El timbre anunciaba la hora de salida, el rubio aun no se reponía de lo ocurrido ayer ¿porque el moreno no le había dicho nada? Después de que le confesara sus sentimientos por ashura; este lo miro con una expresión que nunca antes había visto, luego dejo la comida sin hacer caso de nada y se fue a su habitación, cuando el entro al cuarto, ni siquiera le había dirigido la mirada ¿acaso lo odiaba por gustar de otro chico? Lo más seguro era que sí, bajo la mirada ante esos pensamientos
El cielo se encontraba nublado otra vez, pero afortunadamente hoy no llovía; se dirigía a su hogar con la mirada perdida, tantas cosas se le pasaban por la mente; le había costado entablar una relación con el moreno y ahora todo se había ido por la borda, eso lo entristecía ¿acaso fue mala idea decirle aquello? Y lo peor, no tenía el apoyo del moreno ese día en especial “ese día”
Cuando llego a su casa, tan solo se dispuso a ir a su habitación, no se fijo si había alguien, no se sentía bien y solo quería descansar. Al entrar a su dormitorio vio al moreno, eso lo sorprendió a la vez que lo inquietaba
-buenas tardes…- saludo para luego quitarse la mochila y sentarse en su cama, le entristecía el hecho de que kurogane no le respondiera; este por su parte solo lo miraba ¿Por qué le molestaba tanto saber que el rubio y ashura si eran más que amigos? Eso no le afectaba en nada, sin embargo se sentía muy molesto y más porque la tarde de ayer lo único que le había pedido el rubio era que no le dijera nada a su padre “a su padre” le preocupaba que su padre lo supiera ¿y lo que el sintiera qué? Se sorprendió por pensar aquello ¿Qué era lo que él sentía? Se sentó en su cama al hacerse esa pregunta
Desde ya algunos días aquello lo inquietaba ¿Qué sentía por ese chico? Esa pregunta no le dejaba dormir, ni concentrarse en nada ¿Cuándo fue que aquel chico ocupo gran parte de su mundo interno? Lo miraba de lado, traía la mirada baja, no le gustaba verlo así, quería que siempre fuera el chico molesto de antes, aquel que sonreía por nada y con el cual se había sentido importante otra vez, saber que alguien podía necesitarle ¿pero acaso en verdad lo necesitaba? El ya tenía a ashura “ashura” odiaba tanto ese nombre
Se dirigió al baño, necesitaba relajarse y nada mejor que una ducha fría; el rubio solo lo miro en silencio, se le venían a la mente muchas cosas ¿Por qué el moreno se portaba así? Ciertamente no era nada común que un chico se enamorara de otro, pero eso no era un pecado ¿Por qué la gente no lo entendía? El llego a creer que kurogane si lo haría, porque siempre supo que el era distinto a los demás ¿acaso se equivoco?
-¿ocurrió algo?...- escucho de pronto la voz de souma, había entrado a su habitación, estaba tan distraído que ni siquiera se dio cuenta
-¿y ahora que quieres?...- preguntó sin muchos ánimos, no estaba de humor para aguantar nada
-hay que humor, solo me preocupe, no tiene nada de malo…- hablaba la morena tranquila, el ojiazul solo la miro, no caería en su juego otra vez
-¿y de que te preocupaste? Yo estoy muy bien…- sabía que eso era mentira, pero no quería que la morena se diera cuenta de la debilidad que sentía en esos momentos
-¿te peleaste con kurogane?...- aquella pregunta lo molesto a la vez que lo sorprendía ¿acaso quería regocijarse de eso? El no había peleado con el moreno, pero tal parecía que el moreno si lo había hecho con él, todo era tan confuso
-no pelee con nadie, así que guarda tu alegría…- le respondió a un serio volteando la vista a otro lado, realmente no tenia humor para nada
-no, si no me alegro ¿Por qué piensas que soy cruel?...- que preguntara eso se le hiso gracioso, pero no tenía intenciones de reír
-no lo pienso; lo único que se, es que no volveré a caer en una trampa tuya…- aquella respuesta molesto a la morena ¿Qué significaba eso? Ella no era la mala del cuento ¿o sí? Recapitulando la historia, era un sí
-se que quizá te par…
-ya vete…- el rubio la había interrumpido poniéndola molesta, lo miro por unos momentos, observando que este ni siquiera le dirigía la mirada, así que simplemente se fue
El rubio volteo la mirada en dirección al baño, el moreno aun no salía y dentro de poco tendría que ir a aquel lugar, lo inquietaba tanto, sin embargo se preguntaba ¿Por qué en esos momentos anhelaba tanto la compañía del moreno, y no la de ashura? ¿Quizá porque él estaba cerca? tal vez
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El moreno aun se encontraba en la ducha ¿Qué era esa confusión que sentía? ¿Qué era fye para él? El chico tiene a ashura, saber eso lo molestaba tanto pero ¿Por qué estaba tan molesto? ¿Por qué el rubio gustara de un chico? ¿Porque gustara de otro chico? O ¿porque ese chico no era él? Se asusto de la última pregunta, quizá su respuesta ya la sabia y no la quería aceptar ¿pero qué es lo que no aceptaba? Que fye… ¿le gusta? Se sorprendió de aquello ¿podía ser posible? Negó rápidamente, no era eso ¿verdad?
-levántate...- escucho la voz de la morena mayor, se lo ordenaba a fye ¿qué ocurría? Aquello lo inquieto y rápidamente salió de la tina para vestirse, escuchaba al rubio quejarse un poco ¿Qué pasaba ahí a fuera? Cuando salió ya no había nadie, eso lo preocupo, y rápidamente salió del cuarto
Caminaba buscándolo con la mirada ¿Qué había ocurrido? Al llegar a la cocina vio a la morena mayor, tomaba un vaso de agua
-¿dónde está fye?...- preguntó casi por instinto, haciendo que la mayor lo mirara extrañada
-lo castigue…- hablo secamente mientras ponía el vaso en la mesa, eso enfureció al menor ¿lo castigo?
-¿Dónde está?...- volvió a preguntar secamente, no se sentía cómodo ni tranquilo con la situación. La morena solo lo miraba sin intenciones de responder nada, pero le sorprendía ver al menor con tanta insistencia ¿acaso ya eran amigos? Desde que se había hecho cargo de kurogane, nunca lo había visto entablar amistad con nadie, aun con souma siempre se mantenía distante, pero ahora, en verdad veía en sus ojos preocupación
-deja de insistir, no te lo diré…-con esto último se dirigió caminando a la salida, pasando por un lado del moreno, el cual solo podía mirarla con furia; odiaba tanto a esa mujer
Decidió continuar con su búsqueda, no podía estar fuera de esa casa ¿pero dónde estaba? Ya había revisado todo el lugar ¿y si nunca volvía a verlo? Se asusto de sobremanera por ese pensamiento, pero se tranquilizó al darse cuenta que era algo precipitado creer en eso; pero sin embargo sentía tanta intranquilidad
Reviso los baños, el patio, el jardín, las habitaciones, incluso el sótano, pero en ningún lado lo encontró ¿Qué hacer ahora? Se sentía desesperado ¿Por qué tanta intranquilidad? ¿No se suponía que no permitiría que volvieran a dañarlo? Se arrepentía por haber dejado solo al rubio ¿no le habían hecho nada verdad? Se asustaba solo de pensarlo, ¿y si había escapado de la casa por el trato de esa mujer? Otra vez pensaba de manera precipitante, decidió relajarse un poco ¡¡ cielos era tan idiota!! ¿Por qué se enojo con el menor? Le gustaba otro chico ¿¡y eso qué!? Los sentimientos cambian y el amor puede volver a crecer “no si es verdadero” bajo la mirada ante eso
Se recostó en el árbol de la entrada ¿Qué aria ahora? Miles de pensamientos absurdos rondaban su mente y todos lo ponían más intranquilo ¿Por qué se preocupaba tanto por ese chico? ¿Qué era lo que le causaba esa preocupación? Recordó una a una las veces en que el menor intentaba hablarle, lo ocurrido después y lo bien que la pasaba a su lado; miro su dedo, se veía una marca obscura pero no dolía, tampoco las cortadas, era extraño, incluso sus manos le recordaban al rubio “suspiro” siempre, desde que lo vio por primera vez presintió algo ¿Quién era fye en realidad? ¿Qué parte de su vida ocupaba? Ya no podía ignorar más eso que sentía ¿¡Qué era ese sentimiento!? Fye… ¿le gusta? Ser un hombre no era un impedimento, ashura, ashura si que lo era
-fye ¿conde estas?...- se preguntó así mismo, mientras la impotencia lo carcomía ¿y si iba a la policía? Negó rápidamente, eso también era precipitado. Lo tenía decidido, saldría a buscarlo fuera de la casa; la mujer le había dicho que lo había castigado ¿Qué tipo de castigo? ¿Y porque lo castigo? Como si esa mujer necesitara motivos
Al llegar al parque, no sabía a dónde dirigirse; comenzaba a desesperarse nuevamente; lo único que lo tranquilizaría seria encontrar al rubio, de eso estaba seguro ¿por donde comenzaría? Nunca antes hiso eso, jamás busco a nadie, porque nadie le importaba, ya que después de que sus padres murieran juro que nunca se permitiría encariñarse con nadie… y si alguna vez lo hacía, no permitiría que la vida le arrebate nuevamente lo que más quería ¿fye era lo que más quería? En esos momentos sí ¿Dónde estaba? ¿Dónde? Esa pregunta lo desesperaba
Las horas pasaban y la angustia aumentaba, ya había recorrido casi todo el lugar y no encontró ni una pista que le dijera dónde podía estar el rubio ¿¡donde estaba!? Estaba decidido, si no lo encontraba en media hora, golpearía a esa mujer hasta que le diga donde esta
Paso un largo momento y sus pies comenzaban a sentir el cansancio, decidió sentarse un momento a descansar, en la misma banca donde el rubio lo encontrara aquella vez ¿tenía alguna esperanza de que vuelva a suceder? ¿Se podía tener la misma suerte dos veces? Ojala que así fuera, sería tan feliz ¿feliz? ¿El rubio en verdad le gustaba? No, era más que simple gusto, mucho más
Miro en dirección al cielo, se mostraba nublado, quizá esa noche llovería ¿Qué aria cuando vuelva a ver al rubio? ¿Le pediría perdón? ¿Lo trataría cómo antes de saber sus sentimientos? Quizá lo mejor sería que sus sentimientos actúen por si solos ante la situación “cuando lo viera” anhelaba tanto ese momento
El reloj del parque ya anunciaba las 7:09 pm, quizá lo mejor sería volver a casa, quizá el rubio ya estaría ahí; ante esos pensamientos apresuro el paso, ya quería verlo, era lo que más anhelaba ahora
Entro en la casa, no había más personas que la morena menor, bajo la mirada ante eso ¿Dónde estaba fye?
-¿kurogane? te vez fatal…- hablo souma al ver el estado del moreno, nunca antes lo había visto así ¿Qué le ocurría?
-¿tú sabes donde esta fye?...- preguntó con el ánimo bajo, pero mostrando su actitud seria, en verdad deseaba saber dónde estaba el rubio y cualquier información le era útil
-se fue con su papá, eso creo, los vi salir a ambos, no sé donde fueron…- esa respuesta trajo algo de tranquilidad en el moreno ¿pero porque la morena mayor le dijo que lo había castigado? Se sentía tan furioso; pero al menos sabía que el rubio estaba bien, se sintió tonto por unos momentos, se había preocupado por nada
-gracias…- respondió sorprendiendo a la morena ¿de qué le agradecía? Luego se dirigió a su habitación, estaba más tranquilo, pero la paz entera llegaría solo cuando volviera a ver al rubio.
Había sido un día loco, sonrió de lado al pensar eso ¿cómo es que se desespero tanto solo por no verlo? Entonces paró en seco, no se dio cuenta, pero se había dicho a sí mismo que sentía más que gusto por el rubio ¿eso era verdad?
El tiempo seguía pasando, el reloj ya marcaba las 10:06 pm, se hacía tarde ¿porque no llegaba? Hacia frio, decido entrar en la cama, esperaría al rubio ahí ¿en la cama? Se avergonzó de su pensamiento
El sueño comenzaba a vencerle y ya comenzaba a dormirse, cuando escucho la puerta abrirse, en seguida volteo a ver; le hiso muy feliz que se tratara del rubio, pero su alegría se fue al ver el estado en el que estaba ¿Qué le paso? Traía el flequillo cubriendo sus ojos y la mirada baja; realmente se veía deprimido
-¿te ocurre algo?...- preguntó al momento de levantarse e ir en dirección a él, el rubio solo lo miro con sorpresa ¿ya no estaba molesto? Eso lo hacía feliz, lástima que no tuviera el humor para expresarlo
-¿ya no estás molesto con migo?...- escuchar al rubio hablar y hacer esa pregunta, realmente entristeció al moreno; se oía realmente mal y sin embargo le preocupaba que él estuviera molesto con él ¿Qué le había ocurrido? Cuando se dio cuenta ya lo había abrazado, su cuerpo había reaccionado sin autorización suya una vez más
-claro que no…- respondió algo serio, en esos momentos odiaba no ser una persona abierta, quería decir tantas cosas y las palabras no salían
-eso me alegra…- al terminar de escucharlo, sintió como las lagrimas del menor mojaban su pijama, estaba llorando ¿Por qué lloraba? ya no tenía dudas, quería a ese chico más que a nada y no quería verlo así
-¿de qué…
-por favor, solo mantente así, no me preguntes nada hoy…- interrumpió el rubio mientras se aferraba más al pecho del mayor, el cual apretó más el abrazo mientras se preguntaba una vez más ¿Qué le había ocurrido?