Capítulo 31: Hacer creer y fundas
Al despertarse Chanyeol se encontró a sí mismo tumbado con otro cuerpo a su lado. Aun con la mente aturdida, descubrió que no necesitaba pensar mucho sobre quién era o qué había pasado la noche anterior. Sintió que estaba bien y sintió que el mundo entero se había vuelto balanceado de alguna extraña manera, así que para él, no había duda de que era Baekhyun quien estaba a su lado con sus piernas enredadas y con el brazo tirado sobre su pecho.
Por un momento Chanyeol pensó que podría mentir por un momento y quizás volver a dormirse, pero cuando sus ojos echaron un vistazo a la hora, se sorprendió al ver que ya era pasado el mediodía (aunque al mismo tiempo, sus actividades de la mañana fueron, obviamente, la causa de todo).
Moviendo su cuerpo, Chanyeol giró cuidadosamente a Baekhyun por la espalda para poder alejarse poco a poco. Una vez que puso sus pies sobre el suelo, Chanyeol se abrió paso cansado hacia su baño, pero no antes de darle otra mirada al chico dormido y con el culo al aire de su cama.
Cuando Chanyeol salió de la ducha, abrió la puerta para ver que Baekhyun había pataleado las sábanas fuera de la cama y estaba sentado con sus piernas cruzadas mientras se frotaba los ojos. Chanyeol le miró mientras se quejaba y alborotaba su despeinado pelo por la cama.
—Buenos días...—murmuró Baekhyun mientras miraba a Chanyeol con ojos cansados.
—Buenos días —respondió Chanyeol, moviéndose a su vestidor, giró la espalda hacia Baekhyun por un momento—. Ya es pasado el mediodía así que tal vez quieras levantarte.
Cansado, Baekhyun asintió. —Vale...—dijo, luego se levantó lentamente de la cama y tropezó al intentar mantener el equilibro con sus pies.
—¿Estás bien? —preguntó Chanyeol mientras miraba el pequeño tambaleo de Baekhyun para mantenerse recto.
—Sí, estoy bien —murmuró Baekhyun, moviendo la mano hacia Chanyeol—. Voy a darme una ducha. Me siento asqueroso.
Chanyeol sacó una camisa de su vestidor y la colocó sobre la cama. Agachándose, cogió las finas sábanas y se acercó a Baekhyun, lanzándolas sobre él—. No te pavonees por la casa desnudo.
Baekhyun dejó escapar una suave burla. —No me pavoneo y sólo voy a cruzar el pasillo.
—Aun así… —Inclinándose, Chanyeol robó un rápido beso, haciendo que Baekhyun arrugara la cara—. Te veré en la cocina. —Dándole a Baekhyun un rápido golpe en el culo, Chanyeol sonrió divertido—. Ve.
Baekhyun le dio una mirada antes de girarse e ir hacia la puerta patosamente, entonces se paró y giró su cabeza—. Hey, he estado queriendo preguntártelo, ¿cuándo voy a tener mi dinero?
Chanyeol parpadeó. —¿Qué dinero? ¿Por qué? —preguntó—. ¿Dinero por dormir conmigo?
Pillado por sorpresa, Baekhyun sacudió su cabeza. —No. Por limpiar tu casa, sigo siendo tu criado.
Respirando algo mejor, Chanyeol apretó los labios. —Vamos a tener que cambiar eso bastante pronto —murmuró en voz baja.
—Qu...
—¿Por qué quieres saberlo? —preguntó Chanyeol, cambiando rápidamente de tema—. ¿Lo necesitas para algo?
—Necesito comprar algunos nuevos lanzamientos —respondió emocionado Baekhyun.
Chanyeol miró a Baekhyun por un momento antes de suspirar y rodar los ojos. Haciéndole señas, Chanyeol ladeó la cabeza.
—Puedes tenerlo hoy. —Cuando Baekhyun abrió su boca para responder, Chanyeol le interrumpió—. Hablaremos de esto más tarde. Ve a ducharte primero, quiero proponerte algo.
—¿De verdad? —dijo Baekhyun con ojos brillantes—. ¡Tengo algo que proponerte a ti también! Necesito coger mi lista, espera. Sí. Hablemos más tarde.
Cuando Baekhyun se fue (casi tropezando con la gran sábana que Chanyeol había tirado sobre él) Chanyeol fue dejado preguntándose qué era lo que Baekhyun iba a proponerle. En el fondo de su mente, ya sabía que iba a ser estúpido más allá de lo creíble.
Cuando llegó a la cocina, Kyungsoo estaba sentado en la isla con Kai y su portátil. Sin siquiera mirar hacia arriba, Kyungsoo asintió en dirección a la mesa de la cena.
—Puedes escoger entre comer las sobras del desayuno o directamente pasar al almuerzo. Hay leche en el frigorífico por si quieres.
—Gracias, Kyungsoo. —Chanyeol bostezó mientras despeinaba su húmedo pelo. Cuando pasó al lado de los dos, le echó un vistazo a lo que estaba en la pantalla de Kyungsoo—. ¿Qué estáis haciendo los dos?
—Buscando recetas —respondió Kai.
—¿Por qué?
—Porque —dijo Kyungsoo, suspirando mientras giraba su silla para encarar a Chanyeol— mi cocina es aparentemente aburrida.
En menos de un segundo, los ojos de Chanyeol estaban sobre Kai. En defensa de Kai, alzó las manos frente a él.
—No dije que era aburrida. Simplemente sugerí que probásemos con otra cosa por una vez.
Bufando, Kyungsoo se giró. —Bueno, lo insinuaste. Es lo mismo.
Kai le dio a la parte trasera de la cabeza de Kyungsoo y una mirada asesina antes de volver a unirse al irritado cocinero en su búsqueda de nueva comida. Chanyeol dejó que los dos siguieron a lo suyo y se sentó a comenzar a comer. Unos cuantos minutos pasaron con los dos discutiendo sobre ingredientes y práctica antes de que Chanyeol fuera metido en una conversación.
—¿Así que qué vas a hacer en cuanto a Baekhyun? —preguntó Kyungsoo mientras deslizaba la página. Kai, quien estaba intentando leer la descripción de cada comida en la lista, empujó la mano de Kyungsoo lejos de la pantalla del ratón del portátil.
—Voy a llevarlo a cabo —respondió simplemente Chanyeol. Tras un segundo, añadió—: Sabes, me ha preguntado sobre su sueldo esta mañana.
Dándole a Kai una mirada aguda por llevarse el portátil, Kyungsoo respondió. —¿Y qué?
—No puedo mantenerlo como mi criado si estamos en este tipo de relación —dijo Chanyeol, cayendo a la deriva en sus pensamientos y comenzando a empujar su comida alrededor del plato.
—¿Y qué tipo de relación tenéis? —preguntó Kyungsoo pulsando botones.
—Una relación romántica —murmuró Chanyeol. Se detuvo por un momento antes de enderezar su postura—. De todas formas, he traído un documento de mis padres. Necesito revisar los solicitantes.
Los oídos de Kai de repente se animaron y se giró. —¿Vas a reemplazarlo?
—Sí —respondió suavemente Chanyeol—. Pero él se quedará aquí.
—¿Así que quieres que Baekhyun sea un tipo de interno-amante? —articuló Kyungsoo.
—Él no es mi amante —dijo cortante Chanyeol—. Es mi prometido...
—Chanyeol —dijo Kyungsoo suspirando—, él no sabe eso. Va a pensar que es otra cosa.
—Estará bien —dijo Chanyeol, haciéndole señas a Kyungsoo—. Lo entenderá. Me hace sentir como si le estuviera pagando por sexo, que no es el caso.
Frunciendo los labios, Kyungsoo volvió a mirar la pantalla del ordenador. —Está bien. Lo que sea funciona en tu relación, supongo.
La entrada de Baekhyun fue algo extravagante. Era extravagante en el sentido de que no estaba llevando nada que no pegara o “cómodo”. Estaba vestido con un estilo similar al de la noche anterior y Chanyeol pudo decir que usó estratégicamente el secador para peinar su cabello con ese estilo desaliñado. De una forma, Chanyeol se sintió un poco celoso porque no sabía por qué Baekhyun había decidido vestirse así.
—¡Buenos días! —canturreó Baekhyun mientras caminaba hacia la mesa. No se sentó con Chanyeol como se esperaba. En cambio, cogió su plato, puso comida en él y comió de pie—. ¿Dónde está Nugget? —preguntó antes de dar su primer mordisco.
Chanyeol, que todavía estaba sorprendido por el rápido ritmo al que Baekhyun iba, parpadeó un par de veces.
—Baekhyun, siéntate.
Ignorándolo, Baekhyun continuó. —No lo he visto desde anoche. —Sintiendo a Chanyeol tirar del botón de sus pantalones, Baekhyun tomó asiento de mala gana al lado del gigante—. Oh, tengo mi lista. Está en mi bolsillo. No puedo cogerla ahora porque mis manos están algo llenas —dijo encogiéndose de hombros.
—Tal vez si lo dejaras sobre la mesa como una persona normal —Comenzó Chanyeol—, tendrías manos para usar.
Baekhyun se detuvo por un segundo. Luego dejó el plato. —Vale, espera —dijo mientras metía la mano en el bolsillo trasero de sus pantalones.
Al ver a Baekhyun luchar con sacar la mano del bolsillo trasero de sus vaqueros, Chanyeol bufó. —Lleva pantalones más holgados o haz tu culo más pequeño. Lo haría más fácil.
Tras coger exitosamente su lista, Baekhyun le lanzó una mirada a Chanyeol. —¿De verdad quieres que tenga un culo más pequeño? ¿Hm? —preguntó, pegándole en el costado con su codo.
Apartándose de los golpes infantiles de Baekhyun, Chanyeol sonrió ampliamente. —No. No quiero.
—Eso está bien —Se mofó Baekhyun.
—Me encanta masajear tu culo —dijo Chanyeol en voz baja mientras se inclinaba hacia la oreja de Baekhyun—, me encanta abrirlo y pasar mis manos por él...¿Quieres donuts, Baek? Porque puedo darte unos cuantos si eso significa que tu culo se volverá un poco más grande.
Baekhyun arrugó su cara. —Eres asqueroso.
—Mira quién habla.
Rodando los ojos, Baekhyun tomó su silla y la giró hacia Chanyeol. —¿Quieres ir primero?
—¿Ir primero? —dijo Chanyeol con una mirada de pregunta en su cara.
—Dijiste que tenías algo que proponerme...—murmuró Baekhyun, recordándole algo a Chanyeol lo que había dicho en el dormitorio—. O tal vez lo olvidaste...
—No, no, no lo hice —dijo Chanyeol, disipando rápidamente la idea. Se tomó un minuto para decidir qué hacer y, al final, asintió con su cabeza a Baekhyun—. Puedes ir tú primero.
—Bien, bueno, cuando tú estabas fuera, vi unas cuantas cosas —dijo Baekhyun, pasando sus ojos al suelo y dibujando una amplia sonrisa en su cara, despertando curiosidad en Chanyeol—. Así que entonces pensé...
—¿Qué viste?
—¿Huh?
—¿Qué viste cuando estaba fuera? —preguntó más específicamente Chanyeol—. ¿Porno?
Baekhyun suspiró. —No. Mi última afiliación caducó hace dos meses y todos los que son gratis no son de gran calidad...—Tardó un momento, dejando a Chanyeol perplejo antes de continuar—. Como estaba diciendo, estaba viendo la película Burlesque y tuve esta sensación en el estómago tras verla.
—¿La necesidad de vomitar? —Bufó Chanyeol.
Baekhyun golpeó a Chanyeol en el muslo. —¡Incorrecto! ¡Me hizo querer una barra! —chilló emocionado.
—¿Como una barra de jabalina? —preguntó Chanyeol mientras se frotaba el área en el que Baekhyun le había golpeado.
—No —tatareó Baekhyun, ladeando su cabeza—, como un barra de striptease...
—No.
Baekhyun frunció el ceño. Entonces alzó su lista. —Ni siquiera he llegado a enseñarte mi lista...
Frunciendo los labios, Chanyeol le arrebató el trozo de papel a Baekhyun de la mano y la escaneó.
—Las barras de striptease pueden usarse para hacer ejercicio...
Baekhyun se encogió de hombros. —Todo el mundo piensa que es muy fácil, pero hace falta mucha fuerza en la parte superior del cuerpo para impulsarte en una de esas.
Chanyeol miró a Baekhyun. —¿Y por qué necesitas hacer que tu parte superior del cuerpo sea más fuerte?
—No lo necesito —respondió demasiado rápido Baekhyun.
—Entonces no lo necesitas para hacer ejercicio —dijo inflexiblemente Chanyeol—. La razón uno es inválida.
Dándose cuenta de su error, Baekhyun intentó arreglarlo.
—No, quiero decir, lo necesito. Lo necesito para poder levantar cosas. L...
Chanyeol le ignoró. —Puedes alquilarla...—Se quejó—. ¿Quieres alquilarla y tocar algo que otra gente ha tocado y en la que se han molido? No lo creo.
—Es...
—Es aún un no.
—Estás siendo injusto. —Se quejó Baekhyun.
Sacudiendo su cabeza, Chanyeol leyó la razón tres. —Los bomberos usan barras...Son gente buena...Debería tener una también...—Se detuvo un momento para darle a Baekhyun una mirada fruncida—. En serio, Baek.
—¡Soy una buena persona y por eso debería tener una! —Alegó Baekhyun.
—Sí, Bill Gates era un buen chico también. Me apuesto a que su mujer instaló una para él también —murmuró Chanyeol sarcásticamente. Siguiendo con la lista, continuó—. Está hecha de acero inoxidable, ¿igual que la bici que me negué a comprarte?
—Sí, nunca se oxidará —dijo Baekhyun, añadiendo un dato—. Eso significa que es poco mantenimiento.
Baekhyun tenía un punto válido, pero Chanyeol no iba a dejar que la razón número cuatro pasara sin discutirlo.
—Aun así ocupa espacio, poco mantenimiento o no. —Quejándose, Baekhyun intentó recuperar la lista, pero Chanyeol le empujó a la distancia de su brazo. —Veamos. Los estudiantes necesitan libros...Los bailarines necesitan estudios...Yo necesito una barra en mi habitación.
—Lo necesito —dijo Baekhyun mientras intentaba mover la mano de Chanyeol de su pecho para así poder reclamar su lista.
—Bueno, ¿no eres un pequeño pensador imaginativo? —murmuró Chanyeol mientras le echaba un vistazo al frustrado aprendiz de stripper—. Es fácil de instalar...Vale, continuemos.
—Pero...
—...Es equipamiento profesional. —Alzando las cejas, Chanyeol le dio a Baekhyun una mirada divertida—. ¿En plan club de striptease “profesional”?
—¿Eso importa? —respondió Baekhyun enfurruñándose—. Sigue siendo profesional.
—Sí, bueno, sigue siendo un no. —Mirando el resto, Chanyeol suspiró—. Baek, ninguna de esas son realmente convincentes. —Tras ver la mirada en la cara de Baekhyun hizo que Chanyeol se detuviera por un momento—. ¿Por qué quieres esto, Baek?
Baekhyun jugueteó con sus dedos por un segundo antes de suspirar, dándole a Chanyeol esa mirada en sus ojos que le hacía parecer un perro pidiendo por más comida cuando ya estaba gordo y rechoncho.
—Pensé que sería divertido tener una.
—¿Qué parte de ello sería divertido?
—Deslizarse arriba y abajo por ella —murmuró Baekhyun bajando la vista.
Tras estudiar el comportamiento de Baekhyun por un segundo, Chanyeol forzó al chico a mirarle de nuevo y sonrió travieso.
—¿Qué parte de ella sería divertida para mí?
Parpadeando, Baekhyun esbozó una pequeña sonrisa. —Oh, tú puedes usarla también, si eso es lo que quieres.
La sonrisa de Chanyeol desapareció. —No quiero usar la barra, idiota.
—Estaba bromeando. —Baekhyun se rió, alejando su barbilla de la mano de Chanyeol—. Sé que quieres algún tipo de striptease. —Abandonando su silla, Baekhyun se movió frente a Chanyeol, separando cuidadosamente las piernas y tirándose sobre el regazo del gigante—. Quieres ponerme un collar —susurró en el oído de Chanyeol—. Quieres ponerme un collar y atarme a él como si fuera un animal.
Poniendo sus manos sobre la cintura de Baekhyun, Chanyeol sonrió ampliamente. —¿Y?
—Quieres mantenerme ahí mientras me haces cosas —dijo Baekhyun con voz áspera.
Pasando sus manos más hacia abajo, Chanyeol comenzó a tocar los muslos de Baekhyun. —Estos son mejores argumentos que todos esos diez estúpidos que pusiste en esa lista tuya. —Gruñó.
—¿Si?
—Sí...
—¿...Podéis parar? —Estalló Kyungsoo desde la isla, rompiendo el pequeño mundo en el que Chanyeol y Baekhyun se habían metido—. Kai y yo seguimos aquí.
La gente normal se habría avergonzado, pero Baekhyun y Chanyeol simplemente estallaron en carcajadas. Envolviendo sus brazos alrededor del chico más pequeño, Chanyeol dejó que Baekhyun se descojonase,porque por primera vez, Chanyeol se dio cuenta de que la risa de Baekhyun no era tan molesta como pensaba que era.
Chanyeol no le dijo a Baekhyun su propia propuesta hasta después de que Baekhyun hubiera comido su desayuno tardío. Esperó a que Kyungsoo y Kai se fueran a otro lado y, justo cuando iba a sacarlo, Nugget salió de repente de la habitación de Sehun, corriendo (o pataleando) rápidamente hacia su padre, robando la atención de Baekhyun del gigante.
Minutos pasaron con Baekhyun meciendo a Nugget suavemente en su regazo y cantándole canciones de niños chicos al pequeño perro. Chanyeol era obviamente el número dos en la lista de prioridades de Baekhyun fuera del dormitorio.
Cuando Baekhyun se levantó para ir a por la comida de Nugget, Chanyeol tomó la oportunidad para hacer su propuesta.
—¿Te gustan los animales? —Soltó.
Baekhyun se detuvo en mitad de echar la comida de Nugget en su bol, poniendo ansioso a Nugget por consecuencia, trotando hacia delante y detrás para intentar ganar de nuevo la atención de su padre. Con su boca abierta, los ojos de Baekhyun se movieron hacia delante y detrás entre Nugget y Chanyeol.
—No lo sé, Chanyeol. ¿Parece que me gustan los animales? —Hostigó.
Mirando hacia abajo a Nugget, quien estaba tocando con la pata a su padre para que le diera su comida, Chanyeol admitió la estupidez de su pregunta. —Hay un zoo a cincuenta millas de aquí.
—Eso está bien —dijo Baekhyun, sonriéndole a Nugget mientras se agachaba y por fin le daba su almuerzo.
—Quiero llevarte allí.
Baekhyun alzó su cabeza. —¿En plan una cita en el zoo? —preguntó riéndose.
—No sé si quieres llamarlo una cita —dijo Chanyeol, intentando actuar indiferente mientras se encogió de hombros.
—Oh, así que somos dos personas que se besan y follan, yendo a un zoo juntos —dijo Baekhyun sonriendo ampliamente.
Sin gustarle la forma en la que había sido formulada, Chanyeol sacudió la cabeza. —Da igual. Podemos llamarlo una cita.
Acariciando la espalda de Nugget mientras comía, Baekhyun se rió. —Eso es gracioso.
—¿El qué?
—Tú invitándome a salir —dijo Baekhyun mientras miraba a Nugget comer—. ¿Por qué lo estás haciendo?
Chanyeol se detuvo. —¿Qué hay malo en que quiera llevarte por ahí?
—Simplemente es un poco raro.
—Baek. —Chanyeol esperó a que Baekhyun le mirara, pero cuando Baekhyun continuó dándole su atención a Nugget, quien ni siquiera la pedía, se fue de su asiento y caminó hacia el chico que le estaba ignorando. Inclinándose, Chanyeol tiró de él hacia arriba por la capucha de su chaqueta—. ¿Qué quieres decir con que es un poco raro?
Baekhyun se encogió de hombros, dando un paso hacia atrás, a pesar de que Chanyeol le siguió.
—Estoy como acostumbrado a mantener las cosas en un nivel físico.
—Creo que una vez que empiezas a besarme y echarte encima de mí fuera del dormitorio, es más que sólo algo físico —dijo Chanyeol mientras se acercaba a Baekhyun, forzándole a tropezar contra la encimera.
—Creo que deberías recordarte a ti mismo que no te gusto mucho, Sr. Maravilloso —dijo Baekhyun, fingiendo una risa —. ¿Qué estás haciendo invitándome a salir?
Chanyeol se detuvo y se echó hacia atrás, dándole a Baekhyun algo de espacio.
—Tal vez he cambiado de opinión.
—Cambias mucho de opinión...
—¿Quieres ir o no? —Preguntó sin rodeos Chanyeol, poniendo a Baekhyun en el punto.
Baekhyun bajó la vista por un momento. Nugget había parado de comer y alzó las orejas, escuchando a los dos adultos discutir sobre porqué uno quería ir en una cita con el otro. En otras palabras, Nugget estaba escuchando problemas humanos: relaciones. Tras un tiempo, Baekhyun alzó la vista y se encogió de hombros.
—Tal vez...
—No acepto respuestas parciales.
—No aceptas nada parcial...
Chanyeol suspiró. —Baekhyun. ¿Quieres o no quieres ir al zoo conmigo?
Baekhyun se mordió los labios por un momento antes e alzar sus manos en el aire.
—¡Quiero ir! —Soltó por fin, casi efusivo y emocionado por intentar contenerlo desde el momento en el que Chanyeol sugirió tener algo de una cita—. Quiero ver a tu madre y tu padre. Quiero ver a los simios que te dieron a l…
Una vez de las formas más efectivas de callar a Baekhyun (según descubrió Chanyeol) era ocupar sus labios con otro par. No sólo hacía que el chico más pequeño se callara y dejase de hablar, Chanyeol también descubrió que Baekhyun era mucho más cooperativo. Incluso cuando Chanyeol había cumplido su misión, dejó sus labios a centímetros de los de Baekhyun, burlándose de él con movimientos aquí y allá.
—Lo único que necesitabas era decir sí en vez de irte por las ramas e insinuar que soy producto de dos primates.
Bajando los ojos hacia los labios de Chanyeol, Baekhyun sonrió débilmente. —Pero lo eres.
Entonces, con una voz solemne, Chanyeol dio un paso atrás y dijo. —Sabes, si quieres conocer a mis padres, puedes. Si eso es lo que quieres.
Sin tomar a Chanyeol en serio, Baekhyun bufó y empujó al gigante para poder liberarse a sí mismo de la posición en la que estaba. —Cierto. Y tú conocerás a mis padres también.
—Lo tendré que hacer algún día.
Sacudiendo su cabeza, Baekhyun arregló su vestimenta. —No creo que quieras conocer a mis padres, tal vez mi madre. Espera, creo que tendrías un día de campo con mi padre.
—¿Si? —preguntó Chanyeol mientras sus ojos seguían a Baekhyun.
—A ambos os gusta lo que hacéis para ganaros la vida —dijo Baekhyun con una pequeña sonrisa—. De todas formas, ¿por qué estamos hablando de esto? Necesito mi dinero, Chanyeol. —Estiró su mano—. Por favor y gracias.
Cruzándose de brazos, Chanyeol alzó las cejas. —¿Ese es el por qué te arreglaste? ¿Vas al pueblo?
—Sí.
—¿Cómo irás allí? —preguntó Chanyeol.
Baekhyun echó un vistazo alrededor, intentando sacar una respuesta verosímil que no incluyera la palabra “coche”, pero inmediatamente descubrió que no había manera.
—¿En...coche...? —Respondió Baekhyun, preparado para soportar una fuerte regañina sobre cómo no se le estaba permitido conducir.
—¿Tienes una licencia? —Inquirió Chanyeol en vez de intimar directamente con la respuesta de Baekhyun.
—Sí.
—Enséñamela.
—Espera, no tengo. —Baekhyun había olvidado de repente que todo estaba escrito en su licencia, lo que incluía su dirección y apellido—. Simplemente...soñé que tenía una licencia una vez. Supongo que estoy confundiendo mis sueños con la realidad. —Le dio a Chanyeol una avergonzada sonrisa mientras se encogía de hombros—. Ups.
Chanyeol (sin dudar alguna) vio a través de todo. Baekhyun tenía licencia, pero obviamente pensaba que Chanyeol no sabía nada. Estaba bien. A Chanyeol no le importaba, sólo le daba ventaja.
—Entonces no puedes coger el coche.
Baekhyun hinchó las mejillas y rodó los ojos. Intentó maneuver1 alrededor de Chanyeol, pero el gigante se interponía en su camino—. Perdona, Sr. Maravilloso.
—Oh, ¿estoy en tu camino?
—Estás en el camino de mi vida, sueños, aspiraciones, libros y viaje a la librería —respondió Baekhyun ladeando la cabeza—. Sí, estás en mi camino.
—Eso es malo —dijo Chanyeol, falsificando un tono simpático—. Ahora no puedes ir a por las llaves del coche.
Baekhyun miró detrás de él. —Te das cuenta de que puedo ir por el otro lado de la mesa, verdad.
Chanyeol echó un vistazo y vio que Baekhyun tenía razón. Volviendo a mirar al presumido chico, Chanyeol se mofó.
—Eso no importa. Sigues sin poder coger esas llaves.
—Volví a casa sano y salvo anoche. —Señaló Baekhyun—. Obviamente puedo conducir.
—Yo no sé eso.
Sabiendo que discutir siempre les llevaría a nada más de dar vueltas, Baekhyun frunció los labios.
—Bueno, necesito ir a comprar mis libros y tú no estás dispuesto a dejarme conducir el coche...¡oh! Ya sé. Kai. Kai conducirá por mí —dijo con una sonrisa satisfecha.
Chanyeol vio la mirada en la cara de Baekhyun e inmediatamente supo qué decir. —No. La última vez que volviste a casa con Kai trajiste un perro. No quiero que vuelvas con una caja llena de gatitos callejeros esta vez.
Baekhyun frunció los labios y arrugó las cejas. —¡No lo haré! Cuál es la probabilidad de que encuentre una caja...quiero decir, tal vez encuentre una o dos, ¿pero una caja de gatitos? No lo creo.
—Baek...
Volviéndose más impaciente, Baekhyun frunció el ceño y hundió los hombros.
—Chanyeol...dios mío. Tengo veintidós años y no voy a rejuvenecer. Quiero mis libros.
Quejándose, Chanyeol alzó sus manos en el aire y se apartó de su camino, dirigiéndose hacia el pasillo.
—Bien. Lo que sea.
—¿Puedo coger el coche? —preguntó Baekhyun con las orejas hacia arriba.
—No.
—Qu...
—Conduciré por ti. —Añadió rápidamente Chanyeol. Al escuchar el compromiso de Chanyeol, Baekhyun le siguió en el pasillo.
Nugget, quien había perdido interés en los dos adultos discutiendo, continuó comiendo hasta que su gordo, pero pequeño estómago no pudo soportar más. Cuando sintió la necesidad de cagar rápidamente trotó de vuelta a la habitación de Sehun.
Mientras Baekhyun caminaba detrás de Chanyeol, dijo—: ¡Será mejor que no te dé por tirar cabezas a la carretera! No voy a morir sin dignidad alguna.
Chanyeol soltó una carcajada mientras alcanzaba su habitación y abría la puerta para comenzar a cambiarse con algo que le hiciera lucir intimidante para cualquiera que se atreviera a mirar a Baekhyun mientras estuvieran en el pueblo.
—Relaja. Tirar cabezas por la carretera no es tan divertido. Si realmente quisiera hacer algo contigo, simplemente te tiraría, sólo para estar más seguro.
—Qué considerado.
Baekhyun se sentó en la cama mientras Chanyeol se ponía con sus asuntos: cambiarse con ropa innecesariamente ostentosa. Le hacían lucir más sexy, sí, pero no era como si Baekhyun quisiera que luciera así. Chanyeol sólo iba a atraer atención para sí mismo y Baekhyun no quería eso. No era porque estuviera celoso. No. Baekhyun se mofó por la idea de celos. Sólo era que Chanyeol iba a desviar la atención de él, tomando la atención que sería de Baekhyun si Chanyeol simplemente se mantuviera en su ropa de “viernes casual”.
Era eso exactamente.
Tras un rato mirando a Chanyeol moverse por la habitación, Baekhyun preguntó—: Así que, ¿cuándo piensas que puedes darme ese dinero?
Quitándose su camisa y poniéndose una nueva, Chanyeol le echó a Baekhyun un vistazo.
—¿Cheque o efectivo?
—Me gusta el efectivo. Me ahorra tiempo de escribir todas esas cosas y cobrarlo. —Baekhyun suspiró—. La única cosa mejor que el efectivo son las tarjetas de crédito, pero no puedo usar las mías...
—¿Oh? —dijo Chanyeol, haciéndolo ver como si estuviera interesado mientras se deslizaba la camisa—. ¿Tienes una tarjeta de crédito?
—No, mentí —murmuró Baekhyun—. Estaba fingiendo de nuevo.
—¿Al igual que fingías que tenías licencia?
—Sí.
—Finges mucho. —Chanyeol suspiró. Pasó una mano por su pelo y decidió que no le apetecía peinarlo para una simple visita a la librería local. En cambio, caminó hacia su escritorio y cogió sus gafas de sol antes de hacerle señas a Baekhyun—. Vamos —dijo mientras cogía las llaves del coche del cajón del escritorio.
—¿Mi dinero?
—Da igual tu dinero —dijo Chanyeol—. Lo pagaré yo.
—Vas a pagar mis novelas de romance...—dijo Baekhyun, clasificando la situación sólo en caso de que Chanyeol no lo entendiera.
—Sí.
Sacudiendo la cabeza, Baekhyun se encogió de hombros.
—Vale. Supongo que está en ti entonces. ¿Significa eso que tengo privilegios de gastos ilimitados?
—Sólo por hoy. —Razonó Chanyeol.
—No quiero que te quedes en bancarrota.
—Créeme, Baek —dijo Chanyeol mientras cogía la mano de Baekhyun y comenzaba a dirigirse fuera de su habitación —. No vas a romper mi cuenta bancaria.
La noche anterior, Baekhyun aparcó el SUV fuera, temiendo que si abriese la puerta del garaje, el sonido despertara a los otros miembros de la casa. Pero, según descubrió, tuvo que haber puesto el coche de vuelta dentro. Mientras Chanyeol echaba hacia atrás su coche en la entrada, miró hacia atrás al otro coche antes de arrancar los motores y mirar a los lados. Vio una raya, una raya muy notoria.
—Es...¿qué coño es eso?
—¿Qué? —preguntí Baekhyun, estirando la cabeza para ver de qué estaba hablando Chanyeol.
Hubo una pausa. Luego Chanyeol giró su cabeza hacia el confuso chico que había a su lado, dándole una mirada intensa.
—¿Es eso un arañazo, Baek? ¿Es eso un arañazo en mi puto SUV?
Alzando las cejas, Baekhyun tatareó y miró fuera por la ventana.
—Tal vez...
—¿Quién lo hizo?
Baekhyun miró a su alrededor por un momento mientras retrocedía en su memoria al momento en el que ese arañazo fue creado. Recordó golpear el carro. Recordó a Kai flipando. ¿De qué estaban discutiendo? Baekhyun pensó y entonces lo recordó.
—Baek, no quiero tener problemas con ese chico...
—Si lo descubre cargaré con la culpa de ello...
—Baek —dijo Chanyeol con un tono de aviso en su voz, sacando a Baekhyun de sus pensamientos—. ¿Hiciste tú esto? —Cuando Baekhyun no respondió, Chanyeol le fulminó con la mirada—. Baek...
—Lo hizo Kai.