Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

De Libros a SEXO [MinJun] por SamStarElf

[Reviews - 114]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola linduras... tenía pensado actualizar el domingo, pero me surgieron varios problemas y no pude subir el capítulo.

 

Lamento si tardo mucho en actualizar pero la Uni a veces no me deja tiempo, así que disculpen.

 

Volviendo al fic... Por ahora dejaré a todos felices... por ahora XDDD Tengo pensado en extender el fic a unos 20 capítulos aun no estoy muy segura... digamos que a partir del capo 18 me odiaran *casi habla demasiado*

 

En fin... disfrutenlo :DDD

 

POV Hyung Jun

 

Estaba tan feliz y triste al mismo tiempo. Jung Min me ama, de verdad lo hace… por eso me lo dijo ¿Verdad?

 

Cuando lo escuche decir eso, las palabras de Sulli me golpearon rápidamente…

 

“cuando tú nunca has recibido algo… nunca podrías dar los mismo”

 

“Espero que seas capaz de romper esa muralla que oppa construyó en su corazón”

 

-porque yo. –solté sin pensarlo.

 

-Eh!

 

-porque… yo… debiste haber tenido a muchas mujeres o hombres detrás de ti, seguro que eran mucho más atractivos que yo. Yo soy torpe y…

 

-eso es lo que me gusta de ti baby. –tomó mi rostro entre sus manos, acercando nuestros rostros aún más. –eres tan diferente a todas las personas que he conocido. Tú baby, no tienes maldad en tu corazón… eres tan puro… -rió un poco. –eres todo lo opuesto a mí.

 

-los opuestos se atraen. –afirmé.

 

-eso parece. –volvió a sonreír.

 

-te amo. –susurré antes de besarlo.

 

Un estremecimiento recorrió mi cuerpo. Cuanto deseaba volver a sentirlo tan cerca. Sentir sus labios. No era un beso salvaje o lleno de pasión… era solo un gesto de… amor?

 

Min me separó delicadamente.

 

-¿Qu… Qué?

 

-que paso esa noche entre Kyu y tu.

 

Parpadeé varias veces sin entender… Kyu… y… yo… ¿Noche?

 

-Oh! –me solté a reír, ocasionando que cayera al suelo.

 

-qué es tan gracioso. –ups. Se escuchaba molesto.

 

-eso precisamente. –deje de reír incorporándome. –Min. Estabas celoso.

 

-si lo estoy. De él y de cualquiera que se acerque  a ti. –lo miré asombrado.

 

-Min. Esa noche no pasó nada de lo que te imaginas. Kyu es mi primo.

 

-y el moretón que tenías en tu hombro… durmieron juntos. Baby, no podías caminar correctamente y dijeron que lo habían hecho 4 veces. –replicó.

 

-eres tan tonto. Me senté frente a él. –Tu  supuesto moretón no era de eso… fue un golpe.

 

-¿Qué?

 

-estábamos celebrando en triunfo de Kyu. Así que yo abrí la botella de champagne. Cuando la destapé, el corcho revotó en la pared y me golpeó el hombro. Dolió mucho. Aunque todos se reían de mí.

 

Observé la reacción de Min detenidamente. El me miraba sin ninguna expresión en su rostro, mejor decidí continuar.

 

-lo de dormir junto a él, siempre lo hago. Cada vez que voy a su casa, duermo con Kyu. Lo demás tiene una explicación mucho más lógica.

 

-seguro.

 

-Kyu me estaba ayudando a practicar yudo. No quería ser débil de nuevo. Decidí que debía poder defenderme por mi mismo, pero tenía tanto miedo de lastimar a otras personas que me paralizaba con solo imaginar una situación así. Por eso le pedí ayuda a los chicos del equipo de futbol. Ellos son muy buenos en eso de intimidar a la gente. –recordé que hace tiempo yo les temía, pero en realidad todos eran muy gentiles. –también pedí ayuda a los chicos de club de teatro, sabes que los golpes son muy efectivos, pero un ataque emocional lo es aún más.

 

-por eso me respondías tan descaradamente.

 

-yo diría que solo me defendí. –argumenté.

 

-espera. KimBum me dijo que faltaste a clases y que te encerrabas en el baño a llorar.

 

-¿Qué? –cómo se enteró de todo eso Bum.

 

-es eso verdad. –inquirió Min.

 

-Min… eso…

 

-no me mientas.

 

-en realidad estaba muy triste, me ignorabas… me paseé desnudo por toda la casa y ni siquiera conseguí una mirada tuya. –reclamé.

 

-crees que no conseguiste una mirada mía, te aseguro que fue más que eso. –lo miré sin entender. - conseguiste que rompiera mi marca de erecciones. Tienes idea de cuantas veces me he masturbado en estos días. Hasta temía que se me cayera el pene.

 

-Eh! –reí.

 

-no es gracioso.

 

-lo es. –suspiré. –yo estaba en las mismas circunstancias. La verdad es que… sí. Lloraba en los baños. Me sentía tan frustrado que no sabía que hacer. Luego MinSoo me dijo que lo mejor era entrenar así que…

 

-¿MinSoo? –interrumpió dándome una mirada aterradora.

 

-Oh… él… es el capitán del equipo de futbol.

 

-a cambio de que…

 

-Min… -susurré. –espero que no estés pensando que entre MinSoo y yo… -él desvió sutilmente su mirada.

 

-¡JungMin!

 

-¿Qué?

 

-crees que soy una  puta. –me levanté intentando irme, pero Min agarró mi pierna haciendo que resbalara golpeando mi brazo en la mesa de centro. –Auch!

 

-no es eso… baby. –me levanté empujando mi pierna para que me soltara.

 

-entonces.

 

-baby… no sé. Nunca me había sentido tan inseguro. Es solo que…

 

-bien. –volví a sentarme a su lado. –supongo que tendré que tener paciencia. Yo ayudo a MinSoo y sus amigos en economía internacional. Es una materia fácil, aunque ellos estaban por reprobarla. Extrañamente cuando yo se los explico logran comprenderla perfectamente. A cambio ellos me enseñan a defenderme y no tener miedo de hacerlo. El club de teatro necesitaba ayuda con el diseño del escenario de sus presentaciones, yo me encargo de montar la escenografía y apoyar con los efectos de luz.

 

-a cambio.

 

-de aparentar… fortaleza. Y son muy buenos en eso. La razón por la que faltaba a clases era por las fiestas que realizaban. No había como negarse. –a DongHe era imposible rechazar.

 

-perdóname.

 

-mmm… -la palabra era apenas audible. – Min… tu…

 

-eres la primera persona con la que me disculpo. –era enserio. Nunca se había disculpado.

 

-está bien. Te disculpo. Solo prométeme que no dudarás de mi.

 

-eso… yo…

 

-al menos inténtalo. Sí.

 

-eso podría hacerlo.

 

-bien. Llamaré al Dr. Choi.

 

-no es necesario. Estoy bien.

 

-no lo creo. –me levanté y tomé el teléfono. –MinHo-shi… yo estoy bien, gracias. Eh no. Es JungMin. –lo miré. Tenía el ceño fruncido. –el resbaló por la escalera. –“Resbalé” pronunció solo moviendo sus labios. –lo espero. –corté la llamada.

 

-resbalé… tú me empujaste.

 

-Yah! Fue tu culpa.

 

-ahora me duele toda la espalda. Creo que me rompí una costilla. –hizo un gesto dramático

 

Tiene razón… fue mi culpa.

 

-que quieres.

 

-siéntate a  mi lado. –palmeó un lado del mueble.

 

 

Caminé hasta el sentándome a su lado

 

-bien.

 

Me tomo de la nuca acercándome a su rostro.

 

-eres mío. –con esas palabras prácticamente devoró mis labios, su lengua recorría mi boca con ansia haciéndome estremecer. Difícilmente podía seguirle el ritmo. Después de varios minutos nos separamos.

 

-no sabes cuánto extrañé esto. –susurré en sus labios.

 

-me alegra escucharlo. Nadie se compara a tu sabor.

 

-que…

 

-… nada… tú eres único.  Sabes cuantas veces me he masturbado en estos días. ¿Pensé que se me caería el pene? –reí.

 

-… no lo parecía… Min, me paseé desnudo por toda la casa y tu ni te inmutaste.

 

-crees que no lo hice. En ese instante tuve que salir de la casa a foll… a distraerme para no pensar en esa imagen. Temía arrojarte en cualquier superficie plana y joderte.

 

-pues debiste hacerlo. –reclame. Aun no estaba seguro de porque actuaba de esa forma.

 

-si~~ -pronunció deslizando su mano debajo de mi camisa.

 

-Minnie… no podemos. Estas lastimado.

 

-eso no es problema. –mordió mi cuello.

 

-Min~~ -yo también deseaba estar con él…. Pero creo que podría intentar algo. Me separe de él.

 

-¿Qué?

 

-tengo una mejor idea.

 

-no creo.

 

-lo dudas Min? No debes moverte. Si alguna costilla se facturo podría causarte algún daño interno.

 

-entiendo. A veces detesto tus conocimientos. –gruño.

 

-hasta que el doctor te revise no hay que arriesgarnos.

 

-y quieres que me revise con una erección notoria en mi pantalón.

-por eso te digo que intentemos otra cosa.

 

-¿Qué?

 

-ya lo verás.

 

Me acerque a Min desabotonando su pantalón, sacando su pene del bóxer.

 

-ngh~  -no mentía. Se encontraba muy excitado. La punta de su pene estaba de un color violáceo y con líquido pre-seminal. –baby. Tu idea es una mamada.

 

-nop. –me incorporé y retiré mis pantalones junto con la ropa interior. –algo mucho mejor.

 

Quité los cojines y lo recosté más cómodamente. Me subí al sillón besando su rostro hasta llegar a sus labios, reclamando su sabor. Min inmediatamente se unió a mí, nuestras lenguas chocaban exigiendo más de la otra. Le di un último corto beso en los labios y me deslice hasta llegar a su entrepierna, pero al último momento giré mi cuerpo quedando apoyado en mis brazos y rodillas con mi rostro sobre el pene de Min y mi miembro cerca del suyo.

 

Sentí mi rostro calentarse, cuando vi esta pose en ese libro quise intentarla e incluso la había imaginado, pero ahora me daba mucha vergüenza hacerlo. Por suerte Min no podía ver mi cara, de seguro estaba roja.

 

-¿Tu idea era un 69?

 

-no… te… gusta. –hable nervioso. Fue una estupidez hacer esto. Hice ademán de retirarme pero sentí sus manos sujetar mi cadera.

 

-no he dicho eso. –comenzó a acariciar mis testículos. Masajeando suavemente el saco.

 

-Ah~

 

-respóndeme algo. –sentí que pasaba su lengua por mi entrada. –como sabías de esta posición. –mordió mi glúteo.

 

-Auch!! … eso… -como le decía.

 

-no te escucho.

 

-yo… yo…

 

-si~~

 

-reviseelkamasutra. –respondí rápidamente. Silencio. –Min. –ni una palabra.

 

-hablas enserio. –logre percibir cierta burla en su frase.

 

-olvídalo. Fue una mala idea. Yo… Ah~~

 

No logré terminar la palabra. Min había metido mi pene en su boca. Prestándole especial atención al glande. Perdí mis fuerzas, mi rostro quedó reposando en el muslo de Min, solo jadeos podían salir de mis labios.

 

-baby… así no se juega. Solo tu lo estas disfrutando.

 

-yo… ah~

 

Me sostuve de mis antebrazos, pase mi lengua por toda la longitud del pene de Min succionando el grande.

 

-ba… baby~~

 

Engullí todo, evitando las arcadas. Comencé con un ritmo lento hasta que mi garganta logró relajarse, dando más espacio. Por otra parte tenía que controlar mi respiración mientras JungMin seguía succionando mi miembro. 

 

Mi cuerpo no sabía qué hacer, quería impulsarme hacia atrás y obtener más de ese roce desquiciante de su boca y otra parte ansiaba probar la esencia de Min, su olor inundaba mis sentidos, era una fragancia fuerte y almizclada que me llevaba al éxtasis.

 

 

La sala se llenó de sonidos de gemidos acallados por el trabajo que hacíamos con nuestras bocas sobre el miembro ajeno.

 

De repente sentí una corriente invadir mi cuerpo, grité aún con el pene de Min en mi boca, su lengua se deslizó a mi entrada, sus manos apretaban mis glúteos al mismo tiempo que los separaban para darle más acceso. Sentía como los músculos de mi ano cedían dándole paso, abriéndose ante la intromisión de la lengua de Min.

 

Liberé su pene de mi boca. –Min~ Ah~~…yo… me… correré… -JungMin aumentó la intensidad     de sus caricias. Tomé con mi mano la base de su pene acariciándolo, notando como palpitaba con cada toque.

 

Volví a meterlo en mi boca, igual que Min hacía lo mismo. Se escuchó un gruñido por parte de Min, el sabor del semen inundaba mis papilas gustativas, trague todo mientras mi propia liberación explotaba en la boca de JungMin.

 

-Jun… Tenemos que…

 

La voz de Victoria se hizo presente.

 

-Jun… tu… tu…

 

Alce mi rostro y la ví de pie en la puerta de entrada con la mirada trémula observándonos. Rápidamente me levante, sentí como un poco de semen se deslizaba por mis labios.

 

Me limpié, rezando porque todo fuera una mala ilusión.

 

-Victoria… porque eres tan inoportuna. –habló Min intentando mirarla, ya que no podía levantar su torso.

 

-Vic… tor…

 

-¡Kim Hyung Jun! –ella cerró los ojos, apretando el puente de su nariz, dirigió su mirada hacía mí. “Oh no, ella da miedo”. –ve a ducharte y regresa vestido de forma decente. AHORA.

 

-yo… en… enseguida. –alcancé a decir, tome mi ropa tratando de cubrir mi parte baja, puesto que con el susto había olvidado que aún estaba desnudo. Corrí a mi habitación ignorando las miradas de ambos.

Notas finales:

Y que les pareció... el casi lemon... creo que no me quedó tan bien que digamos ¬¬'

 

 

 

 

No se olviden de dejar reviews *0* me agrada saber sus opiniones *^*

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).