aire, para asi recorrer todo el torso con sus húmedos labios.
-Hoy te hare mío, y a partir de esta noche serás solo de mi propiedad.
Con cuidado, lo deposito de nuevo en la cama, acostándose sobre su musculoso cuerpo
-Hyung... hazlo ya...
Nuevamente sus labios se unieron, intensificando y humedeciendo el contacto; Mordiscos, gemidos ahogados, respiración entre cortada. Las caderas de SeungHyun buscando el rose de sus miembros erectos, se movían con desesperación.
Daesung le enterró las uñas en su espalda, comenzando el vaivén de arriba a abajo, inundando la habitación con gemidos extasiados.
Sus miembros palpitaban, causándoles un extraño dolor placentero. Necesitaban atención.
La mano derecha del mayor se fue a la zona desatendida de Daesung, masajeando lentamente, para acostumbrarlo, y hacerlo pedirle más; Su lengua bajo a las tetillas de su dongsaeng, succionando, estremeciéndolo.
-Dae...
Con agilidad termino de desvestirlo, haciendo lo propio consigo mismo.
Le tendió su mano a Daesung, metiéndole tres de sus dedos en la boca
-No quiero que duela...
Con desespero combinado con nerviosismo, empapo todo con su saliva, procurando no dejar ni un rincón seco.
SeungHyun suspiro.
-Aquí vamos.
Coloco su dedo en la entrada de Daesung, metiendo el dedo índice de poco en poco.
-Ahh...
Emitió un pequeño grito dolido, apretando los ojos, y su entrada.
-Relájate Dae...
Empezó a moverlo en círculos, cuidadosamente. Al mismo tiempo, lo beso en los labios nuevamente para distraerlo
-Hyungs... ¿Está todo bien?... Escuche gritar a Dae...
SeungHyun no se detuvo al escuchar al maknae tras la puerta.
-¿Hyungs?
-Estamos bien... Daesung estaba tenso, solo estoy dándole un masaje...
-Bien, saldremos a beber algo, diviértanse...
Regreso a su labor, ingresando ahora un segundo dedo.
-Ahhh... hyung...
El dolor se transformaba en placer. Esos gemidos encendían al mayor, dejándolo deseoso de entrar en él lo más pronto posible.
Sus dedos se movían con destreza, en busca de un punto dulce para poder continuar.
-Ahhhh!!....
-Lo encontré.
Seung sonrió victorioso.
Saco sus dedos; Le levanto una pierna a Daesung, y coloco su miembro erecto para penetrarlo. Inclino su cabeza, y le beso en la frente.
-Estoy muy feliz ahora Dae.
-Yo tambi....ahhhh!!
Lo penetro.
Las embestidas fueron pausadas para evitar el dolor. Las uñas de Daesung se aferraron a la espalda de SeungHyun, gimiendo y gritando descontrolado.
-Realmente me siento feliz ahora....
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Una extraña sensación en su espalda, obligo a Daesung a abrir los ojos; Lo primero que noto, fue que estaba en su habitación, pero que no estaba solo, y que unos fuertes brazos lo aprisionaban, acomodándolo en un musculoso pecho.
-¿Como se siente mi ángel?
-Cansado, adolorido, pero muy feliz
Levanto el rostro para encontrarse el rostro alegre se su hyung, siguiéndole el paso y sonriendo también
-¿Sabes desde cuando me gustas?
-Como lo sabría, solo eres cariñoso cuando hay una cámara cerca...
-Me gustas desde la primera vez que te vi sonreír... Si actuaba de esa manera, te pido perdón... Era la única excusa que tenia para abrazarte, pero ahora será diferente. Te tomare entre mis brazos, y jamás te volveré a soltar...