MICHI-
Hoy desperte de buen humor, Darki y yo decidimos quedarnos un dia mas en aquel hotel, mi desayuno fue algo magistral, incluso traia fresas, quise comermelas con Darki pero él y su intolerancia por la comida humana, ademas de que me repetia que preferia comerme a mi, haciendome sonrojar el muy idiota ese.
Mi cielo, tengamos una cita -dijo Darki con esa voz melosa que tanto me gustaba-
¿Una cita? -pregunte totalmente sonrojado-
Si, quiero llevarte a un hermoso lugar que me gusta mucho ya sabes el jardin de las rosas, y como es privado, te hare el amor alli
¡¡¿Ehhh?!!; ¡no Darki; estoy en contra!
-¿Por que nene?; ¿no quieres que te ese placer bestial que se que te encanta?- me preguntó él con una sonrisa sensual-
¡¡Wuaa callate Darki!! -chille totalmente enrojecido-
Primero nos dimos una ducha, juntos no porque si no él me violaria; lo mande a comprarme ropa nueva porque la mia estaba rasgada, y me consiguio unos jeans negros, un sueter color miel y unas converse verdes.
¿Por que siempre tengo una prenda verde Darki?
Por mis ojos nene, asi como yo siempre tengo una celeste -me respondio a la vez que señalaba su corbata color celeste-
¿Sabes Darki? si yo me parezco a Jack Frost, tu te pareces a Usami Akihiko...-afirme yo llamando asi su atención-
¿Quien? -me pregunto él con clara curiosidad-
Jejeje nadie -respondi yo dulcemente-
Salimos tomados de la mano, se sentia tan bien, sé que soy un chico de hielo, pero al tomar la mano de mi Darki, sentia como un calor agresivo se apoderaba de mi palma, de vez en cuando al caminar me robaba fugaces besos, fingia enfadarme y me quejaba, pero en realidad me tenia embobado, caminamos un rato por el parque, nos besamos detras de los arboles, tuve que golpearlo más de una vez por tocarme el trasero.
-¿Ahora a donde quieres ir mi amor?- su pregunta vino acompañada de un largo suspiro; estabamos tirados en el cesped, o mas bien yo estaba sentado, y Darki con su cabeza recostada de mis piernas; nos veiamos fijamente, fusionando nuestras miradas, haciendolas una, mis manos se deslizaban por el cabello de Darki con un placer imposible de describir.
¿Que tal si vamos al Zoologico? -pregunte timidamente-
¿Zoologico eh?, esta bien, vamos nene.
Luego del zoologico, donde señale a todas las fieras y las nombre "Darki 1, 2 y 3", él me llevo a su "lugar secreto", era un jardin de rosas, ubicado en otro parque lejano al que fuimos; era tan hermoso, extensas paredes de enredaderas cargadas de rosas, Dios mio, nunca habia visto nada igual; llegamos al centro del lugar y era igual de hermoso, caminos empedrados, adornado con una fuente de piedra con la figura de un ángel. Me sente en uno de los bancos, Darki al lado mio y lo deje ver una de mis mejores sonrisas.
Te amo mi gatito blanco -susurro Darki contra mi oido mordiendo mi lóbulo-
¡Ahh! -gemi por lo bajo-
-DARKER-
Me vuelvo loco por oirle gemir, maldita sea, un solo sonido de su boca y me ponia duro; aunque mi mete seguia divagando en algo amargo, el dulce sabor de Michi me dio un sosiego que ni aun un angel me brindaria.
Pierdo tus ojos
Busco el recuerdo
Lo paro, despierto
Te miro y me siento mejor
Pero yo despidiendote ahogo...
Lo aprete con todas mis fuerzas un abrazo desesperado, el solo pensar que me tendria que separar de su boca me hacia morir lentamente; mis manos se aventuraron dentro de su sueter haciendolo enrojecer como una provocativa cereza, me gustaba pensar que era una cereza albina; le desvesti con desmenuzada locura, el ver su piel tan blanquecina y sus pezones tan rosas me excito más de lo que podrian imaginar, al deshacerme de su pantalon note que ya él estaba tan excitado.
Mi amor, te deseo tanto -fue apenas lo que pude murmurar y forzosamente porque el extasis no me permitia articular palabra alguna-
No pude prepararlo, o mas bien olvide hacerlo, simplemente libere mi extension de su prision de tela, lo vi deslizarse hasta quedar encima mio, y aunque él quiso comenzar lento, aprete sus caderas llevandolo hacia abajo para penetrarlo con rudeza; mis movimientos eran tan animales, mi pequeño gemia con tanta lascivia que senti que iba a explotar en cualquier momento, mis manos se dividieron en cuanto a trabajo, una apretaba su cadera izquierda y la otra le daba placer a su miembro despierto y juguetón, perdi la noción del tiempo, pero es que cuando llegue a ese punto no tuve retorno para ir por mi conciencia, y mi Michi tampoco. Lo deje dormir un poco en el banco (claro antes lo vesti a la fuerza pues su cansacio era mucho), yo tambien estaba vestido y cansado, pero no fisicamente.
Él me enamora cada dia mas, me duele pensar que tengo que dejarlo, pero asi debe ser...Ese maldito mensaje de ese imbecil asi me lo indico...
FLASH BACK...
Michi se estaba duchando, mientras yo le esperaba, esta tirado en la cama sin nada que bueno que hacer, cuando mi telefono comenzo a vibrar con urgencia; lo tome y deslice mi dedo por la pantalla, era un mensaje de....de mi padre...
DE: ADELBERT VAMPIRE
PARA: DARKER VAMPIRE.
-Ya me he enterado que tienes un nuevo juguetito, vale, me alegro por ti, pero este cuento tiene que terminar, hoy mismo le cortas las alas, tu tienes compromisos, ¿o has olvidado tu ultima promesa?; te vas a casar con Ivanna Gold, y no me importa si te afecta o no; y te advierto que si no estas aqui en mi mansión para la noche, y ese maldito crio lejos de tu hogar, le hare tanto daño que hasta sus ancestros lo sentiran.-
Un nudo en mi garganta me impedia tragar saliva, mi estomago daba vueltas, ese maldito hombre tenia que atormentarme de nuevo, no le habia bastado con toda la mierda por la que me habia echo pasar, no, él queria mas. Al ver salir a mi pequeño, solo pude pensar en pasar todo el dia con él, seria su despedida.
Lo complacia en todo, y es que el saber que lo iba a perder me destruia por completo, pero si habia alguien de quien no podria protegerlo, ese era mi padre, si es que se le puede llamar asi a un ser tan horrible como él. Paseamos, inclusive fuimos al Zoologico, Michi me comparaba con todas las grandes fieras, causando en mi cierta gracia, lo lleve a mi lugar secreto y le hice el amor; ese niño era tan puro e inocente a pesar de que yo le habia corrompido, pasamon un dia maravilloso, cuando comenzo a apuntar la noche, en contra de mi voluntad y lleno de asco ante la idea, tuve que formar una estrategia para obligarle a no querer verme mas, y al llegar a la mansion, puse ese plan en marcha, dandole gracias a todo lo bueno de que Sen no estuviese alli; entramos rapidamente debido a la lluvia, mi pequeño se tiro al sofa y me dedico su mas amplia y hermosa sonrisa, pero yo tuve que hacer todo el esfuerzo del mundo para entornarle una fria mirada.
Bueno niño, tenemos que hablar -comence pausadamente y lo mas calmo posible-
Claro Darki, dime -me respondio con la misma sonrisa-
Ya tuvimos sexo como yo queria, y ya te complaci como deseabas; ahora quiero que tomes tus cosas y te largues de mi presencia, ahora -mis palabras salieron secas y sin tacto de mi garganta, aunque por dentro estaba mas que destrozado-
¿Q...que? -susurro mi pequeño, agrandando sus ojos que estaban al borde de derramar lagrimas- Pero...me hiciste el amor..
¿El amor? no niño, tuvimos sexo...metete eso en la cabeza
¿Y...lo q...que me decias? -su pregunta salio forzosamente de su garganta, sonaba tan quebrantado que senti la urgencia de morirme ahi mismo-
Solo era para que te ilusionaras mas conmigo y asi seria mas divertido romperte las esperanzas -exprese con odio por mi mismo-
Mi pequeño se quebró, sucias lágrimas caian desperdigadas por sus mejillas, mi corazón dio un vuelco, hice un ademan de acercarme pero él se alejo mas, corrio hacia la puerta y de un portazo salio, dejandome en la oscuridad.
-Vaya hijo, eres buen actor- esa maldita voz rasposa ya la reconocia yo, era mi padre, estaba escondido entre las sombras, anhelante de este momento; yo solo queria estrangularlo.
Callese -vocifere con la poca fuerza que me quedaba-
Hiciste lo correcto Darkress, con ese niño no tenias futuro, mas con Ivanna te va a ir de maravilla -anuncio el desgraciado poniendo sus manos en mis hombros y fijandome su cínica mirada-
Todo va a salir bien, hijo mio...
-MICHI-
*Maldita sea, maldita sea, maldita sea*
Mi pecho me ardia, mientras estas palabras eran las unicas que danzaban por mi mente, no se cuanto habia corrido, pero mis piernas temblaban y flaqueaban, estaba en el mismo parque donde...donde él me llevo, ahora estaba debajo de un enorme arbol, el mismo donde nos besamos como locos...
-Quiero morirme- susurre desesperado, aun continuaba llorando, pero solo asi podia liberar todo el dolor que estaba sintiendo, estaba solo, roto por dentro....
-SEN-
-Algo anda mal- musite con la vista puesta en el auto de mi padre, aparcado frente a la mansión de Dark; me acerque desesperado a la puerta y con el mismo sentir toque la puerta.
-Voy- esa era la voz de Darker, pero sonaba tan ahogada; cuando me abrio la puerta, la persona que tenia al frente era totalmente distinta, sus orbes color menta brillaban con un odio abrumador, sus facciones estaban tensas, incluso su voz parecia ser otra-
¡Pero si es mi otro hijo Senjougahara!
¿Padre; que haces aqui? -pregunte algo aterrado-
Vine a ver a mis hijos, ¿o es que ahora no puedo?
Sientete libre -respondi yo- Dark, ¿donde esta Michi?
Se fue -musito secamente mi hermano-
¿Cómo?...
Lo que oiste mi querido hijo, ese mosco se fue -exhaló mi padre-
¿Q..qué?
-ZERO-
¡¡HUYYY!! quiero matarlo, ese tonto no solo me violo, sino que ahora me dejo en mi casa y hasta él se quedo en ella, es un completo idiota que me hizo muchas cosas, pero al llegar el anochecer me dijo que tenia un mal presentimiento y se fue, ¿que habra sido? bueno, sea lo que sea; espero que vuelva...
-ESTEFAN-
La vida es una mierda, en especial para mi; despues de aquella herida decido confesar mi nuevo amor, y este me deja por un imbecil Vampire, estaba tan molesto, que esta noche decidi pasear por el parque al que iba con mi madre antes de que ella....muriese. Al llegar, como todas las noches, estabamos mi soledad y yo, pero esta vez era diferente; debajo de un arbol estaba una persona echa bultito que reconoci perfectamente.
-¡¡MICHI!!- Grite provocando a mi hielito subir su rostro, mi nube con forma humana, tenia sus mejillas rosadas y no precisamente por la felicidad, pues estas estaban bañadas de horribles lagrimas.
-Ah..Hola Stef..- susurro mi nube dedicandome una vacia sonrisa, como si fuese a convencerme de que estaba bien.
¿Fue ese maldito bastardo verdad?....
CONTINUARA...