L&AW por myvmaru

Caso 5

"Algo no esta bien"    

* Algo no esta bien... *  

- ... - mirando de reojo al pelirrojo que charlaba alegremente con las chicas de la oficina y su amigo del matsuri.  

* A pesar de que me saludo como si nada en la mañana, algo no está calzando aquí *  

- ¿Allen? -

- ¿oh? - saliendo de sus pensamientos - Ryu... ¿qué pasa? -

- ¿qué te pasa a ti? estas distraído... - 

- ¿yo? - 

- ... - mirándolo - estábamos hablando de este caso - mostrándole los papeles - ¿ves que no estas tomándome atención? -

- lo siento... solo... no dormí bien.. - refregando sus ojos.

- mmm... ¿tiene que ver con Lavi-kun? - 

- ¿qué? - mirándolo sorprendido

- estuve con Kanda anoche y el llego sin avisar... - 

- ¡! - exaltándose

- me pareció extraño... había escuchado que saldrían juntos - 

- ¿quién te conto eso? - 

- Kanda -

- ¿por qué ese sujeto sabe todo lo que pasa con Bookman? -

- por qué él se lo cuenta, supongo.. -

- mm... - ofuscándose.

- ¿se pelearon? -

- no... bueno, si... bueno.. no lo sé - revolviéndose los cabellos 

- explícate - 

- uff.. - suspirando - ven conmigo.. - levantándose y yendo hacia el salón de descanso.

- ... - lo sigue.  

...    

-  así que... le dijiste esas cosas por culpa de Onoda - suspirando - realmente... ¿en qué estabas pensando? -

- en nada realmente -

- mmm.. eso está claro como el agua... deberías disculparte con él -

- ¿con quién? - 

- ¡con Lavi-kun por supuesto! -

- ¿y por qué tendría que disculparme con él? -

- ¿como que por qué? lastimaste sus sentimientos después de que él se tomo el tiempo de llevarte a un hermoso lugar solo para hacerte feliz y tu le gritas. - 

- el me juzgo, odio que hagan eso - 

- pero te lo mereces -

- ¡Ryu! -

- ¿qué? estoy diciendo la verdad... y tú lo sabes muy bien -

- ... - guardando silencio, de alguna forma se sentía culpable y enojado a la vez.

- uff.. - suspirando, mirando el triste rostro de su amigo - está bien.. - acariciando su espalda - ..tu sabias que esto podría pasar... - 

- ... - apoyando su cabeza en sus manos - realmente... - afligido - ..duele -

- ... - mirándolo con un dejo de tristeza.

- cielos... - suspirando y tratando de contener sus lagrimas.  

DESPUÉS    

- ... - caminando hacia su oficina, se había lavado el rostro después de llorar un poco con su amigo.

- ey - le habla una voz tras su espalda. 

- ... - se eriza un poco y se voltea lentamente - ¿qué? -

- ¿? - notando algo extraño en sus ojos - ¿sucedio algo malo? -

- ¿? - sin entender.

- te ves cansado - 

- estoy bien - apartando su mirada.

- ¿podemos hablar un momento? - mirándolo fijamente.

- ... - abriendo la puerta de su oficina - pasa - dejándole entrar.

- ... - entrando y cerrando la puerta tras el

- ¿qué es? - sentándose al otro lado de su escritorio, tratando de no mirar directamente al pelirrojo que se acercaba, pero no se había sentado. Un tanto nervioso por esta charla.

- quiero disculparme por lo de ayer -

- ¿oh? - sorprendido y levantando al fin su cabeza para encontrarse con los esmeraldas ojos del más alto que lo miraba sin titubeos.

- me excedí con mis palabras, estaba un poco sorprendido y no controle lo que dije.. pero quiero que sepas que lo único que no quería era juzgarte -

- ... - un poco conmovido.

- solo estaba... - sonriendo levemente - ..un poco celoso y ofuscado -

- ¿celoso? - 

- mj, si... - mirándolo fijamente - ..me da un sentimiento extraño el pensar... que tu corazón está ocupado por ESE tipo de persona -

- ... - frunciendo un poco el ceño - no hables mal de él.. -

- ... - mirándolo 

- no es una mala persona, sólo... - tratando de justificarlo, no hallando las palabras.

- entiendo - al notar su silencio. - no hablemos más de esto... solo... hagamos como si nunca ocurrió -

- ¿? - 

- volvamos a como estábamos, ¿te parece? - sonriéndole.

- ... -   

* ¿Volver a ser como antes?... ¿cómo? ... ¿qué... es lo que éramos? *  

- está bien - 

- bien - sonriendo.  

* Aunque no lo entendí en ese momento... dije que estaba bien, por qué... no quería abandonar ese lugar en el que solo podía estar cuando me acostaba con Lavi *  

- ¿te apetece ir a comer algo después del trabajo? -

- claro - 

- mj, nos vemos después, te dejo trabajar - saliendo de la oficina.

- ... - en silencio.  

*... pero aun hay algo... que no está bien. *  

...    

- ¡¡ahhh ahhh!! - gimiendo bajo el cuerpo del pelirrojo en su cama

- ohh.. - penetrándolo.

- nghh.. - apretando la espalda del que estaba siendo su amante.  

* .. algo... que no está calzando.. *  

- me... ahh.. voy a venir... ahhnn - 

- uhh.. - su cabello pelirrojo se pegaba en su frente por la intensidad de los movimientos y de su encuentro sexual.

- ¡ahhh! -   

* algo... está pasando entre nosotros dos ahora.. *  

- ¿ya te vas? - mirándolo vestirse.

- sí, quiero pasar por la convini por algo para el desayuno de mañana - abotonando su camisa.

- mmm.. - mirándolo fijamente.  

* Y ahora lo estas dejando tan claro.. *  

- nos vemos mañana, compañero - sonriéndole y retirándose.

- ... - viéndolo irse.  

* volver a ser como antes... no me hagas reír.. *  

- uhh.. - suspirando y recostándose, oliendo su almohada.  

* ..si eres tu el que está cambiando. *  

...    

- uff.. - suspirando mientras camina hacia su casa con su camisa desarreglada al igual que su cabello, fumaba un cigarrillo. Su móvil suena de repente, lo toma y contesta sin mirar el nombre de quien era - diga - 

- Lavi - una voz suave y casi paternal se escucha del otro lado del teléfono.

- ¿oh? - sorprendido, cambiando sus facciones a una tierna y emotiva sonrisa - Ryuutaro-san -     

AL OTRO DIA    

Todos los miembros de la brigada de homicidios se encontraban trabajando en sus labores, en algunos casos estancados o en el papeleo de los ya resueltos.   

- Bookman-san, Walker-san - 

- ¿? - ambos se voltean y miran a la mujer que esperaba en el marco de la puerta. - Izumi-san.. - ambos se acercan a la muchacha.

- ¿podemos hablar en privado los tres? - 

- claro.. vamos a mi oficina - dice el albino.

- si -  Los tres caminan y se encierran los 3 en la oficina.

- tome asiento - le dice el peliblanco.

- gracias - sentándose - quiero informarles sobre la condición de Sakaki Sayuri-san y el pequeño Uta - 

- ... - llamando la interés de ambos, pero sobre todo del pelirrojo - ¿hay algo nuevo? - dice el antes nombrado.

- bueno, la pequeña aun no ha querido hablar, debido a los exámenes físicos descartamos un abuso sexual o golpes, pero si hubo algo importante en su revisión - abriendo una de sus carpetas, sacando unas fotografías, dándoselas a los dos chicos - le faltaba una parte de su muslo inferior -

- ¿oh? - el albino se sorprende, mientras el pelirrojo frunce el ceño, mientras veían las fotos.

- cuando le pregunte quien había echo eso, no respondió, pero dijo que no le había dolido... en los informes médicos encontramos fuertes dosis de un anestésico ilegal en su torrente sanguíneo, aun no está bien identificado cual usaron -

- ... - escuchando.

- lo otro que sabemos es que le hicieron exámenes médicos y cortaron su cabello, los detalles del por qué no están definidos -

- mmm.. - mirando los papeles.

- ¿qué tal Uta-kun? ¿como se encuentra? -

- el muchacho no parece tener problemas a grandes rasgos, solo estaba un poco asustado y confundido. Su hermana no le ha dado detalles, ni él los ha pedido.. su relación fraternal no se ha visto alterada en ningún sentido y sus padres han tomado esto lo mejor que han podido -

- entiendo - 

- muchas gracias, Izumi-san -

- no es nada, seguiremos siguiendo a la familia de todos modos, ¿podría encargarle el aviso a Komui-san? -

- claro, lo haré hoy mismo -

- muy bien -

- Izumi-san -

- dígame - mirando al pelirrojo.

- ¿cuando es la próxima visita? -

- mañana a las 5 pm -

- mm.. - pensando en algo - me gustaría acompañarla, ¿habría algún problema con ello? -

- por supuesto que no, avíseme mañana y lo llevaré conmigo -

- gracias -

- el pequeño ha estado preguntando por usted, creo que será una buena idea que lo visite - sonriéndole.

- mj, es bueno saberlo, gracias - 

- bien, es todo, ¿tienen alguna pregunta? -

- no, está bien. -

- bien - levantándose - nos vemos - reverenciándolos y saliendo de la oficina.

- dime, es un patrón, ¿verdad? - mirándolo de reojo.

- si - metiendo sus manos en sus bolsillos. - a lo largo de la investigación se presento el patrón de robo de órganos o pedazos de piel, uñas y cabello.. -

- ¿descubrieron el por qué? -

- no está 100% corroborado, pero se encontraron algunos de esos pedazos robados en obras de arte encontradas en distintas zonas de interés en distintos países y ciudades -

- ¿? - sorprendido.

- mmm... - rascando su cabeza - la intención del por qué lo hacen no es algo que tengamos claro, pero hay algunas hipótesis -

- ¿como cuales? -

- asustar a la población, acrecentar sus propios egos, algún fetiche.. cosas por el estilo -

- entiendo - pensando en ello. - dijiste que eran obras de arte, ¿había alguna en especial? -

- no, eran distintos artistas, algunos muertos otros no... no hay un patrón en ello -

- mmm... - 

- ... - mirándolo de reojo

- ¿tienes las fotografías de las obras? -

- si -

- tráemelas, quiero verlas -

- de acuerdo - 

- ... - ahora él lo miraba de reojo. 

- Allen.. -

- ¿? - mirándolo fijamente.

- yo... -  

La puerta suena de repente interrumpiendo su conversación.  

- pase - dice el albino.

- disculpen.. - entra Ryuichi - ..tenemos un caso en carpeta -

- entiendo, vamos enseguida -

- claro - sonríe y se retira

- bien.. vamos - poniéndose de pie

- ¿no vas a terminar lo que ibas a decir? -

- no es necesario - acercándose a la puerta - era algo personal, así que dejémoslo para otro momento - le dedica una forzada sonrisa y sale del lugar.

- ... -   

* En ese momento sentí que lo que iba a decirme era... realmente importante *  

MIENTRAS TANTO    

- ¡¡nghhh!! - una chica amordazada de boca, manos y pies, comienza a moverse sobre la cama de lo que parecía un hotel. Lo última que recordaba era que volvía a casa del trabajo y alguien la había agarrado por la espalda y drogado. - ¡¡nnn!! - sus ojos comenzaron a lagrimear al notar que estaba en lo que parecía una situación peligrosa. También había notado que su ropa había sido cambiada. Antes vestía su traje negro de trabajo y ahora vestía un fino vestido rojo, parecía muy formal, la seda era tan fina y delicada que podía sentirla en la piel, si hubiera sido en otra situación le hubiera gustado usarlo. La puerta suena de repente y se ve obligada a mirar quien entraba, era una muchacha baja, parecía de unos 15 años, vestía un vestido negro fino al igual que el suyo, con un tul en la parte de su cintura hacia abajo, sus calcetas bucaneras* eran de líneas blancas y negras, con lo que parecía finos zapatos de fiesta.

- oh.. ya estas despierta - le sonríe infantilmente, acercándose a ella.

- ¡nghh! - llorando y moviéndose 

- no llores.. - tocándolo su rostro, secándole las lágrimas con sus dedos - .. o arruinaras tu maquillaje -

- nnghh.. - 

- mj, ciertamente Tiky-oniichan elige a las más bonitas.. - acariciándole el rostro, el cuello y el cabello, dejando su dedicación en el. - tu pelo es tan bonito... - envolviendo sus dedos en entre el delgado cabello negro y largo de aquella asustada mujer. - se verá tan lindo en mi colección.. - la mirada de la pequeña se torno oscura y profunda

- ¡¡!! - asustándose más.

- mj.. - la muchacha jala del cabello a la mujer, haciendo que sus rostros queden a una corta distancia - ..disfrutaré tanto ver como se mancha de sangre cuando Tikky-onichan te corte en pedacitos -

- ¡¡NGHH!! - tratando de moverse, muy asustada por aquel comentario. 

- Road - una voz masculina se hace escuchar

- Onii-chan - mirándolo y sonriendo.

- ¡¡!! - la mujer abre sus ojos como platos al ver al hombre que había entrado en la habitación, parecía conocerlo.

- no asustes a nuestra invitada.. - sonriendo lascivamente como solo el podía hacerlo. - ten, un regalo - agitándole una paleta de colores

- ¡ah! ¡es mi favorita! - corre hacia el alegremente, abrazándolo y tomando la paleta - ¡muchas gracias! -

- mj, disfrútala - besándole la frente y caminando hacia la mujer

- ¡¡nghhh!! - moviendose mas asustada y desesperada

- sabia que el vestido te sentaría bien.. - sentándose en la cama junto a ella. - ... y Lulubell hizo un excelente trabajo con tu piel.. - tocándole la mejilla con la parte trasera de su mano, con mucha delicadeza.

- mnn - llorando.

- ya... estará todo bien.. - quitándole la venda de la boca

- ¡¡¿por qué?!! ¡¡¿¿por qué me estás haciendo esto??!! - gritándole e increpándole.

- shh~~ no grites - hablándole calmadamente

- ¿qué mierda?... ¿qué mierda está pasando? ¿qué vas a hacerme? - 

- no lo sé.. - enredando sus dedos en su cabello - ¿qué quieres que hagamos? - mirándola coqueto, besándole un poco de su cabello.

- ¿vas a violarme? - asustada

- mj, ¿eso quieres? - acercándose a sus labios - ¿por eso pintaste tus labios rojo cereza cuando nos vimos la última vez? Nanami-san.. - 

- nnn.. - temblando.

- es una lástima.. - rozando sus labios con los de la mujer - ..pero a pesar de que eres hermosa, las damas no son lo mio.. - susurrándole

- ¡¡!! - sorprendiéndose.

- mj.. - se pone de pie y busca algo en el velador. La mujer lo mira de reojo y lo ve tomar una jeringa, preparándola

- no... ¡¿qué vas a hacer?! - comenzando a moverse.

- voy a poner en ti un elixir que te hará sentir muy bien.. - golpeando con su dedo la jeringa

- ¡¡NO!! ¡¡NO TE ACERQUES!! - grita al verlo venir con la jeringa

- te prometo que no dolerá, solo quédate quieta - sosteniéndole uno de sus brazos

- ¡NOOOOO! ¡¡SUELTAMEE!! - tratando de quitárselo a duras penas.

- allá vamos - tomando con fuerza el brazo, clavándola de una estocada asertiva en una vena.

- ¡¡ah!! - gritando por el pinchazo.

- ¿ves? no dolió nada.. - besándole la frente mientras apretaba el trasero de la jeringa para dejar en la sangre de la mujer todo aquel veneno de un azuleo color. Al termina ello, quita las vendas de la mujer y se pone de pie.

- uhh.. - asustada mira al hombre que le da la espalda, mira a la muchacha la cual estaba en un sofá violeta, comiendo su paleta sin prestar atención a lo demás. En una valiente decisión la muchacha se pone de pie y corre hacia la puerta, pero no alcanza a llegar a ella cuando sus piernas se desvaneces y la hacen caer de golpe al suelo.

- cariño, no hagas eso.. - mirándola con sus manos en los bolsillos - dañaras tu hermoso cuerpo - caminando hacia ella

- ¡¿qué me diste?! - no podía mover su cuerpo.

- ¿como te sientes? - agachándose 

- nghh... ¡¡quema!! - apretando sobre su pecho.

- sí, siempre quema al comienzo - tomando su delgado cuerpo, levantándolo en sus brazos - aquí vamos - llevándola a la cama

- uhh.. uhhh.. ¿qué es esto?... - su cuerpo se sentía caliente, pero de una manera extraña. 

- ¿duele? - dejándola en la cama delicadamente.

- n..no... - jadeando - ahnn.. - haciendo ruidos sexuales.

- mj, ¿lo notas? - deslizando su mano por su pecho, por su abdomen, sus muslos

- ahhh~~ se siente tan bien~~ - sintiendo mucho placer, abriendo sus piernas - nghh... cógeme... - 

- mj, te daré algo mejor.. - acercándose a ella - te convertiré en un hermoso Gustav Klimt* - dándole un suave beso en la mejilla.

- nghh.. ahh... - 

- ... - poniéndose unos guantes blancos quirúrgicos. Abriendo una caja negra en donde habían aparatos de cirugías, sacando un bisturí. - Road -

- ¿mm? - mirándolo - pon algo de Haydn* por favor - sonriendo suavemente.

- claro - sonriendo y estirando su brazo hacia un equipo de música, poniendo el compacto numero 3. La música clásica comenzó a invadir la habitación.

- mmm... - cerrando sus ojos un momento - sublime - sonriendo, pone el bisturí en el pecho de la mujer, rompiendo la parte del escote dejando salir sus senos, rasgando la piel de la mujer con el aparato medico haciendo burbujear la sangre de esa zona.

- ¡¡ahh!!... - gimiendo - jajaja.. es tan bueno~~ - 

- ... - sonriendo plácidamente mientras abre a la mujer, descuartizando suavemente su cuerpo.

- nghh.. ¡ahhh! si.. ¡mas! ahhh... - 

- mj.. - sonriendo.  

La habitación se lleno de gemidos, música y un notorio aroma a sangre.  

...      

- ¿y cuando llega? - 

- esta noche - 

- eso fue rápido -

- sí, estoy en el cambio de avión, llegaré a eso de las 10 -

- ¿quiere que pase por usted al aeropuerto? - hablando por teléfono apoyado en una pared.

- no, no es necesario -

- ¿ya sabe en qué hotel se hospedará por el momento? -

- mjejeje, si.. lo sé -

- mj, esa sonrisa sonó muy hermosa - sonriendo suavemente

- mj, deja de alagarme Yuu - 

- es imposible cuando se trata de usted, Asahi-san -

- eres tan lindo - 

- no diga eso, voy a sonrojarme -

- mjejeje.. -

- entonces lo veré mañana -

- sí, te he extrañado mucho, a ti y a Lavi -

- sí, nosotros también, el conejo estará muy contento - 

- mj, eso espero... ¡ah! debo irme, el avión saldrá pronto -

- claro, cuídese mucho -

- tú también, no se lo digas a Lavi, quiero que sea una sorpresa -

- claro - sonriendo - nos vemos -

- nos vemos, Yuu - colgando.

- ... - guardando su móvil, prendiendo un cigarrillo.

- ¿fue una buena llamada? -

- ¿? - mirando al chico que le hablo.

- mj.. - sonriéndole mientras cierra la puerta del lugar de descanso.- algún amante, ¿quizás? -

- ¿acostumbras salir de las paredes? - quitándole la mirada.

- mjejeje, soy silencioso, es todo... - sentándose en una de las bancas

- no recuerdo que fuera así - 

- mjejeje - riéndose - bueno, hay cosas en las que no puedo mantener mi boca cerrada - mirándolo.

- ... - haciendo lo mismo. - ¿qué quieres? - 

- pienso que quizás hoy es un buen día para jugar entre las sabanas - sonriente.

- ... - mirándolo de reojo - ¿en las mías? -

- en las tuyas o en las mías, no importa, mientras seamos tu y yo - coqueteándolo.

- eres un bicho raro -

- ¿lo soy? - 

- si... - apagando su cigarrillo, acariciando el cabello del muchacho - pero un bicho muy erótico - 

- mjejeje - riendo

- ven a mi casa esta noche y trae condones, no me quedan - saliendo de la habitación.

- jajaja, a la orden - sonriendo.  

MÁS TARDE    

- ... - sentado en su sofá, viendo unos papeles mientras fuma un cigarrillo y un vaso de whisky con hielo descansa sobre su pequeña mesa de madera. - uff.. - suspira y mira de reojo hacia una carpeta azul, frunce el ceño un poco. Un silencio entumecedor se hace presento en todo su departamento. Desvía su mirada y toma su móvil, enviando un mensaje que leía -"Para: Allen. Asunto: Sobre lo de esta tarde. Mensaje: Tengo los papeles que querías, dime si estás en casa para ir a dejarlos. LAVI." - ... - deja su móvil sobre el sofá un momento y mira nuevamente la carpeta azul. Su móvil suena y lee la respuesta a su mensaje - "No te molestes, estoy fuera ahora mismo, iré hacia allá cuando termine las compras. Allen." - ... - luego de leer deja el móvil nuevamente sobre el sofá. Luego de mirar la nada por unos minutos gira su mirada hacia la carpeta, abriéndola y sacando una fotografía, poniéndola frente a sus ojos. - ... - su mirada se torna depresiva.  

FLASHBACK    

- vaya, no pensé que había tanta gente en estas cosas - mirando a su alrededor, un Lavi de aproximadamente 16 años, vestido con un uniforme escolar, cargando su bolso. Estaba en lo que parecía un galpón, se exponían obras de arte. 

- eso es por qué nunca vienes - le habla un hombre alto y moreno, bien vestido con un terno negro, una de sus manos estaba dentro de su bolsillo derecho y en la otra descansaba un cigarrillo.

- perdóname por no ser tan aburrido como tu - 

- cielos, tienes una lengua tan filuda ahora, deberías haberte quedado pequeño -

- sí, sí.. lo que sea... ¿hasta cuando me obligaras a estar aquí? -

- no te hará daño aprender algo sobre arte.. así que cierra la boca -

- mmm... - ambos caminan por el salón lleno de pinturas famosas - waa~~ - bostezando.

- no seas vulgar, idiota - golpeándole la cabeza

- ¡au! - sobándose - pero esto es realmente aburrido -

- imagino que lo es para un chiquillo que piensa todo el día con su parte baja -

- ¡ja! ¿lo dice el hombre que anoche no paraba de decir "estas tan bueno hoy" mientras se cogía a su amante? -

- deberías dejar de escuchar lo que hacen los demás -

- no es como si pudiera evitarlo, Ryu-san no es muy silencioso que digamos -

- ... - sonriendo de medio lado, deteniéndose frente a una pintura, mirándola un momento.

- aunque siempre es un placer escucharlo, su voz es tan sexy que se me puso un poco duro -

- oye.. - poniéndose frente a él - no estés poniéndole el ojo encima al amante de tu benefactor - golpeándolo la frente con su dedo índice.

- ¡au! - el hombre sigue caminando y él lo sigue - eres tu el que no quiere que tome un departamento de la brigada -

- prefiero que te masturbes a dejarte vivir solo con el tipo de vida que llevas -

- entonces aguántate -

- hablaremos de ello cuando tengas la mayoría de edad - mirando una obra inmensa en una pared - mira esta, es mi favorita -

- ... - mirándola - mmm... - sus ojos se posan en toda la pintura, era algo abrumadora.

- su nombre es "El Guernica" de Pablo Piccaso... es maravillosa -

- me da escalofríos -

- mj, es porque no entiendes el arte... - mirándola fijamente, como hipnotizado - .. es hermoso como renuncia al color para acentuar el dramatismo de la obra, uso una técnica llamada "Grisalla" en donde solo utiliza, grises, blancos y negros... el realismo en ella es impactante, casi sientes como gritan y se quejan de desesperación, es exquisita.. -

- ... - mirando al moreno - eres tan raro.. - 

- mj, quizás.. - sonriendo 

- ¿ya puedo irme? -

- sí, ya vete, estas molestándome -

- entonces, no me traigas a esto, por favor - iba a retirarse.

- Lavi -

- ¿mm? - mirándolo.

- cuídate - sonriendo amablemente.

- mj, tu también, nos vemos en casa - yéndose.

- ... - viéndolo marcharse. Devolviendo luego la mirada a la pintura - mj - cambiando su sonrisa a una más tenebrosa.  

...   

- uh.. uh... - corriendo por el pasillo de una mansión en llamas - cof, cof.. - tosiendo mientras pierde la respiración, entre los gases tóxicos del lugar, su rostro mostraba desesperación, tristeza y preocupación. - ¡¡¡TIKKY!!! - grita mientras abre algunas puertas a patadas.- ¡¡¡TIKKY!!! - comienza a toser más fuerte y a perder fuerza en sus pierna. - mierda - jadeando y tratando de continuar, levanta su cansada mirada y ve la puerta al final del pasillo - el estudio... - susurra y se dirige a aquel lugar, al acercarse podía escuchar provenir de dentro, música clásica. - ¿?  sorprendiéndose por  aquel detalle, llega hasta la manilla de la puerta y duda un momento en abrirla, algo dentro de él lo atemorizaba, pero al final... abre la puerta.  

FIN FLASHBACK.  

- ¡! - abre los ojos rápidamente y arroja la fotografía al suelo. - mierda - susurra y pone las manos sobre su rostro. De repente el timbre de su apartamento suena. - ... - se pone de pie y abre la puerta - hola -

- buenas noches - le dice el albino que cargaba unas bolsas.

- ¿la cena? - mirándolas

- sí, ¿comiste? -

- no.. pasa - dejándolo pasar - iré a lavarme la cara, ponte cómodo -

- bien - quitando sus zapatos y abrigo, caminando a la sala, nota que hay una fotografía en el suelo y la recoge, la mira y se sorprende. 

- ¿quieres unos palillos? - entrando a la sala - ¿oh? veo que la viste - 

- estaba en el suelo -

- ¿si? debe haberse caído cuando me levante - sentándose en el sofá.

- ¿son estas? - tomando la carpeta.

- si - 

- ¿puedo? -

- adelante - prendiendo un cigarrillo.

- ... - toma asiento y abre la carpeta, mirando las fotografías de las escenas de los crímenes de los noahs, una por una. - esto es... -

- no es el mejor panorama para antes de la cena, pero.. - 

- cuantas veces encontraron.. -

- todas -

- ¿eh? - sorprendido.

- en cada una de las escenas fueron encontradas... las dos más grandes fueron encontradas en Roma y en Japón.. la primera, fue en Japón... "El Guarnica" de Pablo Piccaso - 

- ¿Piccaso? -

- si... -

- ¿dónde? -

- el Orfanato en donde me crie -

- ¡¿?! - sorprendido.

- el mismo día en que se descubrió que Tikky Mikk estaba involucrado directamente con los Noahs -

- ese hombre... por lo que pude investigar, fue uno de los policías más destacados hace años atrás.. - 

- ... - 

- ... - lo mira fijamente - lo conociste, ¿no es así? -

- ... - silencio. - si - dice finalmente luego de minutos de silencio.

- debe haber sido difícil para ustedes... - 

- lo fue - bastante cortante - .. todos estábamos sorprendidos, era un hombre que a los ojos de muchos lo tenía todo, prestigio, educación, porte... pero al parecer... - suspirando bajamente - ..no era suficiente -

- ... - guardando silencio por el ambiente producido a causa de esa conversación.  

*No quise decirlo en ese momento para no empeorar las cosas, pero... sabía que había algo más, algo que él no estaba diciéndome... *  

- la segunda... - sigue hablando - .. fue en el vaticano, "la ultima cena" de Leonardo Da Vinci... -

- mm... - mirando la foto de aquella oportunidad - bastante apropiado para el lugar.. - pensando - ..aunque aun no entiendo por que "el Guarnica"... -

- por qué en aquel lugar comenzó su propia desesperación -

- ¿oh? - sorprendido.

- o al menos eso creo -

- ¿el también? -

- sí, de aquel orfanato han salido la mayoría de los agentes del matsuri de mi generación, el no fue la excepción -

- entiendo - 

- las demás obras no fueron de pintores tan reconocidos, sólo en los puntos importantes se encontraron de aquellos artistas de mayor prestigio.. -

- ¿entre cuantos periodos de tiempo? -

- relativo... los primeros fueron separados por un mes exacto, luego fueron anuales y últimamente había cesado, o al menos eso parecía -

- hay otra cosa que me tiene intranquilo.. - dejando las fotografías - ..las victimas -

- ... - pensando - no se ha encontrado un patrón fijo - 

- mmm... -

- pero aquello tiene un por qué -

- ¿? - mirándolo.

- ...los noahs son como coleccionistas... -

- ... - escuchando atento.

- cabello, piel, uñas, etc... ninguna de las victimas ha sido dejada con todas sus partes corporales intactas, ni mucho menos... vivas -

- pero... Sayuri-san... -

- también me lo pregunte... pero solo puedo encontrar una respuesta para eso... - mirando fijamente al peliblanco.

- ¡oh! - sorprendiéndose - ella no era la víctima -

- ciertamente - 

- entonces... -

- no quiero pensar que es al pequeño al que buscan, pero... debemos ser cuidadosos -

- claramente.. - pensando en ello. Ambos quedan en silencio unos minutos.

- bueno, puedes llevarte la carpeta si quieres -

- lo haré, gracias -

- ¿vas a comer? -

- si... -

- traeré algunos platillos - poniéndose de pie - ¿cerveza? -

- si.. gracias - aflojando su corbata

- mj.. - sonriendo

- ¿qué? - mirándolo, al notar que su esmeralda mirada estaba puesta en el.

- eso que haces... cuando aflojas tu corbata... es muy sexy... - 

- ... - ambos se miran fijamente por varios minutos.

- entonces, ¿quieres cenar primero? - diciéndolo en un tono sensual.

- ... - suspirando y poniéndose de pie - no - se cuelga de su cuello y lo besa apasionadamente, el pelirrojo bordea las caderas del más bajo y lo acerca violentamente a él, levantando los pies del otro del suelo, llevándolo entre besos a su cama, donde ambos se recuestan para tocarse, besarse, acariciarse por aproximadamente una hora.  

...    

- ¿donde compraste este bento? - comiendo sobre la cama.

- de la tienda de conveniencia cercana a la estación -

- mm.. esta bueno.. - 

- deberíamos comer en la mesa -

- mj, no seas tan tieso.. - 

- no lo soy, de todos modos eres tu el que tendrá que limpiar -

- mjeje, ciertamente -

- ... - mirándolo de reojo.  

*Así que ahora si eres tú mismo... *  

- iré a ducharme.. - le dice el pelirrojo luego de dar el último bocado de su plato.

- levantaré estás cosas -

- ¿no quieres entrar conmigo? - poniéndose de pie y sonriéndole coqueto

- no, ya vete - 

- mj.. - riendo, yendo hacia el baño.

- ... - caminando hasta la cocina con los trastos sucios. - "realmente no entiendo a este hombre.." - abriendo la llave del agua para lavar los platos, metiendo sus manos dentro. - "¿qué tan bipolar puede llegar a ser?" - lavando, desvía su mirada hacia un reloj y nota que ya se aproximaba la media noche - "me pregunto si... ¿me echará ahora? últimamente no se ha quedado en mi casa y yo no había venido a la suya... así que... no sé en qué estará pensando... " - suspirando - "aunque sé... el por qué se está comportando así... "te daré de tu propia medicina" quizás... " - dejando los platos en el secador. - "aunque dije que solo cogíamos y sigo pensando que esa es nuestra relación... " - cerrando la llave del agua - "... aun así... sigo pensando que los momentos que paso con él... son muy cómodos y apacibles" - 

- ey.. - abrazando el cuerpo del menor por la espalda, apoyando su mentón en su hombro.

- eso fue rápido -

- solo fue una ducha.. - unas gotas de su cabello caían sobre el hombro y cuello del albino.

- ve a secarte ese cabello, estas mojando mi camisa -

- mj.. me gustaría mojar otra parte de ti.. - mordiéndole su oído.

- mnn... vaya.. - volteándose, quedándose frente a frente con él. - hoy estas algo... -

- ¿caliente? - sonriéndole - bastante.. - iba a besarlo, pero el peliblanco interpone su mano para detenerlo.

- ya es hora de que me vaya o no cogeré un taxi luego.. -

- no es necesario, puedes quedarte... -

- mmm... - mirándolo fijamente - ...es extraño que eso salga de tu boca últimamente -

- hoy no quiero pelear - acercándose nuevamente a su boca - .. quiero comerte, voy a usar cada uno de tus agujeros esta noche.. - susurrándole en el oído.

- nghh.. - excitándose por esas sucias palabras.

- voy a lamerte por todas partes.. - besando su cuello y la parte posterior de su oreja.

- ahh~~ - gimiendo.

- voy a tocar cada centímetro de ti.. - bajando su mano hacia su pantalón, tocando por sobre la tela el miembro semirrígido del más bajo.

- uh... - suspirando.

- justo aquí.. - levantando su cuerpo y sentándolo en el mueble de cocina, besándolo salvajemente 

- nghh.. - dejándose llevar, acomodando sus brazos alrededor del cuello del pelirrojo, abriendo sus piernas para dejarlo ponerse entre ellas y poder rozar aun más sus cuerpos. Las manos del mayor se mueven en los pantalones del otro, rozando el miembro para ponerlo cada vez más duro, mientras el suyo obtenía su propia rigidez, por el roce y los gemidos de su contra parte. Pasan unos minutos tocándose y encendiéndose, pero los interrumpe el timbre.

- ¿? - ambos se detienen un momento.

- ¿esperabas a alguien? - entre jadeos.

- no... es extraño, es bastante tarde -

- deberías abrir -

- ¿ahora? - mirando hacia abajo, viendo las dos notorias erecciones.

- puede ser alguien de la brigada - también un poco aproblemado por su erección, tampoco quería dejarlo a medias, pero debían. 

- lo dudo.. -

- vamos, aparta - bajándose del mueble - ve a ponerte un pantalón - el pelirrojo solo traía una toalla en su cintura. - yo abriré.. -

- mm.. - funfurruñando.

- muévete.. - sonriendo algo divertido.

- está bien.. - va al cuarto por algo de vestir. El albino se arregla su ropa mientras camina hacia la puerta.

- uff.. - ordenando su cabello y abriendo la puerta. - ¿oh? - sorprendido. Frente a el había un hombre un poco más alto que él, era delgado, de un largo cabello negro azulado que colgaba por su hombro en una coleta desordenada, poseía unos profundos y dormidos ojos azules. Vestía un traje negro muy fino y a pesar de no estar todo en su lugar se veía muy bien, sus facciones eran finas, suaves y femeninas. - "esta persona es... bellísima" - asombrado por tanta belleza.

- emm.. - comienza a hablar el chico frente el - .. creo que me equivoque de dirección - hablaba suavemente, con una voz masculina y formal - .. ¿este es el departamento de Bookman Lavi? - 

- ah, si... es aquí - le responde un poco intimidado por tal belleza.

- oh, eso es genial - sonriendo suavemente

- ... - mirándolo fijamente, esa sonrisa lo había encandilado.

- ... - también lo mira fijamente.

- ¿? - sorprendido.

- mj - sonriéndole - ¿él se encuentra en casa? -

- ¡oh! si.. pase, por favor.. - 

- gracias - entrando.

- "aunque no debería hacerlo pasar sin preguntar, el parece conocer a Bookman.." -

- ... - el hombre mira su alrededor y sonríe cálidamente, cerrando sus ojos un momento - huele igual que siempre - susurra.

- ¿? - sorprendido - "...el... podría ser..." - 

- Allen... quien... - sale de la habitación y detiene sus palabras al ver quien estaba junto al albino.

- mj.. - el pelinegro lo mira y sonríe casi maternalmente

- ... - impresionado por ver a aquella persona, se notaba en sus ojos la sorpresa y la emoción - Ryu.. - susurra y corta sus palabras.

- ha pasado tiempo.. Lavi - 

- ... - comienza a caminar hacia el - Ryuutaro-san - cuando llega frente a él, le da un abrazo protector y muy personal.

- ¡! - el albino se sorprende por aquella escena - "no hay duda..." - apretando sus puños.

- mj.. estoy en casa - le abraza también el hermoso hombre.

- bienvenido - aferrándose más a el delgado cuerpo frente a él.

- "... este hombre debe haber sido... un amante" -  

*En ese momento, sentí un sabor agridulce en la boca... y no pude explicar en ese momento, el por qué me sentía tan incomodo... y tan molesto.*  

Después de unos minutos, ambos se separan y se miran fijamente, sonriendo.  

- estas más alto que la última vez que te vi.. -

- debe ser tu imaginación.. - se veía muy contento.

- quizás... -

- tú no has cambiado nada, sigues igual de hermoso - 

- mj, no digas eso, me avergonzaré - acariciando su mejilla.

- mjejeje.. - riendo - oh.. - mirando hacia Allen - no los he presentado, el es Walker Allen, está a cargo de la brigada -

- oh, es un placer... tenía la impresión de haberte visto en alguna parte.. - sonriéndole al albino.

- ... - mirándolo también.

- soy Asahi Ryuutaro, estaré a cargo de la división psicológica de la brigada - reverenciándolo.

- ¿oh? usted también es... -

- mj, si... también soy un enviado del matsuri, aunque mi llegada se adelantó un poco, espero podamos trabajar juntos -

- oh, claro.. es un placer - reverenciándolo también.

- es cierto, ¿por qué no me dijiste que llegarías hoy? hubiera ido por ti al aeropuerto -

- mj, quería darte una pequeña sorpresa -

- y vaya que lo hiciste - 

- me alegra -

- ven, dame tus cosas - tomando el bolso y la chaqueta del muchacho - te haré un poco de té y podremos charlar un poco -

- de acuerdo -

- creo que me retiraré ahora - dice el albino

- ¿eh? - ambos lo miran

- ¿por qué no te quedas a tomar un té con nosotros? -

- no, ya es tarde y debo encontrar un taxi - poniendo su chaqueta - además, ustedes parecen no haberse visto hace mucho - poniendo sus zapatos - .. los dejaré conversar tranquilos - 

- ¿estás seguro? ya es tarde.. - 

- Lavi tiene razón, no tiene que irse por mi -

- no, no es nada de eso... estoy también un poco cansado, no se preocupen - 

- entonces, te acompañaré hasta que tomes tu taxi - iba a coger su abrigo.

- no es necesario - hablándole un poco duro 

- pero.. -

- está bien, de todos modos mi casa queda cerca, si no pasará algo podría caminar -

- Allen.. -

- soy un policía, estaré bien - abriendo la puerta - fue un placer, mañana podríamos compartir una taza de café, Asahi-san -

- claro, será un placer - sonriéndole

- nos vemos mañana - retirándose.

- ... - el pelirrojo queda mirando su partida.

- ¿está bien que lo dejes ir solo? -

- si.. - poniendo las manos en sus bolsillos - el es un chico fuerte, aunque no parezca - sonriendo algo triste.

- ... - mirándolo fijamente.

- en fin.. - volteándose a mirar a su huésped - .. ¿vamos por esa taza de té? - 

- si.. - sonriéndole.  

* En realidad, no quería quedarme..*  

- ... - caminando por las calles casi vacías de la zona, había decidido caminar para despejar su mente.   

*.. ellos parecían tan cercanos que... sentí como mi presencia estaba de sobra...*  

- uff.. - suspirando y deteniendo sus pasos.  

* Me sentí exactamente igual a como me siento... cuando comparto la misma habitación con Takahiro y Sakura-san *  

...    

- aquí tienes - dejándole la taza de té humeante frente a él, sobre la mesa de estar.

- gracias - bebiéndolo - esta sabroso -

- tiene un poco de menta -

- umm.. me encanta la menta - sonriente

- lo sé - sonriendo cálidamente.

- así que, ¿interrumpí algo? -

- mjeje, nada que no hayas interrumpido antes.. - bebiendo de su tasa.

- jejeje, ciertamente - riendo - Walker-san es bastante guapo, pero parece algo difícil -

- uff, no sabes cuánto.. -

- mj, es extraño de ti buscar un amante que te traiga problemas.. - 

- Allen, es especial -

- ¿mm? ¿lo es? - llamándole la atención.

- ¿de verdad tienes que analizarme ahora? - mirándolo divertido.

- siempre es agradable analizar a mi pequeño Lavi - 

- devuélveme mi privacidad, por favor -

- mjejeje - riendo.

- ¿Yuu sabía que vendrías antes? -

- sip - 

- ya me parecía - 

- tu... ¿has estado bien? - poniéndose un poco más serio.

- sí, un poco cansado, pero bien... -

- mm... estaba preocupado.. -

- no debes estarlo, ya soy un hombre grande -

- mj, lo sé, pero.. nunca se es lo suficientemente grande para cargar con tal peso encima -

- ¿lo dices por ti? - 

- mj, quizás.. - mirando su reflejo en el té de su tasa - a pesar de que han pasado años, él se las ideo para hacernos sentir su presencia día a día... siempre me he preguntado si era parte de su plan hacernos sentir así.. - bajando la cabeza, un tanto decaído 

- no pongas esa cara.. - mirándolo fijamente - .. independiente de lo que el quería o no, darle en el gusto no es algo que deberíamos hacer.. - el pelinegro lo mira - .. ese día, decidimos vivir nuestras vidas fuera de la sombra en la que el nos mantenía, decidimos dejar de amar a ese hombre que nos dio tanto y a la vez... nos quito todo.. - 

- ... - bajando la cabeza nuevamente - mj.. has madurado mucho, Lavi.. -

- ... - escuchando.

- me haces sentir que... me he quedado atrás - 

- ... - lo mira y estira una de sus manos, tocando suavemente la del hombre frente a el

- ¿? - mirándolo.

- entonces... - sonriéndole dulcemente. - ... voy a seguir jalándote hasta que me alcances - 

- mj.. - sonriendo - gracias - apretando la mano sobre la suya.    

AL OTRO DIA    

- buenos días -

- Walker-san, buenos días - le saludan las muchachas de recepción.

- ... - sigue caminando - ¿oh? - nota un alboroto en la oficina - ¿? - se acerca a los demás y comienza a escuchar los cotilleos de pasillo.

- ¿lo viste? -

- ¡sí, es guapísimo! - 

- al parecer viene de una central extranjera -

- ¿enserio? -

- uno de los superiores dijo que tenía descendencias chinas -

- ohh~~ con razón tiene esa fina cara -

- pero su acento es ingles -

- ¿quizás viene de América? -

- wuoo.. -

- ... - "entonces ya están aquí..." - sabiendo de quien se trataba - permiso - le dice a la gente aglomerada fuera de la oficina del fiscal. Toca la puerta y cuando escucha el pase desde dentro, abre la puerta y la cierra tras el

- buenos días, Allen-kun - le saluda Komui.

- ¡buenos días! - le dice sonriente el pelilargo.

- buenos días, Asahi-san - reverenciándolo.

- ¿ya se conocen? - pregunta el viejo Bookman.

- sí, anoche estaba en el departamento de Bookman, revisando unos archivos y tuve el placer de conocerlo -

- entiendo - 

- entonces, podemos avanzar más rápido - dice el fiscal - Asahi-san se hará cargo junto con Izumi-san de los interrogatorios psicológicos y la ayuda a las victimas... hoy tenemos una visita a la casa Sasaki, me gustaría que los 3 acompañaran a Izumi-san y dieran una visita a la familia.. -

- claro.. - 

- apóyalo en lo que necesite, Bookman-kun ya se encargo de presentarlo a los demás y de mostrarle el lugar, sólo ponlo al tanto de los casos -

- lo haré - 

- Bookman-kun -

- ¿si? -

- ya que el traslado de Asahi-san fue sorpresivo, quiero pedirte que lo recibas en tu apartamento hasta que el suyo este listo -

- ¡! - el albino se sorprende y aprieta su puño.

- ... - el pelilargo lo mira de reojo.

- claro, no hay problema - 

- entonces, habiendo dejado todo claro, pueden retirarse y continuar con su trabajo, Asahi-san, bienvenido a la brigada - sonriéndole.

- muchas gracias - poniéndose de pie y reverenciándolo - espero poder hacer un buen trabajo junto a ustedes, cuiden de mi por favor -   

...  

Los tres salen de la oficina y caminan por los pasillos.  

- ¿a qué hora es la visita a los Sasaki? - le pregunta Allen a Lavi.

- a las 5 -

- tenemos tiempo aun, Asahi-san, si desea podemos usar estas horas para ponerte al tanto del caso -

- oh, me parece muy bien... -

- acompáñeme a mi oficina, por favor - 

- claro - mirando al pelirrojo

- ¿nos acompañas? -

- no, tengo algo que hacer con otro caso, los veré donde los Sasaki, más tarde -

- de acuerdo -

- llamaré a Yuu y le daré que pasaremos después del trabajo, me envió un mensaje y dijo que tenía muchas ganas de verte -

- mjeje, yo también, por favor arréglalo -

- sí, nos vemos después - acariciando su cabello.

- sí, hasta más tarde - los dos chicos más bajo se quedan mirando la partida del pelirrojo

- Asahi-san, por aquí por favor - 

- si - ambos entran a la oficina del albino y dedican la mañana a hablar sobre el caso. Luego, al llegar la hora, ambos suben al auto policial con rumbo a la casa Sasaki.

- ¿Izumi-sensei llegará desde otro lugar? -

- sí, tenía otro caso que atender - conduciendo. Se mantienen un momento en silencio hasta que el albino habla

- Asahi-san -

- ¿mmm? -

- ¿es nacido aquí? - 

- oh, no.. nací en china, pero fui traído aquí a los 6 años - 

- ¿sus padres son nativos de ahí? -

- si, por lo que sé así es -

- ¿? - sin entender

- soy huérfano -

- oh, lo lamento -

- no, está bien, a la edad que tengo sería absurdo el no haberlo superado - 

- ¿usted también se crio en el orfanato de Bookman? -

- sí, pero conocí a Lavi cuando fue llevado a New York por Bookman-san -

- mm.. ¿es así? -

- sí, de todos modos soy mayor que él. -

- ¿lo es? - 

- ¿no lo parece? -

- honestamente, no - mirándolo de reojo - ¿puedo preguntarle su edad? -

- mjjeje, claro, tengo 40 años -

- ¡¡¿QUE?!! - sorprendido.

- mjejee, luces sorprendido -

- usted... no los aparenta para nada-

- oh, muchas gracias.. - sonriéndole.

- vaya, fue una gran sorpresa -

- mj, suelen decírmelo mucho, pero los años se sienten de todas maneras -

- de verdad no parece para nada - 

- mj, ¿y que edad tienes tu? -

- 28 -

- mm.. eres muy joven, debes ser un buen oficial como para hacerte cargo de homicidios a tu edad -

- supongo que es gracias a mi trabajo, no quiero elogiarme, pero soy diligente en lo que hago -

- mm.. si, tienes ese tipo de aura, además... tienes un buen ejemplo -

- ¿oh? - sorprendido.

- mj.. - sonriéndole - tu padre era un buen hombre -

- conoció a... -

- si, en el matsuri era un hombre muy respetado, lo querían mucho y era un buen oficial... hubo ocasiones en las que pude compartir con él, era un hombre muy correcto y amable... -

- ... - escuchando atento, todo lo que tenia referencia a su padre era muy importante para el saberlas.

- el siempre ostentaba el tener un hijo muy mono - 

- ¡! - sonrojándose un poco 

- mjeje, por lo que veo ahora, no era solo una exageración - 

- mnn.. - avergonzado.

- mj.. - sonriendo.

- ya llegamos - frenando el auto.

- es una bonita casa - mirando alrededor

- si.. - cerrando el auto, caminando juntos hacia la casa, cuando llegan a la puerta tocan el timbre. 

- oh, Walker-san.. - le abre la dueña de casa - bienvenido -

- buenas tardes, le presento a Asahi Ryuutaro-san, estará a cargo del caso junto a Izumi-san -

- es un placer, dama -

- también para mí.. - sonrojada por ver a tal guapo hombre - por favor, adelante - dejándolos pasar.

- gracias, con permiso - ambos entran al lugar y los acompaña la mujer hasta el salón, en donde estaba la doctora Izumi, el dueño de casa y el hermano mayor de la familia.

- Walker-san.. - lo reverencian todos 

- buenas tardes.. - les presenta al hombre que lo acompañaba al que todos reciben y los hacen tomar asiento. - Bookman, ¿aun no ha llegado? - 

- no, llamó para avisar que ustedes vendrían -

- entiendo.. - mirando a la doctora - Izumi-san, ¿ya pudo ver al niño? -

- sí, tuvimos una pequeña conversación, el muchacho está bien... ahora, me gustaría poder decir lo mismo de Sayuri-san -

- ... - los padres bajan sus cabezas. El nuevo muchacho de la brigada los mira fijamente.

- ¿aun no ha querido hablar? - pregunta el comisario.

- asi es.. sólo habla con Uta-kun.. - 

- mm.. si no hay avance seguiremos estancados.. - 

- disculpen -

- ¿oh? - miran al hermoso hombre.

- ..¿me permitirían hablar con ella? - 

- ... - lo miran fijamente

- quizás si es alguien diferente a los que han estado a cargo, sea más fácil para ella abrirse... -

- sí, puede que Asahi-san tenga razón, he venido todas las semanas y puede estar un poco sobre cargada de esto, quizás alguien diferente pueda ayudar -

- mm.. entonces, si Izumi-san está de acuerdo.. ¿que opinan? - le pregunta a los padres

- si creen que pueda servir, adelante.. -

- Asahi-san, se lo encargo - dice el albino.

- si.. - poniéndose de pie - ¿podría guiarme? - le dice a la mujer.

- claro.. - se pone de pie también y lo guía por la casa.

- ... - el albino queda pensando en algo.  

- esta es su habitación -

- mm.. - mirando la puerta. La mujer toca y luego abre la puerta

- Sayu-chan.. - La muchacha estaba sentada en su cama, mirando por la ventana. - tienes una visita - la muchacha no contesta. - pase - le dice al hombre

- gracias.. - entra a la habitación - Sayuri-chan.. - la nombra

- ... - la muchacha voltea su mirada a él y abre sus ojos a modo de sorpresa. Las dos personas se sorprenden.

- Sasaki-san.. - le habla a la mujer - déjenos a solas, por favor -

- está bien - saliendo dudosa de la habitación, pero cierra la puerta tras ella.

- ¿paso algo? yo no quiero hacerte daño.. - le dice suavemente.

- tú eres... - asustada y sorprendida

- ¿eh? - sorprendido y algo confuso. - ¿ sabes quién soy? - 

- no... tu... - 

- ... - mirándola y dejándola hablar.

- ese hombre.. - sostiene su cabeza con ambas manos

- ... - se torna serio - ¿te refieres a Tikky Mikk? - 

- ¡¡!! - da un sobre salto.

- ¿el te hablo de mi? - 

- ngh... - mordiéndose su labio inferior. 

- ... - su mirada se torna suave y un poco triste - debes haber estado muy asustada.. -

- ¡! - otro sobresalto.

- yo también estoy asustado... pero no por el hecho de que pueda dañarme, si no por qué podría hacerle algo a las personas importantes para mí.. -

- ¡¡!! - mira al pelinegro fijamente.

- pero yo soy un hombre grande, tu eres aun muy pequeña para cargar con esto sola.. - sonriéndole maternalmente - ..déjame ayudarte... - 

- ... - mirando al hombre frente a ella.

- mj, yo también he sentido... la mirada de ese hombre... -

- ... - sorprendida - pero... tu eres... -

- lo fui... ahora solo me encargo... de recoger los vidrios rotos que va dejando a su paso.. - sonriéndole cálidamente - déjame arreglarte, hermosa - 

- ... - las lagrimas caen por los ojos de la pequeña, se levanta rápidamente y abraza al hombre frente a ella, llorando desenfrenadamente.

- eso es... - abrazándola y acariciando su cabello - déjalo salir - aferrándola fuertemente.  

...    

- disculpen la demora.. - entra al salón el pelirrojo - mi otro caso se alargo un poco - reverenciando a los presentes.

- lo entendemos, ¿un café? -

- no gracias, estoy bien - mirando al albino - ¿Ryuutaro-san? -

- esta con Sayuri-san -

- ¿oh? - sorprendido. - ya veo.. - pero no pregunta nada más. - ¿como han estado las cosas? - sentándose.

- no han cambiado mucho, ella sigue sin querer decirnos nada.. -

- mm.. entiendo... - 

- Uta, ha estado preguntando por usted.. -

- ¿es así? - mira al hombre de casa que le había hablado. 

- sí, nos alegra que haya podido venir hoy.. se lo agradecemos -

- no es un problema, también tengo ganas de hablar con él, esperaré a Ryuutaro-san para ir a hablar con él, me gustaría presentárselo -

- claro - 

- ¡! - notan que el pelilargo bajaba las escaleras de la casa, pero no las bajaba solo. 

- sayu.. - susurra la madre de la muchacha.

- mamá... - la pequeña corre donde su madre, abrazándola y llorando.

- ¡! - su madre y todos los presentes estaban sorprendidos, la mujer solo pudo abrazar a su hija protectoramente y sus otros parientes se acercaron a ella.

- ... - el albino mira impactado la escena junto a la doctora.

- Ryuutaro-san.. - mira al pelilargo.

- lo hablaremos cuando estemos en la brigada.. - se iba a acercar a la familia, pero deja algo en la mano del pelirrojo.

- ... - se sorprende y mira lo que había dejado en su mano, descolocándolo. 

- ... - el albino nota aquello.  

Después de que la familia se calmará, Asahi les explicó a todos como deberían actuar de ahora en más, lo más importante era no hacerle preguntas a la muchacha, sólo mimarla y apoyarla. Está de más decir, que la familia estuvo completamente de acuerdo con ese método.  

- Lavi.. - mira al pelirrojo.

- dime.. - guardando lo que le había dado en su bolsillo.

- por hoy deberíamos dejar a la familia descansar, vengamos otro día a hablar con el pequeño -

- sí, tienes razón, ¿Izumi-san? - mirando a la doctora.

- por mi está bien.. - el pelirrojo mira al albino.

- sí, también creo que es lo más adecuado - poniéndose de pie - diciendo aquello, nos retiramos por hoy.. - le dice a la familia.

- está bien.. - se acerca el dueño de casa - estamos realmente muy agradecidos por todo lo que han hecho por nosotros - reverenciándolo.

- no debe agradecernos, es un placer para nosotros el poder cumplir nuestro trabajo diligentemente -

- el comisario tiene razón.. - le habla el pelilargo - .. lo importante no somos nosotros, si no aquellos pequeños que no tienen por qué pasar por esto.. - lo reverencia - ..por favor, dele mucho amor y apoyo a su familia de ahora en adelante, Sasaki-san - 

- ... - ruborizándose un poco, sonriendo - si, lo haré -

- Sasaki-san.. - habla Lavi

- dígame -

- por favor, discúlpeme con el pequeño Uta.. dígale que vendré otro día a visitarlo -

- lo haré.. gracias - emocionado.

- mj.. - sonriendo y retirándose con los demás oficiales, dejando la casa.   

- Asahi-san, ha hecho usted un excelente trabajo el día de hoy, me gustaría que me diera algunos consejos para la próxima sesión.. -

- mj, por supuesto.. - le sonríe.

- ... - el ojiesmeralda se queda serio y en silencio, mientras caminan a los respectivos autos de la brigada, el peliblanco lo mira de reojo. - Allen - habla de repente.

- ¿? - voltea su mirada completamente al otro.

- necesito que pasemos a mi departamento por algunas cosas, ¿puedes acompañarme? -

- está bien.. - mirando la hora en su reloj - avisaré a la brigada que entregaremos el informe más tarde -

- sí, hazlo por favor. -

- ... - hace la llamada.

- Ryuutaro-san -

- ¿mm? - mira al pelirrojo.

- iremos por unas cosas al departamento, adelántate luego al bar con Yuu, los veré haya y podremos hablar sobre lo de hoy luego -

- está bien, haré un informe junto a Izumi-san y dejaré una copia para dártela más tarde. -

- sí, gracias -

- oye.. - se acerca a él y acaricia su mentón. - .. ¿a quién hay que jalar ahora? - sonriéndole dulcemente.

- mj.. - sonriendo.

- mantén la cabeza en alto, nos vemos más tarde - camina hacia uno de los autos, en el cual lleva a la doctora con él.

- ¿nos vamos? - le pregunta el albino

- si.. - comienzan a caminar al auto. - ¿está bien que nos llevemos el auto? -

- lo devolveré más tarde a la brigada, junto al informe de hoy - sentándose en el lado del conductor.

- bien - sentándose a su lado, poniendo el cinturón de seguridad en su lugar.  

...    

- ¿quieres un café? - ambos ya se habían quitado sus chaquetas y se habían acomodado en la mesa del living con todos los datos del caso, Allen se había sentado en el suelo, sobre un acolchonado cojín. 

- te lo agradecería -

- lo prepararé.. - yendo a la cocina.

- ... - comienza a escribir en la computadora el comienzo del informe. A los minutos después el pelirrojo trae dos cafés y los deja sobre la mesa, sentándose junto al peliblanco, en otro cojín. 

- mj.. - sonriendo mientras mira al concentrado Allen.

- ¿qué? - mirándolo de reojo.

- nada.. me gusta mirarte cuando trabajas - sonriéndole, mientras lo mira fijamente.

- ... - un escalofrió recorre su espina dorsal, dándole un sentimiento de bienestar y excitación. - oye - tratando de cambiar el ambiente que se estaba dando.

- ¿mm? - 

- ¿qué fue lo que te dio Asahi-san cuando bajo con la niña? -

- ... - la sonrisa de Lavi desaparece, poniendo un rostro serio y rígido. Suspira por lo bajo y busca algo de su bolsillo, sacándolo y dejándolo sobre la mesa. 

- ¿oh? - se sorprende. Era una pequeña botella de perfume. Una que se le hacía familiar al albino. - esto es.. - tomándola en sus manos, su nariz inmediatamente sintió ese aroma particular, un aroma refrescante y agridulce, suave pero intensa.

- ¿la recuerdas? -

- es la misma... que usas.. -

- si.. - mirando un poco hacia el frasco de perfume que descansaba en la mano del ojiplateado. - ..es un perfume que.. solo se vende en una tienda... - 

- ... - escuchándolo.

- Tikky Mikk, fue quién lo hizo.. -

- ¡¡!! - sorprendiéndose.

- el era... muy bueno cuando se trataba de soluciones químicas y se especializo en botánica, hacer perfumes era su pasatiempo - el pelirrojo le quita suavemente la botella de perfume y la pone frente a sus ojos verdes, mirándolo hipnotizado. - este fue el único de sus perfumes que se hizo en masa... el siempre.. ha usado este aroma.. - 

- ... - tragando un poco de saliva, el ambiente alrededor del pelirrojo estaba opaco, casi depresivo

- ¿y tú? -

- ... - sobre saltándose un poco

- ¿porque lo usas? -

- ... - se mantiene en silencio varios minutos, mirando el frasco del perfume intensamente - por que... me recuerda día a día... el por qué sigo haciendo lo que hago.. - alejando su mirada del perfume - o quizás es solo una escusa - sacando sus cigarrillos.

- ... - mirándolo fijamente. 

- ese hombre era... muy especial para mí.. - dándole una fumada a su cigarrillo - .. el me enseño todo lo que sé... soy todo lo que soy gracias a él y es lo que más me enfurece de todo esto... - bajando un poco la cabeza - ..y ni siquiera sé si lo que digo es cierto, quizás sólo uso el perfume para recordarlo.. es confuso... - 

- crees que... ¿encontraras esa respuesta cuando lo detengas? -

- ... - pensándolo - no lo sé.. - mira al albino - .. pero es algo que quiero descubrir - 

- ... - ambos se quedan mirando así, fijamente.  

* A pesar de que no me dijo la relación que ellos dos compartían, era evidente al ver sus ojos, que había sido alguien muy importante para él... era un poco doloroso mirarlo... pero me hacía sentir bien, el poder haberme acercado un poco más a el... a sus sentimientos, a su.. *  

- ... - dándose cuenta de sus propios pensamientos, le quita su mirada rápidamente. - "¡¿qué pasa conmigo?! ¿estoy feliz por algo como eso?, ¡¿no se supone que él y yo... solo cogemos?!" -

- ... - mirándolo fijamente.

- "¿por qué yo quiero... saber más o consolarlo?" - ¿oh? - sorprendiéndose cuando el pelirrojo apoya su cabeza en su hombro.

- cada vez que hablo de esto... me siento vulnerable... como si hubiera regresado a mis años de infancia.. - cerrando sus ojos.

- ... -   

* Su cabello... su aliento... su existencia... me estaba ahogando... *  

- hueles muy bien - le dice en susurro el más alto.

- ... - un leve tiritón envuelve su cuerpo al sentir a ese hombre tan cerca de él.  

* ... quiero hacerlo... *  

Se mantienen así unos minutos.  

* Tengo muchas ganas... de coger con el.. *  

- Allen -

- ¿qué? - tratando de hacerse el fuerte.

- ¿puedo... tener un beso? - 

- ... - guardando silencio.

- ¿solo uno? - acercando sus labios a los del peliblanco.

- ... - lo mira fijamente 

- mj.. - pone su nariz en el cuello del albino y comienza a olfatearlo.

- para.. - causándole cosquilla - .. ¿qué eres? ¿un perro? - 

- mm.. puede ser... - sonriendo y acercándose a su oído - y estoy como... en ESOS días.. - mordiéndole el lóbulo suavemente.

- mnn.. - cerrando un poco los ojos.

- ¿como lo haces? -

- ¿qué cosa? - el pelirrojo posa su frente en la del comisario.

- ¿como logras ponerme así de caliente? - sonriendo.

- mje.. - sonriendo también - ..tu siempre estas caliente - 

- ¿y tú? - 

- ¿en este momento? -

- si.. -

- me estoy quemando -

Después de decir eso, con una de sus manos toma del cuello al mayor, para darle un salvaje beso, el cual es bien recibido de la contra parte. Lavi comienza a desordenar la camisa del peliblanco, quitándole la corbata, y luego desabrochando los botones, dejando ver ese formado y aunque delgado, tonificado cuerpo níveo. Una de sus manos va hacia un pezón y su lengua a otro.

- nghh.. - dejándose lamer.

- ponte de pie -  - ... - lo mira y le hace caso, el pelirrojo se queda sentado y su rostro queda a la altura del cinturón del otro, lo abre y lo quita, manoseando un poco por sobre la tela de la ropa interior del albino, haciéndolo tiritar levemente y suspirar, sin quitar aun los calzoncillos pone su boca en el ya erguido y notorio grosor duro, apretándolo con sus labios y tocando sus testículos con una de sus manos.

- nghh.. ahh.. - el menor pone una de sus manos en el cabello rojizo, acariciándolo y jugando con él, desordenándolo. - sácalos.. -

- ¿mn? - mirándolo desde abajo

- se van... ahmm.. a mojar... quítalos.. - entre suspiros.

- ¿es eso? o es por qué esto de aquí.. - apretando con un poco de dientes el pene de Allen

- ¡ngh! - dando un sobresalto.

- ..¿quieres que me lo meta de lleno en la boca? - 

- unnh... - mirando hacia el pelirrojo, rogándole y a la vez increpándolo.

- mj.. - sonriendo sensualmente - .. quítatelos y ponlo en mi boca.. - 

- ... - mirándolo

- muéstrame... como quieres que te la chupe - 

- ah... -suspirando, baja sus calzoncillos dejando su rigidez a la vista del pelirrojo, toma el mentón de este último suavemente en la palma de su mano y acerca con la otra su miembro a la boca abierta del ojiesmeralda, metiéndolo dentro de ella. - ahh.. - gimiendo al sentir las paredes bucales del otro envolver toda su extensión. - nghh.. - lo saca un poco y luego vuelve a introducirlo, lentamente, moviendo así sus caderas a ese ritmo una y otra vez.

- ... - el Bookman mantiene su boca en circulo y con una de sus manos, comienza a jugar con los testículos del otro. Produciéndole más placer al muchacho. Se mantienen haciendo eso en unos minutos, el pelirrojo pone sus manos en las nalgas del otro, apretándolas, abriéndolas y acercando sus dedos a esa zona.

- ahhhnn.. - retirando un poco su miembro de la boca del otro al sentir un dedo entrando en él, había sentido que iba a correrse en ese momento, por ello, aquel impulso.

- mj.. - tomando el miembro en su mano, masturbándolo.

- nghh.. ahh.. - apretando el cabello rojo bajo su mano.

- ¿lo quieres? - metiendo un segundo dedo, mientras sigue moviendo su mano.

- ahh.. nghh.. - apretando sus ojos, dejando abierta su boca.

- el rostro que estás haciendo... es muy erótico - metiendo el miembro de Allen nuevamente en la boca, chupándolo rápidamente, succionándolo y apretándolo con su mano.

- ahhh.. ahhh.. - apretando mas sus cabellos - pa.. para.. ahh.. -

- ¿no quieres venirte? -

- n..no así.. ahh.. -

- ¿no? -

- ngh.. - le aparta sus manos de su cuerpo y se pone de rodillas frente a él, le desabrocha el pantalón para sacar el miembro ya deseoso del pelirrojo, el cual lo miraba maravillado por tanta lujuria. - uh.. - jadea y se sube sobre la pelvis del mayor, acercando su entrada a ese rígido miembro.

- mierda.. - apretando su cintura - eres tan jodidamente sexy - se apodera de esos finos y suaves labios, en un beso salvaje, lleno de pasión y desesperación.

- nghh.. - besándolo también, guiando su entrada a ese miembro, metiéndoselo lentamente.

- oh.. -

- ahh.. - ambos gimen al mismo tiempo cuando ya estaba completamente dentro, Allen estira sus brazos y se aferra al cuello del mayor, besándose nuevamente mientras espera acostumbrarse al grosor entre sus paredes internas, cuando esto está listo, comienza a subir y a bajar por ese falo rígido. - ahhh.. nnghh.. ahh.. - 

- oh... - sintiendo placer, apretando las nalgas del peliblanco mientras se mueve sobre él.  

* Hacerlo con Bookman... es tan... bueno.. *  

- ¡ah.. ahh..! - mirando fijamente al otro que hacía lo mismo, incitándose con sus miradas a ir más rápido o más lento, más apasionado, más besos, más caricias... una comunicación erótica solo con sus miradas.  

* ... se siente tan bien... es tan adictivo.. *  

- ahh.. más.. - dándose impulso con sus piernas, subiendo y bajando rápidamente.

- oh... - mordiente su cuello

- nghh.. ahí.. nghh.. - ya habiendo encontrado el lugar donde el glande de Lavi golpeaba con su próstata. - más.. nghh -

- ohh.. Allen.. - apretando su cintura, acariciando sus pezones, lamiéndolo.   

* .. es como si... el recuerdo y el sufrimiento de años de un amor correspondido, no hubieran existido nunca... lo olvido, olvidaría hasta mi nombre si él no lo dijera entre sus jadeos.. *  

- nghh.. ahh... Lavi.. - apretando sus dedos en la espalda del pelirrojo.

- ngh ohhh.. - a punto de acabar.

- ¡ah! - en lo mismo, ya no podía aguantar mucho más.  

* .. el sexo con el... es como un analgésico a mi patética existencia.*  

...    

- ... - estira un brazo y alcanza su móvil de la mesa de centro, estaba recostado en el suelo, junto al peliblanco, descansando después de su acalorada sesión de sexo. - vaya.. ya es tarde.. - el reloj marcaba las 9:30 minutos. Deja el reloj en el suelo y prende un cigarrillo.

- deberías arreglarte.. - sentándose en la alfombra, vestía su ropa interior y su camisa abierta y desordenada. - ¿no te esperan tus amigos? - rascando su cabeza.

- mmm... si.. - sentado también - .. pero estoy tratando de recomponerme, me dejaste seco hoy - sonriendo picarón.

- mj.. - sonriendo - ..quizás estás demasiado viejo para esto.. - ordenando su cabello.

- o tu eres demasiado salvaje.. - tomándole el mentón, dándole un beso en los labios, luego deja una distancia pequeña entre ellos. - muy sexy.. - acariciando los finos labios del otro con la llema de su dedo. 

- ... - mirando fijamente al hombre frente a él, perdido en sus ojos verdes.

- ¿mm? - notando que solo lo miraba y no decía nada.

- ¿puedo preguntarte algo? - 

- claro.. - mirándolo

- ¿cuál era tu relación con Asahi-san? - sin dejar de mirar esos ojos verdes, que parecían algo sorprendidos por su pregunta, esto le dio un poco de vergüenza, por lo que quita su mirada - bueno, si no quieres decírmelo, está bien.. -

- mm.. no, no es eso.. solo me sorprendió un poco que quisieras saber de mi - alejándose un poco.

- ¿no puedo? -

- jeje,  si, puedes.. - mirándolo - ..aunque suene extraño.. Ryuutaro-san para mí es como una madre cariñosa - 

- ¿? - arqueando una ceja.

- el siempre me ha cuidado, desde que lo conocí, ha sido muy amable y cariñoso conmigo... al no tener nunca una imagen materna, el fue tomando ese lugar poco a poco... -

- mm.. - pensándolo. - .. si.. el se ve de esa manera.. - recordando que a él también le había provocado algo parecido.

- sip... aunque... para ser honesto él y yo... lo hicimos un par de veces -

- ¡! - se sorprende al escuchar aquello - no se supone que te acuestes con tu madre -

- mjejeje, ciertamente... pero a pesar de eso, el NO es mi madre.. - 

- ... - bajando su cabeza - "me siento un poco... frustrado..." -

- aunque ahora no me imagino volver a hacer eso.. -

- ¿? - mirándolo.

- el es... - una mirada cálida, pero un poco triste se hace presente en los ojos perdidos del mayor - ... demasiado preciado para mí.. - 

- ... - sintiendo un apretón en el centro de su pecho.

- así que no podría volver a tocarlo.. además.. - mirando al albino, el cual hizo lo mismo tratando de mantener la calma - ... ahora hay alguien que me gusta aun más.. - 

- ... - un tiritón invadió su cuerpo.  

* Sentí... una ganas enormes de saltar a sus brazos y hacerlo otra vez, pero... no fui capaz de moverme.. *  

- no digas tonterías.. - poniéndose de pie - usaré tu ducha - caminando al baño

- claro.. - mirándolo y apoyando su codo en la mesa para poder apoyar su cabeza - no era necesario ser tan frio - susurra esto y se deprime un poco.  

RATO DESPUES  

- ¿y qué harás ahora? - saliendo ambos del departamento del Bookman, el cual cierra la puerta con llave, bajan las escaleras juntos.

- iré a la brigada a dejar el informe y el auto.. después iré a casa, estoy cansado.. -

- ¿quieres que te acompañe? - 

- no, vete ya... te deben estar esperando hace ya horas.. -

- mmm.. está bien, quería darles un poco de tiempo a solas -

- ¿eh? - le llama la atención eso.

- ¿estás seguro que no quieres que te acompañe? - olvidando lo que había dicho antes

- no, no quiero -

- mjejeje, eres tan malo.. - 

- ... - guardando silencio, cuando llegan al auto, el albino abre la puerta del conductor, deja el papeleo sobre el asiento  del copiloto - bien, nos vemos mañana.. - sentándose en el transporte.

- ¿no quieres ir por unas copas? - apoyándose en el auto, hablando por el vidrio que había bajado el peliblanco hace segundos atrás.

- no... ve y charlen sobre lo que hacían en el extranjero, no me sentiría a lugar yendo sin más -

- mm... está bien.. - mirándolo.

- ¿qué? - poniéndose algo nervioso.

- mj, nada.. - le acaricia el cabello y se aleja - hasta mañana - comienza a caminar.

- ... - queda mirando esa espalda ancha mientras se alejaba. - "¿qué es... este extraño sentimiento?" - suspira y hace andar el auto.  

DESPUES    

- ... - entra a su departamento, donde su gato sale a saludarlo - hola.. - agachándose y dejando su chaqueta sobre la mesa pequeña junto a sus llaves - ¿como estas? pequeño.. - acariciando las orejas de su pequeño Tym

- miaau~~ - ronroneándole.

- mj, tienes hambre, ¿no? -

- nyaaaaaa~~ -

- mjejeje, está bien, ven conmigo.. - yendo a la cocina, alimentándolo y luego bebiendo un poco de agua. Se sienta en su sofá, apoyando su cabeza en el respaldar acolchado. - uff... ¿qué estoy haciendo? - susurrando. El timbre suena de repente. - ¿oh? - sorprendido, mira el reloj y marcaba ya casi las 11 de la noche - "¿quién será a estas horas?" - se pone de pie y camina hacia la puerta, donde el timbre suena de nuevo, toma la manilla y abre la puerta - ¡¿oh?! - sorprendido.

- buenas noches.. - le sonríe un hombre de castaños cabellos.

- Taka.. - susurra su nombre algo asombrado.

- perdona la hora, pero estaba bebiendo con unos compañeros y estaba cerca.. espero no te moleste -

- ah.. no.. pasa - dejándolo entrar.

- gracias.. - entra y quita su abrigo, colgándolo, luego queda frente al peliblanco - ¿como estas? - acariciando su cabello.

- bien.. ¿y tú? ¿como esta Sakura-san? -

- muy bien, todo marcha de maravilla - 

- ya veo.. me alegra - sonriendo tímidamente.

- mj, estas tan bonito como siempre - tocándole su mejilla.

- ... - sonrojándose un poco - ¿quieres... un café? -

- ¿estas tratando de huir? - 

- ¿qué? - al fin mirándolo a los ojos

- ¿mm? - se acerca más

- ¡! - avergonzándose.

- ¿qué es ese aroma? ¿un nuevo perfume? -

- ... - sorprendido - s.. si.. - diciendo sin más.

- huele muy bien.. - acariciando su nariz por el cuello del muchacho, provocándole una leve excitación.

- Takahiro... - tratando de apartarse, pero su cuerpo no se movía

- te he extrañado tanto.. - acercando sus manos a la cintura del más bajo, acercándolo a él lentamente.

- nn.. - dejándose llevar

- ¿me has extrañado? - 

- ngh... yo.. -

- Allen.. - se acerca a sus labios y lo besa apasionadamente.

- ngh... - se deja llevar y se aferra a él. El más alto toma su cuerpo y lo carga entre besos y caricias a la cama del albino.  

* A pesar de que me había duchado, el aroma al perfume de Bookman, no había salido del todo de mi cuerpo.. *  

- ahh... - apretando las sabanas, mientras es desbordado por el doctor.  

* ... y a pesar de que digo que lo mío con él es solo sexo... hubo algo que me molesto durante los minutos en que Takahiro me hacía el amor.. *  

- nghh.. Taka... - cerrando sus ojos - mnngh.. -   

* Por qué si estaba haciendo el amor con el hombre que he amado toda mi vida... *  

- Allen.. - embistiéndolo repetidamente.

- ¡¡ahh!! - apretando la espalda del peli castaño.  

* ¿por qué... sigo sintiendo a Bookman dentro de mí? *      

CONTINUARA.            

ATTE.

~~MYVmaru~