“Onceava consecuencia: Y Troya empezó”
Evans sonrio con diversión al ver la cara de desprecio que se formaba en Severus.-¿Siempre tienes esa cara de querer matar a alguien?-Pregunto divertido el de ojos color miel.
Snape bufó levemente.-Solo que no entiendo cómo te gustan tanto las cosas dulces.-El pelinegro miro con algo parecido a la resignación la crepa que había sido depositada hace poco en sus manos. Evans ya iba por la mitad de la crepa, ¿Cómo era eso posible? Si hace menos de cinco minutos las había traído.
El Ravenclaw le dio otro mordisquito a la crepa.-No seas así, dale una oportunidad a la señora crepa, ella no es mala y sabe muy rico.-El mayor entrecerró los ojos y formo una sonrisa maliciosa en sus labios.-O… ¿Acaso prefieres que te la dé yo en la boca?-Inquirió con diversión en la voz.
Severus bufó con el ceño fruncido aunque un tenue sonrojo en sus mejillas.-Eres fastidioso.-Mordió su crepa y como esperaba estaba bastante dulce, pero Evans tenía razón, sabia bastante bien, por lo menos estaba tolerable. Thompson parecía complacido con verlo comer.-Después de comer, ¿A dónde quieres ir?-Preguntó al rato. El de lentes ya había terminado de comer su crepa y de beber el té con infusión de fresas que había pedido. Arqueó una ceja al notar que Evans alternaba la mirada por el lugar, como buscando algo. Severus se lo quedo viendo por un rato que basto para que el Ravenclaw saliera de su ensoñación.
El de lentes sonrió apenado.-Lo lamento, me distraje. ¿Me decías?-Cuestionó todavía algo avergonzado. El muchacho se acomodó un poco los lentes.
Severus decidió ignorar el comportamiento extraño del muchacho, después de todo Evans ya de por si era extraño.-¿Qué hacemos ahora?
-Oh… Salgamos de aquí, ya casi anochece, quiero enseñarte algo.-Una sonrisa animada se posó en las facciones del más alto.
Ambos se pusieron de pie. Evans le abrió la puerta a Snape. El de lentes suspiró levemente al notar a los tres grupitos que los venían siguiendo desde hace rato. Merlín… Ya nadie tenía privacidad. Cerró la puerta con un suspiro resignado.
-¿Y a dónde vamos?-Preguntó Severus al rato de estar caminando, solo seguía a Evans que iba caminando con una sonrisa suave en los labios.
-Ya lo verás.-Aseguró mientras metía las manos en los bolsillos de su abrigo. El frío había aumentado. -¿Estas bien con el frío?-Preguntó mientras se giraba para ver a Severus. El Slytherin tenía los labios algo morados por el frío, así que se adelantó antes de que el otro negara que tuviera frío. Se sacó los guantes y tomó con suavidad una mano de Snape y le puso el guante. Repitió el mismo proceso con la otra mano.-Sé que son guantes sin dedos pero algo harán, te pondría también la bufanda, pero si lo hago no podre verte el rostro.-Mencionó divertido, Severus rodo los ojos pero aun así no hizo ademan de quitarse los guantes. Internamente agradecía el gesto.
-En verdad que eres molesto.-Soltó con voz suave Snape. Evans aumentó la sonrisa.
-Ya casi llegamos. Ven.-Thompson le hizo un gesto para que lo siguiera por un sendero que se iba abriendo por los árboles. Caminaron un rato hasta llegar a las ruinas de lo que parecía había sido algo como una iglesia o algo así, había un lago congelado y un enorme árbol.
Severus arqueó una ceja, el lugar era bonito, pero tenía un sentimiento nostálgico.-¿Dónde estamos?
-Como has visto, son ruinas.-El de lentes hizo un gesto restándole importancia.-Me gusta venir aquí a veces, casi nadie lo visita, así que se puede estar en paz. Y se pone mejor cuando anochece, pero para eso todavía falta un rato.-El muchacho se sentó a la orilla de lo que parecía ser o era un pozo. Severus imito la acción del otro y se sentó a su lado.
-¿Y para que venimos?-Severus alzó su vista al cielo que se encontraba oculto en nubes.
-Para hablar tranquilamente y mostrarte algo.-Explicó con simpleza el Ravenclaw.-Quería decirte unas cosas antes de que las supieras por otras personas y se haga un malentendido. Eso es problemático.-El muchacho soltó un suspiro. Sonrió levemente notando como el cielo comenzaba a obscurecerse dando paso a la noche.
Snape alzó una ceja.-¿Sobre qué?-Preguntó con un gesto de desconfianza.
-Solo dame tiempo de terminar de hablar y no saques conclusiones.-Evans le dio una mirada seria.-Porque prometo por Merlín que si te intentas largar te tackleo.-Mencionó con una sonrisa divertida pero con una mirada de completa seria, que daba a entender que hablaba en serio. Snape simplemente asintió.-Bueno veras, yo no soy precisamente sociable y eso.-Pasó una mano frustrado por su cabello, no sabía cómo seguir. Suspiro intentando calmarse, era nuevo para él eso.-Y la cosa es que siempre me encerraba en mí, no me gustaba relacionarme con las personas y Ravenclaw es diferente que las otras casas, todos son muy independientes, no son como los amigos que encuentras en Slytherin…- Thompson se quedó mirando algún punto en el suelo.-Me vas a matar por lo que voy a decir.-Soltó una risita floja.-Nathan es mi mejor amigo, es como mi hermano y eso que ya tengo uno… Bueno, yo me encerraba en mí mismo y siempre he sido distraído y algo raro, lo acepto. Entonces los de Ravenclaw y otras casas me molestaban, mis hermanos mayores eran increíbles en sus casas y estaba yo, solitario y raro. Fui mucho tiempo blanco de bromas y aislamiento. Y en cierto punto no me importaba.-Suspiró con pesadez.-Entonces en cuarto pasó. Nath me insultó y dijo cosas que me sacaron de mis casillas, nunca me había pasado. Ese día me di cuenta que tenía más fuerza física de la que aparentaba.-Soltó una risita irónica.-Le rompí la nariz y el labio. Entonces llegó él y me dijo: “Por fin pareces estar vivo” y sonrió. Es la única vez que lo he visto sonreír. Fue un golpe duro. Nath es de los que es muy directo, además que no tiene mucho tacto cuando quiere ayudar. Después nos hicimos amigos, mi actitud cambio, las personas querían acercárseme y las alejaba. ¿Para qué hablarles a eso cabrones de mierda?-Bufó levemente.-Así que seguía en mi mundo, alejados de todos pero viviendo.
-¿Y?-Preguntó en un murmullo el Slytherin.
El de ojos mieles tenía la vista perdida.-Entonces yo no notaba a las personas, y bueno a ti te note cuando paso aquel incidente del traje de sirvienta.-Severus frunció los labios.-Lo que me llamó la atención y lo sigue haciendo es tu mirada…-Evans lo encaró.-Es tan parecida a la mía, es algo amarga, de esas que se pierden mucho en los recuerdos… Pero la tuya es más obscura.-Severus se quedó de callado, la mirada de Evans era fuerte.-Y bueno seguías ahí, me di cuenta que compartías clases de alquimia con Nath. Entonces una vez saliste colado en una conversación que tenía con él.-Suspiró.-Y… Bueno Nath tiene problemas de expresar emociones, ¡Siempre esta serio! Así que decidí aprovechar la oportunidad y…-El Ravenclaw vaciló un poco.-Le dije que eras violable y que serías lindo de ver gemir debajo de mí.-Mencionó rápidamente como en un quejido lastimero.-¡Juró por Merlín que era para ver si el reaccionaba de alguna forma! Para ver si lucía incomodo, avergonzado o enojado, lo que fuera…-Evans volteó el rostro a Severus. El pelinegro estaba completamente rojo y lo miraba con una mirada tan gélida como para congelar el infierno. Thompson trago saliva pesadamente.
Severus se quedó callado por unos minutos.-Me debes mucho…-Snape agregó y aparto la vista.
Evans suspiro aliviado.-Muchas gracias, te aseguro que me siento idiota. Eso no fue nada caballeroso. ¡No lo digo en mal sentido! No me mires así. Sé que eres hombre, Severus.-El chico suspiro pesadamente.-A lo que me refiero es que sé lo que es que hablen a tus espaldas y sinceramente es un fastidio. Entonces quería pedirte disculpas y bueno, si llegaba a tus oídos lo que dije, supieras el por qué.-Terminó con voz cansada y aliviada.
Severus se quedó viendo la oscuridad del lugar.-En verdad que me debes mucho.-Snape fulminó con la mirada al más alto.-Ya después me lo cobrare. Ni creas que lo voy olvidar, Thompson.
El Ravenclaw soltó una risita débil.-Lo sé. Puedo comenzar pagando con esto.-El más alto sacó de su bolsillo un paquete y se lo tendió a un Snape que lo abrió desconfiado. Era una pulsera de plata que parecía muy costosa. Tenían unas runas grabadas.-Son las runas de la protección y la sinceridad.-Respondió la pregunta muda.-Entonces… ¿amigos?-Preguntó con una sonrisa nerviosa.
El de ojos negros cruzó los brazos.-Como sea.-Murmuró.-¿Qué era lo que me ibas a mostrar? Espero no haber hecho todo este viaje para que me cuentes historias.-Evans negó con la cabeza divertido.
-Claro que no.-El chico se puso de pie y sacó su varita, murmuró unas palabras y el lugar se empezó a llenar de luces blanquecinas.-Era esto.-Una sonrisa enorme se posó en sus labios.-Es hermoso… ¿Verdad?
Snape asintió vagamente, en verdad era un espectáculo hermoso. Se quedó sin palabras por un momento.-Pon tu cabello verde.-Demandó el Slytherin.
Thompson abrió la boca y la volvió a cerrar.-¿Qué?-Consiguió decir después de un rato.
-Que quiero ver tu cabello verde, así que ve haciéndolo a menos que quieras una Cruciatus.-Severus lo miró con una ceja alzada. Rápidamente el cabello del otro cambio a un color verde oscuro. Una sonrisa de superioridad se formó en los labios del Slytherin.
Thompson negó levemente con la cabeza, una sonrisa suave en los labios.-Los Slytherin se tienen un carácter.-Murmuró.-Mmm…-Se sentó de nuevo junto al pelinegro.-¿Sabes?... Me gustas.
El rostro de Snape tomo un tono rojizo.-Estas bromeando.-Soltó bruscamente, tenía una mueca tensa en la cara.
Evans lo encaro con el ceño fruncido.-No estoy bromeando, es la verdad, pero…-Le sonrió cálidamente al de ojos negros.-Me di cuenta que bueno me atraes pero… Prefiero tenerte de amigo, es como congeniamos más. Y ninguno de los dos nos vemos como un más allá de una amistad y realmente no me gustaría perderte por una relación fallida. Eres importante.-Declaró completamente convencido.-Pero… Aun así….-Tomó el rostro de Snape con una mano y fue acercando su rostro al de Severus.-¿Has besado a alguien?...-Susurró con suavidad antes de unir sus labios con los del pelinegro, sin darle tiempo de contestar. El peliverde cerró los ojos al sentir el contacto. Severus estaba en shock, lo había tomado desprevenido. Se sentía cálido y extraño, era algo diferente… Cerró los ojos también. El Ravenclaw empezó a mover los labios con suavidad y él se dejó llevar. Las luces todavía estaban brillando.
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Lucius iba muy tranquilo caminando al lado de Regulus y Narcissa. Se lo tomo con calma, después del asunto de la caída masiva, todos se habían mirado y salido en diferentes direcciones. Malfoy tuvo que hacer un esfuerzo para no rodar los ojos. Por Merlín, que gente más penosa. Regulus y Narcissa iban algo avergonzados todavía, no era normal de un Slytherin temer ese comportamiento torpe. Iban con paciencia, después de todo Narcissa había encantado la ropa con un hechizo rastreador, solo la seguían a ella. En una parte tuvieron que ingresar al bosque. Todos se dieron una mirada antes de empezar a caminar de nuevo.
Narcissa que era la que iba al frente, se detuvo. Por los arboles podían ver a Severus y Thompson, no podían acercarse más o los verían. No se podía escuchar lo que decían. Todos se quedaron viéndolos resguardados detrás de los árboles. Después de un rato paso. Thompson besó a Severus. Regulus se había avergonzado un poco y había apartado la mirada para dar privacidad. Narcissa se había apoyado contra un árbol, tenía el rostro completamente sonrojado pero tenía una sonrisa que apenas y podía contener. Lucius… Bueno Lucius sonrio levemente y saco una foto con la cámara que había llevado desde un comienzo.
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Remus saltó sobre el enorme perro negro. Sirius se había transformado en Padfoot para rastrear el aroma de Snape. Lupin no sabía qué hacer con el perro que se movía histérico. Sacó su varita y le lanzó un Silencius al perro para que dejara de gruñir, con otro movimiento le lanzó un Petrificus.-No saben que estamos aquí, así que cálmate.-Soltó frustrado Remus mientras se dejaba caer a un lado del perro negro.-Sé que estas molesto, pero entiende algo Sirius, no tienes ningún derecho sobre Severus y lo sabes.-Remus le dio una mirada que no daba a réplicas.
“Lo sé” Soltó con pesar en su mente Black. Le dio una mirada a su amigo para que quitara los hechizos. Al parecer Remus le entendió y los quito. Sirius volvió a su forma humana y se sentó junto a Remus. Ninguno giró su rostro de nuevo al lugar, Sirius tenía los puños fuertemente apretados al igual que sus dientes.-Lo voy a cambiar.-Sirius se encontraba con un semblante serio. Se puso de pie y comenzó a caminar.-Vamos.
Lupin suspiró y comenzó a caminar detrás de su amigo, nunca había visto a Sirius tan serio y decidido.
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James apretó con fuerza la corteza del árbol donde estaba apoyado.
-Potter…-La voz de Lily se oía verdaderamente preocupada. La chica tomo con delicadeza la mano del de lentes. Estaba sangrando… Unas astillas se habían insertado en la piel de este, pero Lily sabía que eso no tenía nada que ver con la cara de dolor que tenía James en el rostro.
-Hora de irnos.-Potter se dio la vuelta, oculto su mirada en las gafas.
La pelirroja comenzó a caminar con lentitud detrás del chico. Tenía un aura pesada a su alrededor.-James…
El Gryffindor se detuvo y giro a verla. El rostro de James estaba completamente serio, aunque algo de dolor era visible en los ojos de este.-Yo sé que tal vez no sea el mejor, pero…-Los ojos avellana de Potter brillaron con seguridad.-Te aseguro que cambiaré.-Declaró con total seguridad. James le sonrió de nuevo, con calidez y dolor. Algo dentro de Lily se removió al saber que esa sonrisa no era para ella.