Me senté en la pila de ropa que había sido sacada con toda prisa de mis cajones, estaba deprimido ahí sentado a punto de echarme a llorar, me sentía frustrado, uno de esos días en los que se te hace tarde por razones que no entiendes, hace un calor de los mil demonios y te pruebas un millón de cosas del closet pensando que con todas te ves mal, como si fuera poco mi cabello era un asco y mis risos esponjados me hacían ver horrible, se había secado y yo seguía apenas con unos jeans azules sentado en la pila de cosas.
Bufé molesto e hice un puchero a punto de hacer el berrinche del siglo y entonces fue que lo ví tirado en el piso del closet, me levanté ya resignado a que no iba a llegar a la cita con aquellas chicas, sabía que entrarían los chicos y les diría que no iría con algún pretexto, pero por ahora ese suéter llamó mi atención por completo. Lo había usado para el video “beautiful target” y amaba como pocas cosas ese suéter. Lo levanté del piso y lo estrujé contra mi pecho mirando el oso que tenía pegado en la parte de enfrente, CNU era ese oso y debía estar ahí al lado de mi corazón.
Me quedé mudo mientras lo veía y de la nada comencé a llorar decepcionado de la vida y enojado por todo…. ¿Cómo demonios es que los años seguían pasando y yo no conseguía estar a su lado?
Sé que algún día voy ser suyo, sé que eso es lo que va a pasar porque yo lo decidí así y porque tiene que ser nuestro destino… ¿pero cuanto faltaba para ese día?
En estos pensamientos estaba cuando la puerta se abrió, yo me paré derecho seguro de que no quería que uno de ellos se diera cuenta de que yo había estado llorando.
- ¿GongChan? ¡date prisa! ¡vamos tarde! – chillaba Sandeul desde la puerta
- no tengo muchas ganas de ir, de pronto me duele el estomago… - dije tratando de poner mi mejor voz
- ¿ehhh? ¿en serio vas a dejar a esas chicas tan lindas? – preguntó la voz de Baro también detrás de Sandeul
- si, en verdad no tengo ganas… - susurre mirando ese oso en el suéter con un puchero
- ¡¡OMMA!! ¡¡Channie no se siente bieeen ~!! – chilló Sandeul de nuevo
Mi piel se erizó mientras escuchaba los pasos de CNU avanzar hasta la habitación, se quedó en la puerta y Baro le susurró algunas cosas que no alcancé a entender bien “dolor de panza” “lloraba” fue lo poco que alcancé a escuchar “váyanse” dijo CNU y entró al cuarto cerrando detrás suyo.
- woow…en serio ¿teníamos tanta ropa en esos cajones? – preguntó mientras llegaba hasta mi
- eso creo… - susurré limpiando mis lágrimas rápido y tirando el suéter al piso para que él no lo viera, con suerte pues él no pareció hacer caso a la prenda
- oye… ¿Qué pasa? no vas a mentirle a omma ¿verdad? Baro dice que estabas llorando – dijo él mientras me tomaba del hombro y me giraba para verlo a la cara
- oh, solo es un mal día, no tienes que preocuparte, CNU…. – me quejé en voz baja
CNU miró a nuestro alrededor y yo miré también poniéndome sonrojado al ver la magnitud del tiradero que había armado en la búsqueda de algo que ponerme.
- en mi opinión esto parece más que un mal día… - dijo mientras tomaba la ropa y la metía a empujones en el closet – ponte algo, te dará un resfrío – dijo sonriendo y me lanzó una de sus playeras
Él siguió por ahí acomodando un poco las cosas y mientras yo me puse la playera negra que me prestaba, olía bien, olía a él, me gustaba mucho. Estando en estas escuché la puerta de la casa ser cerrada y supuse que al fin estábamos solos los dos en casa y que nos habían dejado, eso no estaba bien, de nuevo había impedido que Shin tuviera una cita con una muy bella mujer, quizás él en verdad no estaba en mi destino y yo solo estaba impidiendo que el suyo se llevara a cabo por mis deseos egoístas, estaba siendo muy cruel y no me había dado cuenta, quizás después de todo aquel día solo estaba en mi imaginación, en mis fantasías.
- ¡mira lo que encontré! – dijo de pronto su voz triunfante mientras sostenía mi suéter azul entre sus manos – oh, que bellos recuerdos, esa grabación fue de las mejores, me encantó sobre todo como te veías en la versión japonesa, te queda bien el rubio – decía mientras contemplaba el suéter con anhelo, casi ese mismo anhelo que yo tenía
- a mí también me gustó la versión japonesa…aunque odie la parte en la que intentas besar a Jin… ¿Por qué no podías besarme a mí? – pregunté en uno de mis pucheros infantiles, no me había causado ningún empacho decirle aquello pues seguramente él lo tomaría como parte de uno de esos juegos bobos que a veces hacíamos, él también me había dicho algunas veces cosas románticas en juego y a veces me gustaba imaginar que no era un juego
- pues… por que el MV trataba de Jin, aunque sin duda me hubiera gustado besarte a ti – dijo sonriendo mientras guardaba mi suéter en uno de sus cajones, yo no dije nada pese a verlo hacerlo.
- lamento haberte arruinado la noche, seguramente tú querías ir a esa cita con los chicos – dije después de verlo bien por un rato, en verdad se veía guapo, había peinado su cabello y se había puesto un suéter negro, usaba unos lentes grandes y botas…listo para una cita.
- oh, no seas tonto, Channie… prefiero una noche contigo que una cita con todas las mujeres de Asia – dijo mientras me guiñaba el ojo - ¿ya te sientes mejor? quizás podríamos ir tu y yo…al cine, hay una película que quiero ver – dijo mientras sonreía
Fuimos al cine, no hace falta que les diga que para eso me sentía muy bien, además ahora estaba usando su ropa y él me ayudó a escoger unos zapatos y una sudadera, me importaba poco verme bien, eran cosas que a él le gustaban y por lo tanto me sentía de lo más guapo del mundo. La función del cine fue normal, todo como siempre y como el cine no estaba demasiado lejos de la casa decidimos volver caminando. Él era el de la confianza así que no me sorprendió demasiado cuando me tomó de la mano al andar, muchas veces antes lo había hecho y yo lo encontraba por demás hermoso. Shin no paraba de hablar sobre las cosas de la película pero yo no le prestaba atención, no me importaba para nada eso, solo importaba saber que estaba con él.
Tampoco había puesto atención a la película realmente, el evento con el suéter me había hecho recordar todo lo que durante ese MV había pasado, en verdad me había gustado tenerlo a mi lado tantas horas al día, cada vez que estaba cerca y cada escena que hacíamos mi mente había estado en él…él en verdad tenía un lugar junto a mi corazón.
- ¿Channie? ¿hey….? – escuché su voz llamándome – no me prestas atención – dijo haciendo un puchero y entonces extendió hasta mi una sola rosa de color lila, la contemplé sin saber de dónde había salido hasta que miré que al lado nuestro había un puesto de flores
- ¿y esto? – pregunté tomando la rosa entre mis dedos
- es… bueno, en verdad no sé porque es… - dijo él antes de ponerse todo colorado – creo que es por darme una hermosa tarde, me hace feliz salir contigo – me dijo después de un rato
Yo simplemente no pude contenerme y me lancé a sus brazos a besar su mejilla, él se movió sin embargo y mi beso acabó en la comisura de sus labios, demasiado cerca, ambos nos miramos y nos sonrojamos, fue él sin embargo quien me sujetó de la cintura y con una sonrisa me dio un beso en mi comisura.
- anda… - dijo jalándome de la mano pues el semáforo había cambiado…
En esa esquina dejé mi corazón latir a mil por hora y supe que después de todo…un día, quizás no hoy y quizás tampoco mañana…yo podría besarle los labios y comerle la boca sin tener miedo a ser rechazado… solo debía esperar un poco más.