La atmosfera de desesperación era palpable en el ambiente, chicos y chicas se mantenían en la espera, un par de minutos más y el reloj por fin marcario la tan ansiada hora. LuHan se estiro en su asiento mientras observaba el ir y venir refinado de su maestro de administración, su largo y rubio cabello se balanceaba con su caminar, uno, dos, y se retiraba el flequillo que dejaba suelto desde siempre. Se preguntó, de nuevo, si ese hombre no se habría equivocado de profesión, volteo su mirada al asiento de junto, Kris era guapo, sin embargo a él si lo imaginaba con su imponente figura hablando de cálculos matemáticos, o dirigiendo una importante empresa, sin embargo, su maestro daba más la pinta de un artista, con esa delicada apariencia.
- No olviden colocar sus trabajos a salir. – El siempre sonriente hombre les hablo, mientras esperaba a que todos se acercaran con sus carpetas –Y tenga un buen descanso joven.
- ….-
- Gracias, y buen descanso LuHanie –Le sonrió amablemente a su catedrático y camino hasta Kris que lo esperaba en la puerta del aula.
- Buen descanso LuHanie – Se burló mientras revolvía su cabello –Luhanie~ - El mencionado dio un pequeño golpe en el hombro del rubio
- Cierra la boca FiYan
- ¡No me digas YiFan! –Se quejó mientras le arrebataba la mochila y se la echaba al hombro. –
Caminaron por el campus, era el último día de clases, al menos para ellos que habían salido lo mejor del curso, no como otras pobres almas que aun aguardaban expectantes por una nota aprobatoria, pensó como le estaría yendo al pobre chico que había pedido su ayuda durante la semana de exámenes, le había rogado tanto que el siempre frio e inalcanzable YiFan le había tendido una mano, y es que el la pobre alma estaba realmente desesperada, esperaba que al menos hubiera salvado unas cuantas materias.
- Realmete necesito algo de comida – LuHan se quejó a su lado mientras bajaba su gran mano al estómago, y es que el chino se había estado matando de hambre a los ojos del rubio, LuHan tenía una tendencia estúpida a bajar su alimentación en periodos de estrés, siempre le reprochaba pues afectaba considerablemente su salud –No me mires con esa cara de madre acomplejada porque su retoño no come en meses – bufo el mayor mientras se adelantaba a la cafetería.
- …- El chino hizo un esfuerzo sobrehumano para no reprochar la testarudez de su acompañante -…. – continuo tragándose sus palabras y solo repasando su sermón internamente mientras revisaba el menú del día. El castaño frunció el ceño al mirar el trozo de plástico, debía reconocer que la comida coreana era deliciosa para él, sin embargo la comida china hecha en corea era un tanto molesta a su paladar, muchas veces sustituían ingredientes por otros de la zona, o hacían variaciones para hacerla más agradable al gusto local, lo que era molesto e inclusive un poco insultante.
- No quiero nada chino/coreano en mi organismo –La voz de Kris sonó molesta, el más que nadie odiaba las combinaciones en la gastronomía, el chico siempre había visitado los mejor restaurantes de su país como para estar contento con una imitación de su comida.
- Pizza y malteada – Ambos sonrieron e hicieron su orden.
El día era un asco, había practicado mil veces la misma coreografía y seguía cayendo al suelo, el giro del final podía constarle buenos puntos en su calificación final si no lograba controlar su cuerpo, y para que mentir, él no era capaz de controlar nada en su vida últimamente, tras su noche al desnudo con Kai había intentado hablar con el chino, sin embargo le había sido imposible, YiFan siempre lo acompañaba y solo terminaría aun peor si se confrontaba al rubio, y ahora estaba metido en sus clases a sol y sobra, había tenido que memorizar al menos seis coreografías en menos de dos semanas, justo ahora quería ir con los estudiantes de otras facultades a restregarle sus palabras “Es la carrera más fácil que existe” ellos debían memorizar páginas de libros al pie de la letra, pero él debía ser autodidacta, solo le daban las bases, él debía comprender por sí mismo y expresar todo a través de su cuerpo. Debía montar su coreografía, ensayarla, pulirla y luego presentarla ante toda la clase.
- Mierda –La blasfemia abandono los labios de su compañero cuando cayó al igual que el en el último giro. –Esto es un asco –La exasperación de Kai se veía clara y fuerte, y debía admitir que él se encontraba igual, en esos momentos era tan molesto ser los niños sobresalientes de la clase, pues todos esperaban más de ellos, y por lo tanto dependían de rutinas el doble de elaboradas y complicadas – Mañana presentamos esto y aún no termina de salir.
- Si no lo perfeccionamos pronto tendremos que cambiar el final, aun debemos practicar el baile de la clase de jazz y hip-hop – El moreno al escuchar las palabras de SeHun se dejó caer con los brazos abierto.
- Venga – se levantó mientras recogía su mochila – Llevemos nuestros traseros a la cafetería, no quiero desmayarme en plena presentación por falta de comida – El rubio asintió mientras lo seguía, el camino a la cafetería fue ajetreado, todos los chicos del campus se acercaban haciendo preguntas ¿Esto estaría bien para el baile? ¿Qué piensas de esto hyung? y otras muchas cosas que respondieron lo más cortes posible, al claro “Vete al demonio” que deseaban soltar.
- ¡Que molestos! – ambos llegaron al recinto y se tiraron sobre la primera mesa que encontraron, la jovencita de la cafetería les entrego los menús y se retiró. El estómago de SeHun se comprimió, y su corazón dolió. Todo en ese maldito menú estaba plagado de comidas chinas que LuHan le arrastraba a comer en otros restaurantes-
- Elige tu – Tiro la carta y espero la decisión del otro.
- No te ofendas amigo, pero yo no tengo tu fascinación por los chinos – el menor le arrojo la carta a la cara mientras el otro reia – Ya! ¿Te parece pizza y soda? –
Pidieron la comida, mientras esperaban hablaron sobre lo que debían hacer con el infernal baile que no terminaba por completarse.
- Eres el experto en ballet deberías montar el final –Kai solo asintió mientras jugueteaba con sus dedos –
La chica llego con su comida y ellos atacaron todo a penas la camarera se alejó, era la regla establecida por ambos, come o comerán tu parte, ambos sabían que si se descuidaban el otro atacaría.
- Entonces, ¿Cómo va todo? –Kai hizo una breve pausa mientras observaba el rostro de su amigo entristecer.
- No he podido acercarme, y es jodido, está por acabar el curso, necesito hablar con él ya
- ¿Seguro?
- Si
- Entonces apresúrate que el chico esta justo ahí – El rubio volteo rápidamente, a unas cuantas mesas estaban ambos chinos compartiendo una pizza, y una estúpida y romántica malteada, sin quererlo sus puños se cerraron fuertemente. Jodido chino oxigenado, estaba a punto de ir y arrebatarle la sonrisa al estúpido cuando la mano de Kai se posó sobre la suya.
- Tranquilo Rocky, no quieres espantar al ciervito
Ambos pagaron la cuenta y caminaron hacia la mesa de los otros dos chicos. Con forme se acercaban más se pegaba el moreno a su amigo que comenzaba a tensar los músculos por la forma en que YiFan tocaba al castaño.
- Aprende a comer LuHan – el rubio limpio la salsa de la comisura de los labios del chico mientras sonreía. Seguían en su mundo cuando un carraspeo rompió la pequeña burbuja. De pie junto a ellos estaban SeHun y Kai, la mirada de Kris se afilo recordando la última vez que habían tenido contacto con el mejor. LuHan volteo para encontrarse con los pequeños ojos de SeHun, debía admitir que su corazón dolió, Caí estaba prácticamente guindado de SeHun y tenía una muy mala cara seguramente por estar ahí.
- LuHan, necesito hablarte, por favor – Los ojos del rubio se veían suplicantes, esa mirada jamas había sido otorgada por SeHun para con él .
- ¡Fuera de aquí, Oh – la imponente figura de Kris avanzo hasta chocar con el mencionado. LuHan se paralizo mientras procesaba lo que acababa de pasar.- ¿No entiendes? ¡Dije largo! – los largos brazos de Kris lo empujaron al mismo tiempo que LuHan se paraba, si quiera había intentado abrir la boca cuando la morena mano del moreno aprisiono la muñeca de Kris apartándola de SeHun.
- Contrólate tú, Wu, aquí nadie está peleando – los ojos centellantes del moreno molestaron a LuHan –
- Suéltame Kim – el agarre fue deshecho por el moreno que seguía fulminándose con el otro chico.
- Esto no te incumbe YiFan, ni a mí, solo a ellos.
- LuHan, por favor – la mirada de SeHun calo en lo más profundo del castaño –Solo necesito hablar contigo.
- Yo … yo … - Guio su mirada a Kris que se mantenía molesto en su lugar y hacia Kai que estaba indiferente a la escena, siempre un poco adelante del rubio para evitar otra confrontación. SeHun entendía la resistencia del chico, aun con todo la ebullición de sentimientos colándose en su interior dirigió la mirada a Kris para hablarle directamente.
- Realmente necito hablar con el –El rubio aflojo su mirada mientras analizaba la mirada del otro rubio, por primera vez en mucho tiempo sintió una actitud humilde en el altivo chico, y él debía ser sincero, sabía que LuHan debía terminar esa etapa, pero al mismo tiempo le daba pánico el pensar que su ciervo pudiera ¡Demonios no!
- Kris – Los ojos caramelo de su ciervo lo vieron suplicante, lo suficiente para hacerlo alejar la mirada.
- Bien – El rubio se apartó al mismo tiempo que Kai miraba a SeHun con una sonrisa en los labios, poso una mano sobre su hombro.
- Suerte – le sonrió una última vez antes de caminar hasta una mesa cercana.
Ambos se apartaron de sus acompañantes en total silencio, LuHan estaba frio e inclusive inexpresivo, algo a lo que SeHun no estaba acostumbrado y aunque le costara admitirlo le hacía sentir nervios, jugueteo con sus dedos cuando llegaron a un pequeño jardín, necesitaba encontrar rápido que decir si no quería que el chino se fuera del lugar,
- Entonces, ¿Qué necesitas SeHun? – Un punzante dolor atravesó el corazón del coreano mientras alzaba lo mirada hacia LuHan
- ¿SeHun? ¿Ya no más SeHunnie o Hunnie?
- Eso murió hace un tiempo.
- ¿Cuándo LuHan?
- Murió en el mismo momento en el que tu dijiste odiarme SeHun
El corazón le dolió, la mirada de LuHan acababa con sus esperanzas.