Ritsu: - Takano-san, enserio creo que está delirando…-
Dijo tratando de separase de mí, lo deje…
Takano: - ¿Enserio no me recuerdas?.-
Ritsu: - ¿Haya algo que debe recordar de verdad?, porque no me lo parece, ahora deje de estar jugando y comencemos con los borradores que nunca acabaremos…-
Dijo ignorándome y agarrando los borradores que se encontraban en la mesa.
Cuando Ritsu me conoció no era tan pequeño pero desde eso han pasado 11 años las memorias de lo humanas son tan cortas, que tal vez ese sea el motivo por el cual ni me recuerde… pero aun así me siento un poco dolido.
Tendré que comenzar de cero para poder ganar la confianza de Ritsu de nuevo, no dejaría que me aparataran de él otra vez. Lo juro.
[En otra parte]
….:::::: Usagi :::::….
Me encontraba desempacando todo en mi departamento, al fin me habían dejado volver al mundo humano, después de 11 años, mientras tanto me había quedado en el cielo ayudando a Urahara con algunas cosas.
Termine de poner todo en orden y tome mi forma de ángel, y volé hasta la casa de Misaki.
Entre y todo estaba tal y como lo recordaba el apartamento seguía siendo el mismo simple pero hermoso. Fui hacia la cocina y allí estaba sentado Takahiro y … Misaki.
Ahora estaba más alto, creo que me podía llegar a mis hombros, su pelo era más largo y un poco rebelde, aún seguía siendo flaco y su rasgo más distintivo sus hermosos y grandes ojos verdes no habían cambiado. Pero algo opacaba esa belleza.
Misaki: - ¿Hermano enserio nos tenemos que mudar a Osaka?-
Takahiro: - Ya te lo había dicho verdad, me casare con Manami la semana siguiente y me subieron de rango en el trabajo, pero para ello tengo que trabajar en las oficinas de Osaka. Así que por eso decidimos mudarnos y tú te vienes con nosotros.-
Misaki: - Pero siento que solo seré un carga para ustedes, ¡Además van a estar recién casados!, no puedo hacerles eso, tal vez… me pueda quedar aquí…-
Takahiro: - ¡De eso nada! ¡Cómo voy a dejar a mi único hermano solo!.-
Misaki: - No me quedaría solo, Nao viviría aquí y me ayudaría con los gastos y todo eso…-
Takahiro: - Ni lo pienses, Nao es de tu misma edad, no voy a dejarte sin supervisión de un adulto. Te recomiendo que te prepares porque después de la boda nos mudaremos.-
Takahiro se levantó y dejo solo a Misaki en la cocina. Él solo veía a su hermano subir por las escaleras…
Misaki: - Pero no quiero ser una carga para nadie…-
Dijo bajando su cabeza deprimido, no entendía nada, de que trataba todo eso, ¿Cómo que Misaki se mudaba de ciudad? ¿Cómo que Takahiro se casaba? ¿Y quién demonios era Nao?.
De pronto el timbre de la puerta sonó y Misaki fue a abrir.
Misaki: - ¡Nao!-
Me acerque para conocer o bueno ver al tal Nao y era un muchacho de la misma edad de Misaki, complexión delgada, piel muy clara, pelo negro azabache y ojos morados. De él emana un poder espiritual muy fuerte…
De repente sentí que noto mi presencia y no dejaba de mirarme sorprendido…
Misaki: -¿Hay algo en la pared? -
Nao: - No es nada, me pareció ver un insecto pero me equivoque… y ¿Bien que dijo Takahiro?.-
Dijo mientras pasaban a la sala y se sentaba en sillón, él a lado de Misaki.
Misaki: - Que no me dejar quedarme al menos que se con un adulto… bueno, eso me dio a entender. Pero si voy estoy seguro que solo sería una carga para él y Manami.-
Nao: - No creo que Takahiro te vea como una carga, eres su único hermano, no, creo que sería más conveniente decir que eres la única familia que le queda, y es normal que se sienta preocupado.-
Misaki: - Pero…-
Nao: - Ya, ningún pero tienes que entender sus razones, de todos modos si te vas yo te seguiré.-
Misaki: - ¿Hablas enserio?-
Nao: - ¡Por supuesto! ¿Cómo podría dejar solo a mi mejor amigo?-
Dijo sonriéndole, ¿Qué pasa con esta atmosfera?.
Misaki: - ¡Gracias! –
Contesto feliz y abrazándolo ¿¡quién demonios es ese Nao?!
Pasaron las horas, ellos dos seguían muy juntos al parecer Misaki confiaba plenamente en él al igual que Takahiro, lo cual hacia mi sangre hervir de la rabia, ¡cómo es que él puede estar tan cerca y yo no!.
Ya había oscurecido y es tal Nao decidió que debería irse… ¡Al fin!, salió del departamento y lo seguí si él va estar al lado de Misaki, debo asegurarme de que no sea un maldito…
Lo seguí a todas partes, primero fue al súper mercado y luego fue directamente a su departamento uno lujoso debo decir.
Nao: - Rafael-sama ya se puede materializar…-
Usagi: - ¿Me puedes ver?-
Nao: - Si… creo que no me recuerda, soy el ángel que puso Urahara-sama a cargo de Misaki, Mi nombre es Naoki.-
Usagi: - Ah…-
Nao: - Si, se le olvido…-
Usagi: - No, ya me acorde…-
Nao: - Permanecí junto a Misaki estos años, crecí junto a él así que confía en mi.-
Usagi. – Ya veo… pero creo que tus servicios ya no serán necesarios, ya que al fin volví. Misaki necesitara a un igual, alguien que le pueda ayudar a controlar sus poderes.-
Nao: - No me iré hasta que Urahara-sama lo diga, él necesitara a alguien que lo ayude con su carga emocional cuando se entere de la verdad y en la persona que más confía en estos momentos es en mí. Su pasado con usted es historia mientras no lo recuerde…-
Usagi: - Veo que te has vuelto engreído.-
Nao: - Misaki es importante para mí y no lo dejare solo…-
Usagi: - ¿A qué te refieres con importante?.-
Dije desafiándolo con la mirada, no permitiré que me arrebaten a Misaki otra vez y menos él.
Naoki me devolvió la mira sin ningún miedo, él hablaba enserio y yo también…
Mi celular sonó. Conteste de mala gana.
Takano: - El jefe te habla, que vengas de inmediato…-
Y colgó, maldije dentro de mí.
Usagi: - Terminaremos con esto después.-
Dije para salir de allí y dirigirme hacia donde estaba el idiota de Urahara…
[En el cielo]
Había llegado y ahí se encontraba el en su “trono”.
Urahara: - Hola~ hace tiempo que no te veo.-
Puso su cara de idiota como siempre.
Usagi: - Al punto.-
Urahara:- Tan frio como siempre, bueno el punto es que Nao me acaba de informar que el hermano de Misaki piensa mudarse, cosa que no podemos permitir, Tokio es la ciudad más segura que tenemos por ahora allí hay más concentración de ángeles que en cualquier parte del mundo, por eso he decidido manipular un poco los recuerdos de Takahiro…-
Usagi: - ¿A qué te refieres con eso?-
Urahara: -Pues vamos a poner recuerdos falsos a donde tu estudiaste con Takahiro pero en tu último año de universidad te fuiste al extranjero y de repente volviste. Falta una semana para que Misaki se vaya así tienes que hacer que Takahiro se sienta cómodo contigo y así convencerlo de que Misaki estará bien en Tokio.-
Usagi : - Pero lo que quiere Takahiro es que Misaki no se quede solo…-
Urahara: - Y es ahí donde entras, le ofrecerás que Misaki se quede contigo y asunto arreglado.-
Usagi: - Me parece bien…-
Es una buena idea y más por la parte a donde Misaki vivirá conmigo y así no tendrá que acercarse a Naoki.
Usagi: - Ahora que lo recuerdo ya que estoy yo, no es necesario es ángel ¿no es así?-
Urahara: - ¿Te refieres a Nao?, mmm… bueno técnicamente no es necesario para nosotros…-
Usagi: - ¡Exacto!...-
Urahara: - Pero es necesario para Misaki, Nao es el mejor amigo de Misaki así que no puede desaparecer de un día para otro y menos cuando se acerca su despertar, prefiero que se quede junto a él.-
Usagi: - Pero…-
Urahara: - Además recuerda que se supone que Misaki no te conoce, será un poco incómodo para él estar contigo… así que diremos que… mmm… ¡Nao es tu sobrino!-
Usagi: - ¡ESTAS LOCO! Solo un idiota se crearía eso no tenemos el menor parecido.-
Urahara: - Si lo tienen, aunque que Nao se vista de negro y tenga el pelo negro igual hay algo que los distingue a los dos… sus ojos morados así que si tienen algo en común ¡Ah! Y otra cosa que tienen en común es su horrenda personalidad…-
Usagi: - ¡Oye!, un momento, pero si le vi comportándose todo meloso y comprensivo con Misaki esta mañana.-
Urahara: - Solo es así con las personas que él respeta o quiere…-
Se fue callando conforme vio mi aura asesina…
Urahara: - Bueno eso es todo lo que te quería decir así que… ¡nos vemos!.-
Y el huyo, por lo que volví a mi departamento.
Cuando llegue al mundo humano eran las 12 de la noche, quería ver a Misaki por una última vez este día, por lo que fui a su casa. Como me imagina él ya se encontraba dormido.
Dormía con una camisa sin mangas y un short y en un posición que no creí que fuera posible… me reí internamente, lo acomode bien y lo tape con la manta. Se veía tan tranquilo cuando dormía… le di un beso en su frente y murmure un “buenas noches”.
Se removió un poco pero después sonrió.
Mañana sería un nuevo comienzo.