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De Libros a SEXO [MinJun] por SamStarElf

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Notas del capitulo:

Hoooola linduras!!! Al fiiiin!!

 

lo sé... lo sé...

 

me demoro mucho en actualizar pero es causa de mi trabajo y pues estaba terminando unos proyectos de la universidad así que bueno...
 *ser adulto apesta*

 

Me encantan estos capítulo, no sé a ustedes pero yo estoy emocionada *se emociona con su propio trabajo* toda esta maraña de misterio de esta deshenredando y con ello viene lo mejor de toda la pinche historia *o*

 

En el siguiente capítulo habrá una importante revelación que os dejará *SPOILER... SPOILER* mejor no digo nada y os dejo que lean :DDD

 

 

ENJOY!!!!

POV JungMin

 

Veo a baby salir corriendo, dejando la puerta entrecerrada. La imagen de su expresión herida y las lágrimas que inundaban sus ojos carcomen mi corazón.

 

Él estaba besándose con Eli, con ese hijo de puta que intento violarlo. No debería sentir ninguna clase de remordimiento. ¿Verdad?

 

Bajo mi vista y veo a Jessica arrodillada entre mis piernas, su boca ocupada en mi flácido pene. Ni siquiera puedo excitarme con una mamada. ¿Qué está mal conmigo? La aparto molesto y me levanto del sofá en el que me encontraba. Subo mi pantalón y arreglo mi camisa.

 

-espera… ¿Por qué te vas?

 

-por si no lo notaste… -señalo mi entrepierna. –no me emociona para nada tu trabajo en mi pene.

 

-puedo hacerlo mejor. –ella empieza a quitarse la ropa interior quedando desnuda delante de mí. Cuando habíamos entrado a su cuarto inmediatamente se quitó el vestido quedando únicamente con las bragas, porque es tan puta que el brasier al parecer no aparece en su vestuario.

 

-no lo creo. –me aparto cuando ella intenta tocarme. Solo el sentir sus manos sobre mi hace que mi estómago se revuelva.

 

-¡Eres un maricón! –grita furiosa.

 

Camino a la puerta no sí antes decirle: -creo que lo soy. Con mujeres tan zorras como tú, a los hombres no nos queda más que ir a por otros hombres que sí sepan cómo chupar una polla.

 

-¡Maldito! –la veo abalanzarse a mí pero la evado tomando sus manos.

 

-no me gustas… deja de perseguirme de una puta vez. –la empujo haciendo que caiga al suelo. Mientras me alejo me parece escucharla llorar, simplemente lo ignoro dejando que la fuerte música borre todo.

 

Salgo inmediatamente del lugar. Bajo las escaleras y Victoria rápidamente me intercepta.

 

-¿Qué pasó con Jun? –habla fuerte Victoria. La música sigue igual de fuerte y los invitados chocan con nosotros a cada minuto.

 

-no lo sé.- intento esquivarla pero ella vuelve a impedirme el paso.

 

-lo vi bajar llorando. Salió corriendo desesperado como si hubiera visto un fantasma. Ni siquiera me vio cuando paso de mí.

 

-¡Hijo de puta! –Kyu aparece de la nada y golpea mi rostro. De la fuerza del golpe caigo contra unos parlantes que se encontraban detrás de mí.

 

-¿Qué pasó oppa?

 

Muevo mi mandíbula sintiendo el sabor ferroso de la sangre en mi boca. Paso mi mano por mis labios observando la sangre que escurre de ellos.

 

-este imbécil se estaba follando a Jessica. Jun los vio.

 

Me levanto pero otro golpe me hace volver a caer. –¡Joder! Podrían al menos haberlo hecho en mi otra mejilla. Digo. Para igualarlo al menos. –miro a Victoria.

 

-¿Cómo pudiste? –grita intentando volver a golpearme. Kyu la agarra de la cintura apartándola. Todas las personas ahora se encuentran rodeándonos, mirándonos curiosas.

 

-primero. –me levanto. –yo no la folle. A penas y me hizo una mamada. Y segundo… baby no es ninguna víctima. ¡Él se estaba besando con Eli! –grite frustrado. La maldita imagen de ellos besándose me golpeaba peor que los golpes de Kyu y Victoria juntos.

 

-venga. –Kyu nos toma a Victoria y a mí de los brazos y nos saca llevándonos al jardín. Una vez lejos de todos nos suelta.

 

-Qué rayos es eso de Jun besando a Eli.

 

-¡Oppa! –grita Victoria.

 

-habla JungMin.

 

-los vi besándose en el patio trasero. –confesé.

 

-eso es imposible. –dice él. –quizá lo está…

 

-los estaba forzando. –complete su frase. –no lo creo. Lo vi bien KyuHyun. Fue todo muy voluntario.

 

-¡Eres un idiota! –Victoria golpea mi cabeza. –acaso no conoces a Jun. Es de él de quién estamos hablando. –nos mira a Kyu y a mí en forma de reproche. –seguro esto tiene alguna explicación. ¡Jun te ama maldita sea! –vuelve a golpearme. –él sería incapaz de engañarte idiota.

 

-¿Seguro? –dijo irónico. –porque lo que yo vi…

 

-¡Ayúdenme! –se escucha un grito. Volteamos a ver y es Eli caminando con mucha dificultad en nuestra dirección. Kyu corre y pasa un brazo por su cintura ayudándolo a caminar.

 

-¿Qué te ocurrió? –pregunta Kyu haciendo que se siente en la acera. Eli tenía varios golpes en su rostro, su labio roto y con una horrible costra de sangre, su ojo izquierdo estaba hinchado y amoratado.

 

-está sangrando. –Victoria se sienta a su lado revisando su costado.

 

Me acercó para y veo un corte profundo. Me quito la camisa y se la entregó a Victoria.

 

-aprieta ese lugar para evitar que pierda más sangre. Será mejor que llames a una ambulancia. –ella asiente sacando su teléfono con una mano mientras que la otra ejerce presión en la herida de Eli.

 

-en que problema estas ahora. Otra violación. –me burlo.

 

-es… Jun.

 

-¿Qué le hiciste? –mi sonrisa se desvanece. Agarro su camisa sacudiéndolo.

 

-Tú que le hiciste. –su voz es apenas audible.

 

-que. –digo sin entender.

 

-él estaba muy mal… lo encontré caminando solo por la calle… llorando como no tienes la más jodida idea. Lo único que decía es “porque lo hiciste” “ya no me amas?” –Eli apartó mi mano mirándome con reproche. –nunca lo vi tan destrozado en mi vida… y eso que Jun ha pasado por varias desgracias.

 

-eso no te importa.

 

-seguro que no. Arg!! –se queja cuando intenta moverse. –¡Lo secuestraron!

 

-que…

 

-¡A Jun maldita sea! –dijo exaltado.

 

Todos nos quedamos en silencio por unos minutos. Vuelvo a acercarme para golpearlo cuando KyuJong me detiene.

 

-déjame golpearlo. Debería terminar lo que ellos comenzaron.

 

-deja de ser idiota. –reprende Kyu. –crees que el jugaría con algo así.

 

-eso no puede ser. –hablo asustado. –porque alguien lo secuestraría. –me dejo caer en el asfalto. Si de verdad eso fuera cierto… todo sería mi culpa… yo lo empuje prácticamente para que saliera a estas horas de la noche y solo.

 

-explícate Eli. –Kyu era el único que se mantenía estoico ante esta situación.

 

-estábamos a dos cuadras de aquí. Intentaba calmarlo pero era imposible… de repente unos tipos salieron de la nada. Jun reconoció a uno… de eso estoy seguro.

 

-¿Sabes quién era?

 

-no. Luego de eso nos acorralaron y tomaron a Jun. Intenté pelear pero eran demasiados. Uno me dijo esto… “Dile al príncipe que su deuda sigue en pie. Ojo por ojo y… –Eli me miró al decir lo último. –…amante por amante” ¿Tú los conoces verdad?

 

-YunHo. –alcanzo a decir. Mi cuerpo comenzó a temblar y el miedo me helaba hasta los huesos. –soy un idiota de verdad… todo es mi culpa.

 

-por primera vez en tu vida dices algo coherente. –escupe Eli con odio.

 

-suficiente. –Kyu se para frente a mí. –será mejor que empieces a decirme porque tus conocidos secuestraron a Jun.

 

 

.-.-.-.-.-.-.-.-.                .-.-.-.-.-.-.-.-.                .-.-.-.-.-.-.-.-.

 

-¿Secuestraron a tu novio?

 

-sí.

 

Luego de decirle parte de la verdad a KyuJong sobre mi relación con YunHo y que perteneciera a una pandilla, además de la posible razón porque lo secuestraron sería que me folle al amante de YunHo, Kyu empezó a llamar a alguien y luego de eso se fue con Victoria. En realidad Victoria lo siguió. A saber si se la llevó con él o no. Eli por su parte llamo a su adre y luego de unos minutos una enorme limosina con 3 guardaespaldas lo llevaron.

 

Yo por otra parte llamé a la única persona que me podía ayuda y no juzgarme.

 

-¿Quién? –Hyun estaba sentado en el sillón frente a la chimenea de la sala de la guarida.

 

-YunHo. –respondí caminando a la mesa que estaba en una esquina de la sala donde se encontraba un mini bar. Recogí una botella de whisky con un vaso y la coloque en la mesa frente a Hyun. Me senté frente a él sirviéndome un trago. Quiere vengarse por lo que paso con JaeJoong.

 

-eso no tiene sentido. –Hyun apoya los codos sobre sus rodillas. –porque haría eso después de tanto tiempo.

 

-porque quiere vengarse. –le repito.

 

-Min…

 

-HongKi está con él. –ambos giramos para ver quien había entrado. Saeng se asomaba muy serio. Su cabello había crecido y su ropa seguía siendo la misma pero su expresión ya no era tan fría y vacía como antes. Caminó hacia nosotros deteniéndose frente a Hyun que lo miraba boquiabierto.

 

-hola amor.

 

Observo a Hyun. Sigue pasmado ante Saeng. Intenta decir algo peo ninguna palabra sale de su boca.

 

-S…aeng. –dice al final.

 

-¿Quién más podría decirte amor? –frunce el ceño colocando sus manos en la cadera.

 

-yo. –intento suavizar los ánimos. –no es verdad mi amor. –pestañeo varias vece sonriendo.

 

-¡Min! –me grita reaccionando al fin. –déjanos solos.

 

-por ahora no. –replica Saeng. –después hablaremos.

 

-pero…

 

-escucha. –se acuclilla frente a Hyun tomando sus manos. Definitivamente este no es el Saeng que conocía. –ante que nada quiero decirte que llegue a Seúl hace uno días y que lo que diré ahora no tiene nada que ver con mi decisión de venir a ti… de acuerdo.

 

-de que hablas. –dijo confundido.

 

-¡Cállate JungMin! –me regresa a ver Saeng enfadado. –ahora. –se levanta y se sienta a lado de Hyun.  –Kyu me llamó hace unos minutos.

 

-KyuJong ¿Cómo lo…

 

-silencio. –advierte Kyu tomando nuevamente la mano de Saeng.

 

-gracias amor. –el besa la mano de Hyun. Oh por Dios! Es horrible verlos así de cariñosos. –para satisfacer tu curiosidad Min… Kyu y yo fuimos novios hace mucho tiempo. Hoy en día solo tenemos una linda amistad.

 

-¡Fueron novios! –casi dejo caer mi vaso de la impresión. Lo dejo en la mesa concentrándome en lo que Saeng acaba de decirme.

 

-me enteré por él que secuestraron a su primo… tu pareja. Nunca lo hubiera imaginado… que el primito que tanto odiaba resultará ser tu amante que también odiaba.

 

-¿Por qué lo odiabas? –pregunte aun recuperándome de las increíbles noticas. Saeng me sonrió divertido por mi pregunta.

 

-porque yo amaba a Kyu, pero a él le gustaba demasiado su primo y luego tú… me gustaste. Aunque no sé porque.

 

-porque soy guapo.

-no lo creo. Pero lo odié porque él te hizo cambiar… convertirte en una mejor persona.

 

-y ahora. –Hyun miraba a Saeng finamente sosteniendo con fuerza su mano. –lo sigues odiando.

 

-no –dijo firme devolviéndole la mirada. –porque te amo a ti. –los hombros de Hyun se relajaron. Atrajo a Saeng hacia él haciendo que quedara sentado en su regazo.

 

-yo también te amo Saengie. –le escuche susurrar cerca de su oído.

 

-ok… ok… ok. No deseo ver eso. –dije cuando las cosas parecían subir de nivel entre ellos.

 

-ni lo verás. –habló Saeng. –lo siento amor… ahora hay cosas más importantes. –no se levantó del regazo de Hyun pero si se acomodó de forma que quedó mirándome de frente. –el secuestro de Hyung Jun está en nuestra lista de prioridades de momento. Kyu me llamó y debería estar llegando en unos pocos minutos.

 

-pero no puede.

 

-JungMin esto es más serio de lo que piensas. Por si ninguno me escucho a lo que entré… HongKi está en esto… aunque tu teoría de YunHo no este del todo sobreestimada… algo me dice que Ki es la mente tras el secuestro de Hyung Jun.

 

-eso no es posib…

 

-como lo sabes Saengie. –cortó mi reclamo Hyun.

 

-te acuerdas de los chicos que nos ayudaron en el rescate de Siwon.

 

-claro. Por lo que sé ellos continúan con él.

 

-sí. Les llame y me dijeron que hace una semana que un hombre rubio llegó a ver a YunHo y que desde ese momento todo había cambiado con su llegada… y antes... –estrechó su mirada en mi dirección. –… de que me digas que existen varios hombres rubios en el mundo. Ellos me enviaron unas fotos. –Saeng saco su teléfono y lo puso sobre la mesa empujándolo hasta que llegó a mis manos. Lo temé con cuidado y revise las fotos.

 

-no puede hacer. –revisé con detenimiento todas las fotos. En cada una se podía divisar claramente a Ki en alguna conversación divertida con YunHo. Cualquiera pensaría que eran muy buenos amigos.

 

-lo ves. Ahora lo que no entiendo es porque el querría secuestrar a Hyung Jun. Aunque este enamorado de ti… esto es algo muy exagerado.

 

-él… lo hizo. –susurré soltando el teléfono.

 

-¿Hacer qué? –Saeng se levantó y se acercó a mí.

 

-Min. Creo que es hora de que nos digas la verdad. La vida de Jun está en riesgo. –dijo Hyun llegando detrás de Saeng y abrazándolo. Bajé la mirada a la foto que se observa aun en la pantalla del teléfono.

 

-yo…

 

-¡Espera! –Saeng me interrumpe. –será mejor que esperes un momento.

 

-¿Por qué? –preguntamos Hyun y yo al mismo tiempo.

 

-Kyu ya llegó. –todos nos centramos en la entrada. KyuJong se sorprende igual que yo de verlo en este lugar.

 

-JungMin ¿Qué haces aquí?

 

-ahora si cuéntanos todos. –insiste Saeng.

 

Vuelvo a bajar la cabeza. Escucho los pasos de Kyu al acercarse y sentarse a mi lado, levemente puedo ver a Hyun sentarse con Saeng de nuevo en su regazo. Respiro por algunos segundo reuniendo coraje para contarlo todo

 

-HongKi… me envió para que me acercará a baby y lograr conseguir la llave de los Lee.

 

-¿Qué? –gritaron todos.

 

 

 

 

POV Hyung Jun

 

Mi mejilla está aplastada contra la fría losa. Mis manos atadas detrás de mi espalda al igual que mis tobillos, mis ojos están cubiertos con alguna frazada y mi boca tiene alguna especie de cinta adhesiva.

 

El frío del piso hace que comience a temblar, la humedad de este lugar dificulta aún más que pueda respirar.

 

¿Cómo llegué a este estado?

 

Amordazado, tirado en el suelo de algún recóndito lugar. Solo recuerdo a Eli consolándome y luego…

 

Me muevo intentando liberarme de mis restricciones. Ahora recordaba todo. Esos hombres me llevaron a la fuerza y él… él estaba con ellos.

 

-veo que ya despertaste Jun… o debería decirte baby.

 

Mi cuarpo se paraliza al escuchar esa voz, un escalofrío recorre mi espina dorsal y ,i respiración se atasca en mi garganta. Agudizo mi oído intentando identificar en donde está.

 

-a pasado una tiempo… o quizá no el suficiente.

 

Alguien me toma de los brazos y me laza sosteniendo todo mi peso. Desatan mis manos y las colocan frente a mi volviendo a atarlas, las alzan sobre mi cabeza sujetándolas en algún tipo de gancho que se debe encontrar en el techo, claramente puedo escuchar los eslabones de la cadena al moverme. Mis pies apenas tocan el suelo haciendo que la mayor parte de mi peso recaiga sobre mis brazos.

 

El pánico se apodera de mí.

 

¿Qué piensa hacerme?

 

¿Torturarme acaso?

 

¿Golpearme hasta la muerte?

 

Escucho varios pasos y murmullos. A duras penas puedo equilibrarme. Mis brazos comienzan a doler y mis articulaciones queman por la incómoda posición. El nudo hecho en mis tobillos no me permite estabilizarme.

 

-Quítenle la mordaza y descubran sus ojos. –de nuevo su voz.

 

La venda de mis ojos es retirada, parpadeo varias veces hasta poder enfocar mi vista en el lugar donde me tienen cautivo. Acto seguido el adhesivo es retirado con brusquedad de mis labios.

 

-AH! –me quejo y mis pies vuelven a ceder. Todo mi peso recae en mis brazos, puedo sentir el ardor de la soga en mis muñecas y un tibio liquido descender por mis brazos.

 

¿Sudor?

 

¿Sangre?

 

En este momento ya nada de eso importa.

 

-¿Por qué? –logro decir cuando lo logro divisar.

 

Él. Ahí parado frente a mí con su frívola sonrisa. Lo único diferente de las otras veces es que ahora viste un elegante traje azul oscuro que hace resaltar su cabello dorado.

 

-¿Por qué crees tú? –él se acerca hasta quedar a centímetros de mi rostro. –tú me quitaste todo.

 

-¿Q… qué?

 

-no lo recuerdas verdad. –sonríe sin apartarse. Miro a todos lados y noto que somos los únicos en este cuarto. Una simple habitación de 4x4m iluminada apenas con una tenue luz proyectada por una lámpara oxidada colocada en la pared cerca de la puerta. Solo una vieja silla de metal adorna este olvidado lugar. –no hay nadie… solos tú y yo Jun. –se aparta tomando la silla, arrastrándola. El metal friccionándose en el suelo causa un chirriante sonido que hace mella en mi actual dolor de cabeza.

 

Pero… ¿Por qué me duele la cabeza?

 

Ya recuerdo cuando me ingresaron en aquel auto, un hombre me golpeo con el mango de su pistola.

 

Desabotona su chaqueta y se sienta frente a mí.

 

-déjame libre. –su risa hace eco por toda la habitación.

 

-¿Por qué lo haría?

 

-por favor… no le diré a nadie quién eres.

 

-Jun. Jun. Jun. Es que no lo entiendes… tu ni siquiera sabes quién soy.

Notas finales:

Y que os ha parecido... Decidme???

 

Apreciaría que dejaran algun review *0*


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