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Ahora tengo una razón. por AkireSemeruder

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Notas del capitulo:

Lo prometido es deuda, un capítulo más. Espero sea de su agrado.

Amaneció, mis maletas estaban listas, intenté comunicarme con Uruha desde que el sol apareció iluminando todo, pero nada, le llamé, envié mensajes de texto. Con el pretexto de ver todo por última vez y tomar fotografías de recuerdo con el móvil, fui a buscarlo al área donde solían trabajar, pero nada, decidí buscarlo en su habitación sin importar el mal humor de la lagartija. Toqué la puerta y esperé, volví a tocarla y esperar, pero nada, toqué varias veces hasta que una mujer me abrió la puerta, parecía ser la mucama.

- ¿Desea algo joven? – preguntó amablemente.
- Sí, bueno, verá... Busco a alguien.
- Las personas que usaran esa habitación llegarán hasta las seis.
- ¿Usarán?
- Oh, ¿buscabas a los guapísimos modelos que estaban aquí con la chica?
- Espere... ¿Estaban?
- Sí, hace como dos horas que partieron.
- ¿Pero a dónde?
- Ay joven, me pregunto lo mismo, así podría seguir al guapo de la bandita a donde fuera... - prácticamente la ignoré y me di la vuelta desesperado para ir a buscarlo, lo busque por los pasillos principales, por los lugares a los que solíamos ir juntos, pero no había señales de Uruha por ninguna arte.

Estuve buscándolo por un buen rato, de pronto mi celular comenzó a sonar, era Miroku, diciendo que ya estaban todos listos esperándome, no podía creerlo, ¿acaso Miroku había llamado a alguien para llevarme a la fuerza, de ser necesario? No tenía alternativa, debía irme suplicando a los dioses el poder comunicarme con Uruha antes de irme, necesitaba preguntarle si podía buscarlo cuando su sesión terminara, si algún día podíamos salir juntos, quizá le parecería absurdo pero quería tener una cita real con él.

Llegué a donde Miroku me había indicado, estaba sólo, creo que al decirme que todos me esperaban, se refería a todos en la oficina.

- ¿Nos vamos? - pregunté con pocos ánimos.
- Tranquilo Miyavi, ya te conseguiré un nuevo permiso pronto y podrás volver a venir, no esperabas que tus vacaciones fueran eternas, ¿o sí?
- Nos vamos a ir, ¿Sí o no?
- Te tardaste mucho, los demás fueron a desayunar, ya estaríamos en camino de no ser por "los caprichos de la estrella".
- Ah - contesté sin poner atención a nada de lo que me decía.

Después de una media hora, quizá poco más, quizá poco menos, escuché varias personas caminando hacia nosotros a mis espaldas, Teito, Kiyoshi, Nishiro y Yutaro, regresaban del desayuno seguramente, siempre eran ellos los que iban por mi hasta el fin del mundo si podían, siempre andaban detrás mío para asegurarse de que cumpliera con mi trabajo.

- Perdone el haberle hecho esperar - "perfecto", pensé, "lo único que faltaba para que mi día se hundiera, la lagartija narizless entrando en escena... Un momento, ¿la lagartija?"
- No te preocupes - respondió Miroku tranquilamente - Miyavi acaba de llegar.

Volteé hacia atrás, ahí estaba, detrás de sus compañeros, Uruha, tímido, sonreía feliz saludándome con un movimiento discreto de su mano.

- Bien, vámonos entones - dijo Miroku, pero yo no entendía nada, ¿Qué hacían aquí? y lo más importante, ¿De verdad vendrían con nosotros?
- De acuerdo - respondió nariz vestida, yo sólo observaba la escena, confundido.
- ¿Qué pasa Miyavi? - me preguntó Miroku.
- No sé, me gustaría saber justamente eso.
- No sueles leer los avisos que te enviamos de la compañía, ¿cierto?
- Sabes que tengo bloqueado ese número - sólo suspiró.
- Bien, el autobús nos espera a todos, te contaré en el camino.

Todos caminamos hacia afuera, algunas personas del lugar salieron a despedirnos amablemente, subimos las maletas más grandes en la parte del equipaje y las más pequeñas las llevamos con nosotros. No entendía nada, pero estaba feliz, Uruha, por alguna razón desconocida estaba en el mismo autobús que yo.

- Qué callado has quedado, pareciera que ya no te molesta el final de tus vacaciones...
- Pero sí me molesta - respondí mientras intentaba ver a Uruha que iba en el asiento del fondo.
- Oye, ey chico...
- ¿Eh?
- ¿Qué pasa?
- Nada... - seguí intentando verlo.
- Ey Miyavi, no estarás buscando al chico ese ¿o sí?
- No...
- Oye, ya por favor, por lo menos voltea verme mientras te hablo ¿sí? - me tomó de los hombros para voltearme hacia él - ¿Ya?
- Si, si, si, disculpa.
- Pareciera que estas interesado en él - se rio un poco y quedó callado un momento.
- ¿Qué pasa Miroku?
- Miyavi... - habló serio - dime una cosa, yo sabré entenderte y en serio que voy a apoyarte...
- ¿De qué hablas Miroku?
- ¿Estás interesado en Takashima? - no creí que de verdad lo preguntaría
- No – traté de sonar convincente, pero no lo suficiente para ese hombre que me conocía tan bien.
- Por favor, no has dejado de verlo, no puedes engañarme...
- Espera un momento, yo no lo busco a él, es divertido verlos a todos... – me excusé.
- Tú no eres del tipo de persona a quien le agrada la compañía.
- Pero de alguna forma ellos son agradables - Miroku suspiro pesadamente y se acomodó en su asiento.
- Si tú lo dices...

Los veía platicar, parecían muy unidos, reían, jugaban piedra, papel o tijera y a momentos parecían discutir de una forma que podría verse amistosa, Uruha jugaba también, pero era el único que no recibía castigo al perder, como la lagartija lo dijo, se notaba que entre todos lo defenderían en caso de que algo o alguien le hiciera daño. Los miré hasta que Uruha se dio cuenta, me regaló una ligera sonrisa, la cual el amargado notó al instante, volteó a verme y todos lo hicieron, el único que parecía amable al mirarme era el chico Kai; el de menor estatura, del que no conocía su nombre, me miró con un aire de quién ve un puñado de basura y el otro chico me miró algo indiferente. Me acomodé en mi asiento y vi que Miroku sólo miraba por la ventana.

- Por cierto Miroku, ibas a decirme qué hacen ellos con nosotros.
- Sí, iba a hacerlo, hasta que me di cuenta que ya no te importaba la razón sino sólo el hecho.
- ¿Eh? - suspiró pesadamente.
- Pero qué chico, creyendo que vas a engañar a alguien...
- ¿De qué hablas?
- Miyavi, te lo digo en serio, si no quieres admitirlo, si no quieres que nadie lo sepa, por lo menos intenta aparentar un poco, intenta no sonreír de esa forma cuando lo miras, sabes bien que yo haría por ti lo que tú me pidieras, que gritaría que la tierra es cuadrada sólo por ti, eres como mi hermano, o no, más aún como un hijo para mí, si quieres decirlo, te escuchare, si quieres callarlo, lo entenderé... - me quedé callado por un momento, siempre lo vi también como mi padre, pero nunca lo dije, no me gusta mostrar mi parte sensible a las personas por no parecer un debilucho, la gente puede ser malvada y ya bastante sufrí por eso en el pasado.
- Miroku...
- Dime.
- ¿Por qué están ellos con nosotros? - suspiro un poco decepcionado.
- Toma - sacó de su maleta un libro - pedí una copia, exigí me llegara hoy mismo, junto con la autorización de la editorial - lo tomé, ahí estábamos, Uruha y yo en esa hermosa escena de amor, se notaba la fuerza en nuestras miradas, el deseo en nuestras manos, no podía creerlo aún teniéndolo frente a mis ojos.
- Que belleza - dije en un susurro.
- Lo sé, lo sabemos, la editorial se enamoró de la estructura del chico, de su estilo y lo tradicional de sus rasgos, nos preguntaron de dónde lo había sacado, les conté y quisieron conocer al grupo completo por unos proyectos de otros escritores, les envié las fotos de muestra y se vieron satisfechos, los contrataron y justo los llevamos a que hagan el convenio necesario para que el contrato por temporada sea firmado.
- ¿Temporada? - no podía creerlo.
- Sí, una temporada completa...
- Eso quiere decir que...
- En efecto, podrás "verlo...s" en la editorial o los estudios durante, por lo menos, dos meses.

Pude sentir cómo mi sonrisa se ampliaba, como mis ojos se volvían de un brillo intenso. Uruha, podría verlo por lo menos dos meses más y durante ese tiempo seguramente sería capaz de invitarlo a salir conmigo, qué más daba si al reptil no le agradaba la idea, quien decidiría no sería él sino Uru, sí, era mi oportunidad.

 

Notas finales:

Bien, ahora me encargaré de responder sus reviews, nos vemos a la próxima actualización que (si llego mañana a casa) será mañana. No olviden dejarme su opinión, me encanta saber de ustedes.

Lord Akire du Zaine


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