CAPITULO 10: Verdades y planes
El monarca y el castaño estaban sentados hablando. Va “hablando” no era la definición, en realidad era el castaño sentado al lado del rey esperando a que este articule una palabra. Después de diez minutos de espera, el padrino del rey decidió romper el silencio ya que vio que su ahijado no lo haría
_Yuuri vas a decirme lo que te aflige-luego de eso, el moreno lo miro y este al ver su sonrisa se tranquilizó y por fin se dispuso a hablar
_ ¿Cómo me doy cuenta si estoy enamorado de alguien?-dijo tan rápido que el castaño apenas logro entender lo que dijo
_A ver, Heika primero cálmese y después habla tranquilamente-dijo porque, aunque lo había escuchado, quería que el monarca agarrara más valor a la hora de decirlo
_ ¿Como me doy cuenta si estoy enamorado?-pregunto después de unos minutos ya más tranquilo
_ ¿Sabes Heika? No es a mí a quien debería preguntar eso-dijo el castaño sonriendo a lo cual el moreno mostro una cara de total desconcierto-Deberías hacerlo a tu corazón, Heika-dijo el castaño, para después, irse dejando a un moreno totalmente confundido
_Solo lograste confundirme más-dijo con un puchero y se encamino hacia su alcoba
_ ¿Que siento?-se pregunto el monarca cerrando sus ojos, en ese momento, empezó a ver todos los momentos que tuvo con el mazoku rubio, después de terminar susurro las únicas cuatro palabras que salieron de su boca, para luego, irse a dormir en el profundo y tranquilo sueño que no había tenido en tres meses al descubrir lo que sentía por el rubio.
Entretanto el monarca luchaba por descubrir sus sentimientos, una castaña luchaba por que su rubio prometido dijera la verdad sobre esa pregunta que jamás pudo hacer
_Wolfram, ¿Qué sientes por el maou?-dijo directamente
_Yo no siento nada por él. ¿Por qué me preguntas eso?-dijo desviando la mirada
_ No me mientas y la razón no importa.¡¡Solo dime la verdad!! ¡¡O que!! ¡¿Acaso eres tan cobarde para no admitir lo que sientes?!-dijo pegando en la más grande debilidad del mazoku, su orgullo
_¡¡No soy cobarde!!-dijo de golpe-¡¡Y sí, sí estoy aun enamorado de Yuuri!!-dijo y luego se tapo la boca con las manos-Y-yo-susurro con sus manos aun en su boca, para que luego, la castaña se la sacara y negara con la cabeza
_Ni se te ocurra disculparte-replico dulcemente
_Y-yo lo dije sin pensar, Arlen- dijo mientras se inclinaba a abrazarla
_Wolfram si lo dijiste sin pensar es porque es la verdad y el que hablo fue tu corazón-dijo y correspondió el abrazo
_S-si es la verdad, pero, él no me ama y yo no estoy dispuesto a sufrir-dijo con tristeza
_ ¿Estas tan seguro de eso?-dijo dulcemente-Yo no creo que eso sea del todo cierto
_ ¿Por qué?-dijo Wolf en un susurro-¿Por qué quieres darme esperanzas?-
_Simplemente porque te amo-dijo con sinceridad separándose del abrazo y acariciando su mejilla- Y te amo tanto que prefiero sacrificar mi felicidad por la tuya. Yo sé lo que te digo, Honey- Wolfram a su primer comentario se sonrojo y luego, puso una cara de tristeza
_Y-yo no lo sé-dijo totalmente inseguro a lo que la castaña le beso la frente y lo miro a los ojos con determinación
_Solo una última oportunidad, Wolfram- dijo a lo cual el rubio asintió con ojos cerrados-Genial, te vendré a buscar cuando lo pongamos en práctica porque antes debo hablar con mi ayudante- dijo y se fue
_ ¿Ayudante? ¿Quién…-dijo y cuando abrió los ojos se encontró solo-hump!!-bufo molesto-Ya lo sabré mañana-dijo acercándose a la cama y antes de dormirse dijo melancólicamente- Última oportunidad, ¿Eh?
El rubio no se dio cuenta que una castaña estaba detrás de la puerta sonriendo ampliamente y susurro, para luego, irse
_Mañana será un gran día
MAÑANA DEL CUARTO DIA
_Tengo un plan, ¿Me ayudaras?-dijo una castaña hablando con alguien, para luego, sonreír
_...-
_Bien, te lo contaré. Primero…- le conto todo su plan a su cómplice secreto
_...-
_Me alegra que lo hayas entendido. Lo pondremos en práctica esta tarde- dijo animada la castaña-¡¡Ahora me iré!! ¡¡Debes cambiarte, nos vemos en el desayuno!!