No se esperaba algo así, estaba en un departamento amplio con Naruto en brazos cubierto por una sabana, había sido complicado hacer que Naruto se levantara para bañarlo y tenerlo listo antes de las siete, aun recordaba lo gracioso había sido bañarlo y vestirlo todo el tiempo estuvo dormido. Un auto negro lo había recogido y como siempre, dejo bien cerrada la casa sin antes despedirse de sus padres al aire.
Cuando llego, Itachi le recibió con ropa formal como el día anterior, lo dejo en lo que parecía la sala mientras él iría a traer al niño que cuidaría.
—Bien, el es Deidara Namikaze tu niñera—escucho a Itachi para fijar la vista en el niño—el es Sasuke Uchiha mi hermano...—No pudo continuar ya que Deidara corrió hacia Sasuke agachándose quedando a la altura del menor.
— ¡Que adorable eres!—le dijo entusiasmado.
El menor se sonrojo por la radiante sonrisa del que sería su niñera pero se fijo en el niño dormía en el hombro. Deidara noto que Sasuke miraba con atención a su hermanito y sonrió aun más.
—El es Naruto, espero que sean muy buenos amigo ¿Si?—Sasuke aun sonrojado asintió volviendo la vista al pequeño rubio que se movía en brazos de su hermanos.
Naruto abrió los ojos encontrándose con un niño de cabellera azabache y de ojos negros que le veía atento y luego noto que no estaba en su casa, estaba en un lugar más grande y colores diferentes.
—Naruto, el es Sasuke y jugaran juntos desde hoy—dijo bajándolo en el piso de cerámica.
—Sasuke, porque no llevas a Naruto a tu cuarto y le muestras tus juguetes—Sasuke obedeció a su hermano mayor y tomo la mano de Naruto asiéndolo sonrojar mientras le ayudaba a subir las escaleras
Deidara mira enternecido la escena de los niños, en verdad le encantaban los niños son tan adorables hasta que se dio cuenta que Itachi está a su lado viéndole fijamente asiéndole sonrojar por reflejo.
—Te ves hermoso sonrojado—Itachi se acerco a él y le acaricio la mejilla sonrojando aun mas a Deidara.
Deidara sentía su rostro arder, los ojos de Itachi no demostraban frialdad como antes, le miraba de otra manera, como si quisiese tirarse encima de él y hacer «cosas sucias con el» recordó las frase de Sai y se alejo de él caminando hacia lo que parecía la cocina.
—dime las indicaciones sobre Sasuke, que le gusta, lo que no debe comer, lo que no debe hacer—Deidara hacia ademanes en la cocina nervioso.
Itachi sonrió satisfecho por lo que había logrado—Pues…solo se encierra en su cuarto y si se molesta puedes darle tomates son sus favoritos pero, no le des dulces no le gustan, el mismo se duerme solo así que, solo debes velar por que este sano y salvo.
Deidara frunció el ceño— ¿Cómo que se encierra en su cuarto y duerme solo? Es un niño no puede estar aislado y que ni siquiera lo arropes por las noches —Se coloco frente a un sorprendido Itachi—y pensar que estaba comenzando a creer que te preocupas por tu hermano.
—De hecho si pero malinterpretaste mis palabras, tengo que ir a trabajar y regreso muy noche, sino trabajo no podría mantener a mi hermano, él lo entiende—hizo ademanes tratando que el rubio quitara el ceño fruncido.
Deidara se quedo callado mientras relajaba el rostro, Itachi le acababa de decir que el mantenía a su hermano ¿Qué paso con sus padres? Suspiro, no podía preguntarle algo así, si la respuesta es que ellos ya no están es este mundo, así que mejor se relajaba y trataba de no molestarse con cada palabra que decía el azabache porque estaba empezando a creer que todo lo que decía era bla, bla, bla.
—Está bien, lo siento pero, llevare Sasuke a tomar un paseo por la ciudad necesita respirar aire fresco y lo acostare a las siete y me iré cuando regreses y…—tomo el rostro de Itachi con ambas manos y lo miro a los ojos—en cuanto entres por esa puerta no importa si estás cansado o no, iras al cuarto de tu hermano y aunque este dormido le dirás «Ya regrese a casa Sasuke» ¿Entendido?—a lo que el azabache asintió nervioso por la cercanía.
Deidara se alejo de él y escucho muchos ruidos y gritos en los cuartos de arriba, corrió hacia el cuarto donde eran más fuertes los sonidos seguido de Itachi, abrió la puerta encontrándose con Naruto y Sasuke jalándose los cabellos.
—Ya suéltame dobe—dijo Sasuke.
—Suéltame tu primero teme—contesto Naruto.
—Naruto, Sasuke, paren se hacen daño—Deidara separo a ambos niños.
—Sasuke porque…—trato de hablar Itachi pero Deidara le hizo un ademan que callara.
—Naruto ¿Porque te peleaste con Sasuke?—le sonrió a su hermanito que hacia un puchero.
—porque no quería jugar.
—Y tu Sasuke ¿Por qué no querías jugar con Naruto?—el azabache menor solo giro su carita hacia otro lado evitando la sonrisa del rubio— Nunca has jugado con nadie ¿Verdad?—a lo que Sasuke asintió—pues desde hoy aprenderás a jugar con alguien ¿Verdad Naruto?—Su hermanito asintió mirando al azabache que evitaba la vista de todos—bien ahora vamos abajo a despedir a Itachi que se le hace tarde.
Itachi al escucharlo corrió a la planta baja, era tardísimo que clase de jefe seria si llegara tarde, sería un mal ejemplo a sus trabajadores. Tomo una tostada de la cocina, salió de nuevo con intenciones de irse hasta que los escucho.
—Que te vaya bien Nii-San—dijo Sasuke.
—Que te vaya bien, Itachi—escucho a Deidara.
No pudo evitar girarse y ver a Deidara tomando de las manos de Sasuke y Naruto mientras este le sonreía y los niños movían sus manitos en señal de despedida estaba tan conmovido con la escena que no pudo evitar decir algunas palabras.
—Pareces una linda esposa con nuestros hijos—Deidara al escucharlo se sonrojo e iba a contestar pero los labios de Itachi sobre los suyos le hicieron callar—Tratare de llegar temprano—y salió.
Después de ver la puerta cerrarse sintió la mirada de los niños sobre él, ambos estaban sonrojados.
— ¿Te casaras con mi hermano?—pregunto inocente Sasuke
— ¿El será mi nuevo hermano?—pregunto aun más inocente Naruto
Deidara se sonrojo ¿cómo pudo haber hecho frente a los niños? no lo podía creer, tenía razón, sonaba como una «Linda esposa» evadió las preguntas de los niños, llevo a Sasuke a tomar un baño, ese día saldrían al parque.
Cuando salieron del apartamento llevo a Sasuke al parque caminando porque aun no entendía como subir a los autobuses y además ni siquiera sabía en qué lugar de la ciudad estaba, así que lo llevo al más cercano del lugar.
Al llegar, los ojos de Sasuke se iluminaron; habían columpios, resbaladeros, una fuente… había de todo, siempre que su hermano lo llevaba al jardín de niños pasaba de largo ese parque pero estando en el era genial y lo fue más cuando le dijo que podía ir a jugar junto a Naruto, aun se sentía mal por haberlo tratado mal, así que lo tomo de la mano y lo jalo a los columpios. Deidara solo los seguía y se percataba de que no se lastimaran.
Después de unas cuantas horas esperando que los dos niños se cansaran regresaron al departamento. Y fue por el botiquín de primeros auxilios, Sasuke y Naruto se habían caído muchas veces jugando a quien atrapa a quien, sus piernas aun eran torpes pero lo sorprendente es que el rubio no había llorado por las caídas, al contrario, había estado riendo todo el tiempo.
Les limpio a ambos las rodillas y codos raspados, mientras estos se hacían muecas entre sí haciéndolo reír. Almorzaron y vieron la televisión. Sasuke parecía divertirse, ni siquiera se había acercado a su habitación para encerrarse.
Llego la noche y se fue con Sasuke a su cuarto dejando dormido a Naruto en el sofá frente al televisor encendido. Sasuke estaba avergonzado de que Deidara le colocara el piyama y lo arropara en la cama mientras le acariciaba los cabellos haciéndole dormir.
Salió del cuarto y bajo a ver a su otro angelito dormir, se sentó junto a él cargándolo para que durmiera en su regazo.
Pasaron algunas horas hasta que escucharon la puerta abrirse, Itachi había regresado con un aspecto cansado, se sentó en uno de los sillones de la sala sin notar la presencia de los dos rubios hasta que intento quitarse la corbata se fijo en Deidara que le miraba y recordó que era la niñera de su hermano menor. Vio como Deidara acomodaba de nuevo a Naruto en el sofá para acercarse a él y señalarle la segunda planta, suspiro cansado, al parecer no era broma sobre darle las buenas noches a su hermanito aunque viniese a punto de morir por cansancio.
A como pudo se levanto del sillón subiendo en las escaleras seguido por Deidara, llego al cuarto de su hermano menor encontrándose con un Sasuke muy acurrucado en la cama. No pudo evitar sonreír, se acerco a él.
—Buenas noches Sasuke…—le acaricio los cabellos y le dio un beso en la frente para salir del cuarto sin hacer ruido.
Al salir se encontró con un sonriente Deidara—Te olvidaste del «Ya regrese» pero como es el primer día te lo dejare pasar.
—Lo único difícil es caminar cuando estas cansado.
—Lo sé, por cierto, la semana que viene tengo un sesión de fotos—comenzó a bajar para ir por Naruto y volver a casa.
—Entonces… ¿No vendrás?—le siguió.
—De hecho, quería pedir tu permiso—llego hasta el sofá y cargo con cuidado de despertar a su hermanito y miro el rostro de confusión de Itachi—Quiero llevarme a ambos a la agencia, no quiero dejarlos solos.
Itachi lo medito un momento antes de asentir—Vamos te llevare a casa—camino en dirección a la puerta tomando de la pared un manojo de llaves que colgaban.
—No te preocupes puedo ir solo—le sonrió nerviosamente, temía por su vida y la de su hermano que alguien adormilado condujera un auto con ellos dentro.
—No me digas, iras caminando ¿Cierto?—Itachi le miro con expresión de «Se que no sabes usar el autobús»—Además es muy tarde.
Deidara derrotado le siguió hasta la cochera encontrándose con auto negro demasiado lujoso para que llegara a un barrio como el suyo. Itachi entendió la mirada que le dirigió el rubio después de ver el auto, así que con la mirada le contesto que no pasaría nada.
En todo el trayecto a su casa se la pasaron en silencio y agradeció que ninguno de los delincuentes que se pasaban todo el día en las esquinas de las calles no estuviesen.
—Muchas gracias—dijo Deidara pero antes de tomar la puerta del auto la mano de Itachi le tomo de la muñeca
—Buenas noches…Deidara—Itachi le soltó la muñeca para acariciarle la mejilla y acercarse lentamente buscando sus finos labios
Deidara se sonrojo al adivinar las intensiones de Itachi y se alejo de él saliendo del auto evitando despertar a Naruto con el brusco movimiento—Debería…irte, es…muy peligro que estés…demasiado tiempo aquí—se sonrojo mas al escucharse tartamudear.
Itachi solo le sonrió y se fue. Suspiro, cargo mejor a Naruto para sacar las llaves de su casa y entrar. Llevo a Naruto al cuarto y le coloco su piyama para dejarle dormir. Deidara tomo un baño y también se coloco su piyama y dormir junto a su hermanito.
Así pasaron los días, descubrió que Sasuke iba al jardín de niños y que el primer día que lo conoció no había tenido clases e Itachi lo llevaba y traía en el auto pensando que, había sido muy duro al decirle a Itachi que no se preocupaba por su hermano, ya se imaginaba la cantidad de trabajo que podía tener sin embargo lo dejaba para recogerlo.
Así que, se quedaba en el departamento limpiando un poco y preparando el almuerzo con lo que había en la nevera aun así, Sasuke se miraba más alegre al llevarlo a diferentes lugares después de sus clases; parques, al centro comercial, al rio que irónicamente estaba unos metros del departamento, entre otros que se le ocurría. Por otra parte, al parecer había hecho muchos amigos, ya que algunos venían con él y se quedaban a jugar en el departamento pero, no pudo evitar ver como su hermanito se mantenía alejado de los juegos aunque Sasuke le invitara a jugar.
—Naruto ¿Por qué no juegas con Sasuke y sus amigos?—lo encontró en una esquina de la cocina escondido.
—Por nada—con un puchero contesto las dudas de Deidara
— ¿Estas celoso porque, Sasuke le pone atención a otros niños?
Naruto solo se encogió de piernas escondiendo su rostro para que su hermano mayor no le viera. Deidara se sentó al lado de su hermano, le acaricio los cabellos hasta que su hermanito levantara de nuevo su rostro.
—Los niños son así, Naruto. Cuando ingreses al jardín de niños como Sasuke veras que son más crueles; te quitaran tu lonchera, los cuadernos, te empujaran, te harán bromas e incluso te dirán cosas groseras pero, habrá amigos que te ayudaran, jugaran contigo y te protegerán; si Sasuke te invito a jugar es porque eres su amigo y estoy seguro que te protegerá… ¿Verdad Sasuke?—Se dirigió a la puerta cerrada mientras que tras de ella se encontraba escuchando el azabache menor.
Sasuke entro a la cocina avergonzado por ser descubierto, miro a Naruto quien le miraba. Se acerco a él pero se detuvo al ver que el rubio menor de nuevo escondía su rostro, con determinación siguió caminando y se agacho frente a él.
—Si no quieres que este cerca de ellos, entonces no lo estaré…pero, tu tampoco estarás cerca de nadie—Naruto levanto su rostro mirando a Sasuke que le veía muy serio.
— ¿Eh? No era eso que debías decirle Sasuke—Deidara rio nerviosamente, se suponía que tenía que animar a su hermanito a relacionarse con otros niños.
— ¿Por qué? Si Naruto no me quiere compartir con nadie, entonces yo tampoco…por eso, cuando sea grande me casare con Naruto—Deidara y Naruto solo le miraron anonadados.
— ¡¿Qué?! ¡No! ¡Espera! Eso no…—Deidara se levanto haciendo ademanes en el aire desesperado, la conversación se iba para otro lado.
— ¡¿En serio?!—Naruto también se levanto pero, con los ojos brillosos de emoción, y como si nada abrazo a Sasuke sonrojando a este.
Deidara ya no recordaba como respirar, tenía que calmarse así que la única respuesta a su situación es que era amor de infancia, sería algo pasajero, ósea nada serio o eso quería creer.
Después de ese momento «Emotivo» Sasuke se despidió de sus amigos prometiéndole a Naruto que nunca los invitaría jugar, sacándole una sonrisa a este. Deidara aun en su mente aun gritaba «¡Amor de infancia!»
~*~
Itachi dejo en su departamento a su hermano y algunos niños que invito a su casa, no podía evitar sonreír al pensar que Sasuke ya se relacionaba con sus compañeritos del jardín de niños, y todo gracias a los cuidados de Deidara.
Por otro lado Sai miraba con atención y burla los gestos que hacia su primo desde que entro a su oficina para tratar de hablar sobre el caso de Madara Uchiha pero, desde que comenzó a hablar no le ha puesto atención en ningún momento así que decidió molestarlo un poco.
—y por eso Deidara está en bañador…
La burbuja en la que flotaba Itachi exploto al escuchar el nombre del rubio más aun con lo ultimo «un bañador» De solo imaginarse a su ángel mostrando su torso delicado y sus rosaditas tetillas, sentía la sangre escurrir por su nariz pero, al ver las mejillas de su primo infladas contenidas en una risotada se dio cuenta que había sido una vil broma.
—Muy gracioso…—le miro irritado
—Lo siento no lo pude evitar, es que te mirabas tan ilusionado que no pude soportarlo, además aun no te has ganado el corazoncito del rubio, apuesto que te trata como si nada—Sai le entrego una carpeta a su primo.
Itachi recibo los papeles, abriendo la carpeta—Pues te informo que no, todas las mañanas se despide de mí como una buena esposa—levanto el pecho orgulloso mientras que su primo volvía a soltar una risotada para luego volver a una seriedad que hizo que Itachi también lo hiciese.
—Sabes muy bien que los accionista de la empresa no esperaran mucho por el dinero de las deudas de Madara y, Deidara es uno de ellos, el que sea niñera de Sasuke y modelo no la pagara, al menos no aun ¿Piensas pagársela tu? Aunque hagas eso no ganaras su corazón para empezar, somos familiares del sujeto que mato a sus padres.
—Lo sé, será difícil ganarme su confianza pero no imposible, con el tiempo le hare saber que no soy igual que Madara.
Arreglaron algunos trámites e Itachi y Sai volvieron a sus puestos de trabajo terminando hasta muy noche como era de esperase. Como se lo había prometido a Deidara llego a su departamento con fingida energía y le dio las buenas noches a su hermano menor para después dejar a su casa a Deidara y al pequeño Naruto que siempre le encontraba dormido.
Así pasaron los días hasta que llego el día que su ángel tenía su primera sesión de fotos como modelo contratado.