------ Near ------
(No podría aguantar mucho tiempo, me habían alcanzado la mayoría de los arañazos y mordiscos, y mi torso estaba desnudo y desprotegido ante de tan fieros ataques. Cuando ya pensé que estaba todo perdido…)
- ¡¡Ni se os ocurra acercaros si no queréis otra paliza pedazo de bichos con pelo!! (Yo estaba en el suelo con los ojos cerrados, esperando que me atacaran y terminaran el trabajo, no me atrevía a abrirlos, estaba muy asustado…) ¿Estás bien?
- ¿Hmmm?
(Abrí los ojos lentamente, no me había dado cuenta de que instintivamente había levantado los brazos y los tenía sobre mi cabeza haciéndome de escudo en la cara.
Después de medio minuto por fin me decidí a abrir los ojos, poco a poco fui acostumbrándome a la luz que me cegaba, provenía de las bombillas del techo, no eran muy fuertes, pero si lo suficiente como para no dejarme ver el rostro de la persona que me ofrecía su mano para incorporarme.
Una vez me hube levantado del suelo, las figuras dejaron de ser borrosas, ya podía ver a mi salvador, que de mucho antes me imaginé no era Mello, ya que el nunca me hubiese ayudado a incorporarme, ni tampoco me había insultado todavía…
Cuando alcé la mirada para poder ver el rostro de mi salvador me encontré con un azabache con ojeras pronunciadas y ojos tan rojos como la misma sangre, que me sonreía y me hablaba)
- ¿Estás bien? (Me había quedado paralizado, embobado mirando su rostro, y perdido en ese mar de sangre como eran sus ojos que me dejaron anonadado) ¿Oye, me estas escuchando? (pasó su mano por delante de mi rostro, lo que me hizo volver a la realidad…)
- ¿Qué, como? ¿Qué acaba de pasar?
- ¿Te encuentras bien?
- S-si, creo que si…
- Menos mal… ¿Por qué estas aquí tu solo, es solo para personal autorizado? ¿Y porque te peleaban esos gatos?
- Yo… esto…
- Miau: 3 (salio el sonido de detrás de mí, la gata acababa de terminar de parir a dos cachorros y parecía que había terminado su tarea, ahora se disponía a limpiarlos…)
- ¿Que a sido eso?, ¿que estas escondiendo? (sin darme cuenta se había agachado y puesto sobre mi para mirar lo que había detrás. Conforme se iba acercando yo me echaba hacia atrás para alejarme)
- “¿Porque me estaba poniendo tan nervioso que se me acercara?” Espera… ¿eh?...
(Cuanto mas se me acercaba mi pálido rostro iba tomando un color rosado en las mejillas hasta que estuvo encima de mí de rodillas un brazo al lado de mi cadera apoyándose para no caerme encima y el otro sobre mi hombro para no caer de lado, miró por encima de mis hombros a la gata que estaba bañando a sus pequeños, uno naranjita y otro negrito, unas pequeñas bolitas de pelo monísimas que no paraban de maullar pidiendo el calor de su madre)
- Así que por eso te vinieron a atacar, iban a matar a las crías y tu intentaste protegerlos…
- Yo…esto…
(El azabache me dirigió una amplia sonrisa, estaba tan cerca de mí que podía notar su respiración, era calmada, estaba tranquilo después de luchar con las bolas de pelo con patas sin ningún esfuerzo)
- Veo que eres muy buena persona intentando protegerlos, pero la próxima vez intenta no meterte con quien pueda lastimarte, imagínate que no llego a venir yo, a saber que te hubieran echo esas malditas bolas de pelo… (Cerró los ojos y me dedicó una sonrisa sincera y despreocupada, como si fuéramos amigos desde siempre)
- Lo-lo siento… (es lo único que articulé a decir, cuando de repente, oí unos pasos que se acercaban a lo lejos por el almacén)
- ¡Hey, rata de cloaca! (Esas palabras, Mello, de eso estaba seguro. Lo primero que me apresuré a hacer fue recuperar mi pose de siempre, que con el azabache aun sobre mí me fue bastante difícil)
- ¡Aquí, pelo de chica!
- ¿Pelo de chica? Entonces seguro que es el hijo del jefe, ¿no?
- Esto…así es… (dije con un hilo de voz que solo el pudo oír)
- ¿Se puede saber que haces ahí atrás bola de sebo?
- Hola Mello…
- ¿Y tú? ¿De donde saliste búho nocturno?
- De abajo de tu cama, soy tu peor pesadilla… (el azabache se echó a reír a carcajadas, al igual que Mello, a diferencia de mi, que no había entendido la broma)
- ¿Tan imbécil como siempre eh Beyond?
- Tú ya sabes como soy…(de nuevo se echaron a reír, y de nuevo no entendí)
- ¿Que se conocen?
- Si, Mello y yo fuimos juntos desde el jardín de infancia hasta la universidad, y después su padre me dio trabajo aquí.
- ¿Trabajas aquí?...
- Si, ¿y ustedes de que se conocen?
- Esta rata de laboratorio es mi primo Near… (como siempre dijo con desprecio, como todo lo que decía en cuanto a mi se trataba)
- No soy una rata maldita muñequita
- Como me vuelvas a decir lo del pelo de chica te mato enano…(en lo que decía estas palabras ya me tenía sujeto del cuello de la camisa a dos centímetros del suelo)
- Hey, hey, hey, tranquilízate, es tu primo, no lo trates así… (dijo el azabache, que según mi primo llamó Beyond, mientras apartaba a Mello de mi y me escondía a su espalda para protegerme)
- Tu siempre igual de protector con los enanos mocosos…
- No es un enano mocoso, ni mucho menos Mello, deberías respetar mas a tu familia, ya lo sabes…
- Bueno, rata blanca, ¿empezamos o te vas a quedar ahí atrás todo el día?
- Okay
- ¿Que van a hacer?
- Mi padre me obliga a enseñarle a este torpe el trabajo y a manejar las herramientas mientras la boba de Misa atiende los clientes y el revisa unos encargos importantes…
- Si quieres puedo hacerlo yo… (Beyond bajó la cabeza y se sonrojó ligeramente, parecía avergonzado por no haber pensado bien las palabras que había usado)
- Pues oye, mejor para mi, no aguanto a esta rata blanca, un trabajo menos para mí… hasta luego B.B. (Mello se dio la vuelta sin siquiera decirme palabra y salió por la puerta del almacén, dejándonos a solas)
- ¿B.B.?
- Si, es un mote, por mis iniciales, mi nombre es Beyond Bithday, siento no haberme presentado antes… (alzó la mano para que se la estrechara y bajo la cabeza ligeramente inútilmente, ya que hacía rato que me había dado cuenta de que se le subieron los colores)
- Encantado, soy Nate River, pero todos me llaman Near… Salvo Mello, que me llama rata casi siempre…
- No deberías permitirle eso, aunque sea tu primo, nadie merece que le traten así ¿no?
- Supongo, pero siempre a sido así, desde pequeño Mello me tiene manía, todo lo convierte en una competición para superarme…
- Espero se de cuenta de lo que tiene algún día, no todos tenemos primos, hermanos, o padres…
- “¿acaso beyond era huérfano?, pero tampoco puedo preguntarle, le incomodaría hablar de el tema si fuese así… lo dejaré pasar, si quiere contarme algo ya lo hará por sus propios medios… ” Bueno, ¿empezamos con la enseñanza?
- OH si, claro… ya casi se me había olvidado con tanta charla…
(Beyond cogió a la gata y a sus crías y las metió en una caja junto con mi camisa, la cual me acababa de dar cuenta no llevaba)
- Toma la mía, te vas a resfriar si andas por ahí con el torso desnudo
- ¿y tu? (pregunte con el rostro mas rojo imposible, además al ser alvino a nada que me sonrojaba se me notaba un montón)
- Yo llevo una interior debajo y recambio en las taquillas, no te preocupes, enserio
- “Madre mía que bochorno”
- Espera, no puedes ponerte todavía la camisa, antes tenemos que curarte las heridas.
(Fuimos al piso de al lado, donde estaban las habitaciones de los empleados, subimos a su cuarto y comenzó a curarme las heridas, que por cierto escocían bastante)
- ¿te duele? (preguntó con aire preocupado al ver mi cara arrugada cada vez que posaba el algodón sobre las heridas abiertas)
- Solo un poco…
- Tranquilo pronto termino, te lo prometo…
(Cada minuto que pasaba se me hacía eterno, no se si por el dolor o por estar al lado de este extraño pero confortante personaje, no sabía porque pero estar cerca suyo me reconfortaba enormemente, y eso no me sucedía con cualquiera…
De repente cuando pensaba que ya había terminado se acercó más a mí hasta que nuestros rostros estaban tan cerca que podía sentir su respiración acelerada)
- Tranquilo, a partir de ahora yo te protegeré… (Esas palabras hicieron que mi corazón diera un respingo) No dejaré que nadie más te haga daño… (Cada vez se acercaba un poco más a mí, yo ya no sabía donde meterme, como reaccionar, se acercaba mas y mas y no sabía que decirle, me estaba poniendo colorado por la proximidad. Y tras decir eso en un susurro que solo yo podría haber oído se separó lentamente y se dispuso a guardar el botiquín en su cajón.
Cogimos la puerta y bajamos por las escaleras hasta llegar a la calle, y después entramos de nuevo en el taller de mi tío, donde este me estaba esperando)
- ¿Se puede saber donde narices te habías metido Near? Se supone que tendrías que estar con Mello aprendiendo a manejar las herramientas (mi tío se veía muy enojado…)
- Es que había una gata en el almacén que…
(Tras contarle la historia y todo lo sucedido, omitiendo el asunto de el susurro y lo que beyond me dijo mientras le curaba las heridas, mí tío se hizo el comprensivo, advirtiéndome de que fuera la ultima vez que desapareciera de ese modo)
- Sabes que sé cuidar de mi mismo tío
- Pues para saberte cuidar estas muy magullado, quien sabe lo que te podrían haber echo esos gatos si Beyond no llega a aparecer a tiempo, muchas gracias hijo por ayudarle…
- No ha sido nada señor Keehl…
- Hijo, deja de llamarme señor Keehl, te lo he dicho muchas veces…
- Lo sé, pero para mí es señal de respeto hacia usted
- (Mi tío dejó escapar un suspiro) Nunca cambiaras Beyond...
- ¿Hijo? ¿que…? (Mi tío no me dejó acabar la pregunta empezando a contestarla antes de que la soltara)
Beyond a sido compañero de Mello desde que iban al jardín de infancia, y hace un año su madre murió… ya que era la única familia que le quedaba y nosotros éramos sus mejores amigos, nos dejo en su testamento la custodia de su único hijo, si a ella le pasaba algo, nosotros éramos los primeros en la lista para cuidarlo, y si no hubiéramos aceptado, Beyond hubiera ido al orfanato, sin ninguna otra opción. Y ya que era el amigo de la infancia de Mello y teníamos tanta cercanía no podíamos dejar que eso ocurriera…
CONTINUARÁ --> --> -->