Joonmyun tiene una familia, amorosa, atenta, cariñosa, una familia casi perfecta. Sus padres a pesar de tener mucho trabajo, siempre buscan una forma de estar con su hijo, puede que trabajen el doble para tener una semana entera con él, o puede que comiencen desde muy temprano a laborar para salir antes de tiempo. Si algún evento aparecía de la nada, siempre se las arreglaban para no interferir con el horario familiar ya estipulado.
Entonces se han de estar preguntando ¿Por qué dicha actitud? Joonmyun siempre obtiene lo que quiere, su madre es la mujer más egocéntrica que se puede conocer en el planeta, enserio. Su padre no cambia en nada, lo más importante, aparte de su familia es el dinero. Son una familia unida, si, pero con una actitud prepotente y altanera. Esa clase de familia y amistad que no deseas tener porque te dan mala vibra.
Ahora ya saben el por qué de dicha actitud.
El chico entra a su hogar, viernes en donde sabe que sus padres regresaran más temprano de lo habitual, viernes en donde cenaran juntos y posiblemente disfrutaran de una buena película, en donde los malos comentario llenaran su hogar. Es la misma rutina de viernes, aunque no lo parezca Joonmyun ya es parte de ella.
Últimamente suelta ácidos comentarios sobre cierto maestro que no le deja obtener lo que él con mucha codicia desea. No es fácil quitar del camino al profesor Wu, sobre todo las últimas dos semanas. Lay es quien busca al maestro, es él quien busca cualquier pretexto para estar junto a él.
Por ejemplo, al inicio de la semana, al terminar las clases pudo escuchar la conversación de ambos sobre una futura reconciliación, un beso y sobre todo el ´no me daré por vencido´ de Lay. Eso fue más que suficiente para que su enojo y rabia fueran en aumento. ¿Es que acaso él no era lo suficientemente bueno? Lo tenía todo. Era guapo, tenía carisma, risa perfecta y sabia como tratar a las personas y un corazón repleto de amor, además de ser joven con un futuro brillante. ¿Por qué Lay no se podía fijar en él?
¿Era por la forma en la que conseguía las cosas? Sabe a la perfección que no es una forma correcta, pero es la única en la que se puede hacer notar. Joonmyun solo quieren que lo amen de verdad, así como Lay ama a Kris, sin importar que. Quiere un amor como el que Yixing le da a su maestro, y para lograrlo necesita a Lay ¿cierto? Necesita ese tipo de miradas traviesas y enamoradas, caricias disimulas y besos cargados de pasión. Así que si, en pocas palabras quiere a Lay para poder tener todo lo que desea.
Así le cueste demasiado obtenerlo no se rendirá, esa no es la naturaleza de Joonmyun. Si Jongin lo logro con Kyungsoo, el también puede. Simplemente necesita hacer un buen plan, ser como Kris. Demostrar con mayor insistencia su necesidad de cariño, vigilarlo, cuidarlo, si es posible asfixiarlo de cariño hasta que le sistema de Lay ya no pueda y se percate que Kim Joonmyun es el indicado, no Kris, no Luhan, no Jongdae. Joonmyun.
Ser Joonmyun el primero al que recurra, el primero en que piense al despertar y el último al dormir ¿Era tan difícil de lograr?
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Lay no podrá olvidar la expresión de Kris al verlo en el mismo edificio, el mismo piso y a unas cuantas puertas más alejado de él. Lay solo sonrió y le mando un beso volado sin olvidar un guiño.
Kris juro que estaba viendo mal, que sus ojos le jugaban una broma. No era posible que su alumno, amor casi-platónico, el chico que le espanta el sueño esta cerca de él, que le haya guiñado el ojo de forma juguetona casi atrevida. Al igual que no era posible que vistiera de forma provocadora. Kris quería lanzarse del balcón, era demasiado para su corazón.
La faceta sexi de Lay salió a la luz esa vez que se quedo en su departamento mientras se recuperaba de la fiebre, el haberlo rechazado fue su principal motivación. Pero no era porque quisiera hacerlo, el maestro pensaba que era más bien una forma de darle libertad. Si hubiera aceptado besarlo de seguro estaría emocionado de tener a su novio a unas cuantas puertas alejado de él. Aunque eso no quita el hecho de su felicidad, puede que por las mañanas se ofrezca a llevarlo a la escuela, inclusive podrán regresar juntos. Kris aun está enamorado, comprendan.
En esas dos semanas, Kris que se ha maldecido por haber tomado aquella decisión, tuvo la oportunidad de retractarse, pero no, como todo un adulto debía seguir manteniendo su decisión.
Al entrar a su departamento golpea su cabeza levemente con la puerta, respira hondo, suelta el aire, abre la puerta sacando solamente la cabeza, En efecto sus ojos no le jugaban ninguna broma. Ahí, frente a él se encontraba su tentación, vistiendo un short que le llegaba a las rodillas, una camisa sin mangas, donde no solo mostraba sus brazos, sino también las clavículas. Pálido y sin aire el maestro se adentra de nuevo a su departamento. Que alguien le ayude.
Con la cabeza repleta de ideas se deja caer en el sillón con un cojín cubriendo su rostro. Ser adulto es difícil, estar enamorado de un adolescente es aun más complicado, que ese chico este tentándolo es su perdición.
Al sentir que el aire no entra correctamente a sus pulmones tira el cojín, observa el techo blanco. Es inevitable no hacer memoria de su vida a través de los años.
Yifan vivía en una familia normal, su padre maestro de corazón, siempre deseando compartir su conocimiento con la intención de mejorar a los adolescentes. Un hombre estricto en toda la extensión de la palabra, los errores eran eso, errores en donde tenias permitido equivocarte un par de veces. Un hombre que apoyo a su hijo sin importa que.
Su madre enfermera de medio tiempo, una mujer realmente bella, con una sonrisa que hipnotizaba y aliviaba los dolores a los enfermos, rápida en su trabajo y ella no permitía los errores. Todo tenía que ser perfecto. Por otro lado tenemos a Mei, hermana menor por tres año. Una chica con rostro adorable, su carácter era fuerte, pero en ocasiones sacaba ese lado lindo que hacía a los chicos derretirse como chocolate.
En fin, una familia unida, cariñosa y cálida. Tanto Yifan como Mei crecieron, conocieron y experimentaron, cometieron errores, aprendieron de estos. Salían a fiestas, se emborrachaban. Mei fue la primera en enamorarse de una chica, al inicio sus padres no lo aceptaron, pero al ver a su hija feliz decidieron permitir la relación. En cambio Yifan se concentro en estudiar, no le importo buscar una novia o novio. En una ocasión su padre hablo con él, haciéndole saber que tendría su apoyo si sentía atracción por un chico.
La universidad, y por loco que parezca la relación de Mei duro casi dos años, hasta que ella se tuvo que mudar a otro país. La vida de Yifan en la universidad no era muy interesante, tuvo algunas novias pero nada estable, su meta siempre fue terminar con su carrera y conseguir un trabajo, establecerse en el ámbito económico. Después de conseguir eso ya podría buscar alguna novia con la que podría casarse y formar una familia.
Si, se puede decir que iba por buen camino cuando cierto adolecente apareció en su camino.
¿Quieren saber que sintió cuando lo vio por primera vez?
Decir que sintió mariposas es falso, una emoción que de la nada se apodero de él. Posiblemente amor a primera vista, aunque suena cursi eso fue Lay para el maestro, su amor a primera vista. Un chico que logro hacer a su corazón palpitar acelerado, cada vez que lo observaba en su silla ese sentimiento llegaba a él, las mariposas salían de su escondite y revoloteaban.
En estos años esa sensación no disminuyo, de lo contrario fue en aumento. Les diré el pensamiento más guardado de Yifan. Él nunca creyó en que su relación con Yixing fuera a durar tanto.
Con mucha dificultad Kris rememora el momento en que su relación se volvió oficial, cuando apenas Lay tenia doce años, un pre-adolecente enamorado de su maestro, un chico que con ayuda de su mejor amigo y la madre de este, logro que el adulto cayera rendido ante Cupido y ante sus encantos adolescentes.
Los días se volvieron semanas, las semanas meses y los meses años, dos en total. El corazón de Kris se hinchaba cada vez más, sus manos se acostumbraron a la piel suave de su alumno, sus labios danzaban con sutiliza y cariño sobre el cuerpo del chico de quince años. Sus ojos admiraban cada gesto, hipnotizado aun más por el hoyuelo que se hacía ver al sonreír, le encantaba besarlo hasta mimarlo era un placer.
Su relación era amena, equilibrada, claro como todos tienen problemas. Como la vez en que Lay mal pensó un mensaje de su hermana. Yifan lo recuerda con claridad. Ellos dos en la sala viendo una película, Lay como siempre tomando sus muslos como almohadas y jugando con sus dedos, el teléfono de Kris estaba en la mesa de enfrente. No había secretos, por eso al ver que la pantalla se iluminaba, tomo el aparato desbloqueándolo y viendo el mensaje de Mei. La discusión más intensa, Lay se coloreo de rojo al inicio, pero una vez explicada la situación este enojo despareció. Kris se prometió hablar de su familia más seguido, darle la oportunidad al chico de entrar a su vida con mayor intensidad. Cosa que no sucedió.
El remolino de sentimientos sigue apareciendo, por más que desea dejar de amar a Lay no puede, siempre hay algo que lo cautiva, que lo hace enamorarse aun más.
Ahora se arrepiente, desea con fervor recupéralo, pero a la vez no. Necesita que el chico se dé la oportunidad de experimentar, que su adolescencia no se sienta encadenado a él, oculto entre paredes, viendo películas en la sala cuando lo puede hacer en el cine, que los paseos inexistentes se hagan presentes, citas, detalles besos en público. Todo eso necesita experimentar Lay.
Mas sin embargo Yixing no quiere lo que los demás hacen. Su relación dejaría de ser especial. Su principal meta ahora es recuperar a Kris, hacerle entender que nunca, jamás, nunca tendría una relación con Joonmyun, en primera por que el chico no es tu tipo ideal, en segundo llega a ser desesperante. Todos los días queriendo estar a su lado, queriendo saber que le sucede, que hay dentro de su cabeza y lo más reciente intenta besarlo. Lay no puede estar con una persona que ni siquiera le da su espacio.
Por eso se ha decidido enamorar de nuevo a Kris.
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Es pasado las cuatro de la tarde cuando Kris ve a su manzana prohibida frente a él, sosteniendo una canasta con frutas y algunos postres. Si quieres hacer amistad con tus vecinos da un obsequio.
— ¿Puedo pasar?—Yifan no responde solo se mueve a un lado dándole la libertad al adolescente de ingresar a su departamento. Departamento que conocía a la perfección—un regalo de mi papá.
— ¿Por qué no me dijiste que te mudabas?—Kris toma la canasta y la deja sobre la isla de la cocina.
—No lose, tal vez porque te quiera sorprender—el chico se encoge de hombros, no queriendo dar importancia a lo que ha dicho.
Kris deja salir un suspiro, era mucho para su corazón. Puede que sea un adulto y tenga experiencia, sin embargo no tiene preparación para las cuestiones del amor.
—Joonmyun—comienza a decir Lay, mientras toma asiento—él de verdad que no es mi tipo—Kris corre una silla para poder sentarse junto a su alumno.
— ¿Lo has intentado?
— ¿Qué?
—Has intentado comenzar una relación con él, intentado entenderlo ¿Cómo sabes que no es tu tipo ideal cuando ni siquiera lo has intentado?
—Yo…yo—el adolescente no sabe qué decir, le duele las palabras de su maestro, son como flechas que atravesaban su corazón sin piedad.
—Ese es el motivo por el cual termine con nuestra relación. Yo no quiero que te sientas encadando a mí, eres joven necesitas experimentar con más personas. Salir al cine, al parque de diversiones, que tu padre conozca a la persona con la que sales— Kris suspira, al él también le duele, no es fácil dejarlo ir, más sin embargo ya dio el primer paso que era terminar. Su mano alcanza la de Lay, la acaricia con sus pulgares queriendo recordar lo suave que es su piel, la calidez que desprende— ¿puedes intentarlo?
Lay sonríe de lado, esa pregunta ya tenía respuesta y era definitiva. Él ya había elegido con quien estar, a quien darle su corazón sin importar que. Se acerca a Kris, admira la madurez del hombre que lo tenía completamente enamorado, su boca podrá decir miles de palabras pero sus ojos nunca mentían, esos mismos ojos que estaba trises. En definitiva Lay no se alejaría de él.
—No—con esa palabra Lay besa la frente y mejilla de su maestro para después salir del departamento.
Kris queda estupefacto en su lugar, esa era una nueva faceta de Yixing, luchando por lo que quiere, mostrando su lado atrevido diciendo palabras con seguridad, le enamoraba aun más. No es que se estuviera haciendo del rogar, era solo que… nada. Kris sucumbía a los encantos de Lay y ese era el propósito.
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El tiempo corría sin piedad. Por las mañanas Kris tenía la dicha de ver a su pecado, inclusive se sonreían y en más de una ocasión Kris le ofrecía llevarlo a la escuela. En más de una ocasión Lay deseaba besar a Kris, pero este se alejaba, eso solo aumentaba sus ganas de insistir y luchar por sus sentimientos.
Tres semanas en donde Joonmyun buscaba la atención de Yixing, sus planes se iban al desagüe al ver la interacción entre alumno y maestro. Inclusive tenía todas las de ganar, simplemente podía acercarse a la oficina del director, comentarle la situación y posiblemente mostrar pruebas y el maestro seria despedido inmediatamente. El único obstáculo en ese plan era su amado Lay. Si hacia eso de seguro lo odiaría y era lo que quería evitar.
Por otro lado Baekhyun estaba más que complacido al ser testigo de cómo su maestro de inglés se jalaba los cabellos cada vez que veía a Lay, era aun más feliz al ver que su amigo mostrar su faceta sexi. Inclusive Chanyeol se había percatado de este cambio y como buen novio apoyaba en todo lo que Baekhyun pedía y decía.
El plan marchaba muy bien y según la señora Byun, Baekhyun y Yixing, Kris caería en cinco semanas o posiblemente un mes, si es que le maestro se hacia el difícil.
En más de una ocasión llego a pensar que parecía obsesionado, inclusive se comparara con esas personas que recurrían a la magia para atrapar a su chico o chica. En esas mismas ocasiones se reía. Lay solo quiere a Kris devuelta a su vida, si fuera el caso de que Yifan ya no lo amara entonces si estaba loco y obsesionado. Más no era así, ese sentimiento no desaparecía y eso era su motor para continuar con el plan.
Su penúltima clase comenzaba, su corazón bombeaba con fuerza, las mariposas en su estomago se soltaron, revoloteaban felices. Al entrar a su salón se percata de la pareja en la primera fila, Kyungsoo y Jongin, el de tez bronceada alimenta su novio quien gustoso acepta cada bocado. Es sin duda alguna la pareja más romántica que Lay había visto en su vida. Ambos a pesar de haber tenido sus diferencias en un principio se acoplaron perfectamente.
Lay se vio a si mismo junto a Yifan, rememorando las hermosas tardes que pasaba con él en su departamento, las veces en que lo besaba de forma tierna, los encuentros pasionales. En sus recuerdos no hay paseos por el parque tomados de la mano o salidas al cine, besos frente a la casa de su padre y despedidas con miradas llenas de suplicas para que Yifan no se marchara. Sus recuerdos son entre las paredes, películas en la dvd, miradas suplicantes en un auto a dos cuadras de su casa, no hay paseos por el parque, pero si existía el sentimiento de que al día siguiente se verían de nuevo, repetirían lo anterior por seguridad.
A Yixing nunca le importo caer en la rutina con su ahora ex-novio, siempre y cuando él estuviera presente. Lay deseaba poder decirle a su padre la verdad en un futuro, al igual que le pedía disculpas a su madre por las noches. Simplemente estaba enamorado. Kyungsoo y Jongin le ayudaron a darse cuenta de muchas cosas, que crear un plan para estar juntos de nuevo no era incorrecto, siempre y cuando el sentimiento de soledad y de querer recuperase sea mutuo.
Una sonrisa se forma en sus labios, ahora que lo pensaba Kris también estaba poniendo de su parte. Casi todas las mañanas se ofrecía a llegar juntos, no porque le quiera ahorrar la caminata si no para pasar tiempo juntos. O esa vez que por accidente olvido las llaves de su departamento, Yifan le abrió las puertas, le hizo sentarse en el sofá junto a él y vieron una película juntos, Lay usando los muslos de Kris como almohadas.
Lay nunca despego la mirada de la pareja enamorada, en un abrir y cerrar de ojos tenía una nueva idea. Con su mirada encontró dos objetos que le ayudarían, un rotulador y una cartulina. Con su mejor sonrisa se acerca al mesa-banco de Joonmyun, el chico al percatarse levanta la mirada y le sonríe de vuelta.
—Joonmyun ¿te servirá esa cartulina?—el chico mira el objeto para después ver Lay.
—No, la tengo por otros motivos—sonríe— ¿la quieres?—Yixing no contesta solo toma la cartulina y se aleja tan rápido como llego.
Solo tiene cinco minutos para terminar con lo que su mente junto a su corazón planearon. Baekhyun siendo el chico curioso que es se acerca a su amigo, lo ve escribir rápidamente y cuando al fin ve lo que ha escrito abre los ojos.
—Se supone que esperaríamos—dice con el ceño fruncido y los brazos cruzados.
—Losé, pero no puedo esperar. Entiéndeme Baek.
—Bien ¿Qué quieres que haga?—Lay sonríe.
—Que distraigas al salón, solo me quedan dos minutos y no puedo perder más tiempo.
La cabeza de Baekhyun comienza a trabajar rápidamente. Va a la parte trasera y hace lo primero que se le viene a la cabeza, grita y levanta las manos. Todos absolutamente todos voltean para mirarlo. Baekhyun sonríe y comienza a bailar de forma graciosa, se detiene cuando Yixing desparece.
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El maestro más estricto ingresa al aula, todos sus alumnos se acomodan en sus asientos sacando sus materiales correspondientes a la materia. Yifan deja un par de libros en la mesa, levanta la mirada, escaneando el salón de clases.
— ¿Dónde está Zhang Yixing?— todos los adolescentes buscan a Lay por el salón. Kris mira a Baekhyun, pero este niega con la cabeza—bien, pagina cuarenta y seis. Luhan leer por favor.
Es junto en el momento en que Luhan comienza la lectura siente un leve jalón en su pantalón. Ahí, escondido debajo del escritorio se encuentra Zhang Yixing sonriendo ampliamente develando su hoyuelo. El maestro vuelve a mirar al frente al no escuchar la voz de Luhan, le indica que continúe. De nuevo baja la vista, Lay rápidamente desdobla la cartulina. La respiración de Kris cesa por unos segundos. El chico tiene un leve sonrojo en las mejillas, los ojos fuertemente cerrados y las manos le tiemblan.
Por ¨accidente¨ el plumóncae el piso, Kris se arrodilla para poder tomarlo. Su mirada conecta con la de Lay, le sonríe.
¿Puedes besarme? Escrito en la cartulina. Toma el mentón de su alumno y susurra—aun te amo—para después besarlo, tierno parsimonioso. Le transmite lo mucho que lo entrañaba, lo mucho que anhelaba su regreso y lo mucho que lo siente. Por todo lo que le hizo pasar.
Lagrimas comienzan a resbalar por las mejillas de Yixing, su corazón se siente de nuevo completo. De nuevo sonríe, es feliz.
Puede que no sea el momento ni mucho menos era el lugar adecuado para una posible reconciliación. Simplemente eran los sentimientos, corazones y dedos entrelazándose bajo el escritorio, ojos brillantes y un beso que era prohibido, sin embargo a nuestros protagonistas no les importaba. En esos momentos eran ellos dos, besando y sonriendo.
Eran felices de tenerse de nuevo.