CAPITULO 27
Renunciar?.
Harry salió de su habitación junto con su capa de invisibilidad, estaba decidido a proteger a Draco de las garras de esos malditos bastardos, tenía que encontrarlo y estar al pendiente de él cada segundo hasta que todo se arreglara, debía encontrarlo, enfrenarlo y aclarar las cosas, miró el mapa del merodeador y observó el nombre del rubio en él, sonrió complacido y después de guardarlo se dirigió hacia el aula de estudios muggles, que hacia ahí? por suerte se encontraba solo, al llegar solo pudo escuchar como las teclas de un piano sonaban con maestría y una melodiosa voz inundaba el aula.
Say something, I'm giving up on you
I'll be the one, if you want me to
Anywhere I would've followed you
Say something, I'm giving up on you
And I am feeling so small
It was over my head
I know nothing at all
And I will stumble and fall
I'm still learning to love
Just starting to crawl
Say something, I'm giving up on you
I'm sorry that I couldn't get to you
Anywhere I would've followed you
Say something, I'm giving up on you
And I will swallow my pride
You're the one that I love
And I'm saying goodbye
Say something, I'm giving up on you
And I'm sorry that I couldn't get to you
And anywhere I would've followed you (Oh-oh-oh-oh)
Say something, I'm giving up on you
Say something, I'm giving up on you
Say something...
La voz de Draco se escuchaba quebrada, aquella canción era tan triste… “i’m giving up on you”… “No! No renuncies a mí!”, quiso gritar, entró rápidamente al aula encontrando al rubio llorando frente al piano, lleno de sentimiento, miles de lágrimas salían por aquellos hermosos ojos recorriendo las mejillas del Sly. Harry deseaba correr junto a él, abrazarlo, besarlo y decirle cuanto lo amaba, lo tonto que había sido por ocultarle todo lo que pasaba, asegurándole que todo mejoraría, que él lo protegería siempre, pero se contuvo, sabía que tenía que ser cauteloso, tanto en la reacción del rubio al enterarse que sabía todo y por haber invadido su privacidad leyendo cartas personales, como en cerciorarse de que no hubiera nadie cerca que pudiera verlos y desenmascarara al rubio.
- En realidad piensas darte por vencido? –susurró Harry recargado en el marco de la puerta.
- Harry –exclamó el rubio sobresaltándose, limpiándose rápidamente las lágrimas -me espantaste, que haces aquí?
- Te estaba buscando…
- A mí? Porque? –preguntó volteando a ver al moreno.
- Cuando entenderás que no puedo vivir sin ti? –respondió Harry caminando hacia el rubio llegando hasta él y posando una mano sobre la cintura de este.
- Harry –rogó casi en un chillido. Tal vez pidiendo que lo besara en ese mismo instante, o tal vez que se apartara inmediatamente de él, o quizás las dos cosas.
- Me encanta que digas mi nombre –susurró Harry rosando los labios del rubio con su pulgar –no llores –pidió besando ambos parpados –no soporto verte llorar –continuó bajando, besando ambas mejilla, dándole un pequeño beso en la punta de la nariz antes de besarlo, apenas fue un toque entre ambos labios, un ligero rose que hizo que el rubio se estremeciera, poniendo sus manos en los hombros del moreno viéndolo intensamente a los ojos, debatiéndose en apartarlo.
- Harry… -volvió a susurrar viendo aquellos ojos esmeralda, el Gry solo necesitaba volver a escuchar su nombre para fundir su boca con la del Sly, automáticamente Draco envolvió el cuello del moreno con sus brazos respondiendo ansiosamente aquel beso, esperando que todo terminara, que todo desapareciera y quedaran únicamente ellos dos en todo el mundo, que al abrir los ojos regresaran el tiempo a la última vez que durmió junto a Harry.
- Te amo Draco –dijo al separarse –te amo demasiado… -aseguró limpiando las lágrimas que el rubio había dejado salir cuando se besaban.
- Yo… -estaba a punto de responder pero el ruido de la puerta abriéndose lo alerto y empujo al Gry –aléjate! –gritó –no te me acerques más! –advirtió llorando.
- Draco, que pasa? –preguntó sorprendido Harry.
- Que sucede? –preguntó Blaise entrando al aula y poniéndose entre ambos.
- Nada Blaise –respondió el rubio tomando a éste del brazo –Potter ya se iba –añadió viendo a Harry suplicante.
- Que te hizo? –volvió a preguntar.
- Nada, ya entendió que no quiero que se me vuelva a acercar –dijo tajante.
- Perfecto, me largo, quédate con éste! –dijo Harry enojado, dedicándole una mirada de odio a Blaise antes de salir de ahí dejando la puerta abierta, por supuesto que no dejaría a solas a Draco con Zabini, y menos ahora que sabía porque había reaccionado de esa manera, al salir del aula tomó su capa de invisibilidad poniéndosela cuando nadie lo veía y se acercó a la puerta observando la situación.
- Qué bueno que llegué antes de que ese maldito intento de héroe te pusiera un dedo encima –exclamó con odio Zabini haciendo que el rubio se tensara –debe de entender que eres mucho para él, ahora que lo mandaste al infierno debe mantenerse alejado de ti, verdad Draco?–agregó acariciando el cuello del rubio.
- Si… -tartamudeó el ojigris viéndolo ansiosamente.
- Y yo?... debo de mantenerme alejado de ti? –preguntó Blaise acercándose a los labios del rubio.
- No… -respondió con una sonrisa regalándole un ángulo perfecto de su cuello mientras acariciaba el cabello del moreno. Harry apretó los puños bajo la capa dispuesto a lanzarse contra ese maldito bastardo pero era demasiado peligroso, Draco se encontraba junto a él y lo podría poner como escudo de cualquier maldición que le lanzara, volteó rápidamente a su derecha y observó a la profesora McGonagall pasando, se quitó inmediatamente la capa de invisibilidad y se dirigió hacia ella.
- Profesora McGonagalla! –llamó el moreno.
- Señor Potter, porque no está en clase?, que esta noche se valla con Sirius no le da derecho de faltar a clases!
- Lo siento profesora es que…
- Y el Joven Malfoy tampoco se encontraba en clases –regañó –lo he estado buscando.
- Está en el aula de estudios muggles! –se apresuró a decir –debería ir, creo que no se encuentra solo –agregó e inmediatamente la profesora McGonagaal fue directamente al aula.
- Dragón –susurró Blaise tomando al rubio de la cintura pegándolo a él mientras besaba el cuello de éste, el rubio por su parte cerro los ojos apretándolos, deseando desaparecer en ese instante, ahora confirmaba sus sospechas sobre Blaise, sabía que él era el autor de aquellas cartas, apretó su varita bajo su capa, esto se acabaría inmediatamente, inclinó con cuidado su varita listo para lanzarle un hechizo al moreno cuando un gritó los separó.
- Pero que está pasando aquí? –gritó abochornada la profesora McGonagall y Draco escondió inmediatamente su varita.
- Profesora… -empezó a tartamudear Blaise –nosotros…
- Ustedes nada! –dijo la mayor.
- No es lo que cree –trató de hablar el moreno.
- Si… no es lo que parece –apoyó el rubio.
- No es lo que parece? Sé muy bien lo que vi! –exclamó –es una falta muy grave! Sin contar con que ninguno se encontraba en clase!
- Pero profesora! Nada de peros! Como veo que a ninguno les interesa entrar a clases me acompañaran ahora mismo me acompañarán cumplir con su castigo.
- Castigo? –exclamaron los dos al mismo tiempo.
- Si! Ahora caminen! Vamos! –apremió la profesora saliendo del aula –y usted también Señor Potter –dijo firmemente al salir y encontrar escuchando la conversación a Harry –también se encontraba fuera de clases, hablaré inmediatamente con Sirius sobre lo sucedido –finalizó enérgica siguiendo su camino completamente enfadada.
- Tú fuiste el que nos delató verdad Potter? –preguntó enojado Blaise caminando tras McGonagall, y Draco le dedico una mirada enojada.
- En silencio! –pidió la profesora –profesor Slughorn! –llamó –debo informarle que el Joven Blaise Zabini ha cometido una falta muy grave, lo he encontrado fuera de clases en una situación muy bochornosa con otro estudiante –agregó viendo de mala manera a Draco –podría ponerle un camino ejemplar por favor?
- Yo me encargo –respondió Slughorn –tengo varios frascos por limpiar, acomodar y etiquetar en mi oficina.
- Me parece perfecto, ahora ustedes síganme –pidió la profesora y ambos jóvenes fueron tras ella hasta entrar a su oficina –me organizarán todos los libros que se encuentran aquí –ordenó -le avisaré a Sirius que hasta que terminen podrán irse –concluyó cerrando la puerta con magia y saliendo de ahí.
- Eres un grandísimo bocaza! Porque tuviste que delatarnos!? –gritó Draco en cuanto estuvieron juntos.
- Que? Enserio querías que te dejara solo con él?
- Solo no quería que te metieras!
- Eso dices ahora, pero cuando te besé…
- Cállate –gritó el rubio interrumpiéndolo –que no vez que alguien puede escucharnos? –añadió apoyándose en la pared dando la espalda al moreno.
- No sé porque te molesta tanto… -susurró Harry sin saber lo que el rubio había estado a punto de hacer.
- Estuve a punto de solucionar todo… -dijo en tono lastimero Draco.
- Solucionarlo? Como?
- Ya no importa, mejor terminemos con esto, me urge irme de aquí –dijo tajante dirigiéndose a un estante lleno de libros para limpiarlos.
- Me gustaría que confiaras en mí –finalizó la conversación Harry.
o-o-o-o-o
- Estúpido Potter! –gruñó Blaise entrando a un aula en desuso sentándose junto a un castaño.
- Qué ocurrió? –preguntó contrariado.
- Potter! Ese maldito Gryffindor! Hizo que me castigaran!
- Como?
- Cuando vi que Draco no había entrado a clases me puse a buscarlo, cuando lo encontré estaba peleando con Potter –escupió su nombre –cuando entré Draco le dijo que no se le acercara más y se fue enojado, después le pregunté si yo si podía acercarme a él y me dijo que si y lo estaba besando, cuando McGonagall entró y nos pilló, nos regañó y nos castigó y antes de irse le dijo a Potter, que estaba fuera del aula, que también estaba castigado, estoy completamente seguro de que él nos delató.
- Relájate Blaise –respondió su acompañante –ya nos vengaremos después, no hablemos de Potter ahora, mejor te quito lo enojado no crees?.
- A si? –preguntó con una sonrisa -y como piensas hacerlo?
- Tengo mis métodos –susurró en el oído del moreno para después atacar su cuello mientras se sentaba sobre el Sly.
- Me encantan tus métodos –suspiró dejándose hacer mientras el castaño desabrochaba el pantalón.
- Lo que pasa es que soy mejor que tu querido Draco –respondió mientras se bajaba del moreno para atender la ya notable erección de éste bajándole el pantalón junto con el bóxer.
- Ooh Seamus –gimió Blaise sintiendo como este devoraba de una vez su miembro –me encanta como lo haces –dijo tomando del cabello marcándole el ritmo.