Habían pasado ya varios días desde la última vez que habló con Zelo. No sabía que le sucedía al menor, pero no respondía sus mensajes e ignoraba sus llamadas... Tal vez se había pasado de la raya la otra vez, pero... Si estaba tan molesto con él pudo haberlo detenido en cuanto comenzaron a besarse.
Taehyun, Jungkook y Jongup escuchaban muy atentos a Jimin mientras el chico contaba lo bien que había estado con "esa persona" el otro día. Ninguno de los chicos sabían a quién se refería el mayor pero Jongup no le daba mucha importancia... Su mente ahora se hallaba vuelta un lío por un Zelo que no le hablaba.
Jungkook miraba divertido a Jimin, quién seguía hablando pero él tampoco le estaba prestando mucha atención, ahora veía preocupado a Jongup... ¿Debería preguntarle que le pasaba? El menor no quería ser una molestia y a veces Jongup era muy cerrado con sus asuntos personales, siendo el tipo de persona que oculta sus preocupaciones para no preocupar a los de su alrededor.
-Hyung... Hyung- Susurró cerca del oído de Jongup y este dio un pequeño saltito en su asiento al sentir el aliento del chico contra su oreja.
-¿Qué sucede Kookie?- Preguntó también en voz baja, alzando una ceja cuando vio que el menor le pedía que fueran a conversar en privado. En cuanto se levantaron Jimin hizo un puchero y Taehyun lo golpeaba en la cabeza por quejarse tanto, escucharlo hablando tanto tiempo sin saber de quién les hablaba ya resultaba aburrido y no era de esperarse que los otros dos huyeran.
Jungkook no era el más atleta de los chicos y después de haber corrido una corta distancia, miraba cansado a Jongup, que reía después de tomar una bocanada de aire.
-Aigo... ¿Ahora sí me vas a decir?- Jongup golpeaba jugando a Kook y le sonreía.
-¿Sucede algo?- Dijo en tono serio y Jongup evadió la pregunta- Hyung... Quisiera que contaras con nosotros cuando tienes problemas... Parece que siempre te lo guardas todo y siento que algún día vas a explotar- Se expresó preocupado el llamado "maknae" de su grupo de amigos.
-Todo está bien Kookie... Hay tantas cosas que quisiera contarles, simplemente creo que ahora no es el momento...- Su mirada estaba perdida en el vacío, Jungkook suspiró con pesadez al ver que no tuvo el resultado que quería- Te prometo que te diré todo en su momento- Jongup le sonrió y ahora el otro hacía pucheros, quería saber más y Jongup no decía nada.
-Está bien Hyung, respeto tus decisiones... Solo espero que no te consumas por "eso"- Hizo comillas con los dedos- Que te tiene tan ocupado... O preocupado, diría yo- Jongup cabizbajo, solo asentía a las palabras del menor... ¿Le estaría dando importancia no debida al asunto?
-Gracias por el consejo Kookie- Dio unas palmadas en la cabeza del chico y ahora se levantaba- Creo que seré capaz de arreglar todo- Sonrió y ambos volvieron con los otros dos chicos, sin sorprenderse de que Jimin siguiera hablando de su emocionante salida, todos reían viendo como contaba lo que había hecho y de vez en cuando molestaban al pequeño enamorado.
Pasada una semana, Jongup arregló todo lo que tenía que decir a Zelo y así poder arreglar lo que tenía pendiente. Se esforzó mucho en hacer que todo quedara bien... Era sábado por la mañana y se había terminado de vestir para ir en busca de Zelo.
-¿Estás seguro de esto? -Dijo Yongguk mientras acomodaba su cinturón de seguridad y terminaba de encender el auto.
-Completamente.- Afirmó con seguridad y Yongguk lo miraba complacido.
-Suerte, pequeñín- Dijo sonriendo y Jongup hacía pucheros, como le molestaba que sus hermanos le dijeran "pequeñín" pero ellos parecían no entenderlo.
-Gracias por llevarme- Jongup se recostó de la puerta y miraba ansioso el paisaje. Esta vez tardaron menos en llegar porque no había casi tráfico. Una vez Jongup bajó del carro dio una mirada a su hermano y Yongguk hizo un gesto con la mano antes de irse.
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Jongup seguía parado al frente de la reja, mirando hacia la ventana del cuarto de Zelo... ¿Estaría bien ir a su casa sin avisarle? Se armó de valor y con sus dedos temblando presionó el timbre, era obvio que ya no había vuelta atrás.
-Buenas tardes, ¿Quién es? - Era la voz de una mujer, Jongup tomo una bocanada grande de aire antes de hablar.
-E-es Jongup, un amigo de Zelo... Vine a visitarlo- Escuchó como la señora hizo un ruido de asombro y metió las manos en sus bolsillos... Necesitaba calmarse.
-Joven Jongup, pase por favor.
Vio como las rejas se abrían y entró algo tímido, miraba a todos lados buscando señales de Cookie, como no vio a la cachorra supuso que estaría adentro con Zelo. Antes de tocar la puerta esta fue abierta por una señora que tenía traje de mucama, Jongup la recordaba de la última vez que estuvo en casa de Zelo. La saludo formalmente y lo invitaron a entrar y tomar asiento.
-Ahorita el joven Junhong está tomando un baño, pero en cuanto salga le digo que usted lo espera- Dijo amablemente antes de retirarse. Jongup se quedó solo en la sala y no podía hacer más que mirar hacia todos lados con curiosidad. La casa de Zelo sin duda era muy interesante, había toda clase de adornos de cristal en una vidriera y figurinas de distintos países en una mesa que estaba al frente del sofá. Tal vez Zelo tardaría mucho en bajar... No le haría mal si descansaba un rato mientras esperaba.
-¿Jongup Hyung?
-¿Zelo?
-Hyung
-Shh, no hables...
-¡Hyung! - Jongup abrió los ojos como plato al sentir los golpes sin esfuerzo que ahora comenzaban a molestar en su pecho. Zelo sonrió y Jongup sintió que ahora estaría como un tomate, la visión que le propinaba Zelo era absolutamente perfecta ante sus ojos. Aún tenía el cabello mojado y traía puesto una franelilla sin mangas y unos shorts, pero sin duda lo que más le gustaba era como podía ver perfectamente sus brazos y clavículas. Sentía que se estaba volviendo loco al tener tan cerca a Zelo sin decir una sola palabra, de haber podido ya se lo habría devorado hace rato, pero tenía que contenerse o Zelo realmente podría molestarse con él.
-¿Hyung, sigues aquí?- Zelo dio un pequeño golpe en la frente de Jongup mientras se burlaba, sin duda su mente estaba en otro lugar...
-Claro que estoy aquí- Agarró la mano de Zelo antes de que pudiera alejarla de su rostro y la sostuvo en su mano- Vine aquí... Porque quiero decirte algo- Apretó la mano del chico y este le veía sin entender a qué se refería.
-No hay nada que hablar, Jongup Hyung- Dijo nervioso y soltó rápidamente la mano del chico, pero era casi obvio que Jongup no se rendiría tan rápido.
-Claro que sí, Junhong- Dijo con voz seria y Zelo pudo sentir como su cuerpo comenzaba a reaccionar al tacto de Jongup, quien tenía una de sus manos en su muslo- Mírame a los ojos y dime que no hay nada de qué hablar- Lo tomó del mentón y sus rostros estaban tan cerca que Zelo sentía la respiración de Jongup contra su piel.
-Detente- Su voz era un hilillo y Jongup sabía que se estaba volviendo tan loco como él. ¿Era riesgoso? Sí y mucho, pero en esos momentos lo que más ansiaba era poder sentir los labios de Zelo con los suyos.
-Junhong, por favor mírame- Suplicó al menor y Zelo se levantó del sofá casi de un salto y jaló del brazo a Jongup para que le siguiera, entrando corriendo a su habitación y cerrando la puerta con seguro. Jongup miraba sin comprender, pero no sabía que la situación estaba en su límite para ambos.
-¿¡Qué quieres!? ¡Vienes a mi casa sin avisar y además haces esas cosas raras de nuevo! ¿¡Qué crees que hubiera pasado si nos hubieran visto!?- Zelo gritó, sin embargo trataba de hacerlo discretamente sin que nadie se enterara de lo que sucedía adentro. Jongup lo miraba sonriente desde donde estaba parado y eso parecía sacar de sus casillas a Zelo.
-Está bien... Está bien. No haré nada que tú no quieras ¿Vale?- Se acercó a él rápido pero con delicadeza, hasta quedar al frente.
-¿Lo prometes?- Dio un paso atrás.
-Claro que sí... -Se quedó dónde estaba- Tengo muchas cosas que decir y no puedo irme sin haberlas dicho todas- Hizo una pausa y suspiró- No sé qué me has hecho, pero... Siento que no quiero que nadie te toque a menos de que ese alguien sea yo- Lo miraba directo a la cara, en ningún momento separó la vista de su objetivo- Estoy loco, siempre me lo dicen pero creo que nunca me había sentido tan desesperado por no serlo... Y eso es por ti, Junhong- Hizo puño sus manos que comenzaban a temblar desesperadamente- Me gustas y no me arrepiento en ningún momento de haberme perdido en tu escuela... Ya que si no hubiese sido por mi torpeza nunca te habría conocido.
Zelo miraba boquiabierto a Jongup... ¿Realmente se estaba confesando? Seguro que si hubiese sido otra persona ya lo habría echado de su casa a patadas, pero con Jongup era distinto... Realmente todo era distinto cuando se trataba de Jongup. De pronto sus manos también temblaban, sentía el rostro caliente y además sus piernas flaqueaban con todas las palabras que Jongup lanzaba como dardos a su corazón inexperto.