KYUNGSOO'S POV.
Suspiré, y me apoyé en las barandillas del balcón.
Eran mas de las dos de la madrugada. La luna brillaba a mas no poder, iluminandome y acompañandome en silencio.
Una noche bastante linda. No habían ni muchas, ni pocas estrellas. Solo las necesarias. Las que quería ver.
Levanté mi cámara y tomé una foto.
-sonrei satisfecho.- Ésta si que es una buena toma.
Hace mas de una hora que todos se habían ido a dormir, asi que era el único despierto.
No había podido pegar un ojo en todo el tiempo que estuve recostado. Me había quedado pensando. Realmente, lo que había sucedido hace unas horas, me había cautivado.
Aun no se por qué.
A pesar de ser algo tan simple como un juego, el hecho de que hayan cantado junto a mi, significó mucho.
Me hizo sentir querido. Verdaderamente querido. Y no excluido, como me sentía la mayoría de las veces.
Sentía que, por primera vez, podía llegar a tener amigos que realmente valgan la pena. Ademas de Byun, claro.
-resoplé.- Pero eso no es posible. No conmigo. No si soy... asi.
Gracias a mi homofobia, y a mi forma de pensar, el tener esos tipos de amigos me es casi imposible.
No puedo confiar en ellos. Lo intento, pero no puedo. Por ello no creo que podamos ser algo mas que conocidos.
Aunque, si tengo que ser sincero, la pasé bastante bien esta noche.
Incluso con Jongin aqui.
-suspiré nuevamente.- Ser homofóbico en serio es una maldición. La pasé genial. -murmuré para mi mismo, y apoyé ambos brazos en mis rodillas.
Incluso con Jongin, ¿eh?
¿Por qué será que aun no puedo perdonarlo?
Sé que lo que hizo no fue tan grave. Es mas, creo que no estuvo mal que me haya ayudado. Es solo que. .
Aun no me siento listo. Siento que aun no es el momento.
- ¿Será por que no puedo creer una sola palabra de lo que dice?
Tal vez.
- Para creerle, tengo que confiar.
Y obviamente en él no confio para nada.
- Si en verdad quiere que lo perdone, tendrá que hacer mas para convencerme.
Coloqué una mano en mi frente.
¿Cuánto mas tiene que hacer?, ¿Es demasiado pedirle a mi estúpido cerebro que lo perdone y ya?
Sinceramente, me he taladrado la cabeza todas las noches pensando en ello.
-resoplé.- Realmente creo que el problema soy yo...
Yo soy el que no coopera.
De hecho, no puedo.
Soy demasiado terco y orgulloso. Pero mas que nada. .
Tengo miedo de confiar en alguien como él.
Porque él es igual a...
- ¿Kyungsoo? -pegué un salto y levanté la cabeza, encontrandome con el moreno.- ¿Qué haces despierto a ésta hora?
¿Es en serio?
- J-Jongin. -dije.- Creí que estabas durmiendo.
- Te lo dije, hyung. Dormir temprano no es mi fuerte. -se sentó a mi lado.- ¿Y tú?
-suspiré.- No podía.
- ¿Por qué?
- ¿Por que, qué?
- ¿Por qué no podías dormir?
- Ah. Si. Bueno. .-jugué con mis dedos.- Pensaba.
-arqueó una ceja.- ¿En serio?
-lo miré mal.- ¿Crees que no pienso?
-rió y negó con la cabeza. Se puso serio de repente.- Hyung. -soltó.- Kyungsoo-hyung. Yo... -mordió su labio inferior.- ¿Te molestaría hablar ahora? Sobre... ya sabes.
-haciendo una especie de mueca.- Ahora?
Basta de huir.
Lo he hecho antes con esa persona. Realmente no fue lo mejor.
No volveré a hacerlo. No esta vez.
- Ya estamos aqui, ¿no? -sonrió.- Mientras no discutamos, esta bien.
-asintió.- Muy bien. Entonces... -acarició su nuca.- Comienza tú.
- ¿Comenzar qué, Jongin? -pregunté.
- ¿Qué es lo que te molesta?, ¿Por qué no puedes perdonarme? Porque, si vamos al caso, lo que hice ni siquiera estuvo mal. ¿O si?
-mordí mi labio inferior, y negué con la cabeza.- No creo que haya estado mal pero. . .-pasé una mano por mi cabello.- Tú sabes que lo que hiciste fue bastante incómodo para mi, ¿verdad?
- Si, me lo imaginaba. -comentó apenado.
- Y tambien... -dudé un poco, luego continue.- Si soy sincero, realmente, el que me haya enojado, no ha sido tu culpa. Sino que, lo que sucedió entre nosotros... -acaricié mi nuca.-Bueno...
- ¿Qué es, hyung? Puedes decirmelo.
- Lo se, es que... es dificil. -confesé y suspiré.- En ese momento, incluso ahora, sigo recordando.
- ¿El qué?
- Algo... del pasado. -miré mis pies.- Algo horrible, de hecho. Es el recuerdo que tuve cuando me hacías... eso. -dije avergonzado.
Jongin aclaró su garganta, algo incómodo.
- No es algo lindo. Para nada, Jongin. -lo miré.- Y cuando veía tus manos en ese lugar; a tí entre... tú sabes. -asintió, aun mas incomodo.- A pesar de que lo intentaba, no podía dejar de pensar
en ese sujeto. -tragué saliva y desvié la mirada.- Cada vez que te veía, veía a ese hombre, y recordaba cada minuto de lo sucedido con él.
- Y por eso estabas enfadado. -concluyó.
- No estaba enfadado. Estaba... me sentí... -moví las manos, buscando la palabra correcta.- Me sentí. .. ¿frustrado, tal vez?
Si. Tal vez esa sea la palabra.
- ¿Frustrado?
-asentí.- No podía quitar esa imagen de la cabeza. Cada momento, cada segundo. .Siempre que te veía, todo eso se me venía a la mente. Y no me gustaba, la verdad. Era... horroroso. Por
unos momentos te temía solo por eso. Creí que serías igual, que harías lo mismo que él. -resopló.- Pero, mientras iba pasando el tiempo, me daba cuenta de que no. Eras diferente, eras...
bueno. O al menos eso es lo que creía. -sonrio apenas.- Aun lo sigo creyendo. Y eso hacía que me frustrase aun mas.
-miró sin entender.- ¿Por qué?
- Porque... -jugue con mis dedos nuevamente.- Sé cuanto lo intentas. Se que te esfuerzas en conseguir mi perdon, pero simplemente no puedo. No se por qué, solo... no puedo. Y enserio
quiero, pero aun no puedo perdonarte. Hay algo que me lo impide.
- Y crees que sea por el recuerdo.
-miré hacia abajo.-...Tal vez.
- Quieres hablar de ello?
-lo miré por un segundo, y negué.- No. En realidad, no.
Él asintió, entendiendo.
- Entonces, eso quiere decir que... -se rascó la nuca.-... ¿aun no me perdonarás?
-apreté mis labios.- No, perdón.
-asintió de nuevo y se puso de pie.- Claro. Lo entiendo. -extendió una mano hacia mi y sonrió. Lo miré extrañado.
- ¿Qué... ?
- Vamos, Kyungsoo-hyung. -tomé su mano y ayudó a levantarme.
- ¿No estas molesto?
-negó.- ¿Por qué he de estarlo?
- Por... no conseguir aún mi perdón, por más que lo hayas intentado.
-rió.- Al menos sé que ese enojo tuyo no es por mi, sino por ese molesto suceso del pasado. Eso hace que tenga esperanzas.
- ¿Eh?
-me miró.- No dejaré de intentarlo, Kyungsoo.
- ¿E-el qué, Jongin? No te entiendo.
- Solo necesitas confiar en mi, ¿verdad? Y asi podrás perdonarme. -abri los ojos. Acaso... ¿ha estado escuchando?
- ¡Tú, maldito... ! ¿Hace cuanto estas despierto? -frunci levemente el ceño y golpeé su brazo.
-rió y se sobó.- Te he visto salir al balcón. -abri los ojos.
¿Estuvo despierto... todo ese tiempo?
-golpeé de nuevo su brazo.- Me has estado espiando, ¿verdad?
-bufó.- Claro que no, hyung. En serio.
-entrecerré lo ojos.- Jongin, no mientas.
- ¡En serio! No me había levantado hasta hace unos momentos.
-lo miré con recelo.- ¿En verdad? -asintió.- Entonces ¿cómo. . .supiste que debías ganarte mi confianza para perdonarte?
-se encogió de hombros, restándole importancia.- Siempre lo dices. -lo miré sin entender.
- ¿Cuándo lo he dicho?
- Siempre. -repitió y sonrio. Rodé los ojos.
- ¿Ah, si? Bueno... -acaricié mi frente.- Pues no me había dado cuenta.
-rió.- Si, eso pensé. Eres tan despistado, Kyungsoo.
Lo miré mal, esperando que éste riera y ya.
Lo que no me esperaba era que me sostuviera la mirada. Fija y seria, totalmente intensa.
Como si quisiese ver a traves de mi.
Apreté los labios, nervioso, y miré hacia abajo. Pasé una mano por mi nuca, un tanto avergonzado.
<<¿Qué había sido eso?>>, preguntaba en mi interior.
Hasta que una fuerte ráfaga de viento hizo que saliera de mis pensamientos y, automáticamente, cerrara los ojos.
-rió.- ¿No me digas que ahora te asusta el viento? -bromeó.
-abri los ojos.- Claro que no, idiota. -negué con la cabeza, desaprobatoriamente.
-me miró.- Ah. Kyungsoo. -se acercó a mi de repente.
Y demasiado. Demasiado como para que pudiera soportarlo.
Cerré los ojos nuevamente y contuve el aire. Sentía que mi pecho se comprimía; que no me dejaría respirar si se acercaba otro centimetro.
Y por instinto, bajé la cabeza levemente, mientras sentía como tocaba mi cabello.
<<¿Qué hará?, Qué es lo que... ?>>
M corazón dió un vuelco repentinamente, y comence a agitarme. No... no puede ser eso. . .¿o si?
- Una hoja.
Me paré en seco.
<<¿Eh?, ¿Qué acabó de decir?>>, pensé atontado.
- ¿Qué?
-levantando algo amarillo frente a mi.- Tenías una hoja en el cabello. ¿No te has dado cuenta? -rió y la arrojó al vacío.
Parpadeé varias veces, tratando de procesar la información, y abri los ojos enormemente.
<<Oh, dios mio. Qué verguenza.>>. Me golpeé mentalmente. <<Maldición, ¡que verguenza! ¡¿Cómo pude pensar eso?! ¡¿Desde cuándo siquiera... ?!>>
Inmediatamente, volteé y tapé mi rostro con una mano.
Sentía mis mejillas arder en demasía. Dios... ¡Dios!
¿Qué me esta pasando?
-colocó una mano en mi hombro.- Oye, Kyngsoo. ¿Estas bien?
Salté alterado, y me alejé.
-asentí rápidamente.- Si. Si, estoy bien. No te preocupes. -apoyé una mano en mi frente.- Yo... creo que estoy cansado. -me excusé.- ¿Te parece bien si voy a dormir primero?
- Ah. De hecho, tambien tengo sueño. -dió un falso bostezó y me tomó de los hombros, empujandome hacia adentro.
- J-jongin. ¿Qué haces? Suelta. -intenté ordenarle. Aunque mas bien, se escuchó como una suplica.
- Te llevo a la cama. Dormimos juntos, ¿recuerdas?
Mierda.
-volteé de inmediato.- No, eso no va a pasar. -me miró sin entender.- ¿Recuerdas lo que te dije hace unas horas?
- ¿El qué, hyung?
- Si te ibas a quedar, dormirías en el suelo. -abrio los ojos.
- No esperaba que... fuese enserio.
- Nada de eso. Cuando yo digo algo, hablo muy en serio. -apenas entramos, busqué su bolsa de dormir con la mirada y la apunté.- Ve y arma la bolsa. Yo iré por un poco de agua. -y sali de
allí casi a la velocidad de la luz.
Ésto no es normal.
En serio, ésto es malo. Muy malo.
Jamás había sentido ese sentimiento de ahogo en mi vida.
- Algo no esta bien conmigo. -susurré.
A lo mejor si estaba muy cansado.
Tal vez tenía dolor de cabeza, y de estómago, y no me había dado cuenta.
- Tomaré una aspirina. -afirmé y caminé hacia el baño, buscando la pastilla en los cajones.
Luego de tomarla, fui a la cama, aun un poco agitado.
- Hyung, ¿realmente tengo que dormir aqui? -hablandome desde el suelo.
-asenti mientras gateaba en la cama, acomodandome.- No estaría cómodo. Ademas, suelo moverme mucho. Te tiraría de la cama, y sería lo mismo a que durmieras allí.
- Pero... Kyungsoo-hyung. -insistió, lanzando unos cuantos golpes a su almohada.- En verdad que estoy incómodo. El piso es duro, y la espalda me duele.
- P-pues es eso, o te devulves a tu edificio. -escupi y me acosté.- Buenas noches.
-resopló.- Buenas noches.
Por mas que dije eso, sabía de ante mano que no haría caso.
Seguramente, en medio de la noche, se colaría en mi cama. Es el niño libre, despues de todo.
Solo espero dormirme para antes de que eso ocurra. De lo contrario, sería capaz de empujarlo por el balcón.
Porque no estaría cómodo. Para nada.
*
-moviendome.- Kyungsoo. Despierta. -susurró en mi oido.
Abri los ojos a duras penas y, al notar una cara frente a mí, automáticamente lancé un golpe al rostro de Jongin.
Demonios, que me habia asustado.
- ¡Pero... ! -sobandose la nariz.- ¿Qué te sucede?
-levantandome.- Lo lamento. Fue un reflejo involuntario. -contesté, tratando de contener la risa.- ¿Qué sucede?, ¿Para qué me despertaste?
Sus quejidos se detuvieron, poniendose serio de repente.
- Acompañame. Te gustará ver ésto. -dijo con tono divertido y caminó hacia la sala.
<<Un cambio drástico de actitud. Qué niño mas raro.>>, pensé, y lo segui.
Al momento de llegar y dirigir mi vista al suelo, casi suelto una carcajada.
De no haber sido por la mano de Jongin, lo hubiese hecho.
-siseandome.- Chanyeol es fácil de despertar. Un solo ruido y es capaz de darte el golpe del día. -advirtió.
-asentí al mismo tiempo en que quitó su mano.- Esta bien. -susurré.
Caminamos sigilosamente hacia ellos, y los miramos desde arriba.
- Se me había olvidado. -solté y lo miré.- Byun es sonámbulo. Suele caminar por toda la casa, buscando a alguien a quien abrazar. Lo hacía conmigo cuando me quedaba en su casa, y eso
hacía que me sintiera realmente incómodo. Es una manía extraña que no ha podido dejar. -miré de vuelta al par.
- Bueno. Al parecer, a conseguido un nuevo cuerpo que apretujar. -bromeó mientras miraba mas de cerca a ambos.
Abrazados como si fuese lo último que pudiesen tocar, con las piernas desparramadas sobre el cuerpo del otro.
El gigante, apoyando su mentón en la cabeza de Byun, mientras que éste, escondía su rostro en el cuello ajeno, abrazando uno de sus brazos como si de una almohada se tratase.
La situación era demasiado divertida, lo admito.
Lo era y mucho.
- ¿Los dejamos así? -preguntó el moreno.
Lo miré, y sonreí.
- Si. -contesté divertido.- Las expresiones que harán cuando se vean...
- Será de película. -completó y colocó ambas manos en mis hombros, guiandome al cuarto, carcajeando apenas cruzamos la puerta.
*
BAEKHYUN'S POV
Desperté lentamente, moviedome un poco.
Parpadeé varias veces, tratando de aclarar mi vista; tratando de despertar, de levantarme. Estaba muy cómodo como para hacerlo.
Me estiré y bostecé, reteniendo unas cuantas lagrimitas.
Mi cuerpo se sentía cálido, seguro. Como si alguien estuviera abrazandome.
Recorrí el lugar con la mirada, desconociendolo totalmente.
- ¿En dónde estoy? -murmuré, frotandome un ojo.
De repente, sentí un suave movimiento sobre mi estómago. Dirigí mi vista, encontrandome con un brazo.
Sonrei.
- No me digas que lo he vuelto a hacer. -tomé su mano, extrañamente mas grande de lo habitual, y tiré de ella.- 'Soo, despierta.
<<Seguramente, se molestará conmigo.>>, pensé divertido.
Unos pasos se escucharon por el corredor, proveniente de las habitaciones.
Y allí comenzó mi pesadilla.
- Byun. Despertaste. -sonrio y se apoyó en el marco de la puerta de la sala.
Espera. ¿La sala?
- 'S-soo. -tartamudeé.- Tú no... -miré el brazo nuevamente y abri los ojos.
No. No puede ser posible.
- Dime que el moreno no esta contigo y que esta aqui atrasito, por favor. -supliqué.
- Bueno... -miró hacia atras.
Y como si fuese por arte de magia, apareció. Caminando vagamente y apoyando su brazo encima del hombro de 'Soo, haciendolo saltar.
Me detuve en seco.
- Oigan. -llamé.- S-si ninguno de ustedes es el que esta aqui, entonces ¿quién... ?
Ambos se miraron, y retenieron una sonrisa.
Oh, no. Claro que no. Me niego a mirar hacia atras.
- No es verdad. -dije, negando con la cabeza.- Diganme que no lo es.
- ¿Terminaste de lamentarte? Mi brazo se esta adormeciendo, enano. -espetó detras mio.- Ya quítate, ¿quieres? -moviendo su brazo aplastado bruscamente, agitandome de forma molesta.
Tragué saliva y apreté los dientes.
Volteé lentamente y, para mi desgracia, me encontré con el que menos quería ver.
- ¡Ah! -grité e inmediatamente lo empujé, haciendo que su cabeza se golpease con el palo de la mesa. Me levanté de un salto, y corri hacia Kyungsoo, quien se reía a mas no
poder.
- ¡Maldición! -dijo mientras se sobaba fuertemente.- ¡¿Qué te sucede, idiota?!, ¡¿Por qué me empujas de esa manera?!
-respirando agitadamente.- ¡C-cierra la boca! Tú, drogadicto, violador, ¡usurpador de camas! -grité.
- ¡¿Usurpdor?! ¡Tú eres el que ha venido a colarse en mi bolsa! -acusó, apuntandome.
- ¡Yo... ! -sin saber qué decir, apreté los labios, molesto.- ¡Cierra la boca! -caminé molesto hacia el cuarto de Kyung, y me senté en su cama, avergonzado.
Demonios. Esta vez me ganó.
Si no fuese un estúido sonámbulo abrazador, hubiese evitado semejante suceso vergonzoso.
Suspiré fastidiado, y eché un vistazo al reloj en la pared.
Salté alarmado y corrí hacia la sala nuevamente, buscando mi mochila con la mirada.
- ¿Y ahora qué? -se levantó, aun sobandose.- ¿Has venido a disculparte?
-ignorandolo, corrí hacia mi bolso y busqué mi cellular. Revisé los mensajes.- Oh, demonios. -volteé a ver a 'Soo, preocupado.
- ¿Qué sucede, Byun? -se acercó a mi.
-buscando mi ropa.- Kyung, ¿puedes prestarme algo de ropa?
- ¿Qué?, ¿Y por qué?
- ¡No tengo nada lindo que ponerme! -exclamé desesperado.- Y casi no tengo tiempo. ¡Sunggyu me matará si llego tarde! -mordí mis uñas, nervioso.- Tengo que tomar una ducha. ¿Me
prestarás, si o no?
- Eh, claro. Ve a buscar la que mas te guste. -dijo aun dudoso.- Pero... -siguiendome.- ¿A qué hora tenías que verte con él?
- A las once. -respondí. Él miró el reloj.
- ¡Demonios, Byun! -dijo y me empujó al baño.- ¡Que son las diez! ¿Qué estuviste haciendo?
- No lo se. Tal vez cuando desperté, estuve en una situación tan shockeante con un gigante, que ni siquiera tuve tiempo de pensar ni de apurarme. -solté sarcastico, un tanto molesto.
-rió.- Bueno, bueno. No te enojes. -giró la llave, dejando correr el agua.- Ahora báñate. Yo te plancharé la ropa.
- Gracias, 'Soo. Eres genial. -sonreí y cerré la puerta.
Tengo que apresurarme. No puedo retrasarme.
Si no fuese por ese estúpido grandulón, no me hubiese distraíado.
¡Maldito seas, Chanyeol!
¡Si llego tarde, en definitiva, lo pagarás caro!