Confesiones
Pov de Seto
Mis palabras salían llenas de furia, trataba de controlarme porque golpearlo sería una pérdida de tiempo, él nunca podría estar a la altura de siquiera tocar o rozar mi piel aunque sea con un golpe…
-Las cosas no acaban ahí… si pudiera te mandaría a matar o torturar pero sé que nada que te pudieran hacer podría pagar el daño que has hecho… estar con Joey me ha vuelto más humano… tienes suerte en otro momento no hubiera dudado de matarte yo mismo…- tome mi chaqueta e hice una señal con la mano y la puerta se abrió, de poco a poco fueron entrando policías
Lo único que escuchaba eran mis pasos sobre el piso de madera y unos cuantos gritos del gusano, mi cabeza estaba llena de preguntas, angustia y tristeza- Joey- Me subí al auto y a toda prisa conduje hasta el hospital en donde estaba mi amado, mis lágrimas no me dejaban ver, el camino era borroso, por momentos olvidaba a donde iba para que iba, mi mente estaba llena de esas imágenes de su cuerpo maltratado.
Al llegar deje el auto mal estacionado e incluso con las llaves puestas, el único que quiera era verlo y asegurarme de que estuviera bien, comencé a grita y dar órdenes al personal.
-Tranquilo grandulón- la voz de una mujer me saco de mi histeria- Él está descansando, no ganaras nada gritándole a todo el mundo-
-¿Quién te llamo?- dije sin voltear a verla
-Jure estar con él en las buenas y las malas- hizo una breve pausa- y parece ser que no ha tenido peor momento que este-
-¿Dices que por mi culpa paso esto?- dije golpeando la pared
-Tranquilo… no me mal interpretes… seguramente esto hubiera pasado aunque no estuvieras con el… no te culpo a ti… no culpo a nadie…- el leve olor a cigarrillo atrae mi atención
-Apaga esa porquería estamos en un hospital-
Una estrepitosa risa de Mai se escucha por todo el lugar –Joey sí que te ha cambiado- termina su risa cuando ve mi cara de enfado- Aún recuerdo cuando te conocí en aquella reunión fingida… la verdad cuando me contaste de tu plan para estar con Joey me pareció que eras un desquiciado…- saca el humo del cigarrillo de su boca- pero cuando supe el porqué de tus planes de mi cuanta de que mi amigo estaría con una buena persona… - con las gemas de sus dedos apaga el cigarro- él es muy fuerte y va a estar bien-
De una puerta sale una sonriente Isabel –Me han dicho que el joven Joey se encuentra bien, tiene algunas heridas superficiales y no ha comido bien, pero con cuidado y amor estoy segura de que se recuperará muy pronto-
-Esa es una buena noticia ¿verdad Kaiba?- Mai se acerca y me da una palmada en la espalda- te daré permiso de que lo veas recién que despierte, iré por café- y sin más se escucha el sonido de sus tacones avanzar hacia la salida
-Creo que tienes mucho trabajo que hacer con el- dice Isabel- demuestra todo tu amor por el… dile la verdad…- yo solo afirmo con la cabeza y entro a la habitación. Todo ahí adentro tiene un horrible aroma a medicamento, doy algunos pasos y el aroma a miel toca mi nariz, es increíble que a pesar de todo el siga siendo tan dulce.
Tiene algunos parches en sus brazos y uno en su frente, algunas zonas las tienen rojas y a pesar de que está dormido sé que tiene los ojos muy rojos por haber llorado tanto tiempo. Junto a su cama hay una pequeña silla, la cerco un poco más a la cama y me siento en ella, tomo la mano de Joey y le doy un beso. Ciento una miradas sobre mí, la mano de Joey comienza a moverse, alzo un poco la vista y veo que se ha despertado, él sonríe.
-Esta historia de amor es bastante extraña… se supone que a la princesa la despierta un beso de amor en la boca no en la mano… además el dragón se queda a cuidar la torre- su sonrisa es hermosa
-Joey- trata de incorporarse, pero algo le duele- espera no te levantes, quédate así-
-Sí que estaba loco ese Duke- suspira- tengo hambre-
-¿Qué quieres que te pida de comer? Tú solo di un platillo y te lo traeré de donde sea-
-Quiero… quiero…quiero… quiero un beso de mi primer amor…- suelta una carcajada al ver mi cara de sorpresa- quiero una gelatina de cereza-
-No juegues conmigo-
-¿Por qué si tú lo hiciste?- sus ojos comienzan a cerrarse de nuevo- gracias por rescatarme- es lo último que escucho decir antes de que caiga en los brazos de Morfeo nuevamente. Entre lazo nuestras manos, acaricio sus nudillos, él no puede irse de nuevo de mi vida, yo tengo que contarle la verdad.
Es entonces que veo en su mano izquierda algo que llama mi atención, es un anillo con un enorme diamante, por un momento mi cabeza empieza a dar vueltas, <<seguro que se lo dio ese gusano>> pensé, pero luego lo comienzo a ver más de cerca porque me parece familiar.
-Es el anillo de mamá- no logro comprender que hace Joey con el anillo de mi mamá, ese anillo desapareció junto con ella, mi corazón comienza a latir muy fuerte, se empieza a oscurecer todo hasta que siento unas manos sobre mis hombros
-¿Ya despertó Joey?- dice Isabel
-Ya pero, se ha vuelto a dormir-
-Seguro que está muy cansado- la tomo de la mano- ¿Te encuentras bien?- yo señalo la mano izquierda de Joey- ohhh no me digas que se anillo es… vaya sí que Joey tiene muchas cosas que contar-
Estos días han sido difíciles, he tenido mucho trabajo a causa de los problemas causados por el Gusano Duke, tanto así que decidí traer a la oficina a la casa para poder estar cerca de Joey, trato de comer con el todos los días, el aún no puede salir de la cama por lo que comemos juntos en la habitación, a veces Mokuba nos acompaña, aunque me siento más feliz cuando estamos los dos solos. No he encontrado las palabras precisas para hablar con Joey acerca del anillo de mamá, tampoco encuentro el valor para contarle mi historia de amor hacia él.
Depuse de todo me parece que soy un tonto, hemos pasado por tanto y tengo miedo de que más pueda pasar. Los papeles llenan mi despacho, son miles de formatos que firmar, revisar, corregir… estoy cansado de todo esto…
-Sorpresa- dice Mai entrando al despacho- Hemos venido a saludar, tras de ella y con mucha calma entra Joey con ayuda de un bastón, el doctor dijo que era una buena idea que caminara un poco por la casa- es un alivio que esta mujer este aquí, a decir verdad confió mucho en los cuidados que tiene con Joey y es que aunque Tea cuide también de él yo sé que Mai lo hace realmente de todo corazón.
-Joey- digo con una sonrisa
-Es raro verte sonreír así- Joey camina hasta una silla- debo descansar un poco- salto sobre unos papeles y lo ayudo a sentarse
-Los dejaré solos un momento, tengo que ir al trono de la reina- Mai cierra la puerta después de salir
-Joey me alegra que te sientas mejor-
-A mí también, creí que nunca podría salir de la cama- nos quedamos un minuto en silencio, el comienza a jugar con el anillo de mamá, nota que observo el anillo- sonará loco, pero vi a tu mamá en un sueño… me dio este anillo…cuando desperté ya lo tenía…-
-Ya veo… me hubiera gustado verla…- suspiro
-Ella te quiere mucho- se quita el dedo de las manos- creo que lo correcto es dártelo a ti… es un recuerdo de tu mamá-
-No… estoy seguro de que ella quería que tú lo tuvieras… tal vez esto demuestra que aprueba mi matrimonio-
-¿Seto Kaiba diciendo eso?- Joey ríe a carcajadas- tal vez es el destino-
-Joey… antes de verte en el restaurante en el que trabajabas yo ya te había visto…-
-¿Me seguías no es así?-
-Hablo de muchos años antes… cuando tú eras pequeño y vivías aquí-
-¿Te refieres a antes de la muerte de mi madre?- afirmó con la cabeza- desde aquel entonces eras un acosador- se ríe nuevamente
-No… tu y yo éramos amigos… una vez me encontraste llorando…-
Fin Pov de Seto
Pov de Joey
Mi cabeza comenzó a hacerse bolas, los años pasaban rápido por mi cabeza, y entonces recordé esos ojos azules llorando, era un pequeño de cabello castaño con una gran tristeza en su semblante… ese niño era Seto.
-Tú eras el niño al que no le dejaban comer chocolate… no lo puedo creer…-
-Joey desde ese momento quede enamorado de ti… tu dulzura me cambio por completo la vida… te busque por mucho tiempo… ahora sé que te fuiste de la ciudad por la muerte de tu madre…- suspira
-Sigo sin creerlo… sigues siendo idéntico… no has cambiado en nada- y es cierto, no sé por qué no me di cuenta de que eran el mismo – no se decir que todo esto es a causa del destino o es causa tuya, pero me hace muy feliz saber que ese amiguito mío este bien- me quedo un momento en silencio- es lindo que alguien luche por el amor de otra persona… Señor Seto Kaiba es usted el hombre más romántico que conozco- le sonrió, entonces tocan la puerta
-Es hora de tu medicamento Joey- Mai entra con un vaso de agua y el frasco de mi medicamento- le he dicho a Isabel que hoy comerían aquí ¿está bien?- ambos asentimos- ok, continúen con su plática, los dejo solos de nuevo-
-Cuando yo llegue a esta casa me sentía fuera de lugar, no conocía a nadie, todo era raro para mí, no sabía ni donde era el comedor… me sorprende que ahora todo me sea tan familiar, me siento a gusto aquí con Mokuba, Tea, Isabel, Mai… y contigo- un leve sonrojo en mis mejillas me delata
-¿eres feliz aquí?-
-Por supuesto- digo sonriéndole
Fin Pov Joey
Los días pasaron después de esa confesión del amor de infancia de Seto, la relación de ambos se iba haciendo cada vez más cercana, incluso dormían abrazados y Joey a veces le daba un beso de buenas noches en la mejilla a Kaiba. La salud de Joey también había mejorado, ya no necesitaba del bastón para poder caminar, incluso había vuelto a sus clases para poder ocupar el lugar que le correspondía en la empresa. El dragón comenzó a ir a las oficinas de la empresa poco a poco hasta que todo regreso a la normalidad, juntas llenas de accionistas extranjeros, nuevos proyectos, reuniones con empresarios, etc.
Una mañana Joey decidió hacer su primera visita a las oficinas de la empresa, tomo la ropa que Isabel le había recomendado llevar, se puso loción, peino un poco su cabello y se fijó que todo estuviera en orden, tomo su maletín y sin más emprendió su camino.
El motivo real de la visita a la empresa no era conocer la empresa como tal, ni saber cómo iban las cosas, ni mucho menos empezar con su trabajo, su motivo real se centraba en ver a Seto, extrañaba las tardes comiendo en la cama viendo películas románticas que a Seto no le gustaban. Joey se preguntaba qué era lo que había cambiado en el… <<esto es amor>>
Al entrar a las oficinas todos volteaban a verlo, al principio el creyó que porque iba mal vestido, pero después empezó a escuchar los murmullos de las personas <<es el esposo del señor Kaiba>> decía el policía de la entrada, <<que guapo es>> decían algunas empleadas la recepcionista que se encontraba fuera de su lugar de trabajo corrió a gran velocidad para atenderlo- Buenos días señor Wheeler, le diré al señor Kaiba que está aquí-
-¿Habría la posibilidad de que no se enterará? Quiero darle una sorpresa-
-Por supuesto, su oficina está en el último piso y el elevador esta hacia la derecha-
-Gracias- digo regalando una hermosa sonrisa
Los murmullos se escucharon de nuevo en el ascensor <<dicen que están planeando tener un hijo>> <<ellos son el uno para el otro>> <<Que bonita pareja hacen>> así hasta llegar al último piso, cuando estaba a punto de llegar, el rubio tomo una fuerte bocanada de aire para darse valor y salió del ascensor. Frente a él había un escritorio en el que se encontraba la secretaria de Kaiba –Hola- dijo Joey – ¿Puedo ver a Seto?-
-Claro, en un momento le aviso que está usted aquí-
-¿Puedo pedirte un favor?- la chica afirmó con la cabeza- quiero darle una sorpresa y bueno… no sé si tú nos pudieras dejar solos un par de horas…- la mujer soltó una leve risita y sin más se levantó de su lugar y tomo el ascensor
Y entonces ahí se encontraba Joey frente a la cueva del dragón, apretó un poco el maletín con la mano que lo sostenía y con la otra abrió lentamente la puerta sin hacer ruido, tras entrar cerró la puerta con seguro. Recorrió con la mirada cada parte de la oficina, era muy amplia, hasta tenía una pequeña sala en una esquina, no había rastro de Seto, entonces escucho ruido de una puerta, supuso que estaría en el baño así que decidió poner en marcha su plan.
No estaba seguro de que lo que estaba haciendo le gustará a él, pero a Seto seguramente lo dejaría extasiado. Lentamente se quitó el saco, la corbata, su camisa y pantalón, quedando solamente el calzoncillos que eran semitransparentes, por lo que dejaban muy poco a la imaginación, de maletín saco un pequeño látigo y tomo asiento en el escritorio de Kaiba esperando a que saliera.
La puerta se abrió lentamente, <<es ahora o nunca>> pensó Joey y comenzó a lamer el látigo de manera bastante provocativa. Tras salir de baño Seto Kaiba no daba crédito a lo que sus ojos estaban viendo, su pequeño Joey estaba semidesnudo sobre su escritorio lamiendo un látigo –Ven Seto- dijo Joey mientras bajaba del escritorio- yo sé lo que quieres- Seto comenzó a dar pasos lentos- acércate, más no te voy a morder- el dragón seguía atónito- ¿Quieres esto Seto?- decía el rubio señalando su trasero y moviéndolo de manera provocativa.
-Joey… alguien nos puede ver…- decía el castaño mientras tomaba el trasero del rubio
-Estamos solos… vamos… castígame por hacerte cosas malas…-
-Joey no puedo-
-Vamos… sé que te va a gustar lo que tengo para ti…- abrió su maletín y mostro todo un arsenal de juguetes sexuales- ¿Con cuál empezamos primero?-
-No Joey no puedo…no quiero hacerlo…-
-No digas eso… tú lo quieres… te he escuchado por las noches cuando duermes… sueñas con esto…- dice acercando su trasero a donde esta Kaiba y lo mueve un poco
-¿Tú quieres hacer esto?-
-Claro, de otro modo no estaría aquí- lo toma por el cuello- vamos dame un beso- Kaiba toma por las nalgas a Joey y lo levanta, este enreda sus piernas sobre la cintura del mayor y se funden en un beso lleno de lujuria y amor –Que duro estas- dice Joey tras separarse del beso- El castaño lo lleva directo escritorio y lo recuesta ahí un momento, se quita el saco, la corbata y la camisa, dejando a la vista del rubio el perfecto abdomen marcado, este no pierde el tiempo y comienza a delinear con su lengua cada una de las líneas del abdomen, poco a poco abre el pantalón de su amado y lo baja, Joey puede ver que Seto está completamente erecto, comienza a jugar con el resorte de los boxers de Kaiba y a lamer el mimbro sobre la tela.
-Vamos Joey, no seas malo…- decía entre gemidos- mételo de una vez a tu boca- Joey hizo caso omiso a las suplicas del dragón y comenzó a masajearlo por unos minutos –Joey- de un momento a otro lo metió dentro de su boca sacándolo para lamer su extensión. –No aguanto más Joey, tengo que hacerte mío-
-Ven… vamos al sofá…- Seto solo observa como Joey se quita su diminuta ropa interior y se posiciona en el sofá, ofreciendo su cuerpo y su entrada- ven Seto… tómame de una vez-
Pov de Joey
No sé en qué estaba pensando cuando fui a esa tienda a comprar este tipo de cosas, a decir verdad, nunca me imaginé que yo fuera capaz de planear algo así… y mucho menos para el… después de lo que paso he pensado que lo único que le falta a esto es amor… un poco de amor del bueno… sé que él sabe que yo hago esto porque lo amo… porque aprendí a amarlo pese a la adversidad de las circunstancias.
- Ven Seto… tómame de una vez- alzo un poco mis piernas y paso mi mano entre mis piernas, él se acerca a mi admirándome de pies a cabeza, me siento muy extraño, todo mi cuerpo se encuentra muy caliente y además verlo a él me pone aún peor- Que esperas… hazme tuyo- con estas últimas palabras se abalanza contra de mí, me besa como si fuera la última vez que no veremos, son besos rápidos, fuertes y con mordiscos.
-Siempre has sido mío- muerde un poco mi oreja- te doy a hacer sentir el cielo- toma mi mano y la mano en su miembro, yo la conduzco con cuidado a mi entrada, cierro los ojos sé que esto va a doler y tengo miedo, espero unos segundos pero, no pasa nada, abro mis ojos y me doy cuenta de que el me mira-Prometo que no dolerá- y comienza a besar mi cuello, siento como lentamente su miembro va abriendo paso dentro de mí, duele un poco el grosor de Seto, el me abraza –Te amo Joey- nuestras lenguas empiezan a jugar nuevamente, el está completamente dentro de mí, después mueve lentamente sus caderas, es una sensación nueva para mí, esto no es sexo… el me está haciendo el amor.
Con sus caricias se van todas las heridas de la vida, mi cuerpo comienza a purificarse junto con mi mente y sobre todo con mi corazón, Seto es como un artesano haciendo algo nuevo de algo viejo y maltratado. Cuando me toma los glúteos para embestirme más fuerte no lo siento como una amenaza como cuando empezábamos a dormir juntos y en las noches me manoseaba, esto se siente distinto, sus manos son tan conocidas pero a la vez tan desconocidas.
El final está cerca puedo sentirlo con cada embestida, son más rápidas y fuertes, solo puedo escuchar nuestros sonidos muestra del pacer y nuestra carne chocando, él llega a un punto que me hace retorcer de placer, ¿es eso lo que todos buscan?, siento como si nada en el mundo pusiera superar eso, nadie es tan feliz como yo en estos momentos.
-Joey…- dice jadeando- me voy a venir- y sin más siento un líquido correr en mi interior, tomó la iniciativa nuevamente y lo tomo por el cuello para fundirnos en un beso, sus brazos rodean mi cintura, me siento tan protegido cuando hace eso, nada malo va a volver a pasar.
-Te amo Seto- digo tras terminar el beso, sus ojos se abren por completo, su cara de sorpresa me causa gracia, hoy la ha hecho varias veces.
-¿Me amas?-
-Por supuesto… ¿crees que hago esto con quien sea?...- el me abraza muy fuerte, pero algo no está bien- ¿Seto?- me separo un poco de él, sus ojos están cubiertos de lágrimas, entonces recuerdo a aquel pequeño que encontré en el parque, sigue siendo igual de tierno, con el dorso de mi mano limpio una lagrima que recorre su mejilla.
-Soy muy feliz Joey-
-Yo también soy muy feliz- lo abrazo-creo que es hora de que me vaya, la secretaria no tarda en regresar-
-Quédate conmigo esta tarde-
-No puedo tengo algo que hacer, pero prometo que mañana vendré a quedarme toda la tarde contigo- me levanto del sillón y busco mi ropa
-Es cierto, tengo una junta a las 7- Seto se levanta a toda prisa, tomo sus calzoncillos que están sobre mi saco y se lo aviento, su cara de preocupación se va y me sonríe
Tomo mi ropa y me visto lo más pronto posible, me encuentro acomodando mi corbata cuando Seto se para frente a mí- Joey se te ha olvidado ponerte esto- me enseña la diminuta ropa interior con la que llegue
-Ohh es verdad- abro mi maletín y la guardo ahí
-Joey…- Seto hace una cara de desagrado
Suelto una carcajada -Si traigo ropa interior, ¿quieres ver?- digo pícaramente
-Dejémoslo para la noche ¿vale?-
-Te esperaré despierto- digo dándole un beso en la comisura de los labios- Nos vemos en la noche- y salgo de su oficina, la secretaria aún no ha llegado, tomo el ascensor al bajar me despido con toda la normalidad del mundo y tomo el auto que me espera afuera
-¿Y bien? ¿Cómo te fue?- dice Mai al regresar a la mansión
-Digamos que…bien-
-¿Bien? ¿Seto Kaiba lo hace bien? Vaya… yo esperaba algo como “fue lo mejor que he hecho”-
-Mai… le dije que lo amo…- mi amiga me da una palmadita en la espalda-Todos ya sabíamos eso campeón-
Fin Pov de Joey
Los ultimo rayos de soy comenzaban a desaparecer en el hermoso manto de la noche, el alumbrado público empezaba a encenderse, las luces de los edificios le daban aires de Glamour a esa pequeña cafetería. Las personas platicaban algunas reían, otras lloraban o solo veían pasar a las personas por la calle. El joven rubio de la mesa frente a la ventana era distinto, jugaba con un anillo que se encontraba en su dedo y observaba impaciente en su silla.
<< ¿Abra recibido mi recado?>> pensaba <<tal vez… tal vez se le olvido con tanto trabajo…>> entonces lo vio corriendo entre la gente, un joven castaño de ojos azules corría para entrar a la pequeña cafetería, entonces el rubio se levantó y fue directo a la cocina del lugar.
-Bienvenido- decía una alegre chica al joven castaño- Una mesa se acaba de desocupar-
-No quiero comer, quiero a Joey, ¿Tú lo conoces verdad? Dime donde esta- decía gritando
-No lo conozco- dijo la chica sonriendo
-Él trabajaba aquí- preocupado Seto volteaba para todos lados
-Ohhh es que soy nueva aquí, tome asiento llamaré al gerente estoy segura de que el podrá ayudarlo- la chica le mostro una mesa desocupada frente a la ventana, el dragón se sentó, estaba muy preocupado, no sabía porque había desaparecido de esa manera Joey ¿Algo hizo mal ese día? todo iba bien hasta que Joey se pareció con esa diminuta ropa interior unas horas antes en la oficina, pero realmente eso no había empeorado nada sino que al contrario… <<¿Entonces qué fue lo que paso?>> fijo su mirada en la mesa porro que no pudo notar que alguien se acercaba
-Buenas noches caballero, le dejo la carta, mi recomendación para esta tarde tan fría es una dosis de besos de su ser amado-
-¿Joey?- dijo Seto levantándose de golpe de la silla, lo tomo en un fuerte abrazo – Nunca te vuelvas a ir-
Un desconcertado Joey no entendía de lo que Seto estaba hablando- Hoy fui a tu oficina y alrededor de las 5 pm me fui de ahí y luego te mande a avisar de que te vería aquí a las 7…-
-Cuando llegue a la mansión me dijeron que te habías ido, no sabía en dónde buscarte y recordé que tenías amigos aquí así que vine corriendo-
-Vamos siéntate, yo no pienso alejarme de ti nunca… yo solo quería tener una cita contigo en un lugar normal…- suspiro- pero parece que nada es normal contigo…- suspiro nuevamente- cuando trabajaba aquí muchas veces quise ser como esas parejas que venían a comer aquí…-
-Si tú lo deseas así será-
-Lo extraño es que me acabo de dar cuenta de algo… nuestra relación nunca ha sido normal… - sonríe- pero eso es lo que la hace tan especial…- toma la mano de Seto para entrelazarla con la suya- Quiero estar contigo siempre-
Pov de Seto
Desde que lo perdí cuando éramos pequeños todas las noches me la pasaba pensando en donde estaría, con quien estaría, que estaría haciendo… eso me llevo a una extraña obsesión por saber de él… por tenerlo solo para mi… hoy sé que las cosas no pueden ser así y que aunque yo quisiera estar con él eso no significaba que él también lo quisiera, no me tome la molestia de enamorarlo y procurarlo, tal vez las cosas pudieron haber sido muy diferentes, pero como mi cachorro dice todo lo que pasamos hace especial a esta relación.
Fin Pov de Seto
El castaño toma la mano del rubio- Cuando tú te vas mi mundo se desmorona a pedazos-
FIN