Amargos recuerdos
-buenos días anoki
-buenos días – el rubio iba bajando las escaleras para dirigirse a desayunar - ¿Cómo la pasaron ayer en la playa?
- bien – respondieron al unísono uno con una sonrisa deslumbrante y otro con un aura a su alrededor que daba miedo
- oh ya veo, hiro-chan ¿te podrías parar? O es que te duele la cadera – el oji verde al no recibir respuesta más que la tenebrosa mirada del demonio kamijou se propuso a hablarle a su hermano – onii-chan no le des tan duro a hiro-chan, porque no podrá caminar bien – hiroki ya estaba al límite y le arrojo un libro al rubio – ouch, el demonio kamijou ataco de nuevo – nowaki ignoro la peleo de esos dos, y tomo su maleta
- ya me voy, adiós hiro-san, anoki –
- ¡adiós! – el menor sonrió para su hermano
- que te vaya bien – contesto hiroki
Un peli azul salía hacia su trabajo, mientras en el departamento todavía se encontraba un castaño y un oji verde discutiendo, hasta que el oji café se percató de la hora
-¡demonios!, me tengo que ir – hiroki tomo sus maletas y se dirigió a la puerta
- ¿vas a la universidad?
- si
- ¡voy contigo! – anoki se encamino a la puerta
- ¡¡no!!
-¿eh?, pero hoy comienzan mis clases y estoy en tu universidad, en literatura- el oji verde sonrió al notar el enojo del castaño
- está bien – acepto a regañadientes y así los dos fueron a la universidad
Cuando llegaron se tuvieron que separar en la puerta del instituto para cada quien ir a su correspondiente clase, pero cuando anoki iba a llegar a su clase… se detuvo un momento y decidió reposar bajo un árbol dado a que casi no durmió la noche anterior… cuando despertó recordó que era clase del demonio kamijou y eso no se lo iba a perder por nada. Cuando llego se percató que llegaba 10 minutos retrasado y si más abrió la puerta de aquel salón
-¡¿Quién te crees para llegar tan retrasado?! Personas a las que no les importa la literatura no deberían estar aquí – su voz se mostraba irritada
- cálmate hiro-chan… - antes de que el mayor dijera algo se dirigió a las personas que estaban sentadas que ahora serían sus compañeros – mi nombre es kusama anoki y desde hoy estudiare aquí – acabando de decir esto fue a su asiento… la persona que está a su lado tiene cabello castaño, ojos esmeralda y de menor estatura
- tiene un carácter bastante peculiar el profesor ¿no? – dirigió su mirada hacia al chico que estaba a su lado
-s-si –
- mucho gusto mi nombre es… creo que ya lo escuchaste – sonrió un poco el rubio – y ¿Cuál es tu nombre?
- mi nombre es takahashi misaki
Toda la clase se la pasaron hablando sobre cosas triviales como de donde venía anoki o cosas al respecto… claro que fueron reprendidos varias veces por el demonio kamijou hasta les arrojo libros. Cuando termino la clase el maestro llamo a ambos
-¡ustedes no respetan mi clase y se quedaran castigados! – claramente se notaba un aura obscura alrededor del castaño
-¿ehhh? – misaki al parecer era el único preocupado así que el oji verde se acercó a él y le susurro `` no te preocupes yo lo resuelvo``, en un movimiento anoki jalo de la cintura al oji café y le tomo del mentón
-¡¡¿Qué haces?!! – el castaño se libró de la posición en la cual estaban
- vamos hiro-chan, es mi primer día… no seas tan duro… además fue mi culpa yo lo entretuve – señalo a misaki
- ¿crees que con eso los voy a dejar ir? – El maestro se dirigió a la puerta dispuesto a salir – y anoki ¡¡¡no me llames hiro-chan!!! – en un segundo ya no estaba el castaño y se quedaron solos en esa sala
-¿anoki?, lo conoces
- si… algo así –
Paso toda la hora en que los dejaron castigados… pero no se quedaron sin hacer nada más bien se quedaron a resolver operaciones y no de las básicas unas bastante complicadas… lo bueno es que anoki aunque es perezoso realmente es inteligente y le explico a misaki lo que debía hacer… así tardaron menos en salir de aquella sala de la tortura para cada quien ir a su respectivo hogar
-ahora ¿Qué hago? – Se preguntaba un rubio bastante aburrido, al poco rato un celular sonó haciendo que volviera a la realidad - ¡¿Qué demonios?! – Exclamo al ver la persona que llamaba, después de pensarlo un largo rato decidió contestar - ¿Qué quieres? –hablo con un tono serio
-¿eh?, vamos no me digas que no me extrañaste… yo a ti si – dijo aquella persona en un tono juguetón
-¿para qué llamaste?, ¿no te basto lo que me hiciste… Frank? – su voz se notaba amarga, seca
- ¡te extraño!… ven conmigo… no extrañas lo que hacíam- bruscamente el rubio corto la llamada
- déjame en paz…que más quieres de mi – tenía un tono de voz suplicante – nunca voy a perdonar lo que me hiciste… por tu culpa yo… por tu culpa yo… ¡maldita sea! – se arrojó en el sillón, para después de un rato de sumergirse en sus pensamientos se puso de pie y fue al refrigerador – así que tiene – el oji verde tomo las bebidas que estaban en el refrigerador y se dispuso a tomarlas
30 min después
-si hiro-san, eso paso – los dos amantes entraron al departamento y se encontraron una desagradable escena a anoki tomando… el peli azul rápidamente corrió hacia donde se encontraba su hermano para quitarle la botella que tenía en mano
-que… haces…devuélvemela – anoki a penas se podía poner de pie
- es suficiente, ve a dormir – al ver el oji azul que su hermano no hacía caso lo cargo y se fueron a su habitación
-¡¿Qué...haces bájame?!
- no tú te quedaras aquí – nowaki cerró la puerta de la habitación
- onii-chan…lo siento – anoki se fue recostar a su cama * lo siento… dije que ya no recaería…, pero lo hice onii-chan tú no tienes la culpa, tu mereces ser feliz… eres una buena persona. Frank… porque hiciste eso… por tu culpa…*