CAPÍTULO 24: “EL PRIMERO Y EL ÚNICO”
-EN ALGÚN LUGAR DE COREA DEL SUR- -24 HORAS ANTES-
(pov Sung Min)
¿NO SE SUPONÍA que debía ser relajante? Hoy tenía planeado dormir por lo menos hasta medio día, pero parece que mi cuerpo sigue acostumbrado a madrugar. Se supone que vine aquí para tener un poco de tranquilidad y para poder pensar con claridad qué debía hacer en el futuro, pero todo lo que he hecho estas tres semanas sólo es pesar en Kyu Hyun y en lo mucho que lo extraño. ¿Por qué? ¿Por qué no soy capaz de quitármelo de la cabeza? Ya que evidentemente no seré capaz de dormir, reúno todas mis fuerzas disponibles y decido que es momento de levantarme de la cama. Tal vez es momento de tomar en serio la sugerencia de Jong Suk y regresar a Seúl. Una sonrisa se forma en mis labios cuando mi canción favorita empieza a sonar gracias a una llamada. Tomo mi celular y leo en la pantalla el nombre de Dong Hae. Inevitablemente un pensamiento viene a mi cabeza, nada agradable por cierto. Rápidamente oprimo el botoncito para responderle.
SM –“¿Sí?” – respondo dudoso, pero intentando ocultar la preocupación.
DH –“¡Hola hyung! ¿Te desperté?”
SM –“No, no. De hecho el día de hoy madrugue. ¿Qué ocurre Hae?”
DH –“¡Tengo qué contarte Min!” – exclama eufórico –“En dos semanas viajo a San Francisco. Básicamente es por trabajo, pero Hyuk viene conmigo. ¿No imaginas la razón?” – nada lógico cruzaba por mi mente. Pensaría que es por un simple diversión… pero Dong Hae está demasiado emocionado, así que definitivamente debe haber algo más.
SM –“En realidad…” – una idea llegó de golpe a mí y me detuve en seco –“¡OH, POR DIOS!” – exclamé al mismo tiempo que saltaba de la cama –“Dong Hae, ¿acaso…?”
DH –“¡SÍ!” – interrumpió Dong Hae –“Hyuk dice que no quiere seguir esperando y que este viaje es la oportunidad perfecta. ¡¿Puedes creerlo, Min?! ¡Voy a casarme con Hyuk! Si pudieras sentir cómo late mi corazón en este momento te darías cuenta lo emocionado que estoy” – debe estar inmensamente feliz, casi puedo imaginar el rostro de Dong Hae –“Pasamos por tantas cosas para estar juntos y no puedo creer que finalmente esté pasando” – sus palabras fueron como un golpe de realidad, nada bueno debo decir, y una pregunta vino a mi mente.
SM –“Dong Hae, yo de verdad estoy feliz por ti, y no quiero arruinar tu momento, pero ¿Kyu Hyun lo sabe?” – hubo un par de segundos de silencio antes de que escuchara un suspiro.
DH –“No lo sabe, pero ya se lo imagina. Anoche intenté decírselo, pero en cuanto mencioné el lugar dijo que buscara otra oferta, que San Francisco estaba descartado y creo que sabes la razón. De hecho es algo extraño, ¿sabes? Se ha cruzado con Hyuk en la casa, le he comentado cuando voy a salir con él y es como si no le importara. Hyuk dice que está acostumbrándose a la idea, y cree que eso es bueno, pero la reacción que tuvo anoche me hace dudar”
SM –“Yo creo que no está listo para dejarte ir”
DH –“No entiendo. ¿Qué quieres decir con eso?”
SM –“Me refiero a que no creo que su reacción tenga que ver con Eun Hyuk, más bien creo que no quiere dejarte ir todavía. Eres su hermano menor y eres todo su mundo, es lógico que quiera tenerte siempre cerca” – escuché una risita apenas audible de su parte.
DH –“Sigo siendo un niño para él, ¿no?”
SM –“Siempre vas a serlo” – mordí mi labio y respiré profundo. Tengo que preguntarlo –“Dong Hae, ¿cómo está él?”
DH –“Bien, supongo. Físicamente no parece estar enfermo, pero ha estado muy raro últimamente. Está más irritable, prácticamente no sale de su habitación y mucho menos de la casa, solamente cuando va al trabajo” – ¡DIOS! ¿Tanto le afectó lo que pasó? Jamás quise hacerle daño. Debe estar odiándome –“¿Por qué no hablas con él? Tal vez a ti te diga qué es lo que le pasa”
SM –“Dudo que quiera hablar conmigo”
DH –“Hyung, ¿qué pasó entre ustedes? ¿Por qué mi hermano estaba tan molesto?” – me quedé helado. ¿Cómo responder a esa pregunta tan directa? Obviamente no puedo decirle la verdad, Kyu Hyun me mataría –“Está bien, no es necesario que me lo digas, pero hyung, ¿no crees que deberías regresar? ¿Qué haces tan lejos y solo?”
SM –“Este viaje era necesario, tenía muchas cosas en qué pensar Hae”
DH –“¿Y cuándo piensas regresar?”
SM –“Mañana mismo estaré de regreso, pero…” – fui incapaz de seguir hablando. Tragué saliva nervioso y dejé escapar todo el aire que contenían mis pulmones.
DH –“Vas a mudarte definitivamente, ¿verdad?”
-SEÚL, COREA DEL SUR-
MI CUERPO ENTERO está temblando. Jamás creí que regresar sería tan difícil. Me siento muy inquieto, y no me explico el por qué. Empacar ropa y libros es sencillo, ya lo he hecho algunas veces, ¿entonces por qué tengo esta sensación abrumadora? La respuesta llegó en forma de una vocesilla dentro de mi cabeza que susurraba una y otra vez ‘No quieres irte’. Todo pareció cobrar sentido entonces. Empacar tus pertenencias no es difícil, lo difícil es empezar de nuevo, lejos de todo lo que amas… lejos de todos los que amas. El rostro de Kyu Hyun vino a mi mente, un rostro enrojecido por la furia. Entonces me doy cuenta que no importa cuánto lo deseé, quedarme en Seúl no es una opción.
¿? –“Hemos llegado” – esas dos palabras hicieron que mi corazón dejara de latir. Fue mucho más rápido de lo que yo esperaba, pero estoy de vuelta. Abro mis ojos por primera vez en todo el camino a casa y finjo una sonrisa al taxista.
SM –“Sí, eso parece” – digo al reconocer el gran árbol de cerezo, árbol que adoraba ver cada mañana mientras bebía una taza de café. Supongo que es la última vez que podré apreciarlo. Sacudo levemente mi cabeza con pesadez, tomo mi cartera y saco dos billetes para dárselos al taxista –“Puede quedarse con el cambio” – lo escucho agradecerme pero no le doy demasiada importancia. Quiero terminar con esto tan rápido como sea posible. Miro ambos lados de la calle para asegurarme que puedo cruzar sin problemas, y es entonces que noto un auto a unos metros del edificio donde vivo. Ese auto es idéntico al de Dong Hae. ¿Será que vino a recibirme? La primera sonrisa sincera del día se forma en mi rostro. Estoy seguro que es él. No puedo esperar a verlo, así que empiezo a correr y subo tan rápido como puedo las escaleras. Sin embargo, cuando estoy por llegar me detengo en seco cuando veo a mi vecina, la señora Jo, y a su hijo Kwang Min bajar –“Buen día señora Jo, hola Kwang Min” – saludo mientras revuelvo el cabello del pequeño niño.
SRA. JO –“¡Oh, Sung Min!” – exclama aliviada –“Al fin volviste” – en un acto sorpresivo ella toma mis manos –“Ve a tu casa ahora mismo, hay un hombre ahí y no se ve nada bien. Además él…”
¿? –“¡MALDITA SEA SUNG MIN! ¡¿DÓNDE DIABLOS ESTÁS?!” – mi sangre se heló ante aquel grito desesperado. Esa voz… esa voz es de Kyu Hyun. La señora Jo abrazó protectoramente a Kwang Min cuando él brincó asustado.
SRA. JO –“Tienes que ir ahí y hacer algo. Ese hombre viene aquí cada mañana y grita o golpea la puerta. Lucía bastante desesperado. Deberías ir con él” – mi piernas se volvieron gelatina, pero aún así seguí subiendo las escaleras. Ahora sólo tenía que doblar el pasillo y estaría frente a Kyu Hyun… otra vez.
KH –“¡Es hora de que vuelvas a casa!” – lo escucho y mi corazón empieza a latir con fuerza. Entonces, ¿Kyu Hyun quiere que vuelva? Trago saliva mientras intento reunir valor, entonces asomo un poco mi cabeza. ¡Oh, Dios! Kyu Hyun está en el suelo… ¿está llorando? De pronto yo también siento unas ganas tremendas de llorar. No es la primera vez que lo veo llorar, pero esta vez es diferente, esta vez… ¿puedo ser yo el culpable? Me quedo unos segundos observándolo, hasta que cubre su rostro con sus manos –“¡LO PROMETISTE, SUNG MIN!” – grita con desesperación. Decido que es momento de hablar con él. Con mis manos en los bolsillos me acerco un par de pasos más.
SM –“¿Qué fue exactamente lo que prometí?” – pregunto intentando que mi voz no se quiere o delate mi nerviosismo.
(fin pov Sung Min)
(Narradora)
KYU HYUN levantó el rostro lentamente, hasta que su mirada se encontró con la de Sung Min. Su corazón dio un vuelco y pareció que el tiempo se detuvo. Por varios segundos Kyu Hyun no pudo mover un solo músculo o articular palabra, simplemente se limito a observar a Sung Min de pies a cabeza. Su mirada seguía siendo dulce y brillante, su rostro seguía luciendo inocente. Parecía que nada en él había cambiado, a excepción de su cabello. Ahora Sung Min volvía a lucir una hermosa cabellera negra.
SM –“¿No vas a decir nada?” – una mezcla entre furia y alivio explotó en su interior. Kyu Hyun había pasado unas semanas terribles, pero Sung Min lucía como si a él no le hubieran afectado en lo absoluto.
KH –“Ba-bastardo” – murmuro, y antes de que se diera cuenta, su puño se estrelló en el rostro de Sung Min –“¡¿Dónde estuviste todo este tiempo?!” – preguntó exaltado.
SM –“¡¿Qué carajos te pasa Kyu Hyun?! ¿Por qué me golpeas tan repentinamente?”
KH –“¿Dónde te has estado escondiendo?”
SM –“¡Yo no me estaba escondiendo!” – replicó –“Simplemente regresé a mi ciudad natal” – Kyu Hyun se sintió burlado, así que lo tomó por el cuello de la playera.
KH –“¡MENTIROSO! ¡Llamé a tu madre y no sabía nada de ti!”
SM –“¿Llamaste a mi madre? ¿Cómo conseguiste su número? Ni siquiera yo lo tengo, por eso no la contacté”
KH –“Si lo busco puedo encontrarlo fácilmente. Primero llamé a tu hermano, fue bastante altanero, pero accedió a darme el numero de tu madre” – Sung Min suspiró y se liberó del agarre de Kyu Hyun.
SM –“Kyu Hyun, hablemos adentro, ¿te parece? Y sin golpes si no te importa” – Sung Min se acercó y abrió la puerta. Por cortesía dejó que Kyu Hyun entrara primero y después entró él. Una vez dentro del departamento, Sung Min dejó la pequeña maleta en el suelo y siguió a Kyu Hyun hasta la sala –“Y bien, ¿por qué me buscaste?”
KH –“¿Por qué no te contactaste conmigo?” – Sung Min parpadeó sorprendido.
SM –“¿Por qué iba a contactarme contigo? Yo quería cortar definitivamente los lazos contigo, por supuesto que no iba a llamarte” – Kyu Hyun lo miró horrorizado.
KH –“¿Planeabas no volver a verme?”
SM –“¡Eras tú quien no quería volver a verme!” – replicó Sung Min. Hubo unos segundos de silencio antes de que Sung Min dejara escapar un suspiro –“Da igual, ¿tienes algo más que decir?”
KH –“¿Por qué te pusiste en ausencia temporal?”
SM –“Porque si me quedaba trabajando en la universidad acabaría viéndote” – Sung Min desvió el rostro –“Yo no quiero que me odies aún más, por eso tomé la decisión de no volver a verte. Me iré de aquí, de hecho hoy solamente regresé a recoger mis cosas”
KH –“No sabía que podías llegar a ser tan cruel” – murmuró Kyu Hyun –“Tú hiciste una promesa, ¿lo olvidaste? Prometiste que no ibas a dejarme solo y desapareciste. Esto es lo mismo que chantajearme”
SM –“¿Qué dices? Yo no decidí irme por gusto, simplemente no puedo soportar tu mirada llena de odio. No soportas tenerme cerca y por eso me voy, ¡eso de ninguna manera es chantaje!”
KH –“¡Es un maldito chantaje!” – gruñó Kyu Hyun –“¿Crees que dejaré que te salgas con la tuya? ¡Estás muy equivocado si piensas que voy a ceder con una pequeña amenaza! ¡No voy a permitir que te marches de mi lado!” – Sung Min parpadeó un par de veces sorprendido.
SM –“Eso… eso quiere decir que quieres que me quede?” – Kyu Hyun tragó saliva nervioso y desvió el rostro.
KH –“¿Hay algún problema con eso?” – dijo en voz muy baja. Sung Min lo miró perplejo y boquiabierto ‘¿No se supone que me odiaba?’ pensó Sung Min –“¡Te estoy preguntando si hay algún problema con eso! ¡Vine aquí cada día de las últimas dos semanas esperando que aparecieras!”
SM –“Kyu…”
KH –“¡CÁLLATE!” – gritó mientras lo tomaba de los hombros y lo acorralaba contra la pared – “Desapareciste sin decirle a nadie. ¿Creíste que yo lo aceptaría?” – Kyu Hyun deslizó una mano por el cuello de Sung Min sin ejercer ninguna presión, simplemente lo inmovilizó para asegurarse de que no escapara –“Sung Min, ¿creíste que yo no sentiría nada?” – preguntó en un susurro. Y de pronto las lágrimas volvieron a rodar por sus mejillas.
SM –“Estás llorando” – Kyu Hyun no lo había notado hasta ese momento.
KH –“¡Cierra la boca! Es sólo agua salada que sale de tantas emociones” – Sung Min sintió sus ojos arder también, así que como pudo atrajo el cuerpo de Kyu Hyun en un abrazo.
SM –“Lo siento” – susurró Sung Min cerca de su oído –“Yo no creí que te preocuparía tanto” – al principio Kyu Hyun no pudo reaccionar, pero ese abrazo le había dado una tranquilidad que jamás había imaginado, así que también envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Sung Min y hundió su rostro en el cuello del otro.
KH –“No vuelvas a irte sin decir nada”
SM –“Ya no me iré. Te lo prometo” – Kyu Hyun se alejó un poco y lo miró con reproche.
KH –“Tú no cumples tus promesas”
SM –“Esta vez lo cumpliré” – dijo con una sonrisa, e inmediatamente después juntó sus labios en un beso suave y lleno de ternura. Pasaron un par de segundos antes de que Kyu Hyun pudiera asimilar aquel beso, y cuando lo hizo empujó a Sung Min, pero no lo suficientemente lejos.
KH –“¡¿Qué diablos haces?!” – replicó y con ayuda de su mano frotó con fuerza sus labios –“¡No malinterpretes mis palabras, Sung Min!”
SM –“Pero, ¿no acabas de decir que no quieres que me marche de tu lado? Dijiste que querías que me quedara”
KH –“¡Eso es muy distinto!” – Sung Min tomó las manos de Kyu Hyun y ahora fue su turno para acorralarlo.
SM –“No es distinto, al menos no es distinto para mí. Te amo Kyu Hyun, y mientras continúe a tu lado mi corazón no cambiará”
KH –“¡¿Lo ves?! ¡Me estás chantajeando después de todo!”
SM –“No es ningún chantaje, simplemente estoy exponiendo mi corazón” – los ojos de Sung Min empezaron a brillar, estaban cargados de deseo y Kyu Hyun estaba consciente de ello –“Hoy no estoy usando ninguna droga, si realmente quieres alejarme puedes hacerlo en cualquier momento” – acercó un poco su rostro al de Kyu Hyun y sus labios quedaron a escasos centímetros –“Claro que si lo haces, entonces me iré” – irritado, Kyu Hyun empujó levemente a Sung Min.
KH –“¡¿No es eso chantaje?!” – Sung Min sonrió divertido.
SM –“Está bien, te estoy chantajeando, pero es porque parece que necesitas una excusa” – volvió a acercarse y colocó una de sus piernas entre las de Kyu Hyun y se acercó para besarlo, y esta vez Kyu Hyun lo aceptó gustoso, e incluso respondió el beso. ‘¡Mierda!’ pensó ‘Tanto deseas que éste chico se quede cerca que incluso estas dispuesto a tener sexo con él?’. La respuesta llegó como un relámpago a su mente, y lo supo cuando inconscientemente rodeó la cintura de Sung Min y lo atrajo un poco más hacia su cuerpo. De pronto una idea cruzó por su cabeza, por lo que a pesar del beso, Kyu Hyun sonrió, rompió el beso y alejó a Sung Min.
KH –“¡No! No Sung Min” – murmuró. En un principio el rostro del menor lucía decepcionado y su mente se llenó de los peores pensamientos –“Si vamos a seguir adelante con esto, lo haremos a mi manera”
SM –“¿Qué quieres decir?”
KH –“Que si decides continuar, seré yo quien te penetre, ¿entiendes?” – Sung Min abrió los ojos tanto como pudo. Jamás en su vida esperó escuchar esas palabras, en especial de alguien homofóbico como Kyu Hyun –“Es mi turno de hacerte mío, ¿estás bien con eso?” – Sung Min mordió su labio nervioso y desvió el rostro avergonzado. Lucía tan tierno e inocente, pero al mismo tiempo tan provocativo que Kyu Hyun deseó arrancarle la ropa. ‘¿En qué momento empecé a desearlo?’ pensó. Su pequeña fantasía provocó que sintiera una incomodidad dolorosa en sus pantalones y ya no le importaba nada más que tener a Sung Min debajo suyo y gimiendo su nombre. ‘¡Al diablo!’ pensó mientras tomaba bruscamente a Sung Min por la cintura pegándolo a su cuerpo, sólo para después empezar a devorar sus labios con urgencia. Por supuesto el menor quedó tan aturdido que ni siquiera pudo protestar; a decir verdad no lo hubiera hecho aunque tuviera la oportunidad. Cuando Kyu Hyun por fin le permitió respirar, ambos se miraron a los ojos.
SM –“Yo… no he respondido” – susurró.
KH –“¡Al carajo la respuesta!” – gruñó y deslizó una de sus manos por la espalda del menor hasta llegar a su cabello, entonces tiró con fuerza exponiendo su cuello –“Aquel día no importó cuántas veces te dije que pararas, tú no te detuviste y continuaste haciendo lo que te dio la gana con mi cuerpo; hoy yo haré lo que quiera contigo” – Kyu Hyun sonrió de lado –“Quiero que sepas que estoy furioso contigo Sung Min. Estás jugando conmigo descaradamente; pero está bien, voy a permitirlo porque eres especial” – el cuello de Sung Min fue devorado de una forma desesperada y un poco salvaje, pero no le importaba. A pesar de no tener mucha experiencia estaba haciendo un estupendo trabajo con su boca, y un suspiro que llevaba el nombre de Kyu Hyun se escuchó. El corazón de Sung Min empezó a latir con fuerza y con un ritmo acelerado mientras sentía las manos de Kyu Hyun recorrer su cuerpo. La magia del beso se interrumpió y ambos aprovecharon para llenar de aire sus pulmones, se sonrieron con complicidad y se miraron con deseo y ternura a la vez. Sung Min colocó sus brazos alrededor del cuello de Kyu Hyun, y éste lo sorprendió rodeándolo por la cintura y levantando su cuerpo –“Tus piernas” – murmuró y Sung Min captó el mensaje. Rodeó con sus piernas la cintura de Kyu Hyun y después bajó un poco su cabeza para volver a besarlo. Kyu Hyun se había grabado cada rincón de esa casa, así que empezó a caminar sin problemas hasta la habitación. Siguió directo hasta la cama y colocó delicadamente el cuerpo del menor, después él se colocó sobre Sung Min y continuó acariciando su cuerpo sobre la ropa. Recordó la primera vez que estuvieron juntos, y aunque al principio le había parecido desagradable, tenía que admitir que Sung Min parecía ser un experto en hacerlo arder. De pronto detuvo todo movimiento cuando un pensamiento lo hizo enfadar –“Sung Min”
SM –“¿Sí?”
KH –“¿Quién te enseñó todo eso que hiciste conmigo la primera vez?”
SM –“¿Qué?”
KH –“Aquella vez, supiste exactamente dónde y cómo tocarme. Eres experto en la materia. ¿Quién te enseñó todo eso?” – Sung Min gruñó frunció el ceño.
SM –“¿Eso qué importa ahora?”
KH –“Responde Sung Min, quiero saberlo. ¿Fue algún ex novio?” – sentenció Kyu Hyun. Por el tono de su voz Sung Min supo que estaba molesto y que no iba a dejarlo pasar.
SM –“Fue Ye Sung” – a Kyu Hyun le sorprendió esa respuesta. Había escuchado que las personas de distintas preferencias sexuales solían tener sexo incluso con amigos cercanos, pero jamás imaginó que Sung Min hubiera tenido algo que ver con alguien que, según le había dicho, era como su hermano. Su estómago se revolvió y una sensación desagradable nació de sus entrañas, pero se obligó a permanecer tranquilo. ‘Está bien, puedo soportar que hayan compartido la cama alguna vez’ pensó –“¿Qué pasa?” – preguntó Sung Min un poco temeroso.
KH –“Sólo estoy un poco sorprendido” – pensaba dejar aquel asunto por la paz, pero de pronto sintió que las palabras que no pensaba decir lo quemaban por dentro –“Espero que sus encuentros sexuales hayan terminado”
SM –“¿De qué estás hablando Kyu Hyun? Jamás me he acostado con Ye Sung”
KH –“Pero tú dijiste que…”
SM –“Sé lo que te dije, pero no es lo que estás pensando. Ye Sung sólo me habló del tema; digamos que él me enseñó sólo la teoría, la práctica la aprendí contigo” – Sung Min sonrió mientras acariciaba la mejilla del hombre que amaba –“Tú fuiste el primer hombre en mi vida Kyu Hyun, y has sido el único” – esa idea le agradó más de lo que había creído. Sung Min sólo había sido suyo… o más bien, solamente a él lo había hecho suyo. Se incorporó quedando de rodillas en la cama y con una rapidez impresionante se despojó de su camisa y se encogió de hombros.
KH –“Estorba un poco, igual que el resto de la ropa” – Kyu Hyun empezó a desabrochar su cinturón y bajó la bragueta del pantalón, todo ante la atenta mirada de Sung Min; después se detuvo y observó el rostro sonrojado del menor, entonces bajó a besar sus labios. Coló una de sus manos bajo la playera del menor y empezó a acariciar su abdomen subiendo lentamente hasta su pecho. Sung Min contuvo la respiración cuando sintió como sus pezones eran estimulados de forma tortuosa.
SM –“¡Ah!” – gimió cuando la pierna de Kyu Hyun rozó placenteramente su miembro. El mayor sonrió satisfecho.
KH –“Vaya, eres un poco sensible” – Sung Min no pudo responder, simplemente levantó un poco su cadera y empezó a frotarse contra la pierna del otro –“Oye, tranquilo conejito. Tenemos todo el día para esto, así que tómalo con calma y disfruta” – murmuró y volvió a apresar sus labios.
SM –“Está bien” – Kyu Hyun tomó ambas manos de Sung Min y las colocó sobre su cabeza.
KH –“Quédate quieto” – ordenó para después deslizar la playera del menor sobre su abdomen y su pecho dejándolos desnudos. Maldijo internamente mientras lo despojaba de la playera con desesperación. ‘¿Cuándo se volvió tan jodidamente hermoso?’ pensó. En realidad Kyu Hyun jamás había sido un hombre lujurioso o pervertido, nunca, pero había algo en Sung Min que hizo que su lívido explotara y se apoderara de él. Sung Min sintió su rostro arder y suponía que estaba sonrojado, así que avergonzado intentó cubrir su rostro con su antebrazo, pero Kyu Hyun se lo impidió –“Ni siquiera lo intentes” – gruñó –“No sabes cuánto estaba deseando ver tu rostro las últimas semanas”
SM –“Kyu Hyun” – susurró. Kyu Hyun abrió un poco las piernas de Sung Min para acomodarse mejor entre ellas y empezó a mover su cadera muy lentamente –“¡Oh!” – Kyu Hyun volvió a besarlo, pero esta vez de forma más salvaje y necesitada, todo sin detener aquel movimiento. Quería grabar en su memoria cada rincón del cuerpo del menor, así que sus manos empezaron a moverse casi como si tuvieran vida propia. Kyu Hyun rompió el beso y ahora se centró en devorar su cuello. La primera vez no lo había notado, pero Sung Min tenía una piel muy suave y sus dedos parecían deslizarse solos. Su piel era simplemente perfecta, tanto que de pronto sintió una necesidad abrumadora de dejar su huella en ella, así que inhaló profundo antes de succionar con su boca aquella delicada piel; por supuesto asegurándose de no causar daño. Sung Min sintió como una descarga eléctrica recorrerle el cuerpo entero, así que arqueó su espalda y esto provocó un roce tremendamente placentero entre su miembro y el de Kyu Hyun –“¡Ahh!” – gimió. Kyu Hyun se separó un poco y clavó su mirada en el cuello de Sung Min.
KH –“Es perfecto” – dijo orgulloso de su obra. Estaba muy seguro de que esa marca no se iba a desaparecer fácilmente y que sería difícil de ocultar; con suerte duraría lo suficiente para que todos la notaran, y en realidad ese había sido su objetivo. Decidió que estaba desperdiciando tiempo muy valioso, así que Kyu Hyun volvió a incorporarse y empezó a despojarse de su pantalón y su ropa interior. Sung Min planeaba hacer lo mismo, pero rápidamente Kyu Hyun tomó sus manos y volvió a colocarlas sobre su cabeza –“No, no, no. Yo me haré cargo de eso”
SM –“De acuerdo” – dijo de forma provocativa y lo miró invitándolo a continuar. Por supuesto Kyu Hyun aceptó el desafío y nuevamente se abalanzó sobre él. Sus caricias ahora eran un poco más atrevidas y demandantes. Kyu Hyun atrapó entre sus labios uno de los pezones de Sung Min y empezó a estimularlo lentamente con ayuda de su lengua, para el segundo necesitó ayuda de su mano –“¡Ahh!” – ‘¡Demonios! Kyu Hyun es muy bueno en esto’ pensó Sung Min en medio del placer. Muy lentamente Kyu Hyun fue descendiendo con su mano libre por el costado de Sung Min, hasta que sus dedos tocaron la gruesa ropa de su pantalón.
KH –“¡Mierda!” – gruñó. Decidió que debía deshacerse pronto de ese molesto pantalón. Llevó su mano a la hebilla del cinturón mientras retomaba su tarea de estimular los botoncitos rosados y empezó a desabrocharla, aunque era bastante difícil ya que no podía ver lo que hacía. Cuando por fin lo logró, su mano no tardó en aventurarse a explorar el interior. Las manos de Sung Min tampoco permanecieron quietas, y aún cegado por la placentera distracción de las caricias, su mano logró colarse entre sus cuerpos y localizar el miembro de Kyu Hyun, así que empezó a masajearlo por encima de la ropa. Por un momento temió que Kyu Hyun se negara, pero parecía estar muy concentrado en su cuerpo, lo cual no le desagradaba en lo absoluto. Kyu Hyun bajó un poco el pantalón de Sung Min, lo suficiente para poder liberar su miembro y poder acariciarlo mejor. Sintió un poco de curiosidad, así que clavó su mirada en el miembro del menor y quedó bastante sorprendido. Mordió sus labios y sus ojos brillaron, era como un niño viendo ansiosamente su dulce favorito. Sung Min se sintió demasiado expuesto y muy avergonzado, así que tenía la intención de cubrirse con su mano; sin embargo antes de que pudiera mover un solo músculo, Kyu Hyun se deslizó por su cuerpo y se detuvo justo a mitad de su abdomen. Le pareció que ese era otro lugar perfecto para marcarlo, aunque nadie pudiera verlo, así que primero mordió muy despacio la zona y después succiono la piel. Sung Min cerró con fuerza sus ojos y se removió un poco. El mayor sonrió complacido de que Sung Min estuviera reaccionando a sus caricias, pero de pronto sintió curiosidad por averiguar cuánto era capaz de soportar, así que se le ocurrió algo para hacerlo delirar. Bajó un poco más y su rostro quedó justo frente a la pelvis del menor.
SM –“Kyu Hyun… ¿qué vas a hacer?” – murmuró.
KH –“Yo...” – ‘La verdad no tengo idea’ pensó Kyu Hyun. Hace dos segundos tenía bastante claro lo que iba a hacer, pero era la primera vez que tenía tan cerca un miembro y eso dejó su mente completamente en blanco. Sabía lo que quería, la pregunta era ¿cómo iba a hacerlo? Sung Min notó la duda reflejada en el rostro de Kyu Hyun, así que se levantó un poco apoyándose con sus codos.
SM –“Kyu Hyun, no tenemos que seguir si no quieres” – Kyu Hyun lo miró con el ceño fruncido y negó un par de veces con la cabeza. Por supuesto que no planeaba detenerse. Kyu Hyun respiró profundo y trató de relajarse. ‘No puede ser tan difícil. Después de todo no existe algo como una mala mamada, ¿cierto?’ pensó. Sung Min perdió la fuerza en sus brazos y se retorció cuando su miembro fue succionado por la boca de Kyu Hyun.
SM –“¡POR DIOS!” – gritó. Kyu Hyun empezó a succionar y a saborear el miembro ajeno, lo disfrutaba como si se tratara de su dulce favorito; y pese a todo lo que había pensado, no era nada desagradable. Sung Min empezó a mover inconscientemente su cadera, su mano derecha se aferró al cabello de Kyu Hyun y la izquierda a las sabanas –“¡AHH!” – gimió cuando sintió que la punta de su miembro era succionada –“¡DEMONIOS KYU HYUN!” – gruñó envuelto en placer. Así pasaron algunos minutos antes de que Sung Min tirara levemente del cabello de Kyu Hyun –“Espera” – murmuró –“Detente por favor. No quiero terminar corriéndome en tu boca, tampoco creo que tú quieras que eso pase” – en realidad no había pensado en ello, y quizá anteriormente le habría parecido desagradable y asqueroso, pero la forma en que lo dijo lo hizo sonar muy excitante.
KH –“Pues a mí no me importaría” – Sung Min ni siquiera tuvo tiempo de responder. Su cuerpo volvió a retorcerse de placer. Kyu Hyun siguió jugueteando con su miembro por varios minutos más, hasta que su cuerpo empezó a temblar.
SM –“¡AHHH! ¡Kyu Hyun… detente… por favor!” – rogó el menor, pero fue ignorado por completo. En su lugar Kyu Hyun succionó con más fuerza –“¡AHHHHH!” – Sung Min quedó envuelto en un orgasmo tan intenso que pareció transportarlo a otra dimensión. Kyu Hyun esperaba un sabor desagradable en su boca, pero asombrosamente la escancia de Sung Min no sabía nada mal –“Lo siento” – murmuró el menor cuando pudo recuperar el aliento.
KH –“Está bien” – sonrió y subió para depositar un beso fugaz en su nariz. Por lo que Kyu Hyun podía recordar de aquella primera vez, sabía que debía dedicar tiempo para preparar a Sung Min, pero estaba tan ansioso por poseerlo que no creía ser capaz de soportar más –“Espero que estés listo, porque necesito entrar ahora” – de pronto Sung Min sin min fue invadido por el miedo cuando sintió como Kyu Hyun se acomodaba entre sus piernas.
SM –“Espera Kyu Hyun” – se apresuró a decir. Kyu Hyun simplemente lo miró expectante –“Necesitas un condón, yo no tengo aquí. ¿Tienes uno contigo?”
KH –“¿Estás bromeando?” – replicó –“Por supuesto que no tengo condones, y no pienso ir a comprarlos en este momento. Ahora que recuerdo, tú no usaste uno conmigo, así que al diablo los condones” – Kyu Hyun iba a besarlo, pero Sung Min lo detuvo.
SM –“Tengo miedo” – susurró –“Quiero hacerlo, pero me da un poco de miedo. ¿Estás seguro que va a entrar? Es muy grande. ¿Va a doler?” – Kyu Hyun lo miró con ternura y acarició su mejilla.
KH –“Eres demasiado adorable, Sung Min” – besó fugazmente sus labios y luego su mejilla izquierda –“Está bien, no tienes nada qué temer. Tú no eres nada pequeño tampoco y no tuviste problemas para entrar en mí; no voy a negar que fue doloroso, pero te aseguro que después lo disfruté” – Sung Min lo miró embelesado. ‘¿Cómo puede ser tan tierno y excitante al mismo tiempo?’ pensó el menor –“Te prometo que haré que lo disfrutes, y definitivamente haré que lo recuerdes” – Kyu Hyun colocó la punta de su miembro en la virginal entrada del menor y fue penetrándolo, muy lento, muy suave.
SM –“¡AHH!” – gimió. Era doloroso, sí, pero también era demasiado placentero. Cuando todo el miembro estuvo dentro suyo sus manos empezaron a buscar desesperadamente algo a qué aferrarse, así que Kyu Hyun las guió hasta su propio cuello. Sung Min se aferró a su cuerpo como si su vida dependiera de ello.
KH –“¿Está bien si me muevo ahora?” – el menor no respondió, pero movió un poco su cadera para indicarle que estaba bien que continuara, y así lo hizo. Kyu Hyun empezó a moverse, primero lento y con ternura, pero pronto el ritmo dejó de ser suficiente y las embestidas se volvieron rápidas y profundas, casi salvajes –“¡OH MIERDA!” – gruñó Kyu Hyun mientras volvía a morder el cuello del menor.
SM –“¡AHHHH!” – Sung Min arqueó su espalda cuando Kyu Hyun toco un punto en su interior que lo hizo vibrar, por supuesto el mayor lo notó así que siguió con esos movimientos delirantes; y para aumentar aún más el placer, su miembro fue masajeado hábilmente. Un par de estocadas después ambos llegaron al orgasmo, juntos. Sung Min manchó la mano de Kyu Hyun y éste terminó en el interior del menor. Pasaron varios minutos antes de los dos pudieran recuperarse, minutos en los cuales no habían hecho nada más que contemplarse el uno al otro. Kyu Hyun acarició con extrema delicadeza la mejilla del menor.
KH –“¿Estás bien?” – el menor asintió la cabeza y sonrió antes de abrazarse a Kyu Hyun.
SM –“Kyu Hyun, no quiero arruinar este momento, pero realmente necesito preguntarte algo. ¿Me hiciste el amor sólo porque te sentiste obligado? Lo pregunto porque tú no eres… gay, ¿o sí?” – fue entonces que un crudo golpe de realidad golpeo a Kyu Hyun. Acaba de hacer el amor con un hombre, ni siquiera titubeó para tragar su semen. En fín, había hecho todo lo que, según él, odiaba. ‘¿Por qué lo hice?’ pensó. Y entonces lo entendió.
KH –“Quiero que sepas que tú también has sido el primero y el único en mi vida; pero tienes razón, no soy gay”