-Jumm…- kuroko abría los ojos poco a poco, encontrándose con esos ojos color ROJO!- Tu…-susurro por lo bajito kuroko, para darse cuenta de su desnudes en su parte superior del cuerpo y finalmente tomar la manta y cubrirse con ella- Hay! –un pequeño quejido salió de sus labios proveniente del dolor que tenía en su costado- Que… que ha pasado –preguntaba un poco tímido recordando lo último sucedido, había defendido a una niña, lo había atacado y ahora despertaba en casa de un desconocido…
-No te muevas mucho por favor –le acaricio el hombro sonriéndole y se dispuso ponerse de pie, acercándose a una mesita de noche y sirviendo un vaso de agua- Bébelo, es solo agua –le extendió al vaso a kuroko el cual por inercia lo tomo bebiéndolo de poco en poco- Al parecer te expusiste a ir solo a las zonas más bajas de la ciudad… -tiro de la manta de kuroko y miro su costado, ya no sangraba y solo quedaría esperar a que sanara- Tuviste mucha suerte de no ser alcanzado por ese chico, unos centímetros más ala derecha y hubiera sido fatal-le dedico una hermosa sonrisa para después revolver sus celestes cabellos- Y bien no piensas decirme tu nombre…?-
-Kuroko… Kuroko Tetsuya –le sonrió un poco acomodando de nuevo sus cabellos y sonrojándose ante aquel suave y divino tacto-
-Kuroko…Kuroko- el de mayor estatura pensaba un poco hasta que finalmente un fugas recuerdo de ese nombre le vino a la cabeza- Kuroko! –le tiro del brazo y lo acerco besando cortamente sus labios- Azul, Rojo, Morado, verde, Amarillo, Negro y Carmín…- dijo los siguientes colores como si los hubiera cantado, sonriéndole de la mejor forma a kuroko- Te encontré de Nuevo –suspiro un poco tranquilo-
-Wuaaa!!! –se sonrojo a mas no poder después del ligero contacto, estuvo a punto de reclamar…hasta que escucho esos colores cantados y abrió los ojos como platos- Juntos… todos al atardecer… la pradera al anochecer… Taiga!!! –Los ojos de kuroko se inundaron, lanzándose a los brazos de Kagami – Eras tu…-se apartó un poco de, él y acaricio su mejilla contemplando su rostro y lo mucho que había cambiado, como no había sido capaz de reconocer a…
Su primer amor, Aquel que se fue en su infancia
~Flashback~
Ahí se encontraban un grupo de niños reunidos en lo que parecía un sendero, cantando esa tonada…
~Azul, Rojo, Morado, Verde, Amarillo, Negro y Carmín…júntalos Al atardecer… a la pradera al anochecer…una aventura encontraras, por la noche saldrás a jugar~
-Jumm…Akashin, papa va a regañarnos si nos tardamos en volver- Le decía un pequeño peli-lila de unos aparentes 7 años que media aún más de lo debido para un niño de su edad a su “hermano”- Akashin Papa se va a molestar –dijo eso ultimo llevándose una galleta a la boca-
-Atsu… -en Niño de no más de 6 años, bastante pequeño y con unos rasgos muy finos en conjunto de esos ojos bicolor, miro a su “Hermano” mayor- Mama ha dicho que papa llega hasta tarde, podemos quedarnos a jugar con los demás- Apunto aun grupo de niños de entre 6 y 7 años- Atsu…-miro al más alto- cárgame en tus hombros –dijo esto en forma imperial, más que en suplica-
-Claro Akashin- Tomo al menor de los hombros y le dio un pequeño beso en la punta de la nariz- Akashin, cuando seamos mayores tú serás mi esposa- dijo eso ultimo tomando al menor y colocándolo en sus hombros-
-Atsushi, Akashi, dejen de estar de melosos, además si Atsushi puede tener como esposo a Aka-chan…Yo tendré a Kuroko de esposa –sonrió un pequeño de cabellos rojos carmines, tés moreno y ojos rojos, tomando de la mano de un pequeño de ojos azules y cabellos celeste-
-Pero Kagami-kun –el peli-celeste se encontraba sonrojado tomado de la mano de, el pelirrojo, cuando sintió un tirón en su otro brazo-
-Tranquilo Kagami, Recuerda que kuroko es mi prometido- dijo un pequeño moreno de ojos de un azul profundo y cabello de el mismo color-
(Golpe bajo para kagami)
-Pero Kuroko me ama a MI!- dio eso último en pose victoriosa el pelirrojo, tomando al de cabellos celestes por las mejillas y dejando un pequeño beso en sus labios-A demás tú le gustas a Ki- chan- giro la cabeza indicando a “una pequeña” , que habían conocido hacia unos días-
-Pero que dices apenas la conozco –el moreno soltó al celeste y se cruzó de brazos mirando a la niña rubia, que normalmente llevaba el rostro cubierto-
-Ao-chan, no me quiere…-chillo la pequeña, cubriéndose los ojos y mojando en algunas lágrimas dramáticas el velo que llevaba en su rostro comúnmente-
-Cómo puedo querer a quien no le he visto el rostro, si te lo cubres así seguro eres fea –dijo sacándole la lengua a la menor y caminando en dirección aun peli verde-
-Que cruel Ao-chan –se encamino a otro lado de la formación que tenían entre los menores-
-Aomine, deberías disculparte por ser así de grosero- se acomodó las gafas un des afanado pequeño de cabellos verdes- Yo por eso no me meteré en esos líos del amor… -decía seguro de sí mismo- En fin para que nos han citado aquí… es raro que Kagami y Ki-chan nos citen a todos-
El de cabellos rojos y “la pequeña rubia” se miraron un instante, para que finalmente el de cabellos rojos hablara- Yo voy a mudarme… muy lejos, mi padre será instructor de equitación en otro castillo, muy lejos de este reino…-murmuro eso ultimo casi deseando no hacerlo-
-Yo…-dijo la pequeña rubia- Mi Familia se ira del reino, no creo que volvamos a vernos chicos –dijo en tono triste la pequeña- Saben bien que los gitanos vamos por ahí, sin atarnos a nada, aun así fue bueno conocerlos…- sonreía visiblemente aun con el velo puesto-
(Luego explicare esto que saldrá dentro de unos cap. con aomine y kise, ellos tienen un pasado no muy marcado como para recordarlo de golpe)
Todos los presentes se quedaron callados mirándose los unos a los otro hasta que el llanto de un peli celeste les hiso voltear a verlo, haciendo que el de cabellos carmín se acercase a abrazarlo- Kuroko, no llores Yo are lo necesario para volver a Verte… te prometo que cuando sea grande vendré por ti y nos casaremos… solo espérame –le beso los cabellos y lo abrazo logrando que el de cabello celeste se tranquilizase y hablara un poco
-Kagami, yo te esperare…hasta el último día que tenga de libertad voy a esperarte…Promete escribirme…-lo abrazo un poco y finalmente miro a la rubia Ki-chan no tiene mucho que te conocemos pero espero que a donde vayas te encuentres feliz- abrazo a la rubia y finalmente el silencio volvió para ser roto por un pelirrojo de ojos dispares
-Bien!, hoy es nuestra última tarde juntos así que disfrutemos jugando –les ordeno prácticamente a los demás, a lo que todos asintieron y empezaron a corretear uno con otro haciendo bromas, rodando por el piso y demás… así se pasaron la tarde jugando hasta que la noche callo y finalmente todos tenían que irse- Nos volveremos a ver- dijo un pelirrojo, tomando de la mano a un alto lila y caminando por un sendero hacia un mansión cercana-
-Los voy a extrañar- dijo un peliverde, siguiendo a sus primos por el mismo camino-
Finalmente solo quedaban Aomine, Ki-chan, kuroko y Kagami
-Es hora de irme chicos- sonreía una rubia alejándose y despidiéndose con la mano- Gracias por todos los extrañare- finalmente huyo corriendo sin mirar atrás-
-Yo me voy al castillo, quiero darme un baño –dijo el despreocupado omine mirando al de cabellos rojos- si no vuelves por tetsu el será mío –sonrió con malicia y corrió al castillo dejando a un celeste sonrojado y un cachorro de tigre más que enojado-
-Kagami- kun yo… voy a extrañarte- kuroko yacía abrazado de, el más alto y finalmente se puso de puntitas dejando un fino beso en la comisura de sus labios- No olvides escribir…-
-Lo are cada que pueda- se abrazó un poco al peli celeste, caminando hacia la entrada del castillo y finalmente dejándolo en la puerta- Volveré por ti lo prometo – lo abrazo y salió corriendo volteando a mirarlo y agitando su mano dejándole una ligera sonrisa-
-Kagami! –Grito el menor agitando su brazo, despidiéndose de él y dejando escapar una lágrima-
~Fin del flashback~
Kuroko, no podía creerlo, estaba ahí….como no pudo notar que el hombre de sus sueños, ese que le perseguía era el Kagami Taiga, Algo invadió su interior…eso era… rabia?, lo siguiente fue una cachetada bien puesta de parte de kuroko a Kagami, corriendo gruesas lagrimas por parte de, el más bajo
-Como te atreves… me dejaste, jamás cumpliste tu promesa…te espere, espere tus cartas… jamás llegaron –el de cabellos celeste se encontraba en shock, hasta que unos brazos se posaron alrededor de él y unos labios sobre su frente-
-Yo intente escribir pero mi padre… se negó rotundamente a que siguiera en contacto contigo… él no quería tener problemas con tu padre… el rey se dio cuenta de que tú y yo no teníamos sentimientos solo de amistad… y mando a mi padre lejos con tal de que no interfiriera con tu compromiso con Aomine…- el de cabellos rojos levanto el rostro de Tetsuya con sus manos tomando sus mejillas delicadamente, para finalmente depositar un beso sobre ellos- Perdóname por no reconocerte… has cambiado demasiado –le acaricio la mejilla besándola después y mirándolo dulcemente- ahora eres aún más hermoso
Tetsuya no hacía más que llorar abrazado a kagami y dejarse querer, se encontraba ahí abrazado a su primer amor- No te disculpes… yo tampoco te he reconocido de primer instante –llevo su mano a su pecho dándose cuenta de su desnudes y tiñéndose de nuevo, tomando la manta que lo cubría tapándose aún más-