CAPITULO FINAL.
-¿Donde los conseguiste? –pregunto Yixing mirando todos los libros.
-En algunos viajes, mientras estuve trabajando.
-¿Los compraste?
-Solo algunos, otros los encontraba, otros más me los regalaban.
-¿Solo así? Digo, yo no regalaría un libro tan fácilmente –dijo mientras admiraba uno.
-Tuve que hacer algunas cosas –dijo con un tono desinteresado.
-¿Cómo qué?
-Cosas, cosas Yixing.
Lo siguiente fue un golpe en su hombro con el pequeño libro. SuHo rio divertido, pero Yixing tenía la mirada llena de lágrimas.
-¿Te acostabas con otras personas?
SuHo sintió un nudo en la garganta.
-No me mientas porque sé que fue así, y si conseguiste algún libro de estos en esa forma no los quiero. –aventando el libro a sus pies.
-No conseguí estos libros de esa manera, ya te lo dije antes, fue mientras trabajaba. –Tomo aire –Y si, si me acosté con otras personas.
-Supongo que fue mi culpa que hicieras eso.
-En parte, digo, solo me abandonaste y yo me sentía vacío. Quería borrarte, olvidar tu calor, tu peso, tu olor. Yo…
Yixing comenzó a caminar. Mientras se secaba las lágrimas. SuHo notaba el apoyo en una de sus piernas y como utilizaba el bastón. Le dolía verlo así, pero era mejor a lo que había pensado, como sea, estaba caminando y eso ni con todo su dinero él lo hubiera arreglado.
-¿Te duele? –Pregunto con miedo –digo, cuando caminas.
Yixing asintió dándole la espalda mientras se perdía en la colección de cochecitos que había en una mesita.
-Me dijeron que si todo va bien, en dos años podría dejar de sentir dolor. –Siguió caminando. SuHo se sobresaltó cuando escucho el “Oh” de este al llegar a la cocina.
-¿Te gusta?
-Dios es tan grande, hay tantos utensilios –decía mientras abría todo y revolvía los trastos. Esa inocencia que tanto amaba volvió -¿Pueden venir mis abuelos? Ya sabes cocinarían maravillas aquí.
-Pueden venir cuando quieran.
-Gracias SuHo. –Casi se le para el corazón, había escuchado bien, si, no había duda le dijo SuHo.
Yixing salió de la cocina ignorando la intensa mirada que SuHo le daba.
-¿SuHo, puedo ir arriba? –Y sintió como se le alteraba hasta la última célula.
-Claro, puedes ir a donde quieras, es tu casa ¿Recuerdas?
-Gracias. –dijo sonriendo y mostrándole su hoyuelo.
Esta vez no lo siguió. ¿Qué era eso? ¿Acaso estaba jugando a algo? ¿Se burlaba? Lo que sea que fuera no le gustaba, no le gustaba en lo mínimo que le llamara SuHo. Pero bueno, ya se la devolvería.
Minutos después subió a la habitación, escuchaba la voz de Yixing cantando en el baño.
-Oh He wonts me, Oh He’s got me, Oh He hurts me… -cancion china- Someone Call the Doctor…
-¿Nueva Composición?
-Sí, aunque Kris y Luhan me dicen que es obscena, pero Chen dice que le pongamos ritmo, quiere cantársela a Minseok. A Tao también le gusta.
-Vaya.
Y salió del baño, sin decir más. Minutos después regreso cambiado con pantalón deportivo y una camiseta, dejando lucir su blanca piel.
-Estaba esperando que quisieras hablar conmigo, pensé que tenías cosas que decirme, yo tengo infinidad de cosas que decirte pero parece no ser ocasión. Iré a correr un rato, me pasare por la casa de una vecina, uno de sus familiares hace mudanzas, lo contratare, ya sabes para que se lleven mis cosas y traigan las tuyas. –Yixing apenas procesaba lo que SuHo decía cuando remato –Ya me quedo claro Lay.
Yixing pensó que era una broma, pero no fue así, SuHo ya ni siquiera regreso en lo que restaba del día, no traía su teléfono y no recordaba el del apartamento, así que se quedó allí, solo, al menos había comida, no lo estaba pasando del todo bien tenía un poco de miedo pero se le quito cuando entendió la manera en la que funcionaba el estilizado estéreo, escucho música por un rato, vio una película, pero ya se había dado por vencido, pasaba de la 1:00 am así que decidió ir a dormir. Hasta que un pasillo llamo su atención.
En la pared estaban colgadas fotografías de él, de JunMyeon, estaba la foto que se tomaron aquella vez en la playa, el primer recuerdo juntos. Mientras avanzaba se encontraba con fotos que ni él sabía que existían, probablemente los demás las habían tomado.
No pudo evitar carcajear al observar una foto en la que estaba el, el día de la fiesta de Dasom, él tenía su bonita sonrisa y su hoyuelo, y a lo lejos se notaba un enojado SuHo mirándolo fijamente. Era un tesoro esa fotografía.
Los sentimientos se arremolinaron en su pecho, cuando se encontró con la foto que Siwon alguna vez tomo, dormido junto a Min, esa mujer hermosa que le había cuidado tanto y que aún no tenía el valor de ir a verla. Para después encontrarse con el retrato de su madre justo con una veladora y un ramo de Hortensias justo como lo mantenían en casa. Pero lo más sentimental fue encontrar una foto de el mismo en el horrible estado de la enfermedad, junto a la foto que Chanyeol le tomo cuando decidieron regresar a Corea. En la pared por la misma mano de JunMyeon estaba escrito. Bienvenido a nuestro Hogar. El espacio, la historia de los dos. Wo ai ni. Fue mucho, se desplomo a llorar. Tal vez el que le regalara una casa era totalmente significativo, pero ese pasillo lleno de recuerdos, y del respeto hacia su madre y a su amor no tenía comparación.
Yixing tenía miedo, tenía pena, no pensaba que JunMyeon fuera a perdonarlo así nada mas, el mismo lo dijo trato de olvidarlo. Como sea él lo abandono, y ahora se iria de su hogar, y comenzaba a desesperarse, esa opresión en el pecho hacia que su cuerpo pesara, y que comenzara a dolerle las piernas.
Tomo un poco de aire para tranquilizarse y entro a la habitación. Lo primero que salió de su boca fue.
-¿Por qué me das tanto?
Era un cuarto de baile, totalmente acondicionado, con grandes espejos, el piso de completa madera, un estero más grande y mejor que el de la sala, algunos bancos y hasta cambios de ropa.
Después de la Literatura, amaba el baile, aunque realmente su más grande amor era JunMyeon.
-Porque te lo mereces…
Yixing pego tremendo susto.
-JunMyeon, Por Favor, no hagas eso. –dijo con la mano sobre su corazón.
-Discúlpame Yixing –haciendo énfasis en su nombre.
-Cambiaste tu ropa.
-Tuve que ir al Corporativo. –recibiendo solo un “oh” por respuesta.
Yixing aventó el bastón y le dijo.
-Todo este tiempo he estado pensado en que no podré hacerlo, pero ni siquiera lo he intentado. ¿Podrías por favor?
SuHo de inmediato puso algo de música, de esa que le gustaba bailar a Yixing. El otro respiraba nervioso, tenía los ojos cerrados y trataba de encontrar esa corriente de electricidad que surgía siempre que bailaba.
JunMyeon sonreía inmensamente, prácticamente hacían años que no lo veía bailar. Justo cuando dio un giro su pierna dolió y casi cae por completo, de no ser porque el otro lo sujeto.
-¿Estas bien?
-Gra… Gracias. –lo ayudo a sentarse. SuHo abrió una de las gavetas y le dio un pañuelo.
-¿Lo tenías tú? –Dijo sorprendido, viendo aquel pañuelo que conservaba desde hace tiempo –No sabes cuánto llore y todo lo que le dije a esa pobre enfermera.
-¿Lloraste? –pregunto alzando una ceja.
-Sí, ¡No!... Bueno sí. Pero es que lo había conservado tanto tiempo sentí coraje por eso.
-Lo encontré después de, ya sabes esa ocasión en la que yo…
-Descuida, lo merecía.
-Obviamente No, pero estaba enojado. –dijo sentándose muy junto de él. –Por un momento pensé que tal vez tú, bueno, pensé lo peor.
-Todos los días despertaba deseando que estuvieras allí. Por mucho tiempo nunca paso, y el día que estuviste no me esperaba eso pero dentro de todo eso estaba feliz. Aparte estaba impactado con tu cabello.
SuHo se pasó la mano.
-He pensado en teñirlo, es bastante difícil mantenerlo así.
-Me gusta cómo te vez –volteo hacia otro lado tratando de esconder su sonrojo.
-Pues Gracias, pero sabes Lay creo que ya es tiempo de un cambio, dejar todo esto atrás. –SuHo sabía que estaba tentando su suerte pero igual lo hizo.
-Quiero casarme contigo. –dijo sin mirarlo. De su bolsillo saco su anillo. –Tú ya no lo llevas, yo tuve que quitarlo mientras estuve en el hospital. Quisiera pedirte perdón, pero no tengo derecho, cuando estaba enfermo siempre pensaba en que estarías haciendo, donde, con quien, después me enojaba conmigo porque moría por preguntar por ti. Ocupaba mi mente en escribir, o aprender idiomas con Dara. Después me di por vencido, no había día en el que le pidiera a mi Mamá que me llevara con ella. Hasta que un día deje de sentir y no supe más de mí. Todo regreso a mí, cuando escuche a JongIn y a SeHun me dieron algo de alivio que necesitaba. Las cosas fueron sencillas después.
SuHo rebusco por dentro de su playera y saco una cadena con su anillo.
-No lo usaba en la mano, por miedo a perderlo pero siempre lo he tenido conmigo. Yo también quiero casarme contigo. –dijo él.
-No hay manera de que me perdones.
-Aun no entiendo porque te fuiste de esa manera, pero ya no estoy enojado, al contrario estoy feliz, estas aquí. –tomo su mano.
-Solo deseaba poder regresar. Para estar contigo de nuevo. Pero necesito escucharlo.
SuHo sonrió.
-Te lo dije una vez, lo dire de nuevo. Siempre estaré para ti, tanto si peleas y te desangras por la nariz, hasta si llegas a enfermar de nuevo. Te perdono. No habiendo nada que perdonar, aun así lo hago.
Yixing controlaba el llanto que le amenazaba.
-¿Quieres salir conmigo de nuevo Jun? –SuHo noto como hasta sus orejas estaban rojas.
Yixing sintió un cálido un beso en su mejilla acompañado de una sonrisa.
-Si bebe.
Después decidieron ir a dormir pues tenían que ponerse al corriente con la Universidad, Yixing queria ir a ver a Min y a Siwon, la plática fue interrumpida cuando Xing estallo en risas al ver la foto de JunMyeon en el antro.
-¡Dios! ¿Quién tomo eso?
-El tonto de Chen. –dijo con molestia.
-Pero …¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAAJA!
SuHo se fue para el cuarto.
-¿No fuiste a ver lo de la mudanza verdad?
-¿Quieres que viva contigo? Apenas me acabas de pedir regresar, ¿No vas muy rápido?
-Oh perdón, tienes razón, disculpa. –dijo con ese tono que a SuHo derretía. –Puedes dormir en la cama yo dormiré abajo. No pienses mal.
-Acuéstate.
-¿Qué?
-Te prepare la cama. Anda
-Pero tu…
-No vendrá ninguna mudanza, dormiremos juntos, siempre.
-Bueno, entonces yo me pondré algo para dormir y…
-Yixing.
-Si.
-Conozco todo –dijo con un tono seductor –absolutamente todo, no te preocupes.
Ya entrada la madrugada JunMyeon descansaba dándole la espalda y él estaba mirando al techo.
Ambos aparentaban dormir pero ninguno lo hacía. Yixing era una persona bastante quisquillosa.
-¿Eran bonitas?
-…
-Los chicos, ya sabes, ¿tu o ellos?
-…
-Jun, no estas dormido.
-…
-Había un enfermero bastante atractivo, alto, con músculos, cuando sonreía era lindo.
-¿Enfermero?
-Vez, no dormías.
-Buenas Noches.
-Cuando ya no podía caminar el me pasaba a mi silla y me llevaba a las áreas verdes.
-Descansa.
-Tengo su número.
-Mañana te compro otro celular.
-Algunas veces el me aseaba.
SuHo se volteo abruptamente.
-¿Qué?
-Sandara no podía hacerlo.
-Si eran bonitas, y siempre fui yo quien les dio.
-¿Conozco a alguno de ellos?
-No.
-¿Y…
-Si Yixing les di hasta por donde no, ya fuese hombre o mujer. Estaba desesperado, además con alcohol encima era sencillo. No me enamore de ninguno, no tengo el número de ninguno. Ahora mi amor dormiré un poco. Y le dio un beso en la mejilla dejando a un enojado Yixing.
Solo sintió el agarre de Xing y como devoraba su boca, lo venía deseando hace tanto tiempo. Pero Yixing estaba siendo rudo.
-Hazmelo, antes de que te dé hasta por donde no. –SuHo abrió los ojos completamente.
-Te extrañe bebe –dijo con amor.
-Yo más. Te Amo Jun.
-Te amo más. –y se fundieron en un beso.
Tiempo después.
-¡Tio FanFan! Mi Hermano me jalo el cabello.
-Tio Tao ella está mintiendo.
-¡Hanna, Jin! -Ambos niños se abrazaron a sus tíos. –Mientras sigan peleando, el Tío Tao y el Tío Kristian no van a venir así que se comportan. Sus abuelos van a llegar pronto. Hanna ve con Mamá para que te peine de nuevo.
-Si Papi.
-Y tu Jin, ve a ver al bebe de JinAh, asegúrate de que este dormido.
-Si pa.
-Me sorprende TheHun. –dijo Kris.
-Espero que tú no malcríes al tuyo. Por cierto ¿dónde está?
-Con quien te imaginas.
Minseok y JongDae estaban rodeados por niños y bebes. Todos siempre les preguntaban por qué no decidían inscribir sus datos en el sistema de adopción o porque no contrataban una madre alquiler. La respuesta siempre era la misma.
-Queremos ser los tíos consentidores.
Chen moría de ganas, pero entendía a Minseok, aún tenía muchos miedos e inseguridades, sabía que el día que estuviera listo el mismo se lo diría.
HeeSook ya tenia 10 años, y era una niña hermosa, seguía con la misma sonrisa que su padre y la belleza de su Mamá.
-¿Crees que se enoje?
-Obvio No. Cierra los ojos amor.
-Tío Baekhyun, ¿Puedes dejarlo como el de mi Tia Bom?
-Claro bebe.
Después de unos movimientos termino.
-¡Listo!, ¿Qué dices Chanyeol?
El grandote tenía los ojos hechos agua.
-Esta Hermosa –dijo acariciando su rostro. –Ya no crezcas por favor.
Y comenzó a llorar un poco.
-¡Sandara, el tonto de Yeol está llorando de nuevo! –grito Baek. GiKwang rio un poco y le dio un abrazo al más alto.
-¿Por qué lloras? –pregunto Chen sacando una cerveza del refrigerador.
-Tío Chen –dijo HeeSook con sus mejillas sonrojadas.
-HeeSook, que linda luces. –dijo con dulzura.
La niña solo salió corriendo.
-¡Vete de mi casa JongDae! –dijo Chanyeol llorando más y abrazando mas fuerte a Kiki.
Los otros reian divertidos.
Llamaron a la puerta. Luhan atendió.
-¡Hola! –Dijo muy contento –¿Vinieron solos?
-Si, Yixing y JongIn llegaran juntos, ya sabes las clases.
-Déjame ayudarte con esta preciosura. –cargando al bebe. A hija de Yixing y SuHo era la más pequeño tan solo 4 meses, al igual que los otros tuvieron un bebe por alquiler de vientre, era una linda chica, bastante joven. SuHo se aseguró de que tuviera lo necesario de por vida.
Una vez dentro una voz conocida lo llamo.
-¡SuHo!
-Dasom, cuanto tiempo. –dijo dándole un abrazo, y después saludo a su esposo.
-Lo sé, ¿cómo están?
-Bien, bien acoplándonos.
-Es difícil al principio pero después vale la pena –dijo Taecyeon.
-Mira –dijo Dasom cargando a un pequeñito de 2 años aproximadamente. –Este es mi Yixing.
Suho la miro asombrado.
-El se llama…
-Si, ¿Crees que se moleste?
-Para nada, al contrario.
Toda la familia y amigos estaban reunidos, era un momento muy especial. Estaban por celebrar el cumpleaños de JongIn y siempre que había ocasión se reunían, aunque todos seguían en contacto, no tenía el tiempo suficiente a veces, a excepción de las “chicas” ellos se veían en el Kinder, y en la Guarderia. O cuando necesitaban salir, los tíos Minnie y Chen siempre estaban para recibir a los bebes.
El timbre sonó de nuevo, LuHan corrió.
-Pasen. Dijo con su característica sonrisa.
JongIn llevaba en la mano un bolso floreado y una muñeca. Yixing entraba de la mano con una pequeña que era el vivo retrato de JongIn solo que con la piel blanca y el cabello en un sedoso negro. Era una niña hermosa. Venía con su lindo tutu y comía una paleta que Yixing le había comprado.
-¿Tío Lulu y mi Mamá?
-En la cocina mi amor, ten cuidado cuando entres allá.
-¿Qué tal las clases?
-Lo de siempre, JongIn llora. –y rieron.
-Me encanta el ballet ya saben que lo practique de pequeño y ahora ella. No se es conmovedor.
-¿Tu Xing?
-Todo bien, son buenos chicos –dijo sonriendo.
-Su alumno no le quita los ojos de encima.
-Cállate tonto. –dijo abrazándolo.
-¿Seduces adolescentes? –dijo SeHun uniéndose a la plática.
-¿Porque no fuiste a dar tu clase? Tampoco tu cuñado.
-Estaba ayudando aquí en la casa, además la clase de Lee consta de casi todos los niños presentes aquí.
JongIn, SeHun y Yixing abrieron una Academia de Baile, era bastante popular y tenían bastante gente, SeungRi también les ayudaba.
-Como sea, holgazaneas mucho.
-Mira negro, tengo un trabajo.
-Yo también.
-Y yo y aun así voy.
-Tu que Yixing –y comenzaron a jugar, se daban empujones, uno que otro golpe, comenzaron las carcajadas hasta que fueron a dar al sillón y caer casi encima de Tao y Kris.
-¿JongIn? –dijo KyungSoo.
-No hice nada, ellos me empujaron.
-Nosotros, tú me metiste el pie. –dijo Yixing.
-Chillones –dijo bajito SeHun. Y de nuevo empezó la pelea.
-Los tres tienes hijas, será que les pueden dar un buen ejemplo. –dijo Kris.
-Cállate, si nos sigues molestando tu hijo se pondrá verde. –dijo SeHun, Tao se carcajeo. Y el otro en unos segundos se unió al nudo humano en el que se habían convertido.
Después los otros lo tenían sometido.
-¡Tao! Ayúdame…
-Tao, Tao, Tao –decía JongIn burlon.
-Cállense, les va a patear el culo.
SeHun le pico las costillas.
-LuHan, mira tú Ethtupido Ethpotho –Ni el mismo Kris se aguantó la risa.
-No te rías negro, te vas a poner morado. Te voy a soplar en el cuello Xing.
Y de nuevo los cuatro estaban rodando por el piso.
-¡Kai!
-Hunnie.
-Yixing.
-Ya dejen a GeGe o les pateo el culo en serio. –dijo Tao al último.
Sirvieron la mesa, una extensa mesa. Justo cuando comenzaban a acomodarse escucho
-Yixing ven aca…
Uno grande y uno chico voltearon al mismo tiempo.
-Anda Xing ven –y un despistado comenzaba a caminar en esa dirección.
-No, tu te vienes aca.
-¡Dasom! –dijo con mucha alegría. –No sabia que vendrías.
-Era sorpresa.
-Pues estoy sorprendido –Dasom rio con ese comentario. Un pequeño bebe llego con el hombre alto de antes.
-El es Taecyeon mi esposo. –y se saludaron. –Y Yixing, el es Yixing.
-El… yo, bueno. Es un honor. Gracias.
-No, gracias a ti. Estas mas guapo que antes.
-Tú también.
Todos hablaban y convivían como en los viejos tiempos, solo que ahora se añadían personitas a la mesa. Todos eran felices a su manera, y con su pareja. Yixing una vez más se sentía bendecido por la familia que le toco. Y aun más feliz porque sus abuelos conocieron a su nieta.
-¿Abuelita, no quieres más comida? –preguntaba SuHo.
-Min, necesitas algo?
-No vida. –contesto con una sonrisa.
-¿Tu cuñada?
-No así estoy bien. –Susy era el nombre de la futura esposa de Siwon. Una chica muy bella.
-Quita esa cara Negro, es tu cumpleaños. –dijo Kris cargando a su pequeño. Era un Kris miniatura aunque el carácter era como el de Tao.
-No sabía que vendría.
-Es el cuñado de Chanyeol, el hermano de Sandara. ¿Qué esperabas?
KyungSoo y su pequeña estaban en una animada plática con CheonDung.
Unos minutos después, KyuHyun y Yesung se acercaron con JongIn.
-Es el –dijo KyuHyun. Iban con una chica y un niño.
-JongIn, el es Mir y ella ShinHye, el hijo y la esposa de CheonDung –dijo Yesung.
-Como te decía, él es bailarín, y lo hace espectacular, si vas a vivir aquí podrias ir a su academia. HeeSook también va.
Y los presentaron. La chica hablo.
-Mucho gusto JongIn, venimos contigo porque últimamente mi hijo está un poco triste y necesita consejo, a él le gusta mucho bailar, pero bueno, él quiere entrar a ballet.
JongIn se sorprendió y en seguida le dijo.
-¿En serio? Yo también fui a ballet, a veces aun lo practico con mi hija, es genial que te guste.
-¿Tú crees? Es que dicen que es para niñas.
-Para nada, no hagas caso de eso. Ven te enseñare un video.
KyungSoo noto como el pequeño y JongIn hablaban. Y les sonrió a los otros sintiéndose gratificado y orgulloso.
-ChenChen –decía Minseok, los gemelos cuando eran bebes fue de sus primeras palabras y así con los otros, inclusive HeeSook le llamaba asi.
-¿Qué pasa Minnie? ¿Tienes frio?
-No, para nada.
-¿Te sirvo de comer? –Minseok le pego en el hombro y ambos rieron.
-No tonto.
-¿Que necesitas amor?
-Un bebe.
Chen se quedó mudo. Le pregunto con la mirada, el otro asintió.
-Gracias, Gracias. –una vocecita los distrajo.
-ChenChen –decía el clon de Kris mientras tallaba sus ojitos.
-¿Quieres dormir? –el niño asentía.
-¿Dónde está el poste humano de tu padre?
Llegaba otro.
-ChenChen…
-ChenChen ya está ocupado, pero ven yo te abrazo. Vamos con tu Mamá –dijo cargando al hijo de Baek.
-Minnie –lo llamo.
-¿Qué pasa?
-No puedo esperar por el nuestro. Gracias en verdad, Te Amo.
-También Te Amo.
Habían dado unos cuantos pasos y le llamo de nuevo.
-Minnie.
-¿Si?
-Que tenga tus ojos.
Minseok se sonrojo y lloro un poco.
-Como tú digas. –Y JongDae le mando un beso.
Como es normal, el tiempo transcurrió, dos años después conocieron a una bolita con ojos preciosos. JongDae era el más feliz del mundo.
SeHun y LuHan vivian felizmente, sus gemelos ya eran jovenes y si bien ninguno era padre biológico de alguno los amaban. Ambos decidieron teñirse de rubios para parecerse lo más posible a LuHan y a SeHun, la verdad es que eran guapos y estaban agradecidos de tener eso padres. No les faltaba nada, y nunca les haría falta. Eran muy dedicados y bien portados gracias a SeHun, LuHan seguro los malcriaba y eso hacia siempre los consentía.
-Nos vamos. –decía Jin.
-Cuidas a tu hermana.
-Si pa.
-Adiós papi, Adiós mami, Adiós precioso.
Si años después, tuvieron uno propio, y era idéntico a LuHan, SeHun estaba encantado.
-¡Yoseob! Ya llego Tao y Kris, anda a la escuela. –gritaba Baekhyun.
-Gracias Mama, nos vemos más tarde.
-Estaré con Dara.
-Ok. Te quiero Mamá
Ya era todo un joven, a él no le gustaba el delineador, pero a veces se lo ponía para dar gusto a Baek.
En la camioneta estaba, Ace un chico alto y más guapo que Kris.
-Buenos Dias Geges
-Hola. ¿Nervioso? –Pregunto Kris
-Un poco.
-Papá dice que la Universidad no es tan mala. –dijo Ace.
-Pensé que no irías.
-Me condicionaron, pero igual creo el mundo debe conocer mi arte.
Tao rio y rodo los ojos.
-Pienso que te ira mejor como modelo –dijo Yoseob.
-Yeollie, deja de llorar.
-Pero KrungKrung no quiero. –decía llorando más fuerte.
-Es la ley de la vida, agradece que lo hacen como es y no solo se fugan como nosotros.
-No quiero que se case.
-No la puedes tener siempre aquí.
Y lloro más.
-Anda, se fuerte Yeollie, estoy contigo.
Soltó un suspiro y con esa voz sexy dijo.
-Vamos abajo amor. –Sandara hasta se ruborizo.
Iban a media escalera cuando Chanyeol se regresó corriendo a llorar al cuarto.
Baekhyun, Sandara y HeeSook fueron de nuevo.
-¿Por qué no te casas con el Hijo de Baek?
-Porque le llevo 7 u 8 años
-¿Y? tu Mamá me lleva 9.
-Mi hijo tiene novia Yeol. –dijo Bakehyun.
-Quiero estar solo. –suspiraron y se levantaron. Antes de salir. HeeSook le dijo.
-No importa que me case Papa Yeol. Eres mi hombre favorito. Siempre estaré aquí, y siempre que pueda y quieras iremos al acuario, ya se me todos los nombres de los peces, vendremos a casa, y haremos pan francés y tomaremos café. Si estas más tranquilo, pensamos vivir aquí a dos calles. Tampoco quiero estar sin ti. Y si lloras voy a llorar también, nunca nadie me va a dar un amor sincero como el tuyo. Te amo Papá ChanYeol. Eres el mejor. No cualquiera hace lo que tú por mí. Y como te quiero y respeto tanto, quiero tu bendición. Baja cuando tú quieras.
Salió de la habitación. ChanYeol acababa de recibir una de las palabras más bonitas de toda su vida. Igual lloro más pero su corazón estaba tranquilo.
Su celular vibro.
Era una foto de él y HeeSook celebrando el día del padre en el kínder. El mensaje decía.
“Deja de llorar tonto, Sandara, tú y yo iremos con ella a comprar el vestido”
Una camioneta y muchos reporteros estaban a las afueras de la casa de Minseok y JongDae.
SoHee su hija, con apenas 17 años era una modelo estrella, había sido dotada con una belleza y un carácter único. JongDae estaba loco, no cabía en ningún lado, era feliz estaba completo con su familia. Pero tenía el mal de ChanYeol.
-¿Cómo están esos rumores de que eres novia de Ace? ¿Te gusta el hijo del poste humano?
SoHee reía divertida.
-JongDae déjala, además Ace es buen chico y comenzara la Universidad.
-Si me gusta, pero no somos novios. El Tío Tao me da miedo.
JongDae se quedó helado.
-Ande Chen, la niña tiene sesión. Vamos.
-JongKey, deberías hacer tu tarea.
-No gracias.
-¿El tío MinHo regreso de su viaje?
-No Papá llega la próxima semana. Me urge, mamá cocina horrible, por eso vengo con la tuya.
-¿Cuándo es tu recital de ballet?
-La próxima semana.
-Lo harás bien –dijo la Hija de Key.
-Tenlo por seguro. –dijo el hijo de Taemin.
-Mientras tengo que terminar los parciales. –dijo sobándose las cienes.
KyungSoo llego con bocadillos.
-Iré a la oficina, tengo trabajo pendiente, regreso con Papá. JongKey has la tarea. Te las encargo. Taeyeong.
JongIn y KyungSoo tenían una carrera exitosa, guardaban la distancia en el empleo pues recientemente sus empresas se aliaron y se veían seguido en el trabajo. Era seguro que casi nadie supiera que eran esposos y que tenían una hija.
Kyungsoo era particularmente popular con las chicas, aparte pensaban que era padre soltero pues Lea, su hija lo visitaba algunas veces en el trabajo. Y el usaba su argolla de matrimonio. JongIn no lo hacía porque era acosado aún más.
KyungSoo llego a su trabajo puntual como siempre, saludo al oficial, a la recepcionista y a quien se encontrara, mientras esperaba el ascensor alcanzo a escuchar como algunas chicas hablaban de JongIn, diciendo hasta lo que no.
Cuando el ascensor se abrió JongIn venia saliendo, tan guapo con un traje moderno, su camisa abierta mostrando sus clavículas y esa sonrisa.
-Buenos Días JongIn dijo una de ellas. –él le sonrió haciéndola poner de todos colores. Por su parte el saludo.
-Buenos Días, señor Do. –mientras lo miraba entrar al ascensor. KyungSoo casi se derretía.
-Buenos Días Kim.
-Dejemos las formalidades, llámame JongIn. –dijo mientras se cerraba la puerta. Las chicas veían con mala cara a KyungSoo. Y el iba un poco acalorado.
Después de una pesada junta, y de despedirse después de un largo dia de trabajo JongIn caminaba casi con los ojos cerrados para irse a casa, solo hasta que sintió como alguien lo encerraba en una oficina.
-¿Ya se va Kim? ¿No gusta hacerme compañía? –decía KyungSoo sentado en su escritorio.
JongIn se mordió los labios y puso seguro a la puerta. Y se fue sobre su esposo.
-Fen avisa a Papá que ya está el desayuno. No quiero que lleguen tarde.
La joven subió corriendo, era preciosa, tenía una piel muy tersa y blanca como su padre, es mas era igual de bella que su Padre. Inclusive Yixing le había puesto ese nombre, Fen significa Fragancia.
El claxon sonó, era Minseok que pasaba por Fen, SoHee, Lea y JongKey estudiaban en la misma escuela. Como siempre Yixing salió con ella y le arreglo el uniforme mil veces, le dio su almuerzo y la despidió con un beso y un gran abrazo.
-Te la encargo Minnie.
-Descuida, voy yo, nadie se les acerca –y JongDae se asomó dejándose ver. –Por cierto Xing, ¿Darás clase a los de nuevo ingreso?
-Si, bueno en el área de Filiosofia, Artes y Letras.
-Perfecto, reprueba a Ace. –dijo con seriedad. Minseok y las chicas rieron.
-Tío XingXing no le hagas caso a Papá –dijo SoHee.
-Pero Kris me dijo que le pusiera 10 –dijo con su expresión perdida.
-No les hagas caso, ni a FanFan ni a ChenChen –Fen se acercó al oído de Yixing –A SoHee le gusta Ace.
Yixing quedo sorprendido. Y su hija le hacía seña de no decir nada.
-Buenos Días. –Salio JunMyeon con su taza de café. –Hola señoritas. Toma amor.
y le dio una tarjeta a Fen.
-Papá no es necesario.
-No importa ya sabes, para emergencias. Te la encargo Chen.
El otro hizo el saludo militar.
-Suerte en tus clases Xing –decía Minseok arrancando la camioneta –No seduzcas alumnos.
Y se fue de allí riendo con todos.
Cuando Yixing estuvo listo, lo miro de pies a cabeza.
-¿Iras así?
-No me gustan los trajes. Además esta formal. –SuHo suspiro.
-Nada de ver a tus alumnos.
-¡SuHo!
-Por cierto, ¿Ya está la comida?
-Ya.
-¿Mi camisa azul para mañana?
-También, inclusive planche dos trajes más por si eliges otro.
-¿En la noche podrías sobarme aquí? –Señalo su espalda –me duele un poco.
-Por supuesto, pasare por un ungüento en el camino. –dijo sonriéndole. Caminaron a la salida cuando SuHo lo detuvo.
-¿Te das cuenta?
-…
-Estas aquí, cuidándome, con la comida lista, la ropa a tiempo, y bueno –se acercó y lo abrazo por la cintura –me complaces.
Yixing se sonrojo.
-Vámonos ya. –dijo con pena.
-¿Aun crees que exista alguien mejor que tú? –Yixing no dijo nada pero entendía el punto. –Gracias por llegar a mi vida. Gracias por todo.
Yixing se abrazó fuertemente a él.
-Gracias a ti, Gracias por tu amor.
En la vida conocemos personas que se vuelven indispensables aquellas que nos ponen el mundo de cabeza. Pueden acabarse mil cosas, pero nunca los Sentimientos.
El amor, dichosos quienes lo encuentran y lo alimentan.
En este espacio y este mundo, estas personas viven felices, porque antes que otra cosa aceptaron a su compañero con lo que es y como es, de nuevo, los Sentimientos son lo mejor cuando son sinceros. El camino no es fácil. Pero si estas con quien amas, encontraras la respuesta.
Se fiel a tus sentimientos.
FIN.