Naruto abrió perezosamente sus ojos, preguntándose confusamente por qué su sábana estaba respirando. Y por qué era tan pesada. No es como si lo estuviera aplastando o algo así, pero era definitivamente algo más pesado que cualquier sábana que pudiera recordar tener.
Sus ojos finalmente se enfocaron, y la primera cosa que vio fue una mata de cabello negro. Eso explicaba mucho. No pudo evitar sonreír contentamente cuando recordó la noche anterior. Siendo sincero, tendría un momento difícil cuando intentara caminar, pero estaba seguro de que se acostumbraría.
Sasuke se movió por encima de él, inhalando profundamente antes de abrir sus ojos y levantar su cabeza. Naruto le sonrió, revolviendo el cabello de Sasuke.
“Buenos días.” Le dijo. El azabache lo miró mal antes de recostar su cabeza y acomodarse de nuevo. “Oi, oi. No te volverás a dormir ¿cierto?”
“Trabajé mucho más que tú anoche.” Insistió el azabache.
“Eso es verdad, pero ¿tengo que continuar siendo tu colchón?” Preguntó Naruto.
“Eres cómodo.” Fue la respuesta de Sasuke con un bostezo. Naruto simplemente suspiró, observando el techo. La estable respiración de Sasuke que escuchó unos minutos más tarde le informó que el azabache estaba dormido de nuevo. Pensó que podría quedarse en la cama por un tiempo y dejar a Sasuke dormir. Era verdad; Sasuke había trabajado más que él anoche.
Y fue gratamente apreciado, pensó Naruto con una sonrisa.
Dos horas habían pasado antes de que Naruto no pudiera aguantar más. Seguía cubierto de sudor seco y semen, el cuarto apestaba a sexo, y él realmente tenía que ir al baño. Poniendo sus manos en los hombros de Sasuke, lo sacudió gentilmente— lo cual era extraño, ya que tuvo que doblar sus brazos mucho más arriba.
“¿Sasuke?”
“¿Mm?” El azabache murmuró.
“He esperado por dos horas. Es tiempo de levantarse.” Sasuke dejó salir un largo suspiro antes de removerse.
“Bien.” Se alejó del rubio, permitiéndole a Naruto sentarse. Mientras que salía de la cama, Sasuke envolvió sus brazos alrededor de él desde atrás, acariciando su cuello.
“Eres realmente un verdadero rubio.” Sasuke le sonrió maliciosamente a Naruto, como si nunca antes hubiera visto a Naruto desnudo.
“Jódete.” Naruto le escupió de vuelta a medias, inclinándose sobre Sasuke.
“¿De nuevo?” Sasuke le dio un empujoncito a la frente de Naruto, girando la cabeza del rubio para que pudiera besar su cuello.
“Definitivamente quiero una repetición, pero no ahora mismo.” Admitió Naruto, sintiendo un enrojecimiento en sus mejillas.
“Estaré esperando por ello.” Sasuke liberó a Naruto, permitiéndole al rubio salir de la cama. Fue a agarrar su bóxer, poniéndoselo de vuelta, cuando sus ojos encontraron los residuos estacionados al lado de su cama. Él miró adentro y asintió, impresionado por la puntería de Sasuke.
“Buen disparo.” Comentó mientras que señalaba el condón tirado en el fondo del cubo de basura.
“¿En más lugares que en uno, cierto?” Sasuke sonrió. Naruto simplemente rodó los ojos, dirigiéndose a la puerta. “¿A dónde vas?”
“A ducharme.”
“Yo voy.” Sasuke se bajó de la cama. Por primera vez, era el turno de Naruto para vengarse.
“No lo sé. Sólo si te portas bien.” Le tomó a Sasuke un par de segundos darse cuenta de lo que Naruto estaba hablando, pero cuando lo hizo, sonrió. Aparentemente, su estilo de personalidad parecido a Genma se le había pegado a Naruto— en una buena manera.
Sasuke se sacó el bóxer y agarró la toalla mientras que Naruto agarraba la suya, un jabón, y su champú.
“¿Todo listo?” Inquirió Sasuke. El rubio asintió, así que Sasuke abrió la puerta y se quedó sorprendido de ver a Kiba, Shino, Chouji y a Shikamaru en frente de él, todos sentados en el suelo, como si estuvieran esperando algo.
“¿Puedo ayudarlos?” Inquirió él, Naruto venía detrás de él y miraba por sobre su hombro.
Kiba sonrió ferozmente, inclinándose contra la pared, con ambas manos detrás de su cabeza.
“Entonces, ¿tuvieron una buena noche?” Sasuke obligó a su rostro a mostrarse sin emociones.
“Disfrutable, sí. ¿Por qué?”
“Simplemente nos estábamos preguntando.” Respondió Shikamaru calmadamente. Kiba no dejaría esto así. Cerró sus ojos y comenzó a jadear ligeramente.
“¡Sasuke!” Kiba gimió. “¡Joder, más fuerte, Sasuke!”
Los ojos del rubio se desorbitaron y se sonrojó fuertemente mientras que Kiba prácticamente se moría de la risa.
“Bueno, ¡al menos tengo algo de sexo!” Espetó antes de irse apresuradamente al baño. La risa de Kiba murió inmediatamente.
“Bueno, joder, eso fue un poco hiriente.”
“Si tú quieres con él, Kiba, puedes ir a preguntarle a Naruto si está dispuesto.” Dijo Naruto con una sonrisa mientras que cerraba la puerta. “Estuvo bien en el cama— para ser un virgen.” Sasuke se lamió sus labios mientras que miraba hacia la dirección del baño. “No puedo imaginarme cuan bueno será cuando tenga más práctica.”
“¡No necesito escuchar eso!” Kiba se cubrió los oídos con ambas manos. “¡Demasiada información!”
“A los otros no parece molestarles.” Sasuke sonrió, señalando a los otros tres.
“Es porque bloqueamos lo que dices cuando comienzas a hablar de cosas que preferimos no oír.” Respondió Shino.
Sasuke simplemente se encogió de hombros antes de caminar hacia el pasillo para unirse a su novio en el baño. Si tenía suerte, tal vez podría convencer a Naruto de hacerlo en la ducha…
>Sn<
En la mañana del lunes, Kiba estaba amenazando a Sasuke con castrarlo debido a que él vivía a dos puertas lejos de su cuarto, y podía escuchar todo lo que hacían ellos dos. Sentía pena por sus vecinos, pero Sasuke insistía en que nunca estaban en casa de cualquier manera. Era la verdad, Sasuke no había visto a ninguno de sus vecinos ni una sola vez. Casi comenzaba a sospechar de que quizás no había realmente alguien allí.
Kiba continuó gruñendo durante todo el desayuno, y mientras que caminaban a sus clases también. Shikamaru simplemente ignoraba todo eso, prefiriendo estar perdido en sus pensamientos que escuchar a Kiba quejarse. Ya había escuchado al castaño lo suficiente.
Todos se separaron en diferentes direcciones para dirigirse a sus clases, Sasuke iba a francés y Naruto a matemáticas. Todos se reunirían una hora más tarde en la clase de inglés.
“Tengo que pedirte un favor.” Dijo Sasuke, volteándose hacia Kiba, quien estaba sentado dos filas más atrás que él, esperando a que llegara Hinata. Sakura e Ino normalmente ocupaban los asientos detrás de Sasuke y Naruto, pero ellas no estaban allí todavía.
“Dispara.”
“No le digas a Kakashi.” Sasuke estrechó sus ojos mirando a Kiba. “Si Kakashi lo descubre, todos lo sabrán.”
“Sasuke, siento decírtelo, pero ¡tú y Naruto son muy ruidosos!” Exclamó Kiba. “Probablemente ya todos lo saben.”
“Cuéntaselo a Kakashi y te mato.” Siseó Sasuke. Los ojos de Kiba se agrandaron ante el veneno que derramaban las palabras de Sasuke y asintió vigorosamente.
“Si, está bien. Relájate, joder.” Kiba saltó de la silla cuando Hinata se sentó a su lado.
“Lo siento.” Dijo ella con su voz tímida. “No quise asustarte.”
“Está bien.” Chilló Kiba. Sasuke sonrió, satisfecho de haber asustado lo suficiente al otro chico para que mantuviera cerrada la boca.
Sasuke pasó la mayor parte del comienzo de la clase —el tiempo que esperaban a que Kakashi se mostrara— tratando de desabotonar los pantalones del rubio por debajo del escritorio. Recibió un fiera oposición, porque Naruto realmente no quería tener que caminar con el bóxer húmedo por todo el resto del día.
Sasuke estuvo casi por ganar cuando la puerta se abrió y se vio obligado a remover su mano. Todos miraron a Kakashi caminar hacia su escritorio y poner sus libros en él, observando a Sasuke y Naruto en el proceso. Él entonces frunció el ceño y caminó hacia ellos, inclinándose sobre Sasuke. El azabache se inclinó hacia atrás, no gustándole que su espacio personal fuera invadido por alguien que no era Naruto.
Los ojos de Kakashi se curvaron felices mientras que le sonreía. “Felicitaciones. Estoy feliz de que ya no estés sexualmente frustrado.”
“¡¿Eh?!” Gritó Naruto. “¡¿Cómo lo supiste?!”
“Ya no parece tener metido un palo en el culo.” Kakashi le sonrió maliciosamente al rubio antes de voltearse a ver a Sasuke. “¿Qué tan bueno es?”
“No es tu maldito problema.” Espetó Sasuke, sintiendo un ligero sonrojo en sus mejillas. La clase entera les estaba prestando atención, ¡y él no quería que nadie supiera! Aunque parecía ser que no tenía opción ahora. Sabía que si los otros contribuían, él probablemente se rendiría y comenzaría a hablar de ello.
“¡¿Ustedes tuvieron sexo chicos?! ¡Oh dios mío!” Sakura abrazó a Sasuke por detrás. Y parece que hablaré de ello, pensó Sasuke con una sonrisa. “¡Eso es genial! ¿Quién fue el activo?”
“¡Sakura!” Exclamó Naruto, sonrojándose fuertemente.
“Apuesto que fue Sasuke. Él es el más agresivo de los dos.” Comentó Ino.
“Y el más cachondo.” Añadió Sakura.
“¡Deténganse!” Naruto puso una mano en las dos bocas de las chicas, girándose desde su silla para hacer eso. “¡Ésta es nuestra vida privada! Palabra clave: ¡privada!”
“Pero eres tan lindo cuando te pones nervioso.” Insistió Ino, habiendo quitado la mano de Naruto de su boca.
“¡No, no, no! ¡No soy lindo cuando me pongo nervioso!” Insistió Naruto.
“Estaba pensando más entre las líneas de caliente.” Se puso de acuerdo Sakura.
“¡No!”
“Deberías verlo cuando se viene.”
“¡Sasuke!” Naruto le pegó justo en la nuca.
“¿Cómo se ve?” Preguntó Sakura, cautivada.
“¡Paren!” Gritó Kiba, golpeando su puño contra la mesa frente a él y parándose. “Me siento incómodo con esta conversación, y por como se ve, Naruto no parece estarla disfrutando mucho tampoco. ¡Si no paran ahora mismo y comienzan la lección, me iré!”
“Nos vemos el miércoles.” Comentó Kakashi. “¿Lloriquea mucho? Porque eso es lo que hace Iruka.” Kakashi le dijo a Sasuke.
Kiba miró a Kakashi fijamente, impactado. Kakashi estaba dejando irse para escuchar acerca de la vida privada de Sasuke. ¡Tiene que estar jodiéndome! Pensó Kiba, impresionado. ¡Los profesores de aquí están locos!
Después de eso, Kiba y Hinata guardaron sus cosas y esperaron a Naruto mientras que él hacía lo mismo, los tres se apresuraron en irse. Naruto estaba locamente sonrojado. Nadie más se fue, principalmente porque querían quedarse a discutir sobre lo que había pasado entre los dos chicos, o porque simplemente no querían molestarse en moverse. Chouji, Shikamaru y Shino estaban discutiendo acerca del próximo examen de japonés mientras que Sakura, Ino, Kakashi y Sasuke discutían acerca del fin de semana de Naruto y Sasuke.
Cuando la clase hubo finalmente acabado, Sasuke se quedó atrás unos cuantos minutos para hablar con Kakashi antes de irse. Se encontró con Naruto en el pasillo, quien lo había estado esperando, y Naruto le pegó en el hombro.
“¡Bastardo! ¡¿Por qué diablos tenías que ir y hacer eso?!” Demandó Naruto enojado.
“Cálmate, fue sólo por diversión.”
“¡Los sonidos que hago durante el sexo no es tema para divertirse!” Gritó Naruto, y entonces se sonrojó cuando cayó en cuenta de que las personas lo estaban mirando.
“Lo siento.” Sasuke recorrió con su mano el cabello del rubio. “Es sólo que eres tan lindo cuando te avergüenzas.”
Naruto alejó de un manotazo su mano antes de gruñir algo acerca de necesitar ir a clases y desaparecer. Era verdad, Naruto tenía que ir a anatomía. Sus pasos se alentaron cuando cayó en cuenta a quien tenía en anatomía. Oh dios mío, por favor no dejes que se ponga loco.
Naruto no iba a contarle a Genma, por supuesto. No era un idiota. Él simplemente tenía el divertido presentimiento de que Genma lo sabría, incluso si no decía nada. El tipo era un pervertido con un maldito radar.
Naruto se sentó en el asiento de siempre, y en el momento justo, Genma apareció de repente al lado suyo, sonriendo.
“No, Genma.” Dijo Naruto, pero pudo sentir que se enrojecía. Mirando a Genma con preocupación, vio los ojos del pervertido profesor iluminarse antes de saltar de su asiento, señalando a Naruto con su dedo.
“¡Oh dios mío! ¡Lo hiciste! ¡Finalmente lo hiciste!” Genma empezó a reírse fuertemente, aplaudiendo con sus manos como un idiota. Él entonces agarró la mano de Naruto, alzándola a lo alto en el aire mientras que señalaba al rubio, llamando al resto de la clase. “¡Echen un vistazo! ¡Él ya no es más un virgen! ¡Naruto finalmente tuvo sexo!”
Naruto liberó su mano y se hundió en su silla, cubriendo su rostro mientras que la gente de su clase comenzaba a aplaudir. Algunas personas incluso lo silbaron. Naruto quería morir.
“Me alegro de que finalmente tuvieras los huevos para hacerlo.” Genma se dejó caer en el asiento de al lado de Naruto. “Entonces, ¿cómo estuvo él?” Tocó el brazo del rubio con su dedo índice, sonriendo maniáticamente.
“¡No te lo diré!” Espetó Naruto, hundiéndose aún más en su silla.
“Oh, vamos. Sólo un poco. ¿Es ruidoso? ¿Es compasivo? ¿Es bueno?” Genma continuó tocando su brazo. “¿Eres tú algo bueno? ¿Puedo probarte?”
“¡No puedes probarme!” Gritó Naruto. “Comienza la clase, ¡maldito pervertido!”
“Oh, vamos. ¿Una probadita? Sasuke no tiene que saberlo. Puedes compararnos, para ver quien es mejor.”
“¡No!”
“No eres divertido. Nunca quieres experimentar.” Genma cruzó sus brazos e hizo un puchero.
“Si no comienzas las clases ahora mismo, ¡le diré a Sasuke que me quisiste ligar!”
Genma nunca antes en su vida había dejado una silla tan rápido. Pasó el resto de la clase viendo con preocupación la puerta, como si pensara que quizás Sasuke llegaría de repente con una pistola para disparar su trasero de nuevo.
>Sn<
“¿Por qué no mentiste?” Inquirió Sasuke mientras que él y Naruto entraban por las dobles puertas de salida de química para dirigirse a biología.
“¡Yo mentí!” Insistió Naruto. “Le dije que no, pero por supuesto, yo tuve que sonrojarme y él solo se dio cuenta.”
“No pudo haber sido tan malo.” Sonrió Sasuke.
“¡Intentó ligar conmigo!” Gritó Naruto enojado, queriendo conseguir vengarse de Sasuke y Genma.
La sonrisa de Sasuke desapareció y su ojo tuvo un tic. “¿Qué?”
“Él dijo que quería ‘una probadita’. Yo sólo puedo imaginar a que carajos se refería con eso, pero las posibilidades son que esté en lo correcto.”
Genma— era hombre muerto.
Sasuke iba a encontrar al pervertido, y lo castraría. Entonces, lo cegaría para que nunca más pudiera mirar a su Naruto de nuevo. Entonces, le cortaría las manos para que nunca más si quiera pudiera pensar en tocar a su Naruto de nuevo. Y entonces, sólo por el placer de hacerlo, lo mataría.
Naruto y Sasuke se sentaron en biología y Raidou vino hacia ellos. El hombre con la cicatriz se inclinó hacia adelanta para observarlos, y entonces sonrió.
“Felicidades.”
“¡¿Cómo es que todos lo saben?!” Explotó Naruto, poniendo sus manos en el aire. Raidou simplemente se rio.
“Por favor. Vivo con Genma. Esto es algo que tendría que darme cuenta. Sasuke y Genma son muy similares, sería un idiota si no me percatara del aura de satisfacción.” Naruto se volteó para mirar a Sasuke, mirándolo de arriba abajo. Sasuke simplemente subió una ceja. Naruto se volteó de nuevo hacia Raidou.
“No la veo.”
“Créeme, lo harás.” Insistió Raidou, riéndose. Comenzó a irse hacia las escaleras de nuevo para dirigirse al frente cuando la puerta de atrás se abrió repentinamente.
“¡Raidou!” Genma corrió por las escaleras antes de agarrar al hombre de cicatriz de la mano y arrastrarlo de vuelta hacia donde estaban Naruto y Sasuke, obligándolo a doblar la cintura ya que había puesto su mano en la cabeza de Raidou. Raidou notó que su rostro estaba peligrosamente cerca del de Naruto.
“¡Mira! ¡Mira!” Genma señaló a Naruto y a Sasuke. “¡¿No puedes sentir la lujuria saciada?! ¿No puedes decir cuan dichosamente feliz están?!”
“Eso es genial, Genma.” Dijo Raidou lentamente, mirando a Sasuke. Puede que sólo fuera el ángulo en el cual podía ver al azabache, pero Sasuke no parecía estar ‘dichosamente feliz,’ como Genma decía. De hecho, se veía real, realmente molesto. Raidou quería correr.
“¡Estoy tan contento de que al fin lo hicieran! ¿Qué les parece un cuarteto?”
Esa fue la gota que colmó el vaso. Sasuke se tiró encima de Raidou, tacleando a Genma y haciendo que los dos chocaran contra las sillas del otro lado del pasillo. El salón quedó en silencio mientras todos observaban a Sasuke atacar a su profesor.
“¡¿Qué?! ¡¿Qué fue lo que hice?!” Preguntó Genma, en pánico, tratando de defenderse de Sasuke.
“¡Quiero una ‘probadita’ mi trasero!” Gritó Sasuke.
“¡Me prometiste que no se lo dirías!” Gritó Genma, obviamente hablándole al rubio.
Se las arregló para sacarse a Sasuke de encima antes de ponerse de pie y correr por las escaleras, saliendo por las puertas del frente y gritando como una colegiala. Sasuke estaba pisándole los talones, prácticamente arrancando la puerta de las bisagras mientras que la abría.
Naruto hizo una mueca. Sólo rogaba porque Genma fuera un rápido corredor.
>Sn<
Sasuke se dejó caer en su asiento de geología, todavía humeante. Genma se había disculpado efusivamente y había prometido mantener sus respectivas partes lejos de Naruto— esto incluía sus manos, ojos, y por supuesto, su miembro.
Sasuke había regresado a biología en los últimos cinco minutos —quien hubiera pensado que Genma pudiera correr tan rápido por tanto tiempo— e iba a tener que pedirle las notas a Naruto. Después de eso, se fue a geología. Y ahora, estaba sentado allí, esperando a Gai.
Genma le había también jurado que no le contaría a nadie más sobre lo de él y Naruto. Eso era lo último que Sasuke necesitaba. Gai sabiéndolo. El azabache tembló de simplemente pensarlo.
Fue una suerte que hubiera estado tan enojado con Genma, porque si no lo hubiera estado, el hombre de cabello largo hubiera tratado de convencer a Sasuke y a Naruto de coger como conejos allí mismo en el salón de clases —Sasuke probablemente también le hubiera insistido, aunque Naruto probablemente hubiera tratado de escaparse. Sasuke sonrió mientras que pensaba en su rubio compañero de cuarto, deseando que estuviera allí ahora mismo para que pudiera molestarlo, sin importarles la clase.
Como si hubiera sido conjurado por sus pensamientos, Naruto entró a su clase, buscando a Sasuke. Lo encontró en la fila del frente, como siempre, y se dirigió hacia él.
“¿Qué estás haciendo aquí? Preguntó Sasuke, confundido, mientras que Naruto le pasaba un papel.
“Kakashi me dio esto mientras que me estaba dirigiendo de vuelta al dormitorio y me dijo que era urgente. Quería que te diera esto lo más rápido posible.”
Sasuke frunció el ceño mientras que abría el papel que estaba doblado, con Naruto asomándose por sobre sus hombros para que así pudiera leerlo también.
‘Considérenlo como una venganza, chicos. Diviértanse.’
“¿Venganza?” Sasuke le preguntó al rubio confundido. “¿Venganza por qué? ¿Y qué hizo?”
“¡Sasuke! ¡Naruto! ¡Escuché buenas noticias!”
Sasuke agarró el cuello de la camisa de Naruto cuando el rubio comenzó una carrera para irse hacia la ventana, intentando salir afuera. Si yo sufro, tú también sufrirás, el azabache pensó mientras que arrastraba al rubio de vuelta y lo empujaba hacia el asiento al lado del de él.
“¡No tengo mis libros! ¡Tengo clases en Hebb después de esto! ¡No he comido nada! ¡Tengo dolor de cabeza!” Naruto continuó lanzándole excusas y más excusas, tratando de quitar las manos de Sasuke del cuello de su camisa. Por supuesto, Sasuke no debilitó el agarre en ella.
“¡Qué maravilloso que dos jóvenes como ustedes hayan sellado su amor con el vínculo definitivo! ¡El sexo!”
Naruto cambió los roles con Sasuke, agarrando la muñeca del chico y sosteniéndola fuertemente. Los ojos de Sasuke se agrandaron cuando vio la mano que sostenía su muñeca, y entonces vio la sonrisa maliciosa de Naruto. Si me arrastran de mi asiento, lo mismo te pasará a ti, pensó el rubio, agrandando su sonrisa.
“¡Déjame ir!” Gritó Sasuke, tratando de liberar su brazo justo cuando Gai agarró a Naruto y lo sacaba de su asiento.
Sasuke los siguió.
Gai no parecía darse cuenta de que Naruto estaba sosteniendo la mano de Sasuke, creyendo que el azabache se había parado por cuenta propia. Riéndose desde el fondo de su corazón, metió a ambos chicos en un abrazo de oso, apretándolos.
“Te odio.” Dijo Sasuke con la voz entrecortada mientras que seguía apretado contra el pecho de Gai.
“Es tu culpa.” Naruto le regresó.
Gai comenzó a moverlos de un lado a otro, con sus brazos todavía envueltos alrededor de los dos chicos, y lágrimas corrían en su rostro.
“¡Oh, el vínculo del amor es una vista hermosa! ¡Es más espectacular que la puesta de sol! ¡Más explosivo que supernova! ¡Más majestuoso que un unicornio!”
“¿Unicornio?” Naruto le susurró a Sasuke. El azabache sacudió su cabeza.
“¡Quiero que todo el mundo sepa de esta ocasión sumamente importante donde dos jóvenes han decidido poner a un lado sus diferencias para convertirse en amigos y entonces en amantes! ¡Es maravilloso! ¡Me siento tan eufórico! ¡Me siento lleno de amor y energía! ¡Quiero correr alrededor del campus en mis manos cien veces!”
“Por favor hazlo.” Naruto se ahogó.
“¡Debemos hacer algo ésta noche! ¡Debemos celebrar! ¡Una botella de tequila por cada encuentro sexual! ¡¿Cuántas veces lo hicieron?!”
Naruto le lanzó a Sasuke una mirada que le prometía que nunca más volvería a dormir con Sasuke de nuevo si divulgaba esa información. Sasuke no estaba dispuesto a divulgar nada, incluso si no estuviera amenazado.
Eso sucedía cuando pasó de repente. Un sonido estridente estalló a través del edificio, y los aspersores se prendieron, haciendo que el agua volara por todas partes.
Naruto observó el techo. “¡Gracias!”