CAPITULO 2 LA SOLUCION
Loki. Ese sujeto extraño de cabello negro largo hasta los hombros y bien peinado, que siempre vestía de negro con toques de verde. Nunca le había prestado verdadera atención, solo sabía que era un raro y que sacaba las mejores calificaciones de toda la escuela, no por nada había adelantado un curso, para su suerte compartían todas las clases. No es que le importara pero cuando uno se apellida Laufeyson, es casi imposible de no prestar atención.
El pelinegro era extremadamente serio, Thor estaba seguro nunca haberlo visto reír o algo parecido. Hasta algo soberbio le parecía. No es que le interesase, pero ya que lo necesitaba pues debía saber cómo abordarlo. Así que lo vigilo durante dos días, desde una distancia segura, antes de poder acercarse, lo que descubrió fue que el joven o pasaba la mayor parte del tiempo solo o se encontraba con dos chicos más, Tony Stark, una tipo que se decía a si mismo estrella porno, casi como Fandral pero con cerebro y Steve Rogers, el rubio simplón, esos dos también se podían considerar genios pero de uno o dos años más grandes que Loki. Pero por alguna razón preferían mantenerse en el mismo grado que ellos. Por otra parte, Loki, era menor que Thor por un año o eso había descubierto. También se dio cuenta de que el pelinegro era un joven de rutinas, por lo menos en la escuela, así que no sería tan difícil abordarlo ese día.
Al final del día vio a quien buscaba sentado junto a una mesa despidiéndose de Tony Stark y Steve Rogers, así que se dispuso a acercarse rápidamente, casi no había nadie, así que pudo hacerlo fácilmente.
Thor llego antes de que el joven se parara para retirarse, se sentó y su repentina llegada había hecho que Loki levantara su mirada y así pudo ver unos grandes ojos verdes. Un verde esmeralda, pensó Thor, que lo dejo perdido por un momento. Y solo pudo sonreír, sin dejar de ver esos ojos.
- Hola.- dijo al momento que veía las claras intenciones de Loki por retirarse. Ya que él no había dicho nada hasta que vio como el otro planeaba alejarse pero no obtuvo respuesta.- ¿podemos hablar?
- Por qué quisiera hacer eso – decía más como afirmación que como pregunta. Sin verlo realmente, ya que tomaba sus cosas.
- Porque necesito tu ayuda.
- Mi ayuda. Si vienes a pedir mi ayuda, debes estar muy desesperado para hacer eso. – decía mientras le miraba superior y daba una sonrisa burlona casi imperceptible.
- Bueno, lo estoy.- admitió Thor y eso atrajo la atención de Loki. Posando de nuevo sus ojos en los de Thor, pero este desvió un poco la mirada para no verlo.
- Habla.- dijo mientras tomaba asiento de nueva cuenta.
- Pues no sé si sepas, pero no estuve dos semanas. El punto es que me perdí más de lo que pensaba que me perdería, ahora no entiendo absolutamente nada y si sigo así pues no pasare los exámenes. Que si no mal me equivoco pronto serán.
- Yo que gano de todo esto. – preguntaba serio el joven, de ojos verdes. Sin entender en que le podría interesar la vida de aquel rubio.
- Te pagare por hora.
- Cinco dólares la hora. – dijo serio.
- ¿Cinco dólares?- pregunto sorprendido por lo económico del asunto.
- Tienes razón. Que sean siente.
- ¿Siente?, oye espera.- pero antes de que pudiera repelar algo el pelinegro hablo de nuevo.
- Diez.
- Que esperes te estás pasando. – trataba de dar razones Thor.
- Si no te callas no podrás pagarme. Así que serán diez dólares la hora. Por enseñarte. Empezaremos a partir de mañana después de clases. En tu casa. Me esperaras en la entrada a las cinco. Ya que yo tengo más clases que tú.
Y antes de que Thor pudiera decir más, el joven se levantó tomo sus cosas y se fue.
Al día siguiente Thor esperaba a Loki en la entrada, eran las cuatro con cuarenta, a esa hora la mayoría se habían retirado. Ya que su horario de salida normal era a las tres. Y algunos otros como Loki, salían a las cinco. Así que no le quedo más que esperar con su celular, el único que sus padres no habían quitado, y jugar mientras esperaba. Él había avisado a sus amigos para que no contaran con el mientras sus padres lo tuvieran castigado, no es que le diera pena decir sobre sus clases pero prefería eso a decirles que tendría clases particulares porque sus apuntes en verdad no servían más que para alimentar a los puercos, así que prefería echarle la culpa a sus padres que lo habían castigado hasta nuevo aviso. Así no tendría que mentir, más de la cuenta, además ellos se iban a las tres y este mentía diciendo que debería ir caminando, que era verdad ya que le habían quitado el carro. Y rechazo abiertamente la oferta de que alguno de ellos lo llevara.
Era una suerte que le dejaran el celular, claro suerte y no tenía que ver que su madre le hubiera inculcado que nunca se separara de el por ningún motivo, ya que las demás de sus cosas fueron puestas bajo custodia paternal.
De pronto se puso a pensar en cómo se llevaría con el ojiverde, a pesar de ser mayor que él y el mismo buscar su ayuda, no veía como podían llevarse bien. Aunque nunca se hubieran dirigido la palabra., e daba cuenta que ambos eran completamente diferentes, Thor era sociable, amigable y divertido, y Loki, bueno era antipático y nunca veía que se le acercaran más personas que esos dos supuestos amigos. Eso pensaba, así que creyó conveniente que mientras siguiesen con el hecho de que solo debía tomar lo que el necesitara estaría bien, pero esa no era su personalidad solo tomar lo que le convenía, él quería intentar ser amigo del pelinegro por que en verdad le gustaba hacer amigos, además que el pelinegro se veía envuelto como en un misterio ante él.
Ahora que lo pensaba, no sabía mucho del pelinegro, Asgar no era una ciudad chica pero la mayoría de las personas se conocían entre sí. Bastaba con decir que conocías a alguien y de pronto todos sabían quién era y que hacía, pero no pasaba lo mismo con Loki o su familia, él era diferente como si estuviera a distancia de todos en la ciudad.
El rubio se perdió tanto en sus pensamientos que no se percató que el tiempo había pasado rápidamente.
Escucho un poco de bulla y giro a ver de dónde venía, vio a varios estudiantes y al trio caminar a su dirección. Vio a Tony y a Steve seguidos por Loki. Y vio algo que lo dejo un momento en shock. Una sonrisa, una enorme y blanca sonrisa por parte de Loki, ese sujeto que era callado y serio. En ocasiones grosero con su actitud de soberbia, sabia sonreír y vaya que le quedaba bien pensó Thor.