Capítulo 2: El plan del mono.
Casi toda la clase que siguió divagué en mi poco extenso salón de los recuerdos (sólo yo puedo darme ese lujo), tratando de evocar a Serena, (e ignorando las notitas de Hae) oh my hermosa Serena ¿Qué estarás haciendo ahora? ¿Sabrás que tu caballero de brillante armadura ansía tu amor?
Se deben preguntar quién es Serena ¿Conocen Sailor Moon? Al EunHae (insisto: 1313) se le ocurrió llamarla así cuando se la describí ya que no conozco su identidad, no podía llamarla “Aquella chica rubia” por toda la vida, pero pronto sabré su nombre y sólo hasta ahí será la chica lunar, luego será mi rico panquesito con manjar.
-No sé si tienes hambre o para variar hablas de tu Serena -
Sung Min hacía como que escribía pero me observaba disimuladamente, le miré sin entender.
-Dijiste “panquesito con manjar” –Me explicó ahora sin prestar atención a la pizarra- Eso me lleva a pensar que mueres de hambre o de amor –Me sonrió con burla.
-Tengo hambre de amor, Min –Le guiñé un ojo pícaramente y el sólo rodó los suyos.
-Cho –Miré hacia quien me hablaba y pude ver a un bigotudo bastante molesto- Ya que le veo tan atento ¿Podría explicarle a sus compañeros como calcular el área de un triangulo rectángulo?
-Fácil, señor –Bostecé con descaro al ponerme de pie, para hacerle enfadar- El área de un triángulo rectángulo es igual al producto de los catetos partido por 2, por lo cual multiplicando c por b y dividiendo el producto por dos se obtiene con facilidad el área, es algo básico.
Me senté mirando con suficiencia a mis compañeros, podría decir con seguridad que cerca del 90% de la clase me detestaba, lo que significa que descontando al Pez y a Min, en general era el enemigo público, cuando no necesitaban algo de mí claro está. No me importa, ni me importará jamás, de todas formas van a trabajar para mí en el futuro.
-Podrías tratar de ser más simpático –Murmuró mi amigo volviendo a hacer la pantomima de escribir- Es tú culpa que te traten así.
-¿Y eso como para qué? –Miré hacia la pizarra aunque me supiera todo de memoria- Teniéndote a ti a mi lado no necesito a nadie más.
De reojo vi como pasó a botar su estuche y sus lápices se desparramaron por el suelo, me reí y con Hae le ayudamos a recoger todo para que la clase dejase de burlarse de él, ¿No decía yo que era una monada? Al volverse a sentar estaba rojo. Siempre que le daba a entender que es importante para mí, las cosas se le caían, cuando le decía eso a Hae o a Hyuk no obtenía esas respuestas, era divertido ver sus reacciones.
No mucho rato después el timbre sonó, logrando que la clase en pleno saliese en estampida (me incluyo en este acto salvaje) para ir a hacer la fila del desayuno, llegué de los primeros, gracias a mi gran condición física (¡Por dios! ¿Es que acaso no tengo nada malo?), dejé a mis dos enanos amigos obtener lugar junto a mí y esperamos hasta llegar a la ventanilla donde la cocinera entregaba las raciones, hoy era leche de chocolate y un simple pan con manjar.
-Quien lo diría, obtuviste manjar –Me dijo Min cuando nos íbamos a sentar con el mono, que tal como le ordené nos guardó puesto con él- Que raro que obtengas lo que quieres tú –Comentó con total sarcasmo.
-Ya, si un día pediré 1 metro más para ti y así serás más alto –Me mofé mientras nos sentábamos.
-Búrlate de mi estatura una vez más y lo único que obtendrás va a ser un brazo quebrado –Murmuró antes de tomar de su vaso.
-¿Qué le dijiste que se enojó ya? –Preguntó Hae curioso, sentado junto a su Hyuk (¡Matrimonio! ¡Matrimonio!).
-Que lograré que sea más alto, pero descuida Hae, seré generoso contigo también, y dejarás de ser petiso -
-¡Yo no soy petiso! –Me miró enfadado, es chistoso cuando se molesta, es como un bebé con berrinche- Que tú seas un palote no es culpa mía.
-No te preocupes Dong Hae, aguántale no más, que así siempre nos enteramos antes cuando empieza a llover –Dijo con sorna el mandril.
-¡Cállate Jaimico! –Opté por morder con rabia mi pan, logrando que ellos se rieran más, me vengaré de esto.
-No te enfades Kyu ¡Mejor dinos cómo está el clima allá arriba! –
Le di una patada aprovechando que estaba frente a mí.
-Ouuuu... –Se quejó Dong Hae, se me hace que calculé mal.
Su marido me miro enfadado y ya veía venir el dolor, pero en cambio fue Min el que aulló ahora.
-¡Pero qué bruto, Hyuk! –Se quejó y se la devolvió.
Ahora los tres lloriqueaban y yo me reía, hasta que se volvieron en mi contra y me patearon entre todos, no me quedé quieto si, di patadas a diestra y siniestra, luego de eso ya nos desbandamos, éramos un enredo de piernas tratando de matar.
5 minutos después (y con varios moretones de más) al fin nos calmamos, como buenos machos nos habíamos mordido las lágrimas y seguimos como si nada hubiese pasado.
-¿Ya tuvieron la prueba con el profe Park? –Indago Hyuk, ya veo a lo que quiere llegar- Necesito saber que preguntará o voy terminar reprobando la asignatura –Se dejó caer muerto en la mesa, mono flojo, en vez de estudiar siempre trataba de que le entregásemos las pruebas.
-¿No prefieres que este (me apuntó a mi) te dé clases de física, mejor? –Sugirió Hae (¿Este? ¿ESTE? ¿Desde cuándo ese es un pronombre personal?).
-¿Quién dijo que moi quiero darle clases? –Contraataqué, son mis amigos, pero a nadie se las regalo.
-Preferiría la copia de una prueba si no es mucha la molestia –Me miro casi con asco (Desprecio infinito para ti también mandril).
-No te la daremos –Increíblemente fue Min quien lo dijo (Omg se está juntando mucho conmigo parece)- Si quieres pasar, estudia con Kyu y ya –(Wait, wait, wait.)
-¡Yo ya dije que no quiero! –Dijimos los dos.
-Miren, par de engendros –Es un amor- Tú (Se dirigió al mono) necesitas si o si pasar la clase y lamento decirte que tendremos la prueba después que tu curso –Le sonrió con dulzura (Es medio bipolar el chico)- Y tú Animus personificado –Se dirige a mí de esa manera a veces, ¿Han visto la película “La profecía”? la canción dice corpus animus no sé qué, cuando la vimos agarró la costumbre de cantar solo ese pedazo haciendo alusión a que soy el anticristo (Muy gracioso Sung Min) después olvidó el resto y me dejó por Animus, no tiene lógica el sobrenombre pero traten de hacerle entender- De seguro hay algo que necesitas que te puede dar a cambio así que no desprecies al mono.
Lo pensé y recordé que si hay algo que necesito con ahínco.
-Monito querido, creo que si me puedes ayudar en algo –Le guiñe el ojo.
-Repugnante –Comentó la parejita EunHae.
-¿Te he comentado que estoy en bancarrota no? porque si lo estoy –Me trató de convencer (como si no supiéramos que lo dice porque es tacaño y no quiere compartir gastos cuando salimos).
-No es dinero así que relájate –Me reí- Lo que necesito es tú cerebro.
-¡Yo sabía que no era normal tanta inteligencia! –Exclamó Dong Hae como en pánico- ¡Se alimenta de cerebros para subsistir!
-Hae, miles de veces te hemos dicho que dejes tus programas del Syfy channel, no le hacen bien a tu cerebro de pez –Le empujé la cabeza con mi índice- Y no me comería el cerebro de Hyuk, me volvería bobo después.
-Pues si mi cerebro es de bobo ¿Para qué lo quieres? –Dijo suspicaz.
-A veces tienes buenas ideas –En los estudios era totalmente inservible, pero extrañamente era bastante imaginativo para lo demás.
-¿Esto tiene que ver con Serena? -
-¿Cómo lo supiste Sung Min? –Le pregunté sorprendido.
-Eres un disco rayado, es en lo único que piensas –Sonó cansado al decirlo ¿Tanto la menciono?
-Espera ¿Por qué necesitas a Hyuk para esto? –Ahora Hae se preocupó (Uy ¿Cree que le quitaré a su monito o qué?).
-Si se dejasen de interrumpir podría decirle –Idiota- Quiero que me ayudes a saber quién es ella.
-¿Me viste cara de ser Charles Xavier? -
-Dije IDEAS ¿No escuchas cuando te hablo? -
-Realmente no, dices tantas cosas que te escucho como la voz en off de Snoopy; Blablá blablá blablablá -
-Voy a hacer que tus manos sangren de tantos ejercicios de física que haremos Mono –Le dediqué mi mejor sonrisa maquiavélica.
-¿Qué decías? –Puso su mano en la oreja tratando de oír- Sólo escuché blablá blablá blablablá –Me sonrió.
-Sólo vayan al punto, nos hacemos viejos –Comentó el Pez con su barbilla en la mesa.
-Mi idea es tan simple como “Seguirla” -¿Qué demonios? ¿Hae le apresura y rapidito responde? (Eunhae, ¡EUNHAE!)- Dices que las únicas veces que la has visto es en los días de taller, así que ese día nos escabulliremos de los nuestros e iremos al de teatro a ver si damos con ella. Aunque aun no entiendo cómo es que habiéndola visto tantas veces aun no sepas su nombre.
-¡Se lo he preguntado! Pero siempre se va casi corriendo sin responderme –Le contesté frustrado- Y como ya les dije, en el club de teatro dicen no conocerla y para peor se suponía que ella debería estar en el 4ºB ahora ¡Solo por eso acepté adelantarme un año! Así quedábamos como compañeros, ¡Pero tampoco le habían visto jamás!
-¿O sea que no existe? –El pescado preguntó burlándose y miro a Hyuk para reírse juntos.
-Quizás si es producto de tu imaginación Kyu –Min nunca apoyaba a los otros dos idiotas, ¡Eso no pasaba jamás! le miré sin comprender- Tal vez olvidándola y enamorándote de alguien más te iría mejor.
-Nunca -Los tres me miraron sorprendidos ya que lo dije con firmeza y sin titubear- Miren, pueden creerme loco o lo que quieran, pero yo sé que ella es real, al igual que sé que está destinada para mí, lo siento aquí –Toque mi corazón.
Dong Hae y Hyuk Jae dejaron salir un silbido (ni en un momento emotivo para mi, dejan de hacer notar que son tal para cual ¡Restriéguenselo a otro!)
-OK Kyu cuenta conmigo –Jaimico levanto su pulgar hacia mi sonriendo.
-Y conmigo –Acotó Hae.
-¿Y tú por qué? Solo necesito al mono –Pez metiche.
-El está en el Club de baile conmigo, no pienso quedarme solo cuando te ayude –Esto es como un 2x1.
-Esta bien –Bufé, no habría caso en tratar de hacerle desistir- ¿Te nos unes, Min?
-Lo siento, no puedo –Contestó desinteresado mirando la pantalla de su celular- Estamos algo ocupados en el Club de costura, debemos hacer el vestuario de la próxima obra de teatro –Su celular vibró- Y hablando de eso, un amigo del club quiere que vaya a hablar con él ahora, así que al rato nos veremos en el salón.
Se fue dejándonos algo patidifusos, ese no era el Sung Min de siempre ¿Le habría pasado algo? Estaba bien hace un rato ¿Acaso ese otro chico le dijo algo para ponerle mal? Pero si fue así ¿Por qué iba hacia él en vez de dejarme a mí consolarle? YO soy su mejor amigo, no ese otro que solo conoce del club.
-Y... ¿Sigue en pie aun sin Minnie? –
Hae me preguntó dubitativo y ahí volví a la realidad, me distraje tanto con Min que olvide a Serena ¡Por dios! ¿Qué clase de Romeo soy? Mi Julieta esperando por mí ¡Y yo pensando en mis amigos!
-Of course –Le sonreí a ambos- El próximo miércoles ¡A seguirla se ha dicho!
-Si ¡Hwaiting! –El pez elevó el puño esperando que le siguiéramos, pero ambos nos hicimos los que no le conocíamos.
-Aparte del Syfy también deja los doramas por favor –Le pedí sin mirarlo para que no pensaran que estaba con él.
-Entonces... ¿Ganbatte? –Preguntó inseguro.
Con el mono no pudimos evitar reírnos, Hae era tan friki a veces.
-Esta bien Hae... -
-¡Ganbatte! -
-¡Ganbatte! -
-¡Ganbatte! -
Dijimos los 3 a destiempo logrando que nos diera un ataque de risa.
-Ok, ok, a las “3”, 1, 2, 3... ¡Ganbatte! –Y esta vez nos salió perfecto, eso auguraba un buen futuro.
Ujujujui mi amada Serena, pronto serás mi novia.
Continuará.