POV Hyung Jun
Voy apresurado corriendo por todo el campus de la Universidad. Hoy es sábado pero tengo que estar temprano allí.
… la razón…
Estoy ayudando a DongHo a prepararse para la competencia de 200 metros estilo libre, se suponía que Kyu es el encargado de enseñar a los aspirantes a la competencia pero tuvo que viajar a Estados Unidos a representar a nuestra universidad en un torneo.
Ya en la entrada de la cúpula donde se encuentran las piscinas y el gimnasio mi celular empieza a sonar, lo saco de mi bolsillo tomando la llamada.
-Hola.
-Victoria ¿Qué ocurre?
-Oh! Si pasaré en la tarde.
-Bien.
Continúo caminando.
Mi vida ha cambiado tanto. Han pasado 5 meses desde que conocí a JungMin y apenas 4 de salir formalmente como novios.
Jamás pensé que me lo propusiera en serio. Después de la caída en la escalera tuvo que pasar varias semanas en reposo absoluto. Una vez recuperado me invito a salir. Fuimos a las afueras de la ciudad, él había preparado una mesa con una linda cena en la misma, además de varias luces que adornaban un claro.
Disfrutamos del paisaje luego de haber comido, comenzamos a conversar de nosotros y nuestra vida antes de conocernos, aunque Min no me dijera mucho de la suya, solo enfatizó que era huérfano y que desde pequeño vivó solo. Al anochecer decidimos regresar, cuando llegábamos al lugar donde Min dejó estacionada su moto se arrodillo delante de mi entregándome un anillo.
“Esto es una muestra de que eres mío” esas fueron sus palabras cuando lo colocó en mi dedo anular. En su interior tenía grabado J&H seguido de la palabra “mine”
-tan posesivo. –susurró para mí mismo.
Al ingresar veo a DongHo nadando en la piscina.
-Hola.
El se detiene quitándose los visores y girando el rostro frenéticamente hasta que me localiza cerca de los flotadores.
-Llegaste. –sacude sus manos llamando la atención. –empecemos Jun.
-Iré a cambiarme. –le grito señalando los vestíbulos.
-OK!!
Me cambio rápidamente. No es que me tome mucho tiempo, mi bañador consiste en solo un short pequeño tipo licra, la gorra y el visor. Guardo todo en mi casillero y salgo.
-¿Hace cuando tiempo llegaste? –pregunto a DongHo mientras tomo posición en la plataforma de salida.
-15 minutos. –nada hacia mí saliendo del agua para tomar posición en el poyete.
-empecemos. –le sonrío –¡Ahora!
.-.-.-.-.
Ambos nos encontrábamos recostados en la pared de la piscina, intentando regular nuestro ritmo cardiaco.
-No es justo. –gritó DongHo lanzando agua hacia mí.
-las competencias no lo son.
-ya no quiero competir. –hace un puchero cruzando sus brazos.
Habíamos estado practicado por casi 3 horas, estaba empezando a atardecer, la luz naranja que se filtraba por los cristales de la cúpula daba habiso de ello.
-DongHo. Tienes que ser consiente de tus movimientos. No puedes cruzar las corchetas que separan a los nadadores y menos salir antes de que el juez de el pitido de salida.
-pero si tu saltaste al “take your marks”.
-no fue así. Debes posicionar un pie detrás del otro en el poyete inclinándote hacia adelante, de esta forma cuando escuchas el silbato saltas y nadas como si fueras a morir en ello.
En todo el tiempo que estuvimos practicando DongHo no pudo alcanzarme ni una sola vez, se detenía por momentos a respirar y se le quitaba tiempo.
-eres malo Junnie.
-¿Por qué?
-porque no me dejas ganar.
-en una competencia de verdad nadie te dejará ganar. –el resopló. –venga. La revancha.
-no quiero. Mejor me voy.
-debes entrenar. Tu respiración no está bien. Además si Kyu viene de seguro el que tendrá que soportar su ira seré yo.
-soy humano. ¡Necesito aire!
-eso no es…
-Yo dudo que lo seas. Pareces más un renacuajo. –JungMin caminaba hacia nosotros. Se puso de cuchillas en la orilla mirándonos. –Hola baby. –sonrió.
Oh por Dios! Se ve tan sexy cuando sonríe, yo simplemente le devuelvo la sonrisa en respuesta. Él se acerca besando mi nariz recogiendo las pequeñas gotas de agua que descienden por mis mejillas hasta llegar a mis labios. Su lengua delinea mi labio inferior y lo muerde tirando de este.
Lo único que puedo hacer es gemir por la intensidad de sus acciones.
-Argg!!! Es asqueroso. –resopló DongHo. –interrumpes mi entrenamiento.
-por lo que escuche… ya te ibas. –respondió JungMin.
-ahora no quiero.
-ya vete enano. Tengo una cita con baby y tú estorbas.
-no lo creo… el saldrá conmigo.
-ya veremos.
-¡Basta! –grité. –DongHo, tienes que descansar. El jueves empezamos clases y Kyu llega mañana. Aprovecha para descansar y reponerte estos tres días que no tendremos clases.
-¡Jun! –replicó él.
-ve.
-no sé porque estas con él. Ni siquiera puede protegerte. Casi mueres en el lago… si no fuera por Kyu tú…
-¡DongHo! –amonesté.
-enano… -JungMin lo tomo del brazo sacándolo de la piscina de un solo movimiento. –te enseñaré como protejo a baby de una lapa como tú.
DongHo apenas y tocaba el suelo. Min tenía sus manos en el cuello de DongHo manteniéndolo alzado por encima de su estatura.
-detente Min. –salí de la piscina. Me interpuse entre ellos, parándome delante de Min.
-es… cierto… tu… estas celoso… p… por... q…ue.. yo puedo… nadar con Jun… y tu… no… si eres tan valiente… porque no… entras al… a… agua. O… te da… miedo… o.
-¡DongHo!. –giré empujándolo con todas mis fuerzas hasta que cayo golpeando su espalda en el piso. –vete a tu casa.
-junnie…
-Ahora. –exigí.
-bien. –tomó sus cosas y salió rumbo a los vestidores.
Volví a girarme para ver a Min. Él mantenía el ceño fruncido mirando intensamente el agua moverse en la piscina, sus manos formaban un puño en sus costados.
-Minnie… -acaricié su mejilla llamando su atención. –te amo. –el me miró algo confundido pero luego me abrazo con fuerza.
-te amo. Yo… lamento no haber podido recatarte si sol…
-shhh!! –coloque mi dedo índice en sus labios. Pase mis manos a su cuello acercándolo hasta que nuestros labios se unieron.
No quiero que él se recrimine por algo que ya paso. Hace 2 meses fuimos con Kyu y DongHo al lago que queda junto a la casa de Victoria. Al llegar todos fuimos a nadar excepto Min. Su excusa fue porque no quería arruinar su cabello. Al atardecer decidimos salir del agua, pero cuando intentaba llegar a la orilla un calambre en mi pierna lo impidió. No podía nadar y eventualmente fui hundiéndome. DongHo se percató de ello y gritó buscando ayuda.
Lo único que supe fue que Kyu nado hasta mí y me saco del agua. Según Kyu, JungMin intento nadar pero al momento del agua llegó hasta sus rodillas se petrificó y no pudo hacer nada. Luego de ese suceso Min dejo de hablarme y desapareció por varios días.
-baby… -dijo alejándose un poco para besar mi mejilla.
-no digas nada. –me aferré a su pecho. –Min yo te amo. El hecho de que tengas una fobia al agua…
-no tengo miedo. –grito apartándome.
-Min. No hay nada de malo en tener miedo.
-no lo tengo. –se dio la vuelta alejándose de la piscina en dirección a la salida.
Volví a meterme a la piscina, nada hasta llegar al centro de esta.
-¡MIN! –grité.
-baby… -me miró.
-¡Ah!.... ¡Min! ¡Ayuda! –grite moviendo mis manos en todas direcciones emergiendo continuamente.
-¡Baby!
Vi a Min saltar al agua pero apenas entro en contacto con esta el que terminaría ahogándose era él. Nadé hacia él tomándolo de los hombros hasta llegar a la esquina de la piscina donde el nivel del agua era más bajo y fácilmente podríamos tocar el fondo.
-Min… te encuentras bien. –tome su rostro golpeándolo ligeramente. –Min…
El abrió los ojos, su respiración era entrecortada, su pecho subía y bajaba rápidamente.
-Jun… tu…
-Min. Lo siento… no pensé…
-¿QUÉ? –gritó. –sabes lo asustado que estaba.
-Min… yo solo… quería mostrarte…
-que tenía miedo al agua o querías probar si era capaz de saltar por ti. Lo hice. Estás feliz.
-lo siento. –mis lágrimas comenzaron a caer.
En realidad solo quería que se diera cuenta que el sí tenía un temor y que no había nada de malo en ello, además deseaba que tuviera la confianza suficiente en mi para que lo pudiera ayudar. No me interesaba si sabía o no nadar… yo siempre lo amaría sin importa que.
Lo solté cubriendo mi rostro con mis manos, apartándome poco a poco de él.
-está bien. –tomo mi brazo acercándome nuevamente a su cuerpo. Levanto mi mentón. –baby… solo… sé que deseas saber porque no puedo nadar, pero por ahora solo intenta no prestarle importancia.
-¿Cómo puedes decir eso? Yo te amo. Es lógico que quiera saber todo de ti.
-soy yo el que está enojado. L olvidas.
Volví a bajar mi mirada. –sigues enojado conmigo.
-sí.
De repente una idea cruzo mi mente. Volví a sumergirme tomando el suficiente aire para lo que planeaba hacer. Tome el pantalón de Min y baje su cremallera sacando rápidamente su miembro y metiéndolo en mi boca.
Realmente no fue una muy buena idea, mi respiración se terminaba y los movimientos de mi boca en su pene eran algo errados.
Min sujeto con fuerza mi cabello y me saco del agua.
-Q… que…
-baby… tu… enserio… tu… -soltó mi cabello y me aprisionó entre la pared de la piscina y su cuerpo. Un escalofrío recorrió todo mi sistema al sentir el frío de la cerámica rozar mi pecho desnudo. Apoye mis manos en los bordes para mantener mi equilibrio.
-me… me perdonaste.
-tu qué crees. –Susurró cerca de mi oído mordiendo con fuerza mi lóbulo –en que momento te convertiste en un pervertido baby…
-es tu culpa. –me quejé girando mi cabeza para mirarlo. –mira lo que has hecho conmigo.
-y haré mucho más. –beso mi quijada para luego apoderarse de mis labios, mordiéndolos, introduciendo su lengua en mi boca. Iniciando una lucha con nuestras lenguas, en las que siempre salía perdiendo. Su lado tan dominante me fascinaba.
Sus manos se aferraron a mi cadera restregando su miembro erecto entre mis glúteos. Me quitó el bañador lanzándolo en algún lugar. Lentamente introdujo un dedo en mi interior.
-Ah~~ -gemí cortando nuestro beso. Otro dedo acompañó al primero, estirándome.
-Quién diría que el agua puede ser un gran lubricante. Si es así como será estar aquí, me encantaría que me enseñaras a nadar baby~~
-Ah~~ -había tocado mi próstata. -Min~~ -mis manos se aferraron a los bordes de la piscina. -Ah~~ -cada movimiento de sus dedos me llevaba al límite.
-córrete baby… córrete para mí~~
-Ah~~ Min… -con un gran grito de su nombre mi cuerpo se contrajo llegando al clímax. Min me sujeto evitando que colapsara. No tuve suficiente tiempo para recuperarme cuando Min me penetró de una sola estocada, haciendo que choque de golpe contra la pared de la piscina.
-Ah~~ Minnie~~
-dilo baby… vamos…
-te amo
Su mano sujetaba una de mis piernas, levantándola, haciendo que se adentrara más en mí. Dando certezas estocadas en mi próstata. Mi pene volvía a estar erecto. Con su otra mano recorría mi pecho, estimulando mis pezones, apretándolos y retorciéndolos a su antojo.
-Ah~~ Min~~ Min…
-Jun… porque te demoras tanto…
-no otra vez. –murmuramos ambos al mismo tiempo.
Victoria caminaba hacia nosotros, vestía un lindo vestido rosa. Se paro frente a nosotros.
-Victoria Ngh~~ -intenté hablar.
-Hola JungMin. ¿Cómo así en el agua?
-Eres tan inoportuna. –reclamó Min.
-¿Qué?
Min seguía en mi interior moviéndose lentamente. Llevé mi mano a mi boca intentando silenciar mis gemidos. No entendía como con cada movimiento de Min tocaba mi punto dulce.
-Jun lo olvidaste. Tenemos que ir a… bueno tu sabes.
-Vict… Ah~~
Min deslizo su mano a mi miembro acariciándolo, apretando la punta, masajeando mis testículos.
-Jun… que pasa… -Victoria se puso de cuclillas tomando mi rostro en sus manos. Baje inmediatamente mi rosto. Mi coloco su rostro en mi hombro mirando a Victoria.
-Victoria… no lo notas. –sujeto mi cadera acercándome más a él, hundiéndose lo más profundo.
-Ah~~ -no pude reprimir un gemido. Intente apartar a Min, apartándolo con mis manos pero fue inútil.
-vamos baby~~ lleguemos juntos. –susurró en mi oído.
-Ngh~~ -cubrí mi rostro.
No puedo creer que tuviera un orgasmo frente a Victoria y dos seguidos en la piscina. Min me abrazó apretándome más a su cuerpo. Un leve gruñido se escuchó retumbar en su pecho, sintiendo como se corría en mi interior, haciéndome estremecer.
Pasaron varios minutos en los que nos manteníamos en la misma posición en completo silencio. Alce mi rostro y vi a Victoria con los ojos como platos.
-ustedes… tu… él… -ella se levantó de golpe.
-no es obvio para ti. –hablo Min molesto.
-M... Min… -moría de la vergüenza.
-¡Oh por Dios! Son acaso unos exhibicionistas. Tu Jun… como… tu…
-Victoria. Yo creo que necesitas un novio.
-¡Callate! ¡Omo! Jamás volveré a nadar en esta piscina. ¡Agrh!
-… no creo que un bikini te luzca.
-Min… detente. –amonesté.
-Ah~~ -Min seguía dentro. Podía sentir su pene volver a endurecerse.
-olvídalo… otro día iremos… solo regresa a tu casa temprano. No olvides el viaje que haremos para visitar a la abuela.
Asentí apartando mi mirada de ella mientras salía del lugar.
-tu… -dijo antes de salir. –estúpido pervertido. Que has hecho con mi inocente Junnie. –grito desapareciendo por el pasillo.
-ella necesita algo de acción en su vida. –mencionó Min volviendo a penetrarme.
-Ah~~ Min… no… de nuevo…
-¿Por qué no?
-No quiero.
-seguro… tú me dices eso pero… aquí. –comenzó a masturbarme. –alguien pide otra ronda.
Un día quizá moriré por sobredosis de sexo… tal vez no sea una mala muerte.