Danny lo miro perplejo retrocediendo un paso sin notarlo, se sonrojo mientras bajaba la mirada al suelo.
-No…no creo que sea una muy buena idea- se limitó a decir.
-¿Qué sucede, Daniel?- pregunto Marshall bajando la mano -¿te ocurre algo malo?-
-No es eso- respondió Danny frotándose el brazo izquierdo con la mano- es que yo…es que…no se bailar-
Danny mintió, el problema era realmente que Marshall lo intimidaba, su presencia le causaba una gran confusión que no lograba explicar.
-¿Eso es todo el problema?- Marshall sonrió con solo una comisura de sus labios – bueno eso puede arreglarse-.
Sin aviso Marshall despego de la plataforma de hielo y levito gentilmente en el aire hasta estar frente a Danny donde se detuvo sin tocar el suelo, Danny lo observo sin lograr articular una palabra, míralo mientras se deslizaba en el pálido hielo era una cosa pero verle bolar no tenía comparación, Danny quedo hipnotizado por la gracia con la que movía su voluminoso cuerpo. Suspendido en la nada Marshall ofreció su mano una vez más, Danny lo contemplo en ese momento temía muchas cosas pero lo que más lo atemorizaba era ese extraño shock eléctrico que recibía cada vez que tenían algún contacto con él, aun así Danny quedo encantado al tener al frente, a lo que el mismo llamo, un ángel.
-Vamos- lo alentó Marshall, por fin el pelinegro accedió y con precaución palpo ligeramente la mano de Marshall, no hubo descarga pero si una gran sensación de calidez que lo envolvió en un instante, la mano de Marshall no solo superaba el tamaño de la Danny sino que también estaba cubierta de bello por la parte del dorso, un bello muy espeso aunque de color negro, aun que el joven llevaba una manga larga que cubría sus fuertes brazos. Estrechando con fuerza la mano Daniel, dio un pequeño tirón hacia atrás levantándolo del pasto verde, por supuesto Danny comenzó a volar a su lado dejándose arrastra por el al centro de la pista improvisada.
-¿Listo?- Pregunto Marshall
-No- respondió en un instante
-Eso es suficiente para mi- respondió el joven en tono burlón dedicándole una sonrisa, Marshall bajo al hielo y jalo a Daniel colocando los pies del el sobre los suyos mientras los sujetaba con fuerza por la cintura y lo acercaba a su ancho pecho.
-¿¡Qué pretendes ¡- Pregunto alarmado Danny, sin duda era vergonzoso y el color rojo de sus mejillas lo delataban, Marshall solo le sonrió y sin decir nada mas comenzó un suave vals sobre toda la pista, las luciérnagas revoloteaban de un lugar a otro encendiendo y apagando como pequeñas estrellas, aunque el momento era un sueño que muchos envidiarían nuestro pequeño héroe se debatía internamente con el mismo, las dudas lo acosaban , su novia era Sam y lo que él hacía en aquel momento sin duda era un engaño, una traición pensó el, pero el hecho de estar solo sin nadie con quien desahogarse y lograr deshacerse de la miseria que lo agobiaba, esos sin dudad eran los motivos que lo llevaron a la situación en la que se encontraba, no era justo para nadie, pero Danny no soportaría más vivir en ese infierno de ansiedad que ni siquiera pudo explicar por qué sentía, el necesitaba apoyo y compañía, ña triste mirada de Danny que no miraba un punto en particular llamo la atención de Marshall quien sin detenerse tomo el mentón de Daniel con sus dedos alzando su cara de modo que se encontrar sus miradas.
-Desteto verte así, que te ocurre- pregunto con seriedad, Danny no soportaba su mirada y zafándose de el agarre de sus dedos escondió su cara entre su pecho
- No lo sé, No lo sé- respondió Danny con voz quebrada- me siento tan triste y tan feliz, me siento vacío pero no se la razón- Marshall paro en seco y nuevamente obligo a Daniel a que lo mirase, Danny se percató de la mirada afligida de Marshall quien sin aviso estampo sus labios contra los del pelinegro quien se estremeció, el shock eléctrico se presentó pero este era diferente era familiar, reconfortante, las lágrimas de Daniel se desbordaron cayendo en la ropa de Marshall, Danny sabía que lo que hacía estaba mal estaba engañando a Sam pero él deseaba a eso él quería estar con Marshall, con ambas manos Danny tomo la cara de él joven quien lo envolvió con fuerza, sin percatarse ellos abandonaron centímetro a centímetro el hielo llegando aúna altura considerable, al final por la falta de aire deshicieron el beso, agitados y jadeando, Marshall reclino la cabeza en los hombros del pequeño, era muy confuso todo eso y Danny no sabía que decir o hacer, un aire frio escapo de los labios de Daniel entre la maleza algo llamo su atención una pequeña esfera de luz que vagaba sin un rumbo, Danny la reconoció de inmediato sabia que eran las mismas que vio esa mañana.
-Esas luces- Murmuro Danny con los ojos rojizos.
-De que hablas -pregunto Marshall, Danny le indico el lugar por el que vagaba la pequeña luz, al encontrar lo que él decía su cara mostro un enorme asombro, Danny se asombró al ver que por primera vez algo cambia el semblante serio de Marshall.
-Daniel, ¿acaso eres capaz de ver esas luces?- pregunto atónito
-Si- respondió sin comprender que era lo especial- que es lo sorpréndete muchos personas pueden ver fantasmas-
-Te equivocas Daniel, en efecto hoy en día muchas personas cuentan con la capacidad de ver fantasmas y cosas extrañas, pero con estas luces es distinto, los mismo fantasmas no consiguen verlas o sentirlas, ni muchas otras criaturas la perciben, los humanos que pueden sentir su presencia es imitado y aquellos que pueden verlas es aún más reducido, el hecho de que puedas verlas no se debe a tus poderes fantasma- Explico Marshall sin penderse vista la luz que parecía estar perdida, Danny fue sobrecogido por la información.
-¿cuantos personas en el mundo pueden verlas?- pregunto limpiando sus ojos con las mangas
-hasta donde yo sé 5 personas contándote a ti-
-¿Quiénes son?- pregunto Daniel un poco sorprendido
-Primero estas tú, luego el otro mitad fantasma que habita en Wisconsin, después un Militar de alto rango que trabaja en operaciones extremadamente secretas, luego esta mi madre y por ultimo yo-
Obviamente Danny había quitado a Marshall de la lista junto con él.
-¿Vlad masters puede verlas, estas seguro que no se debe a que somos mitad fantasmas?-
- Así que lo conoces-
-Mejor de lo que quisiera- dijo en tono burlón –
-Estoy completamente seguro de eso-
-¿Qué son exactamente esas luces?- inquirió Danny
-Veras, como ya imaginaras en efecto son fantasmas pero son de otra clase-
-A que te refieres- pregunto Daniel un poco confundido
- Existen dos tipos de fantasmas- comenzó Marshall- como sabrás ambos proceden de las misma fuente las personas, plantas y animales. Lo fantasmas que atrapas diariamente son producto de una muerte horrible o traumática, lo que ocasiona que su alma no pueda descansar en paz, al ser arrancados con tanta violencia de esta vida, sus espíritus quedan atrapados algunos ni siquiera saben que están muertos, al quedar tanto tiempo aislados de todo contacto humano, se tornan agresivos empiezan a perderse así mismo al no tener y conciencia reviviendo día tras día el último suceso de su vidas, que en todo caso es su muerte-
Al escuchar esto Danny no puedo evitar sentirse mal por los fantasmas que atrapaba, Marshall tomo aire y continuo.
-luego están los espíritus malignos, también conocidos como demonios desconozco si alguna vez fueron humanos y por ultimo están esas luces, esas luces son almas de personas que descansaron en paz, que en el último momento de su vida, no guardaron rencor o dudas solo decidieron continuar, aunque es un peligro que vaguen por la tierra-
-A que te refieres con peligroso- Danny estaba un poco saturado con lo que había escuchado pero quería saber más.
-Eso no importa por ahora- respondió Marshall recobrando su duro semblante, Danny no continuo preguntando pero no lo olvidaría tan fácil- ben con migo sigámosla te mostrare algo-