Capítulo 12
“¿Cómo le diré?”
—La gonadotropina coriónica humana (hCG) es una hormona glicoproteica producida en el embarazo, fabricada por el embrión en desarrollo poco después de la concepción y más tarde por el sinciciotrofoblasto (parte de la placenta). Su función es evitar la desintegración del cuerpo lúteo del ovario y, por ende, mantener la producción de progesterona que es fundamental para el embarazo en los seres humanos. La hCG puede tener funciones adicionales; por ejemplo, se cree que afecta a la tolerancia inmunológica del embarazo. Las primeras pruebas de embarazo, en general, se basan en la detección o medición de hCG. Debido a que la hCG es producida también por algunos tipos de tumores, es un importante marcador tumoral, pero no se sabe si esta producción es una causa o un efecto de la tumorigénesis. Al igual que otras gonadotropinas, la hCG se puede extraer de la orina de mujeres embarazadas o por modificación genética. Los niveles de hCG pueden medirse en la sangre o la orina. Con mayor frecuencia, se hace como una prueba de embarazo, destinada a indicar la presencia o ausencia de un embrión implantado. También pueden hacerse pruebas de HCG para el diagnóstico o seguimiento de células germinales y tumores trofoblásticos. —Leyó Kelle, minutos antes de ir al médico. Nicolás le había pedido una explicación de lo que decía y ahora que la tenía, se sentía muy angustiado.
Nico se sentía confundido, demasiado como para tomárselo a la ligera. Incapaz de esperar más tiempo y también demasiado asustado como para preocupar y sacar del trabajo a Oliver, decidió ir con Tomás y Kelle. Para su suerte, Kelle los llevó con su médico favorito y de confianza. Fueron al consultorio privado y cuando apenas llegaron, Kelle pidió una entrevista primero para que no fuera a hacer chequeos dañinos por si en verdad Nico estaba embarazado. Su amigo médico logró entender el punto de Kelle y aunque sabía que decía cosas absurdas, decidió llevar las cosas con calma primero.
—No te haremos los exámenes inmediatamente, Kelle primero ha pedido una entrevista y creo que es lo mejor. Me comentan que te hiciste pruebas de embarazo, y que las diez pruebas salieron positivas —expuso el médico, tratando de reiterar lo antes dicho por Kelle—. Las pruebas de embarazo ayudan a detectar la hormona gonadotropina coriónica humana, que también significa crecimiento de un tumor, en los hombres se trataría de un tumor testicular —añadió, mirando tranquilamente a Nicolás—. Sin embargo también me han dicho que has tenido síntomas que podrían significar embarazo y que además tuviste sangrado en el pene, que podría significar menstruación. —Ladeó la cabeza—. Eso es imposible. Es un tanto absurdo, sin embargo en este mundo hay bastantes casos sorprendentes. Este tipo de casos nos sorprenden, Nicolás, pero espero que no te asustes si es extraño tu padecimiento en estos momentos. Lo que menos deseamos es que estés estresado. Así que necesitamos que te tranquilices y debido a que eres menor de edad, te daremos información antes de comenzar a tratar tu caso.
—Sólo quiero que ni mi padre ni mi esposo se enteren —rogó, encogiéndose más de hombros. El médico asintió. Sabía que Nicolás estaba casado con un hombre ya que Kelle le dio toda esa información, sin embargo, necesitaba que Nicolás contestara a todas sus preguntas primero, lo que ayudaría a que el médico se diera una idea y buscara los estudios precisos para hacerle.
Sin esperar más, Frank, el médico, comenzó con explayar la información.
—Di sí o no, o contesta con información basándote en tu persona. Son puntos importantes y que anotaré y palomearé. Tocaré temas que son importantes y necesito que me respondas con sinceridad. —Nico meneó la cabeza verticalmente—. Tienes 16 años y tienes una vida sexual muy activa —dijo, comenzando con las afirmaciones.
—Sí.
—¿Has tenido chequeos antes? ¿No detectaron alguna anomalía con tu sexualidad?
—Sí, he tenido algunos, creo que dos, pero no me detectaron nada.
—¿Tu pene tiene alguna otra abertura aparte de la uretra? O ¿te salió sangre de la uretra?
—No me lo he querido ver desde que me sangró. No lo he checado bien. Sólo sé que salió por algún lugar del glande.
—¿Color extraño? ¿Al tocar tus testículos se sienten grumos o alguna masa que te duela o se sienta extraña cuando tocas?
—No, el color es el de siempre. Y no, durante el sexo me he tocado los testículos y no siento ninguna masa extraña.
—¿Cuántos días duraste con el sangrado?
—Siete días.
—¿Has vuelto a sangrar después de eso?
—Hace algunos días atrás, cuando comencé a activar mi vida sexual. Mi esposo y yo estábamos separados, y durante ese tiempo tuve sangrado, pero comenzamos a vernos y después de algún tiempo nos decidimos a estar juntos de nuevo. Pero el fluido que salió de mi pene era extraño, era una especie de hilillos de sangre y no me duró mucho, de hecho un día o dos, fue rápido y fueron unas gotas mínimas.
—¿Recuerdas el día de tu primer sangrado?
—Sí, recuerdo que fue un 14 de octubre. Pero no recuerdo el día específico del segundo.
—¿Actualmente logras tener erecciones y eyacular correctamente? Al decir correctamente me refiero a si no te duele al llegar al orgasmo o te has desmayado, o sentido una punzada.
—Sí, de hecho me siento muy sano. Ayer eyaculé bien. —Ya sin vergüenza, confirmó, moviendo las manos para continuar—. He tenido sexo sin dolor y cuando eyaculo el semen no sale con un olor extraño ni tampoco con una textura rara ni con sangre. Sale igual que siempre. Aunque debo decir que durante tiempo atrás consumí drogas y alcohol. Se podría decir que llevo apenas 3 o 4 meses que lo he dejado.
—Ya veo. Es peligroso que un hombre expulse sangre por el pene, pero si has mantenido incluso una vida sexual activa y no has sufrido de decaídas graves en este tiempo, entonces facilita más las cosas. Ahora bien, ¿cómo te sientes hormonalmente? ¿Cómo vez tu cuerpo?
—Desde siempre he sido muy irritante. Cambio de humor rápidamente, pero ahora que volví con mi esposo siento que me asfixio y que duermo mucho. Mi cuerpo es muy ligero y me han logrado confundir con una mujer, pero yo me siento como un hombre, aunque me inclino por actividades femeninas.
—¿Entonces cuando sangraste por primera vez no sufriste de cólicos, enojos o un lapso de enfermedad común, como la fiebre?
—Bueno sí. Me dolía mucho el estómago, y sí, mis emociones estaban a flor de piel. Me la pasaba tirado en la cama, comiendo y viendo películas después de practicar yoga y ballet.
—¿Actualmente cómo te sientes? ¿Tienes síntomas extraños?
—Sí. Tengo náuseas, vómitos, irritación, cansancio y me da mucha hambre. Es por eso que Kelle pensó que estaba esperando un hijo, pero carezco de vagina y útero. No hay manera que quede embarazado.
—Correcto, en un rato veremos si hay algo de lo que no nos hemos enterado aún. Checaré tus niveles de gonadotropina coriónica humana y te haré una ecografía para examinarte. No quiero causar daños con una radiografía de abdomen —espetó, previniendo por si posiblemente había un embarazo. Las radiografías de abdomen podían dar la respuesta a las náuseas existentes e inexplicables de Nicolás, pero toda la información que Nicolás le daba era similar a la de una mujer antes y estando fecundada. Era mejor verificar si los niveles de hCG eran correspondientes a un cáncer —.Checaremos tus hormonas, así que no te preocupes. También necesito hacerte un chequeo exterior en el pene y luego uno interior. Debido a que este lugar es algo privado y que soy de administración, dejaré que Kelle te acompañe como adulto que es. En mí podrás obtener servicios diversos ya que también soy gineco-obstetra.
—De acuerdo. Y sobre el monetario… —Nicolás cerró la boca cuando el superior lo hizo callar con un gesto sonriente.
—No te preocupes por ahora, debido a que este lugar es de mi propiedad, te mandaré con orden para que no pagues nada por el momento. Esto hará las cosas más fáciles.
Tomás se apoyó en Kelle. Ese lugar que parecía un consultorio gigante y privado también contaba con habitaciones con máquinas especiales para todo tipo de exámenes. Incluso había una farmacia a un lado y en el segundo piso se encontraban otros médicos diversos. Hubiera sido terrible que fueran a un hospital donde necesitaran el permiso de un mayor.
Después de varios exámenes de sangre, Frank visualizó que los niveles de hCG eran demasiado altos y que se asemejaban al rango a los niveles de un embarazo de seis semanas. Bastaba con las pruebas de embarazo que antes se hizo para saberlo, pero necesitaba corroborar. Tener un nivel mayor a 5MIU/ml era aterrante para los hombres, pues éstos debían tener un nivel por debajo de 5. Si Nicolás no estaba embarazado, entonces tenía un tumor en los testículos. En otros resultados de hormona, visualizó la testosterona y se dio cuenta que ésta estaba baja y que la progesterona elevada. Las hormonas femeninas eran más altas que en cierto modo parecían indicar que Nicolás era mujer y no un hombre. Incluso la progesterona era sospechosa ya que ésta ayudaba a mantener y a crear un embarazo. Por tal cuestión las mujeres que tenían problemas para embarazarse carecían de tal hormona y era por eso que les suministraban dosis vaginales u orales.
Preocupado por los datos, fue directo a hacerle una ecografía 3D. Llevó a las tres personas a la habitación diseñada para el trato ginecológico y recostó a Nicolás en la camilla, destapó su abdomen que seguía plano al parecer, vertió gel y paseó el aparato, viendo el monitor inmediatamente.
Los ojos de Nico brillaron con un extraño sentimiento. Se estremeció y decidió mirar directo a Frank. Al fijar los ojos en el profesional, percibió que éste tenía la boca abierta y los ojos totalmente paralizados. Un escalofrío recorrió las piernas de Noah, quien pensó lo peor por el profundo silencio que había en la habitación. Frank sonrió poco después, moviendo el aparato sobre el vientre del menor, dejando a la vista unas imágenes perfectas de lo que existía ahí dentro.
Existía un útero ocupado por dos productos. Al encender la bocina y activar el micrófono, de repente se escucharon dos corazones. Los latidos sorprendieron a todos. Sonaban regulares, completamente sanos.
—Son dos productos —murmuró el encargado, monitoreando bien y reiterando que el embarazo múltiple era confirmadísimo por los niveles del beta.
—¡Te lo dije! ¡Estás embarazado! ¡Estás bien embarazado y son gemelitos!
La cabeza de Nicolás dio vueltas, mareándolo con intensidad. Era demasiada información por hoy, pero unas fuerzas nuevas lo hicieron tranquilizarse y prestar atención a todo lo que Frank le decía.
—Los productos están en formación, tienes poca madurez en los órganos femeninos debido a tu corta edad, pero cuentas con dos sexos. Hay pocos casos de personas intersexuales como tú, la única diferencia es que eres diferente. Por lo general las personas intersexuales tienen los órganos sexuales pequeños, pero tú los desarrollaste bien, además las personas intersexuales son estériles. Debido a los dos sexos, no logran fecundar ni ser fecundados, pero tú sí —añadió, mirando a Nico con seriedad —. Eres una persona diferente a las demás, pero eso te hace único. Es el primer caso que existe ya que tu pene parece normal y tu útero es sano. —Apartó el aparato y lo dejó en su lugar, dejando de ver su formación para hablar con él, ya que estaba en completo shock—. Tu progesterona es la adecuada para mantener un embarazo, pero es peligroso. Actualmente sólo hay casos en donde los hombres tienen menstruación y les sale por el pene igual que a ti, pero son totalmente incapaces de reproducirse. En tu caso lo más probable es que sólo puedas embarazarte y que tu semen sea cero efectivo. En tu caso lo más lógico es que tus eyaculaciones sean mínimas y carezcan de espermatozoides, es por eso que tu cuerpo se ha crecido de manera femenina. Tu aparato reproductor masculino puede servirte como clítoris y sólo para placer, pero tu aparato femenino te llevará a la reproducción, quizá eso explique por qué tienes erecciones; cuando las mujeres se excitan, su clítoris crece de tamaño y puede incluso crecer más cuando se toman hormonas masculinas, y lo más lógico es que tu eyaculación sea como cuando las mujeres lo hacen cuando tocan su punto G. Aún así sigue siendo peligroso. Te daré mi diagnostico profesional para que al menos tengas una explicación de tu embarazo: por lo que sé de ti y de tus síntomas, tu pene sirve como vagina también, en este caso aquella es pequeña, casi no visible para ti y por eso te sangró el pene, marcando un cambio. Por lo que vemos tuviste un ciclo de menstruación natural y común, también al parecer entraste en ovulación y más que nada en la eficiencia de tu matriz. Necesitaremos ver tu pene detalladamente para encontrar tu agujero vaginal, y para poder explicar en términos lógicos y médicos cómo es que el semen entró por ahí. Lo que ahora sabemos es que tienes dos productos y realmente no sabemos si van a tener problemas conforme las semanas pasen. Debido a que tu agujero vaginal es sumamente pequeño, sólo tendrás dos oportunidades de embarazarte, o tal vez una; tendríamos que hacer cesárea y es peligroso para ti.
Pensando, Nicolás levantó la cabeza, preguntando: —Entonces si no se desarrollan bien los productos ¿Me harán cesárea para sacarlos y perderé la oportunidad de embarazarme de nuevo?
—Debido a la cesárea sí, en todo caso si no se logran formar los productos puede ser señal de incapacidad para reproducirte correctamente. Ya que es un milagro de la medicina; así como lograste embarazarte, también puedes perderlos una y otra vez, haciendo que te enfermes.
—Yo no quiero perderlos —espetó el crío, viéndose de soslayo el vientre, recordando que las suposiciones de Kelle eran correctas y que se sentía muy feliz por ser un intersexual. Recordó que estaban a punto de conseguir un vientre en alquiler y las ganas que Oliver tenía por ser padre. Lo que Frank le decía era lógico, y a pesar de los problemas que podían pasar, Nico se sentía muy sano. Demasiado nutrido y sano. Siempre sintió que había algo extraño en él, pero jamás se imaginó ser mujer y hombre al mismo tiempo. Ahora todo coincidía. Ahora sabía por qué de repente de sentía liviano, sexy y con distintos cambios hormonales. Ahora entendía por qué hacía cosas de niñas y se sentía como princesa cada vez que estaba con su esposo. Pero… ¿Su padre sabía? ¿Su madre desnaturalizada tal vez? Necesitaba respuestas.
—Aunque te puedo decir que por lo que vi, todo va bien. No tienes cáncer, sólo estás embarazado. —Lo dejó claro nuevamente, dejando más gel en el vientre de Nicolás para volver a ver el útero—. Calcularé el tiempo que llevas. —El pelirrojo asintió—. Menstruaste el catorce de octubre y ahora estamos a primero de diciembre. Tienes un total de 48 días, que significan 6.8 semanas de embarazo. Tu fecha de alumbramiento caería el 8 de julio, sin embargo la mayoría de los embarazos múltiples siempre se adelantan, yo te daría fecha de cesárea para el primero de junio, tendrías para ese entonces 36 semanas y algunos días. —Tecleó en la computadora del gran aparato ecográfico —. Los latidos de ambos corazones son regulares, sin embargo tenemos que esperar para ver si son gemelos fraternos o idénticos, aunque por lo que veo son fraternos ¿Vienes de familia con genética múltiple?
—No —contestó el menor, viendo en la pantalla las dos masas—. Pero mi esposo sí. Él tiene una gemela fraterna. —Informó, cerrando los ojos para poder reiterarse que estaba embarazado. Todo había pasado tan rápido que sentía que era un sueño. Necesitaba gritar que estaba esperando a dos gemelos. Necesitaba llorar en su recámara para derrochar lo feliz que se encontraba. Tenía medo, pero estaba seguro que todo iba a salir bien.
Frank movió la cabeza de arriba abajo. Tomás y Kelle brincaron juntos para festejar en silencio.
—Necesitamos mucho reposo, Nicolás. Necesitas habla con tu esposo, necesitamos hablar sobre tu embarazo para darle información y que así pueda cuidarte. Por lo pronto urge que tomes vitaminas. Las pastillas te las daré antes de que te vayas, también te recetaré progesterona para que la suministres de manera oral, esto es sólo para estar más prevenidos. Por lo pronto tienes que cuidarte mucho y hablo de tener cuidado de todas las maneras posibles, te vendrán malestares en altos niveles y es normal debido a los dos productos. Tendrás cambios próximos por la progesterona y por la naturaleza del embarazo. Espero poder ser tu ginecólogo de cabecera y poder guiarte, claro si eso lo deciden tu marido y tú. Todo lo que vi en tu ecografía es normal, por lo pronto te checaré el pene y para eso necesito que estés flácido y erecto, si no te molesta, claro. —Tomó un pedazo de papel y le retiró el gel—. Pero si no te sientes muy seguro, entonces puedes traer a tu esposo y hago el chequeo con terceros.
—Lo que pasa es que a él no le parecerá que me vean desnudo —anunció muy seguro de su afirmación. Oliver se enojaría si se enteraba que se ponía erecto frente a otro hombre, incluso aunque fueran cuestiones médicas.
—De acuerdo, el chequeo exterior no es de mucha importancia, de hecho es sólo para buscar una abertura vaginal nada más. La organización interior de tus órganos reproductores se verán durante y después del embarazo, por lo pronto con las ecografías sabemos que todo está bien. Felicitaciones y no te asustes, la noticia de tu embarazo no la sabrá nadie que no sea tu familia, y si necesitas trato psicológico tenemos a una psicóloga muy buena. Por lo general las personas intersexuales padecen de baja autoestima y rechazo hacia uno mismo, es por eso que los servicios están abiertos.
Nico asintió, aunque a decir verdad no se sentía deprimido ni nada, de hecho le agradaba demasiado estar embarazado. La única incógnita era ¿cómo diablos le diría a Oliver? A como pudo se paró y se dirigió con Tomás y Kelle para pagar, soportando las risillas y saltos que hacían sus amigos. Por suerte Nico portaba una tarjeta de débito que su padre le había dado y con ella hizo los gastos necesarios. Se fue a su casa con una receta médica, demasiada vitamina en píldora y progesterona, que se tomaría de manera oral y con control.
