Kris nunca imagino el cambio que Yixing tendría en cinco años, aquel chico bajito y un poco gordito ya no está ahí, ahora había un pre-adolecente, un poco más alto y delgado, lo único que no desapareció fue su hoyuelo.
—Me gustaría decir que es un gusto estar con ustedes, pero me temo que no—Lay se sintió un poco herido. El Kris frio estaba frente a él.
—A decir verdad prefiero preparatoria o primaria, pero secundaria no, ustedes están pasando por cambios y eso hace que su conducta sea un poco irrespetuosa.
— ¿Le puedo hacer una pregunta?—Baekhyun levanta su mano.
—Me estás haciendo una ahora, pero dígame.
—Si no le gusta secundaria ¿Por qué esta aquí?
—El director me asigno aquí, no luchare con mi superior, así que empecemos las clases—Lay pudo notar el cambio en su maestro, ahora tenía el cabello un poco más corto y rubio su traje dejaba ver un físico más torneado.
Kris coloco unos ejercicios de Física y sus alumnos tenían que contestarlas, Lay se apresuro a terminarlas quería hablar con su maestro, saber porque había regresado. No lo malentiendan. Esta feliz de verlo, pero el porqué regreso de nuevo le esta carcomiendo.
Una vez terminados los ejercicios se acerco al escritorio, Kris no pareció sorprenderse y si lo hizo lo disimulo muy bien.
—Veo que sigues siendo un niño inteligente—Kris tomo la libreta y empezó a revisar.
— ¿Por qué se fue?
—Por trabajo, era un buen puesto—entrego la libreta a su dueño. Junto con todos los ejercicios calificados y una firma con su calificación.
—Aún está en la última página—Kris sabia a que se refería su alumno, quiere sonreír y decirle que no lo olvido, pero se debe de abstener ya que esta en clases y esta es su trabajo.
—Lay has terminado, ¿me ayudas?—decía Sehun casi en la última fila.
— ¿Lay?—pregunto Kris, mientras alzaba una ceja.
—Lo escucharon de mi madre, así que ellos empezaron a llamarme igual.
—Muy bien, ayuda a Sehun, Lay
Lay se acerco a ayudar a Sehun pero se veía tentado a ver a su maestro de vez en cuando.
Lay había cambiado, Kris había cambiado, ambos había cambiado. Lay ya sabía diferenciar entre lo bueno y lo malo.
Kris se dio cuenta que su alumno tenía un efecto en él, en el tiempo en que estuvo fuera del país, no pudo conocer una persona por qué cierto pre-adolecente no salía de su cabeza, cinco años domino su mente, pero ahora lo tenía ahí, en el salón a unos cuantos pasos de distancia.
Cuando lo vio, quería abrazarlo y nunca dejarlo ir, pero Kris era un profesional y dejo sus sentimientos hacia su alumno. Por el momento.
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— ¿Cómo te sientes?—la fuerte voz de Chanyeol se escucho en la cafetería.
—Estresado, tener que lidiar con mocosos que sufren cambios, no es lo más bonito.
—Ya ves… pero te sorprendiste cuando lo viste ¿verdad que ha cambiado?—Chanyeol se entero del pequeño secreto de Kris antes de que él se fuera, obviamente Chanyeol se enojo, no podía creer que su amigo pudiera hacer eso. Chanyeol creyó que su amigo tenía problemas al tener esa clase de sentimientos y pensamientos.
Pero que podía esperar, la niñez de Kris no fue fácil y el tampoco era un gran ejemplo a seguir, así que mejor el callo y acepto, Chanyeol vio el cambio de Lay, y se decía que cuando Kris regresara moriría, el chico se había vuelto más apuesto. La adolescencia le había hecho bien.
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— ¿Todavía no te dejan irte solo a casa?—Lay vio a su maestro parado detrás de él, como la primera vez que hablaron.
—Ya tengo autorización, pero hay me toca cita médica.
— ¿Te sientes mal?—Kris se sentó a lado de su alumno.
—A decir verdad no, pero ella quiere que me hagan un chequeo—por unos segundos todo era silencio, hasta que Lay lo rompió.
— ¿Te volverás a ir?
—No, esta vez me quedare—dijo Kris mientras veía a algunos alumnos salir.
—Yo… ya no quiero que te vayas— Kris miro a su alumno —Me sentí solo.
— ¿Solo? ¿Por qué? Tenías a tus amigos
—Lo sé… pero me sentía así, se que era un niño…
—Aun eres un niño—dijo Kris con una leve sonrisa muy difícil de detectar.
—Como sea, la escuela no era lo mismo—Lay bajo la cabeza porque sentía vergüenza.
— Te digo algo—Lay asintió energéticamente.
—Cuando me fui, también me sentía solo, recordaba a una persona que no debería recordar—Kris miro a Lay, esperando a que entendiera el mensaje en sus ojos.
— ¿Quién era esa persona?—Kris iba a contestar, pero el claxon del auto color plata sonó.
—Algún día te diré quién es esa persona, suerte con el médico—Kris despeino un poco el cabello de Lay y se fue, Lay observo a su maestro alejarse por el pasillo. De tan solo pensar en que su maestro había extrañado a una persona hizo que su corazón parara de latir por un microsegundo.