*lo siento ya no puedo permanecer más tiempo aquí… después de lo que paso ayer seguro te he decepcionado… onii-chan… no quiero causarte más molestias de las que ya te he hecho* en cuanto despertó anoki tomo sus maletas y se marchó para su buena suerte no había nadie despierto… cuando iba en la calle se encontró con la persona menos esperada
-hola kusama – se detuvo un momento al ver las maletas que cargaba el rubio - ¿A dónde vas?, ¿sucedió algo con kamijou o tu hermano?
- n-no me tengo que ir –
- sabes no eres bueno para mentir, me preocupas que es lo que tienes – el mangaka mostro una clara preocupación por lo que le pasaba al oji verde haciendo que este se sonrojara
- está bien anoche hice algo horrible… por lo tanto no me puedo quedar en casa de onii-chan – el menor mantuvo un semblante indiferente algo inusual en el
- … ya veo… en ese caso ¿te quieres quedar en mi casa? – los ojos del rubio se abrieron a causa de la sorpresa
- no, no te quiero causar molestias – anoki se negó rotundamente
- entonces ya está decidido… te vas a quedar en mi casa – el mayor tomo de la mano al oji verde y lo llevo a su casa
- perdón – menciono el rubio mientras entraba
- ¿porque te disculpas?, yo fui el que te invito – ijuuin amablemente le mostro el cuarto en donde se quedaría su invitado especial
Ijuuin se fue de la habitación dejando solo a anoki para desempacar sus cosas y darse un baño *es muy amable ijuuin-sensei… yo no merezco esa amabilidad de parte suya, pero esto me servirá para no decepcionar más a onii-chan… si no quiero que onii-chan se ponga triste entonces… ¿Por qué le quiero quitar a esa persona tan especial para el?, ¿Por qué esto es tan contradictorio?... ¿Qué debo hacer? No debo causarle más molestias a onii-chan… si es así ya no tengo opción debo olvidarme de hiro-chan… si es lo correcto ¿Por qué me siento tan mal?... al principio fue un capricho pensaba que si le quitaba esa persona tan especial a mi hermano yo también lograría ser feliz… que egoísta soy…* sin darse cuenta anoki estaba durmiendo en la regadera con esas gotas cristalinas cayendo sobre su delicada piel disimulando un poco las lágrimas que habían caído con anterioridad sobre su rostro angelical.
El mangaka se preocupó por el rubio ya que no salía de la habitación así que decidió entrar a ver que sucedía, noto el ruido del agua caer y se dirigió a la regadera encontrándose a un anoki inconsciente sin ninguna prenda que cubriera su blanca piel, haciendo que el mayor tuviera un leve sonrojo aun así coloco al oji verde entre sus brazos y lo vistió… el día anterior el mangaka trabajo hasta tarde… por lo tanto cayo rendido junto a anoki en aquella cama en un sueño en que ninguno quería despertar.
-¿Dónde estoy? – el oji gris se dio cuenta de que estaba abrazando a anoki inconscientemente y rápidamente deshizo el agarre y percibió un gran sonrojo por parte del rubio el mayor lo vio con ternura y le dio un suave beso en la frente –por dios kusama estas ardiendo en fiebre – rápidamente corrió hacia la puerta, pero antes de que se pudiera ir escucho a anoki hablando entre sueños
-n-no, p-por favor ¡¡no!! – el menor empezó a llorar desconsoladamente y antes de volver a quedar dormido completamente dijo otras palabras que no le agradaron en nada al mangaka – po-porque hiciste eso f-Frank – en el tono de voz del menor se podía percibir que estaba aterrado y triste
El mayor salió de la habitación y llamo a un doctor para después regresar a donde estaba el oji verde
-resiste un poco más anoki ya viene el doctor – el oji gris coloco a anoki en sus brazo mientras jugaba con su cabello y lo acariciaba - ¿Quién es Frank? Kusama… ya no llores – el menor lentamente abrió los ojos y casi al instante se levantó de la cama cayendo de rodillas – no hagas eso siéntate pronto vendrá un doctor – dijo el oji gris con una voz dulce y amable. Anoki volvió a tomar lugar el costado de ijuuin en aquella cama – hace un rato estabas hablando entre sueños y mencionaste a un tal- el mayor fue interrumpido por un gran azotó en la puerta haciendo que anoki se exaltara
- ¡ya llegue kyo!... ¿te enfermaste de nuevo? – rápidamente el doctor entro a la habitación en donde se encontraban el enfermo y un mangaka enojado
- no, el enfermo es el que está en la cama todo rojo porque está ardiendo en fiebre – el mayor no podía esta mas estresado
- vale, vale pero no te enojes
El doctor se acercó a revisar a anoki quien no opuso resistencia… lo que más le enojo al mangaka cuando le quito la playera que el mismo le había puesto y dejaba al descubierto su blanca piel, pero ¿Por qué el oji gris se sentía así?, ¿Qué le estaba pasando? * ¡Estúpido ryu no lo toques tan descuidadamente!... ¡ah! ¿Por qué el si lo puede tocar y yo no?... ¡espera un momento kyo! ¿Por qué te preocupas por esto? Pareces su novio… ¡novio!, no pienses en eso además ya tienes a alguien que te gusta aunque él ya tenga a ese estúpido escritor*
-¡listo! Solamente necesita reposo, así que no lo molestes kyo –
-¡¡ya vete ryu!!
-como usted ordene su majestad – se fue dejándolos solos en la habitación
-¿Cómo te sientes kusama? –
- estoy bien, solamente quisiera dormir un poco
-claro – ijuuin salió de la habitación *¡ahh! Demonios se me olvido preguntarle sobre ese tal Frank… bueno se lo preguntare mañana*
En la habitación de anoki
*¿Cómo fue que llegue hasta aquí?... lo último que recuerdo es que estaba tomando un baño…Mmm… bueno no debo darle gran importancia. Note la mirada de ijuuin me revisaba el doctor estaba enojado… me miraba algo enojado… tal vez tenga algo con ese doctor, bueno es su vida y no lo debo criticar, además se decían por sus nombres… ¡ah!... ¿Por qué me siento tan mal por eso?... solamente tengo sueño*
Anoki sintió que algo presionaba sus labios… así que lentamente abrió los ojos y se encontró con algo que nunca hubiera esperado
-ngh – anoki rápidamente se apartó de la persona que tenía enfrente - ¿s-sensei? – los ojos del chico lo miraban con gran confusión, pero este no respondió y en su lugar le desabrocho la camisa al oji verde, rápidamente se dirigió a sus botones rosas y comenzó a lamerlos –nghmn s-suélteme s-sensei – dijo entre jadeos que rápidamente se convirtieron en gemidos, nuevamente el oji gris no respondió y callo las quejas del menor con un beso. Anoki se inquietó al sentir una mano bajar por su abdomen hasta llegar a su miembro acariciándolo sobre la tela – p-por favor s-sensei deténgase – anoki tenía lágrimas en sus ojos y al ver que no tenía la mínima intensión de detenerse el oji verde le dio una bofetada a su atacante para hacerlo entrar en razón este solamente abrazo al rubio.
- l-lo siento – anoki sintió unas cálidas gotas caer por sus hombros –l-lo siento, lo siento, lo siento - decía el mayor entre sollozos a lo que el oji verde le devolvió aquel abrazo
-n-no se preocupe
- no me vas a decir que te doy asco y que no me quieres volver a ver por lo que te hice – levanto su rostro y vio al rubio con temor en los ojos
- claro que no
-¿Por qué?- la recamara se quedó en silencio por unos cuantos minutos – eres una buena persona anoki, gracias – dijo esto para después quedarse dormido en los brazos del menor
-sensei… ¿Por qué hizo eso?...