By Baekhyun
Mis pies están tocando algo resbaladizo y por el tacto puedo decir que asqueroso, blando y aguado. No puedo ver lo que es porque no hay algo, una luz que alumbre. Solamente hay oscuridad.
Puedo sentir mis pies descalzos tocando lo que debe ser el suelo. No creo que vaya andando por el techo.
Lo más satisfactorio de todo esto es que no tengo que hacer más esfuerzo con mis brazos para empujar las ruedas de la silla ¡porque estoy andando joder!
No sé a donde me dirijo ni si voy por buen camino, solamente me dedico a correr por la oscuridad. Me planteo que esto es el vacío.
No puede ser el pozo negro en el que de vez en cuando me gusta ahogarme. No hay agua.
Ahora que he pensado en agua, el sonido de las gotas chocando con algo se hace presente. No puedo ver la lluvia, pero puedo sentir pequeñas gotas mojándome.
Quiero que sea más fuerte.
Quiero que me empape por completo hasta calarme los huesos.
Mi deseo está concedido. Ahora suena como si tropecientos baldes de agua fueran arrojados a la vez y muchas veces seguidas. Por consecuencia estoy calado y empapado de agua. No hace frío, tampoco hace calor. No siento el clima. Ahora solo estoy concentrado en la fuerte lluvia que me cae encima. Cuanta más lluvia cae, mis pies más se hunden y estoy casi seguro que es en barro.
Si he deseado que el agua cayera más fuerte y se ha cumplido quiere decir que puedo desear lo que quiera.
Pruebo a ver si mi teoría es correcta.
Quiero dejar esta oscuridad. Necesito ver algo más que solo el negro del vacío.
Efectivamente mi teoría es correcta. Nada más desear que se hiciese, la oscuridad fue desapareciendo hasta dejar un bosque a la vista.
No es que estuviera muy soleado, en realidad el cielo estaba terriblemente gris y casi anochecido. Por otro lado en el suelo, las hojas de un color rojizo se pegaban a mis pies, que como había pensado, están llenos de barro. Millones de árboles me saludan. Unos más grandes que otros, pero todos igual de hermosos. Sigo mojándome con la lluvia, pero todavía no siento si hace frío o calor.
Al mirar al frente, mis ojos captan el árbol más hermoso que he visto hasta ahora. Sus hojas caen hacia abajo hasta tocar el suelo. Es muy alto y las flores que adornan las hojas son amarillas. Es un Sauce Llorón.
Pero este no es como los demás. Parece tener un aura mágica alrededor y justamente la zona del cielo donde está situado el árbol parece tener una aurora con colores fríos. Azul oscuro, morado, entre otros.
Me acerco y me pongo debajo. Las hojas me rozan y comienzo a bailar de alegría alrededor. Sigo mojándome y las gotas que caen parecen tener el color de una aurora boreal. Es simplemente mágico.
-Pareces feliz – Me asusto y giro a encararme.
-¿Qué haces aquí? - Le pregunto.
-No sé dímelo tú, al fin y al cabo es tu sueño.
No me lo había planteado, pero probablemente tenga razón, esto es demasiado bonito como para ser real.
-Vete – Digo seguro de mi mismo. Es un sueño por lo que no va a poder hacerme nada.
-¿No me tienes miedo? - Dice con una sonrisa siniestra.
-Como tú has dicho esto es solo un sueño – Digo sonriendo con suficiencia.
-¿Y cómo sabes tú que yo no soy como Freddie Krugger y puedo matarte en sueños? - Me dice.
-En algo si que os parecéis – Le digo – Los dos sois igual de feos – Termino.
Ale, a pastar.
¿Quién coño se cree para joderme el precioso sueño que estoy teniendo?
Sonríe más ampliamente – Así que te estoy molestando con mi presencia – Dice mirándome de arriba hacia abajo.
-Pero tú ya lo sabes – digo.
-Tienes razón, es una pena porque yo a ti te aprecio mucho. No sé podríamos haber tenido una bonita amistad – Me dice.
-Se supone que ya tuvimos una – Corrijo.
-Era broma – Se ríe escandalosamente como si de verdad le hiciese gracia. - No sabes como te odio y la ganas que tengo de verte sufrir-
Mis piernas se debilitan y me tiemblan, tengo miedo de caerme en cualquier momento.
-No creas que te has librado de mi, solo estoy en un pequeño descanso- Me advierte.
Doy un paso hacia atrás cuando veo que se acerca.
Una sensación sofocante me invade e intento gritar, pero no sale nada. Mi voz se ha quedado atascada en la garganta y se niega a hacerse oír.
Entonces se empieza a reír macabramente y el bosque desaparece y la lluvia junto a él. Ahora solo hay oscuridad pero la risa no se ha ido.
Al cabo de un rato me doy cuenta de que estoy llorando y gritando. Mi voz se escucha por encima de la risa maniática.
Me despierto sobresaltado y siento la cara helada. Llevo mis manos a ella y me sorprendo al descubrir que está mojada.
-¿Pero qué... -
-Qué bien que has despertado, pensé que te estaba dando un hiptus o algo - Dice Kyungsoo, solo que no ha sonado para nada como si se alegrara.
Me fijo bien y encajo todo. Kyungsoo me ha tirado agua helada para despertarme. No le pienso decir nada ya que no quiero empezar una pelea.
Me levanto sin ni siquiera dirigirle la palabra y me marcho de la habitación.
Una vez que estoy en el pasillo veo mucho ajetreo por la ventana.
En el hospital no paran de salir y entrar médicos apresurados. Me fijo mejor y distingo a Chanyeol entre ellos. Está cargando unas bolsas de plástico transparentes con un líquido rojo en su interior. Creo que es sangre.
Como el cotilla que soy, no puedo quedarme aquí parado. Me dirijo hacia el hospital ansioso por saber que ha pasado.
Fin pov Baekhyun
By Luhan
Aunque no puedo ver claramente, siento todo lo que pasa a mi alrededor. Es insoportable sentirte mareado y sin fuerzas, incapaz de abrir los ojos, pero poder escuchar como los médicos a tu alrededor dan ordenes a los enfermeros.
-Está perdiendo mucha sangre – Oigo desde lejos.
También escucho gritos, pero no estoy seguro de lo que dicen.
Alguien me está sujetando la mano, mano que por cierto siento pesada.
Con mucho esfuerzo consigo abrir un poco los ojos y veo que es Sehun quien me sujeta la mano fuertemente.
-Lu – Me dice al borde de las lágrimas.
-¿Qué es ese ruido? - Le pregunto por el origen de los gritos desgarradores.
-No te preocupes por eso ahora, solo intenta descansar – Me explica mientras siento como los médicos me toquetean por todas partes.
Algo me molesta en el costado derecho, pero estoy demasiado cansado para darme importancia. Poco a poco voy perdiendo la conciencia hasta que no siento ni oigo nada.