Pasó el resto de la noche tranquila, ambos dormían plácidamente, afuera recién amanecía y la tranquilidad invadía la habitación, hasta que Kellin despertó entre gritos y un ligero llanto rompiendo el silencio de la mañana, el moreno despertó del susto por el repentino grito.
-¿Por qué estamos en mi casa?-preguntó el menor asustado- me duele todo el cuerpo…- dijo tallándose los ojos, secándose un par de lágrimas que se deslizaban por sus mejillas.
-Es que anoche…desapareciste durante mucho tiempo y cuando te encontraron, estabas desmayado en el suelo del baño a medio vestir…- resumió Vic- y le pedí a Gabe que nos trajera aquí.
-¿Entonces todo eso no fue un sueño?-susurró muy bajito Kellin cubriendo su rostro con ambas manos, soltando de repente un lastimero llanto.
*Recuerdo de Kellin*
-P-por favor…yaa no… sigas…- suplicaba entre gemidos el pobre chico de ojos verdes que nada podía hacer, Oliver cada vez lo embestía con más fuerza, mientras dejaba pequeños chupones por toda la piel a su alcance- ¿Por qué...haces esto?
-Por qué no tenía otra opción, yo te amo…y cuando se hizo público lo tuyo con Fuentes, supe que jamás tendría posibilidades de estar contigo- confesó con tristeza deteniéndose un momento.
-Eres un maldito loco…-soltó el menor entre jadeos.
-Lo soy pero lo importante es que te tengo en este momento ¿No?- comenzó nuevamente a embestirlo, a lo que Kellin gemía con todas sus fuerzas por efecto del afrodisiaco.
-No gimotees tan fuerte pequeño, tu novio podría escucharte y eso sería un problema- dijo divertido dando la última embestida antes de terminar en su interior.
-Vic… debo ir a buscarlo-intentó levantarse pero el más alto lo detuvo, sujetó sus brazos y cubrió su boca para que no pudiese protestar.
-Tú no vas a ninguna parte-susurró en su oído, tumbándolo nuevamente en el suelo y de su abrigo sacó una botella de cloroformo y un pañuelo donde vertió un poco del líquido- supongo que esto te mantendrá tranquilo por un rato-con el pañuelo cubrió su nariz, manteniéndolo por un rato hasta que quedo inconsciente.
-Lo siento, Kellin- se levantó y rápidamente salió del baño.
*Fin del recuerdo*
-Kell intenta calmarte- el menor no paraba de sollozar- necesito que me expliques un poco que fue lo que sucedió.
-E-es que…O-oliver…- logró apenas decir, lo que fue suficiente para que el moreno confirmara sus sospechas
- ¡Ese maldito! Por esto Ben…- susurró lo último a lo que el menor logro escuchar, deteniendo su llanto por un momento.
-¿Ben? ¡El ayudo a Sykes! Yo pensé que era bueno…- dijo volviendo a llorar.
Vic se quedó en absoluto silencio ¿El despeinado chico era cómplice?, ambos las pagarían tarde o temprano, por ahora solo se dedicó a consolar a su novio y tratar de calmarlo, algo difícil después de lo vivido. Le abrazó con ternura y acariciaba su pelo suavemente, jugueteando con algunos de sus ondulados mechones, esto poco a poco fue tranquilizando al menor, quien ya normalizaba su respiración y observaba fijamente al contrario, aun con un par de lágrimas a punto de caer.
-No me odias ¿verdad? lo que sucedió ayer fue… -habló nervioso Kellin pensando en las palabras correctas para contarle a su novio lo sucedido.
-Nada de eso, además ya tengo una pequeña idea de lo que sucedió-dijo levantando su polera dejando ver algunas de las marcas que Oliver había dejado- Esas marcas lo dejan más que claro- el menor veía las marcas fijamente, eran grandes y muy moradas.
-Son horribles- dijo bajándose la polera con enojo, para luego enterrar su rostro en la almohada-¡¿Por qué sucedió esto?!- gritó sin levantar el rostro.
CONTINUARA...