Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La vida de Daniel Phantom por AngleBits

[Reviews - 34]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Oscuro y vacío, un vacío tan profundo que mi alma parecía perderse. Las islas flotaban en la deriva  en un mar de infinita oscuridad. Me asome por el borde de la isla donde yo me encontraba, un vacío sin fin, ¿Me pregunto si cayera seguirá así por siempre o en algún momento tocaría con el suelo? Será mejor que no lo sepa.

Daniel y Petro se había marchado ase unos instantes dejándome en este pequeño pedazo de tierra donde solo crecía un árbol alto y torcido con hojas azules que brillaban con un color neón, se miraba genial. Él me dijo que en esta isla estaría a salvo, que estaba hecha de un material anti fantasmas o algo así, que ese sujeto llamado reloj odiaba las vistas de los humanos, baya tipo más arrogante.

Mire al frente, unas islas con extraña vegetación se deslizaban con suavidad. Esperar es un asco, arrastre la mano por la tierra y la levante mirando mi palma, con que esta isla es de algún material contra fantasmas quizá esto me sea útil,  saque una pequeña bolsa de cuero de mi bolsillo, nunca pensé que esta porquería llegara a servir de algo, la llene con la tierra del lugar y la cerré con el cordel de la misma bolsa. Ahora que lo pienso la hojas se miran geniales quizá me pueda llevar algunas, me puse en pie,  espero no estar rompiendo alguna estúpida regla fantasma o algo si, pensándolo bien que importa, por ese tipo odioso de reloj tengo que esperara en este lugar supongo que es mi derecho o algo así, es lo que quería pensar. Tome la hoja de un rama baja, eran mejor de lo que esperaba, un venas corrían por ella de un color azul más intenso. Por un momento la contemple pero inmediatamente la hoja se disolvió en mi mano dejando la silueta azul de la hoja.

-MIERDA- replique- Espero no me traiga problemas, yo y mis idea geniales-

El color desapareció y el tono de mi piel regreso a la normalidad, que susto,  mire hacia arriba, creo que no podre llevarme más que un montón de tierra,  una hoja se desprendió y callo en mi ojo inmediatamente se disolvió, por un momento todo fue color azul, después regreso mi visón normal

-NO ME JODAS, ACASO TODO EN ESTE MALDITO LUGAR ODIA A LOS HUMANOS- me aparte del árbol algo frustrado y me senté de nuevo a mirar el vacío lugar, esto es un asco de verdad que lo es.

-Así que tú eres Dash Baxter- Una voz profunda se escuchó en e vació

-Quien anda hay, muéstrate- Exigió Dash saltando en una poción defensiva y con mirada seria

Un joven encapuchado apareció, el tono de piel era metálico y sus ojos color rojos en su totalidad, extrañas líneas negras cruzaban su rostro y en su pecho guardaba engranes que giraban a tiempo sin sentido.

-¿Quién eres tú?-

-En este lugar suelen llamarme Reloj-

El encapuchado se deslizo por los aires acercándose al gran árbol para apreciarlo, dándole la espalda por completo a Dash

-Pensé que esta isla era antifantasmas- dijo Dash sin bajar la guardia

-Y lo es-Respondió reloj al momento que su cuerpo cambiaba al de un anciano de barba larga y blanca, algo encorvado.

-¿Pero cómo es posible que estés aquí y que demonios ocurre con tu aspecto?-

-Es simple, yo no soy un fantasma aun que todos lo dan por sentado que lo soy, yo solo soy el guardián de la línea de tiempo de esta dimensión-Respondió girando a Dash para mirarlo de frente

-¿De esta dimensión acaso hay más?-

-Más de las que puedas contar, mi deber tan solo es evitar que esta dimisión colisione con otra y provoque una reacción en cadena que acabaría con cada una de las existentes-

-¿Qué es lo que sucede si no lo quedes evitar?- pregunto Dash un tanto acomplejado

- Mira detrás de ti-

Dash obedeció, pero tan solo había vació e islas flotando

-Esto alguna vez fue un mundo, pero hubo una catástrofe y cada dimisión existente colisiono formando esta zona llena de oscuridad y vestigios de islas pertenecientes a distintos mundos, realidades y dimensiones-

-Pensé que era una zona fantasma, un mundo de fantasmas- Dash se vio sobrepasado por la información

-Por alguna extraña razón las almas en pena llegan a este lugar- Dijo reloj cambiando su forma a la de un infante- En tu mundo muchas personas apodan a este lugar “El purgatorio” donde las almas perdidas y toda clase de criaturas que carecen de una llegan a parar a sufrir, un nombre muy acertado diría yo-

Dash se quedó en silencio mirando el lugar con otros ojos, ahora el  vació le infligía un verdadero temor

-¿A qué has venido y donde esta Daniel él fue a buscarte?- pregunto finalmente

- E venido a buscarte, sobre Daniel él se encuentro ahora mismo hablando conmigo mientras le revelo una pequeña parte de su pasado olvidado-

-¿Cómo es posible que el este contigo si estás aquí?-

-Un acto de omnipresencia no es algo muy difícil para mí- Una vez más reloj volvió a ser el joven de antes- pero dejemos la charla no tengo mucho tiempo-

-Y bien entonces que has vendo a decirme- respondió Dash de forma cortante

-En  5 año a partir  de hoy una guerra azotara tu mundo y Daniel será la única esperanza, pero quedara desbastado y perderá el camino, tu Dash Baxter serás el encargado de guiarlo de vuelta-

Dash quedo en shok

-Por qué demonios… porque yo tengo que hacer tal cosa,  me dices esto a mí, porque no se lo cuentas a Daniel- Dash alzo la voz montada en cólera

-Porque si le cuento esto a Daniel, lo tratara de evitar y en cualquier escenario el terminara muerto y el futuro destruido y llegaremos a la creación de una nuevo purgatorio, la supervivencia de Daniel es la máxima prioridad así que en ningún caso él debe saberlo-

-¿Pero porque yo?- se preguntó Dash cayendo de rodillas al suelo con la mirada perdida

-Es de vital importancia que tú sobrevivas así que asegúrate de no morir, y llegado el momento más vale que estés preparado a todo porque será más duro de lo que puedas imaginar-

Dicho esto reloj se esfumo como vapor en el aire, sin antes no dejar unas últimas palabras atrás

-Esto te será de ayuda. Pero es lo único que puedo hacer por ti-

En la muñeca de su mano izquierda apareció un número “365”  y frente a él un mango de espada y una funda.

-Una hora antes-

Lejos de esa zona, en un templo que flotaba sobre una isla Daniel conversaba con reloj en una gran cámara de piedra, al frente un gran espejo conformado por agua flotaba mostrando el pasado, presente y futuro de Daniel en una película que no tenían ningún orden particular.

-Reloj muéstrate- exijo Daniel, las antorchas se encendieron en llamas azules un ente infantil se mostró delante del espejo-

¿Ha que se debe tu molesta intromisión?- la voz del infante fue fría

-Deberías saberlo, ¿no es así?- Interrogo Daniel

 -Soy un guardián de tiempo, no un mediocre adivino-

-Necesito que me ayudes a descubrir mi pasado, cuando yo era tan solo un niño-

-¿Por qué debería hacer tal cosa?, Yo no te debo nada en cambio tú me debes más de lo que podrías pagarme. Dame una buena razón-

Daniel agacho la cabeza y cerro ambas manos en puño

-Por favor-

Reloj cambio su forma a la de un hombre joven

-Esa es tu razón, eres tan patético, ¿lo sabes?-

-Por favor- repitió una vez más sin mirarlo a los ojos

-Me pregunto con qué me pagaras-

Daniel alzo la mirada hacia el ahora era un hombre viejo

-Ya sabes cómo funciona esto- Dijo Reloj apartándose del espejo flotante, una cuidad azotada por una fuerte tormenta apareció en el –Esta vez no tienes el permiso para interferir, si lo haces te sacare de inmediato y segundo solo cuentas con pequeño límite de tiempo así que más vale que te des prisa, ¿has comprendido?-

Daniel solo asintió y levantando el vuelo atravesó el cristal líquido para formar parte del escenario, reloj seguía sus movimientos.

Ahora me encontraba en la ciudad un clima en extremo terrible, fuerte viento, un gran frio y una oscuridad. A un estaba lejos de la ciudad. Como primer acto me volvió intangible e invisible y moviéndome a gran velocidad me aproximó. La ciudad era completamente rodeada por tanques de guerra y escuadrones de tierra muy bien armados. Mi sentido fantasma se volvió loco, un aire gélido escapo de mi labios, pase la vista por todos lugares hasta encontrar la razón, sobre la ciudad esferas de luz llenaban es cielo oscuro, pero no tenía tiempo para eso.

<> pensé

El clima pasaba a peores, tengo que encontrarme rápido, volé bajo casi mi estómago tocaba la carretera. Pero esto no tenía sentido los autos fueron dejados a mitad de la calle, también hay objetos tirados en las aceras. Un gran edifico se alzó frente a mí, lo cruce solo para confirmar mis sospechas, las oficinas estaban deshabitadas una completa ciudad fantasma.

No debía seguir así, solo es una pérdida de tiempo y no sé con qué tanto cuento. Seguí atravesando edificios hasta dar en el centro de la ciudad, un parque con árboles y un hermoso lago artificial, los llantos de un niño se escuchaban y hay en la orilla de lago se encontraba el pequeño.

 Daniel voló de inmediato hacia él. El agua escurría por su cabello que se había pegado ya a su cabeza, gemía y seguramente estarían corriendo lagrimas por sus ojos pero por el mal tiempo sería imposible saberlo, el color de su piel era demasiado azul, llevaba puesta una playera, un short y unos pequeños tenis rojos con las agujetas desatadas, nada adecuado para el inclemente tiempo.

<> pensó Daniel << ¿Por qué él está aquí?          ¿Por qué él está llorando? ¿qué sucede?>>

-¡HEYYY, TU EL CHICO DEL LAGO ¿ESTAS BIEN?!- un segundo niño gritaba desde una colina muy pegada a la carretera. Daniel lo miro pero no era nadie que conociera, lleva puesta una camisa azul cielo, unos shorts negros y tenis blancos. Al igual que Marshall estaba empapado de pies a cabeza, pero por el contrario se veía totalmente despreocupado.

<< ¿Quién es el?, ¿dónde está mi yo del pasado?, Qué demonios ocurre >> A Daniel lo azotaban las preguntas, una tras otra, como a los pequeños la lluvia.

El chico corrió a toda prisa al ver que Marshall no respondía

-¿Estas bien?- pregunto pero nuevamente Marshall lo ignoro- Oye amigo ¿estás bien?         responde- Con una flamante sonrisa coloco una de sus manos sobre el cabello de Marshall y lo revolvió con suavidad. Daniel quedo sorprendido con la actitud de aquel niño, bajo esas circunstancias todos estarían llorando y exclamando por su padres, pero aquel chico en verdad parecía disfrutarlo

Marshall seguía gimiendo y con la vista clavada en el lago sin decir palabra alguna. El clima seguía empeorando.

-Oye ¿tú sabes que son esas luces en el cielo?- pregunto el chico mirando hacia arriba, Marshall quedo sorprendido con la pregunta y no solo el Daniel también

<< ¿Quién es este niño?>>se preguntó Daniel

-¿Puedes verlas?- Pregunto Marshall con voz temblorosa

-Ahh si, la vez veo a menudo, pero no tengo idea de lo que sean- dijo rascándose con la mano detrás de la cabeza-ciertamente hoy hay muchas, por cierto mi nombres Leon Van Videc, es un nombre largo y tonto-

-Me gusta- respondió Marshall- Me gusta tu nombre-

Leon sonrió y lo sujeto de la mano

-Vamos, si seguimos aquí podremos enfermar- sin más Leon se echó andar sin soltar de la mano a Marshall, quien no opuso ninguna resistencia.

-¿Cuál es tu nombre?-

-¿Eh?- Marshall seguía desorientado

-Tu nombre, cual es-

-Marshall Straiker-

-Suena genial- Respondió alegremente Leon

<<Straiker, Marshall me mintió desde un inicio>> Pensaba Daniel mientras los seguía

Llegaron al porche de una gran casa, donde al menos podrían refugiarse de la lluvia

Marshall se fue hasta el fondo lo más lejos de la lluvia que el estrecho lugar le permita, por otro lado Leon se quedó en la orilla donde las gotas lo golpeaban con poca fuerza.

-¿Qué son exactamente esas luces?- pregunto Leon siguiéndolas con la mirada

-Son espíritus- respondió Marshall tembloroso

-¿Espíritus?- repito dudoso

-Fantasmas de personas que han muerto-

Marshall lo pensó

-Pero no se parecen a los que yo he visto, esto son lindos y se ven geniales-

Leon no paraba de contemplarlos-

-Es porque son espíritus de personas que han muerto en paz-

-No lo comprendo- Respondió Leon cruzando los brazos y frunciendo el ceño

<> pensó Daniel admirándolo

-Algún día lo aras- respondió Marshall, luego estornudo

-Si no logramos secarnos enfermaremos- Leon observo la puerta de la casa, intento abrirla pero no lo consiguió. A pesar de lo enfadado que estaba Daniel con Marshall, necesitaban ayuda y no soportaba ver a dos niños sufriendo, pero la advertencia de Reloj fue clara no tenía permitido intervenir.

<> Pensó Daniel y seguido a traspaso la puerta y la abrió completamente para ellos, Daniel espero temeroso ser expulsado de ese tiempo, pero nada ocurrió

-Ho que suerte- Dijo Leon luego tomo a Marshall de la mano y lo introdujo al lugar el calor los abrazo al instante, Leon cerró la puerta tras ellos.

-Que bien se siente- exclamo Leon

-Es allanamiento- Dijo Marshall

-Eres demasiado aguafiestas- Replico Leon- Por cierto donde estarán las personas no he visto  a nadie desde hace rato, ¿Por qué será?-

Daniel se preguntó lo mismo

- Es obra de mi padre- Dijo Marshall temblando mirando fijamente el suelo- El durmió a las personas de esta ciudad, luego las asesino, ahora todas vuelan sobre la ciudad, el capitán Walker se encargó de acabar con ellas una por una, ahora el capitán Wilfrid Technus se encargara de hacer algo con ellas pero no se más, aunque ellos serán asesinados también después de esto. Yo fui abandonado por mi padre en esta ciudad, dijo que si era capaz de sobrevivir el me consideraría como alguien “útil”-

Daniel quedo en un completo shok al escuchar todo aquello

<> Daniel comenzaba a entender las actitudes de Marshall y el por qué su carácter era tan desconfiado y frio, se sintió mal por el.

Leon lo miro por unos instantes

-Si no nos secamos terminaremos enfermando- Dijo con una sonrisa ignorando totalmente lo que le habían revelado, La expresión dura y fría de Marshall por fin cambio a una de total confusión.

Leon salió a la chimenea de la casa y con un gran esfuerzo logro encenderla aun que se quemó levemente las manos un par de veces, se sacó la ropa totalmente quedando desnudo y la coloco frente a la chimenea para que se secara lo mismo repitió con Marshall quien aún seguía impactado por lo que lo guio al frente de la chimenea y lo sentó luego tomo lugar a su lado y le coloco una mano al hombro para poder estar lo más cerca que pudiese de él. Un silencio inundo todo solo el crujir de la madera al quemarse y sus sobras bailando en la pared por efecto de la luz de las flamas.

-¿Por qué?, ¿por qué no me dices nada?, ¿porque no me gritas?- rompió Marshall el silencio totalmente desconcertado, Leon lo abrazo muy fuerte

-No es tu culpa, porque habría de hacerlo-

Marshall solo conocía el maltrato, los gritos y una vida dura y llena de dificultades el recibir sonrisas y amabilidad era algo que no concia y lo confundía demasiado

-Prométeme que nos volveremos a encontrar por favor- dijo Marshall con lágrimas en los ojos

-Por supuesto- Respondió Leon sin pensarlo con una flamante sonrisa en su rostro, Marshall solo undio la cabeza en el pecho de Leon. En ese instante todo se desplomo y se volvió un humo para Daniel, estaba siendo arrastrado fuera de ese tiempo y devuelto a su época, su estancia en esa época por fin se había agotado, en pocos instantes se encontraba frente al espejo de agua que ahora no mostraba nada, los muros de piedra y las flamas se materializaron una vez más junto con reloj.

-Encontré las repuestas que buscaba pero en cuanto a mi pasado ahora estoy más confundido que nunca, ¿Por qué tengo recuerdos de un lugar donde nunca estuve?-

Daniel fue sobrepasado por todo aquello

-El lugar, la hora y la fechas son las correctas, no puedo decirte nada más tendrás que averiguar eso tu solo- Dijo Reloj- ve con cuidado- después de esas palabras Reloj hizo un ademan de manos, Daniel, Petro que aun esperaba en la entrada y Dash, que en ese mismo instante terminaba de hablar con el Reloj que se presentó ante él, se desvanecieron en el aire

-Ya puedes salir- Dijo reloj, desde la sombras unos ojos rojos saltaron a la vista un chico de cabello blanco y gran compleción se mostró ante el

-¿Desde cuándo sabes que estoy hay?- pregunto Marshall

-Sabía que estarías aquí desde antes que tú mismo lo decidieras- Dijo Reloj

-Pensé que no eras un adivino mediocre- Se burló Marshall, Reloj solo sonrió con una comisura de sus labios – Dime ¿porque no le mostraste todo lo que ocurrió ese día?-

-No hago caridad, le mostré lo que tenía que mostrarle, no por su bien, si no por el bien de el de el mundo- Respondió Reloj regresando a su forma infantil -Tu mismo no se lo has contando, tu tienes tu razones y yo las mías-

-Espero que nuestras razones no le causen que su vida se vuelva un infierno-

-Eso es lo que menos me importa, solo cumplo con mi trabajo- Respondió reloj

Marshall se esfumo en las sombras.

Daniel y compañía regresaron al bosque, la luna iluminaba con su luz azul. Tanto Daniel como Dash estaba recostados sobre un manto de hojas caídas mirando hacia arriba, Petro permanecía sentado mirando el cielo, cado uno solo estaba aún brazo de distancia del otro.

-Tu rostro esta echo un asco Daniel-

-Lo mismo puedo decir de ti Dash-

-No ha sido un buen día- resoplo Dash

- Ni que lo digas- Respondió Daniel

Una melodía sonó en la oscuridad

-¿De dónde proviene ese sonido?- pregunto Daniel

-Estoy recibiendo una llamada- respondió Dash sacando el móvil y mirando la pantalla- Que raro no conozco ese número- dijo mostrándoles a Daniel

-Es el número de mi madre- Daniel tomo el movil para responder-

-¿Mama?-

-¿Cariño eres tú?, que haces con el celular del chico Baxter?-

-Es una larga historia se las contare cuando los vea-


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).