Tao despertó por una terrible calor. Miró a su alrededor, todavía algo adormido, en busca de aire. Tenía algo muy, pero muy cálido rodeandole la cintura, sosteniéndolo contra él. Cuando vio que se trataba de Kris, no pudo evitar sonrojarse con fuerza. Su respiración chocaba contra su nuca, sus labios entreabiertos le daban un aspecto sexy e irresistible a cualquier mujer. Y a cualquier hombre, comprobó el menor al sentir como su cuerpo entraba en calor, sus mejillas ardían y sentía cierto dolor en su intimidad.
Soltó un quejido al moverse un poco, siendo suavemente aplastado por el mayor, el cual se pegaba más y más. Miró hacia abajo y vio como estaba abultado. Emitió un pequeño sollozo.
-¿Tao? -Preguntó un adormido Kris, que luchaba por despertar.
-T-tío Kris... duele... -Susurró asustado el menor, mirándose sin parar.
El mayor, al escuchar eso, abrió los ojos y le miró asustado.
-¿Que duele bebé?
Tao le miró con los ojos acuoso y tomó una de las gigantescas manos de Kris y las dirigió hasta la zona hinchada, jadeando. El mayor agrandó los ojos al notar donde el menor le había dejado la mano y más aún al notar lo duro que se encontraba. Palpitaba en su mano.
-Kris... Mngh... -Gimió el pequeño, y el llamado se acomodó.
-Te ayudaré pequeño... -Besó su frente y bajó lentamente su pantalón para poder acariciar bien la repentina erección del menor. Estaba dura y suave a la vez, y muy cálida. Con tres dedos fue capaz de cubrirla entera y empezó a mover la mano justo para ver como Tao cerraba los ojos y gemía.
<<Joder...>> se dijo Kris, encontrando que él mismo se estaba excitando con la situación. <<Es tu sobrino... y tú... le estas tocando...>> pero su mano ya no podía parar, movía la mano a un ritmo casi exhausto, viendo como Tao se arqueaba una y otra vez a su lado, como sudaba y sus caderas se movían contra su mano.
-¿Te gusta pequeño? -Le susurró al oído y el menor asintió antes de culminar en su mano, casi gritando.
-Mngh... ¡Kris!
El cuerpo del mayor casi sufre un ataque al escuchar al menor, quien ahora jadeaba con fuerza. Kris se miró la mano y tragó saliva. Quería lamerla, limpiarla con la lengua. Joder...
-Gracias Gege... -Susurró Tao antes de caer dormido a su lado.
Kris seguía mirando su mano y, cerrando los ojos la llevó a su boca y lamió sus dedos con lentitud. Gimió sordamente al probar al menor, relamiéndose los labios.
-Joder... -susurró excitado.
Se acomodó a su lado, despeinándose varias veces. ¿Que acababa de hacer? <<Tío... Es tu sobrino...>> se repetía una y otra vez. <<Pedofilo>>
El mayor miró a su pequeño dormir a gusto a su lado y entonces lo supo. Debía apartarse antes de cometer el mayor error de su vida.
*********************************************
Tao corrió hacia Luhan, quien comía solo como de costumbre debajo del viejo roble de la escuela. Se sentó a su lado, jadeando con suavidad. El otro chico le miró con el ceño frncido.
-¿Estas bien Tao? -Preguntó comiendo su desayuno.
-Tengo que pedirte consejo.. Y como eres mayor...
-Dispara -Susurró el mayor mirando curioso al otro, quien sonrió amplio.
-Enséñame a seducir a mi tío...
Luhan abrió los ojos como platos. ¿Que?
-¿A-a... a tu tío? -Tao asintió- Pero Tao... ¿Cuantos años tiene?
-Tiene 30 -Dijo sonriendo como tonto. Luhan se atragantó.
-Ah... B-bien... P-pues... Lo primero de todo... Llamaré a Sehun.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Kris manejó rápidamente hasta casa de Siwon, confuso y enojado.
¿Acaso estaba loco? Era un maldito pederasta, un pervertido al haber tocado así a Tao... Aparcó frente a la majestuosa casa del otro y bajó.
¿Se había enamorado del menor? <<Claro que no, imbécil. Eres un monstruo>> Apretó los puños, pero esa voz siguió resonando. <<Un maldito monstruo que quiere dañar a su sobrino>> <<No tienes corazón>> Picó a la puerta con fuerza varias veces, y un muy despeinado y semidesnudo Siwon le abrió la puerta.
-¿Kris?
El rubio entró sin más y se sentó en el sofá rojo del mayor, miró al suelo y enterró su cara entre sus gigantescas manos.
-Soy un monstruo...
El moreno se sentó a su lado y acarició su espalda de arriba a abajo, tratando de ofrecerle un apoyo moral o algo parecido.
-Siento si interrumpí algo... -Se disculpó al rato, sabiendo que el mayor estaba ocupado.
-Tranquilo... -Lo atrajo a su pecho y acurrucó a su lado.- ¿Que ha pasado?
-Masturbé a Tao... Y-yo...
Siwon besó su cabello dorado y trató de calmarle con caricias. Entendía el dilema de su amigo, mejor que nadie, pues él también había pasado por eso.
Cuando Kris fue a hablar, Kyuhyun apareció con una camiseta del mayor y saltó a sus brazos.
-Hola Kris... -Le saludó sonriendo y después besó torpemente a Siwon, quien sonrió de ternura por ese gesto.
-Hola Kyunnie... -Suspiró y cerró los ojos- Temo dar el paso y dañar a Tao...
-Kris hyung... -Le llamó Kyu y este alzó la vista al menor.- A mi Siwi no me dañó, es más, me gustó mucho. No tienes porqué dañarle...
Siwon frunció el ceño.
-¿Como sabes de que hablamos sobre eso, ah?
El menor se sonrojó.
-Os escuché... -Murmuró.
Kris sonrió ante la ternura de Kyuhyun, y vio como Siwon le regañaba, él le hacia pucheros y el mayor no podía resistirse a besarlos. Él quería vivir eso con Tao... <<Tu solo quieres dañarle>>
****************************************
-Sehunnie, menos mal... -Gritó Luhan antes de devorar sus labios con ansias. Tao se quedó con la boca abierta ante ese gesto, impresionado, pues nunca había visto nada igual. Cuando por fin se separaron, miraron al menor sonriendo. Sehun tenía un año más que Tao, 11, mientras que Lulú tenía 13.
-¿Para que me necesitábais? -Dijo el mediano sentándose al lado de Luhan.
-Tenemos que liarnos aquí y ahora, delante de Tao. Quiere aprender a seducir.
Sehun miró a Tao, algo impresionado, y después asintió.
-Prefiero que TaoZi nos enseñe lo que sabe primero.
El menor se sonrojó cuando Sehun se acomodó a su lado y acarició su mejilla con lentitud. Tragó saliva cuando se aproximó a sus labios, lentamente.
-¡¡TAOOOOOO!! -Gritó Chen corriendo hacia él. Salvado por la campana.-Tu tío ya te vino a buscar... Parece que hoy llegó puntual alguien -Rió con fuerza y el peliazul se levantó de un salto y corrió al encuentro del mayor.
Luhan miró la escena con una amplia sonrisa.
-Esta muy bueno... -Sehun le miró mal- ¿Que? -Chen rió y asintió, dándole la razón al mayor de todos.- Yo quiero uno... -Suspiró puchereando.
-Tu y todos... -Se quejó Chen antes de recibir yna patada de Sehun.
*************************************************
El peliazul corrió al encuentro de su tío, sonriendo feliz de verle. El rubio estaba apoyado en el coche, mirando a otro lado.
-¡¡Tío Kris!! -Le saludó riendo e hizo unas muecas y saltitos para que lo cargara.
En ese momento Tao se dio cuenta que solo era tan tierno con Kris, que solo con él dejaba salir al niño que tenía dentro. Solo con el mayor se mostraba así.
Kris miró a Tao y le abrió la puerta correspondiente al menor, quien dejó de dar saltitos y de sonreír para mirarle confuso. <<Tal vez esté cansado...>> se dijo el menor antes de entrar y acomodarse con otra sonrisa. Se colocó el cinturón de seguridad y miró por la ventanilla, viendo como el mayor le cerraba la puerta e iba hasta el asiento del piloto. Se puso su cinturón y arrancó el auto en total silencio.
-¿Que haremos hoy? -Preguntó el menor.
-Ir a casa -Respondió el mayor con sequedad.
-Jo... Yo quería salir a jugar contigo...
Kris suspiró y apretó el volante. Jugar... eso le sonaba demasiado bien al mayor como para ser cierto. Pero la mente del rubio no se imaginaba a Tao pateando un balón, se imaginaba a Tao, desnudo en su cama, gimiendo y jadeando... <<¡Maldita sea! ¡Eres un monstruo!>>
-No Tao, no jugaremos -Respondió igual que antes, mirando al frente.
El menor miró sus pies.
-¿Ni un poquito? -Preguntó con un hilo de voz.
-¡No Tao! ¡Joder, no quiero jugar contigo! -Gritó el mayor, ya nervioso.
El menor agrandó los ojos y miró al mayor por el retrovisor, quien parecía estar concentrado en su tarea de manejar. Sintió una dura y profunda punzada en su pecho, agachó la vista de nuevo al suelo y de sus ojos de panda unas lágrimas cayeron, herido por la actitud del mayor. El rubio le miró un segundo, y sintió como su alma se partía al ver llorar a Tao. <<Monstruo>>
Todo el camino hasta casa fue en silencio, Tao se estaba obligando a no romper a llorar allí mismo. Él siempre había pensado que su tío era el único que le quería, pero parecía que ya se había cansado del menor. <<Como todo el mundo Tao, solo te utilizan, idiota>> Suspiró cuando el auto aparcó frente a la puerta de la casa de YiFan. Él esperó que su tío se disculpara por haber sido brusco, o algo por el estilo. Pero si tan siquiera le abrió la puerta. Salió y se encaminó hasta la puerta, dejando al pequeño allí, impactado. Bajó lentamente con su mochila en la espalda y se acercó al mayor cabizbajo. Kris le miró de reojo y abrió la puerta principal.
-Pasa -Le ordenó y se quitó la chaqueta.- Estaré en mi estudio trabajando, solo ven si es algo urgente -Le dijo y después se encerró en su despacho, dejando a un pequeño niño de diez años parado en medio de un gigante salón, con la vista nublada por las lágrimas.
Agachó lentamente la vista, sintiendo como de esa pequeña grieta en su pecho salía otra, esta vez algo más profunda. Caminó a paso rápido, evadiendo el sentimiento y las ganas de gritar. ¿Porque lo trataba así? Cerró su puerta y se tumbó en la cama, abrazando su peluche que Kris le regaló, mordiéndose el labio tratando de evitar el llanto. ZiTao no debía llorar. Él no lloraba por nadie.
Además, ¿que esperaba? ¿Que Kris fuera tierno? Él era mayor, y necesitaba hacer sus cosas. Una pequeña lágrima cayó de nuevo por su rostro. <<Molesto... ¿verdad?>> se preguntó antes de hundir la cabeza en la almohada y llorar con suavidad, dolido. <<Claro que molestas, siempre lo has hecho>> Estrujó el peluche contra su pecho, temblando.
<<ÉL tenía razón>>
***************************************
Cuando volvió a abrir los ojos, ya era de noche. Y estaba congelado. Se tapó hasta el cuello, tallándose los ojos algo hinchados de llorar. Miró la hora. Las 9:30 pm...
Sintió dos golpes en la puerta de su habitación y miró hacia allí.
-A cenar -Dijo la voz dura del rubio, haciendo que Tao suspirase. Se levantó y se encaminó hasta la cocina, donde Kris estaba preparando algo de pescado.
Tao se sentó en su taburete y miró a la mesa, abrazado a si mismo, pensativo. <<No seas frío Gege... Por favor..>> suplicó su mente y suspiró con suavidad. En diez minutos solo reinó el silencio. Tao estaba muy nervioso, y no podía adivinar el estado de ánimo de Kris, pues este ni le hablaba. Vio como dejaba su plato y se dirigía a las escaleras.
-¿Tu no cenas? -Susurró sin mirarle.
-Ya he cenado
Escuchó la puerta de su estudio cerrarse y una lágrima cayó por su mejilla. <<Claro idiota... ¿Quien iba a querer cenar con una mierda como tú?>> La herida de su corazón se hizo más grande mientras repetía una y otra vez esa frase en su mente, llorando con suavidad y en silencio. Al acabar, recogió todo y subió a la habitación del mayor. Tenía que ducharse, y le tenía pánico desde aquel día en el que ÉL le bañó... si se le puede llamar así. Picó con suavidad, y la puerta se abrió.
-Kris... ¿Puedes acompañarme a la ducha?
-Estoy ocupado Tao, no puedo.-Cerró y miró al frente. Le dolía en el alma tratar así a Tao... <<Pero así no le dañaré>>
Tao se quedó allí quieto, un buen rato hasta que se dio media vuelta y caminó temblando al baño. Encendió la luz y se desnudó, mirando los cardenales y cicatrices del cinturón que castigaban su morena piel. Jamás se irían.. Suspiró y entró en la ducha, lavándose rápidamente, sollozando por miedo. Se aclaró con los ojos abiertos que acabaron castigados por el champú. Salió y envuelto en su toalla corrió hasta su habitación, cerrando con cuidado y llorando. Sus ojos adían, estaba congelado y sus piernas temblaban. Se puso el pijama y se metió en la cama para caer en un profundo sueño.
******************************************
FLASHBACK
-H-Hyung... Esta fría... -Se quejó Tao, abrazado a cu cuerpo y temblando.
-Y a mi qué... Gírate...
-Por favor... Pon el agua caliente... -Le suplicó.
-¡Cállate mierda! -La mano de él se incrustó en la nalga del menor, quien sollozó por eso.- ¡Maldita puta! ¡No llores! -Le abrió la boca y le obligó a tragar agua.
La garganta de Tao no conseguía tomar aire y tragar el agua al mismo tiempo, y empezó a ahogarse. Sintió como sus pulmones se quedaban sin aire, como el agua llegaba a su nariz...
FIN FLASHBACK
Tao se incorporó sudando y llorando con suavidad. Miró a su alrededor hasta ubicarse y encendió corriendo la luz, mirando con miedo la habitación. <<No está...>> se susurró calmando su respiración acelerada. Salió al pasillo y se encaminó hasta la habitación del mayor. <<Te necesito Gege... Tengo miedo...>> susurró en silencio y trató de abrirla. Cerrada. Lo intentó ahora con más desesperación.
-Gege... -Susurró muy bajito- Abre por favor... Y-yo... Gege tengo miedo... -Susurró llorando con suavidad- Abre Kris... -Trató de abrir de nuevo y al ver que no podía se acurrucó allí, a un lado de la puerta de madera, mirando aterrorizado el pasillo que se extendía frente a él.
<<Gege... yo te quiero...>> pensó antes de dormirse de nuevo llorando.
Y las grietas de Tao se hicieron más profundas.