Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Quédate Conmigo [CHANSOO] por KyuGamer13

[Reviews - 54]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

;;;;;;;;;;;u;;;;;;;;;;;

Primero que nada...

P E R D Ó N


Me tarde una semana dos/tres días en actualizar y les pido mil, millones de discúlpas por eso. Si una cosa molesta es que digan que van a actualizar tal día y no lo hagan y yo lo he hecho. Así que me siento mal por no cumplirles 8( Pero sin ánimos de buscar pretextos les cuento que en esos 8 días me pasaron cosas personales en donde no podía concentrarme del todo en escribir. Estuvo en TW pero solo para distraerme porque enserio que a veces el destino le encanta juntarte noticias tristes en un solo jalón pero ¡BUENO!

 

Ahora estoy aquí, con ustedes en un capítulo más :D

 

Ojalá les guste!

 

Los nombres de artistas o industrias del entretenimiento que se citen en esta historia no se usan para ningun motivo lucrativo o similar. Es solo para mi entretenimiento y para él que lo lea. 

Todo lo redactado es ficticio.

CAPITULO 3

Todo vuelve

 

 

 

 

—Solo espero que sea verdad la parte en donde a pesar de lo que llegue a pasar no habrá conflictos entre ustedes—susurró KyungSoo parándose del lugar donde estaba cómodamente sentado dirigiéndose a su habitación.

Así será—le contestaron ambos muchachos con una evidente sonrisa en sus rostros.

Eso fue lo último que escucho KyungSoo cuando cerró la puerta de su habitación dejando su espalda recargada en ella y con los ojos cerrados. Todo esto se estaba saliendo de lugar. Sabía perfectamente que ChanYeol no tenía por qué hacer ese tipo de trato con JongIn ya que prácticamente todo estaba resuelto, el moreno se había dado cuenta que le gustaba así que era innecesario que el pelinegro siguiera con el juego de que a él le interesaba. Frunció el entrecejo al tiempo que soltaba un resoplido que demostraba la desesperación que le estaba provocando toda esa situación.

Apartó su cuerpo del trozo de madera caminando a paso lento hacia el armario para poder sacar su pijama y así al fin perderse durmiendo sin que ningún pensamiento le estuviera torturando como le venía sucediendo desde que aceptó ese ridículo trato que de primera instancia le pareció el más adecuado, incluso se lo dijo a JongDae pero ahora todo le indicaba que no había sido la mejor decisión. Una vez que estuvo recostado con esa peculiar pijama de color negro clavo la vista en el techo de su recamara tratando de poder conciliar el tan añorado sueño pero tan solo había estado recostado por unos instantes cuando se dio cuenta de que sencillamente esa noche debía de aclarar las cosas con ChanYeol antes de que se malinterpretarán más las cosas y perdiera el control (que se suponía que tenía) del dichoso trato.

Retiro las cobijas de su cuerpo, parándose lo más silenciosamente que podía debido a que las paredes que separaban a una habitación de otra eran tan delgadas que se podía escuchar perfectamente cuando alguien caminaba, roncaba, y en sí cualquier ruido que se provocará, así que, con sumo cuidado se fue acercando hacia la puerta para primero cerciorarse que tanto ChanYeol como JongIn se encontrarán en sus respectivas habitaciones. Abrió con sumo cuidado la puerta de su habitación para echar un vistazo al pasillo pues desde ahí se podía ver perfectamente si alguien estaba en la cocina o en la sala. Pudo observar que las luces de los mencionados lugares estaban apagadas así que sin temor a ser descubierto en su plan, salió por completo de la habitación volteándose para poder cerrar sigilosamente la puerta. Ya afuera de su habitación giro su cuerpo al lado izquierdo en donde se encontraba la habitación donde le habían dado hospedaje a ChanYeol. Camino hacia ese lugar a paso lento y prácticamente de puntitas para tener todo el sumo cuidado de no hacer el más mínimo ruido ya que en medio del trayecto para poder llegar a la habitación donde se encontraba el pelinegro, estaba la habitación de JongIn y lo que menos quería es que este le escuchará y que empezará a imaginar cosas innecesarias de él y de ChanYeol.

Justo cuando paso por la habitación del moreno escuchó los resonantes ronquidos que este producía mientras dormía. KyungSoo formo una ligera sonrisa al haber oído tal cosa y es que sencillamente le parecían de lo más adorable. Recordó que el día que se mudaron JongIn aún no tenía el suficiente dinero para comprarse una cama por lo que dormían juntos y por lo tanto conocía a la perfección el sonido peculiar que JongIn hacia al dormir. Y es que para KyungSoo todo lo que hacía JongIn era único, la forma de beber agua, de comer, de bailar, de respirar, sencillamente su amigo hacia todo distinto al resto de las personas que él conocía y eso fue sin duda lo que provocó que terminará irremediablemente enamorado de él.

KyungSoo movió de un lado a otro su cabeza para poder apartar esos pensamientos de colegiala enamorada para volver su mirada a la puerta de la siguiente habitación que esa era su principal objetivo. Cuando se posiciono frente a la puerta dudo en tocar pero tampoco era un maleducado que podía entrar así solamente a la recamara de alguien más. Tocó la puerta al final de todo de una manera lenta para que se escuchará apenas lo necesario y ChanYeol pudiera percibirlo pero no obtenía respuesta. Volvió a tocar un poco más fuerte para ver si esta vez si el pelinegro lo escuchará pero de nuevo no obtuvo respuesta.

KyungSoo suspiro lentamente para tomar el suficiente valor para abrir aquella puerta. Sabía que no era lo más educado del mundo pero no podía dejar que pasará más tiempo para que la situación se malinterpretará o se tornará de una manera que con el paso del tiempo no pudiera encontrar salida. Acerco su mano a la perilla, girándola lentamente pero antes de poder abrir la puerta se vio sorprendido cuando la persona que estaba dentro de esa habitación abrió sin ninguna contemplación el trozo de madera.

Y ahí estaba él…

Con una playera negra de tirantes completamente ajustada dejando ver como a pesar de lo delgado que era el pelinegro, se le formaba de una manera totalmente masculina el pecho y el abdomen pero eso no era lo más llamativo de su atuendo. En la parte baja solo usaba un bóxer pequeño de color gris. Las piernas eran tan largas, los muslos bien tonificados.

Era un hecho que ChanYeol tenía…sus encantos.

KyungSoo tragó saliva sin pensar en lo que hacía pero tampoco podía negar que lo estaba frente suyo no le gustará…al contrario. Le gustaba y mucho.

—¿KyungSoo?—preguntó un somnoliento ChanYeol mientras se frotaba los ojos en un intento de que estos se mantuvieran abiertos.— ¿Qué pasa?— dijo una vez que sus cinco sentidos se estaban sincronizando mejor.

Pero KyungSoo se quedó inmóvil cuando sus ojos se cruzaron con la boca de ChanYeol y es que ¿Cómo era posible que de esos labios saliera la voz más provocativa, más varonil, más excitante que jamás haya escuchado?  Si el castaño se maldijo por haber visto a al alto muchacho en paños menores se maldecía cien mil veces más cuando escuchó el sonido de su voz  pronunciado su nombre. Esto era sin duda alguna había sido otro error a la lista.

—Yo…— balbuceo llevando una mano a su cabello para alborotarlo un poco y así tratar de tranquilizar el tan misterioso nerviosismo que sentía.— Verás necesito hablar contigo del trato que hicimos—.

ChanYeol presentía que algo así iba a pasar, sabía que KyungSoo no se tomaría de la mejor manera lo que JongIn y él le propusieron puesto que el trato solo era para que el moreno se diera cuenta de los sentimientos que mantenía ocultos por el castaño y como ya prácticamente se había logrado el cometido no habría porque alargar más la situación pero no iba a permitir que eso pasará. Simplemente no podía dejar ir esta oportunidad que había estado esperando por años, años en dónde él tuvo que irse para no volverse una carga para KyungSoo y JongIn. Años en donde no hubo un solo día en donde KyungSoo no pasará por la mente del pelinegro, años en dónde salió con un sinfín de personas y ninguna de ellas pudo hacerle sentir lo que solo KyungSoo podía, años en donde tenía que controlar sus impulsos de dejar la carrera de motociclista para poder regresar por la persona que parecía había borrado cualquier recuerdo sobre lo que algún día tuvieron él y el castaño.

Años de soledad…años de dolor.

—Pasa —abrió la puerta por completo para que KyungSoo pasará.

El castaño entro a la habitación sin poder evitar echar un vistazo a la habitación. Los pantalones y prácticamente toda la ropa de ChanYeol se encontraba amontonada en una esquina de la habitación. Dejo de supervisar lo que para él era un desastre para poder sentarse en el borde la cama dirigiendo su vista a un pelinegro que cerraba la puerta de la recamara.

—Te escucho—soltó ChanYeol una vez que cerró el trozo de madera. Se dirigió al lugar en donde se encontraba KyungSoo, sentándose a su lado esperando lo que el muchacho tenía que decirle.

—Verás —titubeo al ver como ChanYeol se sentó sin ningún problema a su lado sin apartarle la vista, se estaba poniendo nervioso de nuevo pero ¿Por qué? No es como si el pelinegro le gustará. — El trato solo consistía en poner celoso a JongIn para que se diera cuenta que sentía algo por mí y dio resultado así que no entiendo la razón para que ahora tú y él llegaran a un acuerdo para—hizo una pequeña pausa debido a que la penetrante mirada que le estaba dedicando ChanYeol le estaban poniendo demasiado nervioso. — Conquistarme—finalizó.

KyungSoo trato disimuladamente de alejarse un poco de la cercanía del pelinegro con el fin de buscar controlar todo aquello que le estaba asustando. Asustando porque a pesar de que el castaño se ponía nervioso en si con cualquier persona sabía perfectamente que esta vez era diferente. La razón de sus nervios no tenían nada que ver con lo que le provocaba estar con personas nuevas, esta vez no era así. ChanYeol le incitaba de esos nervios que recorren tu cuerpo en una especie de electricidad asfixiante estacionándose en tú estómago, revolviéndolo, haciendo que bajen como caricias sobre el vientre ¿Cómo era posible que de la nada ChanYeol le hiciera sentirse como un adolecente con las hormonas alborotadas?

—KyungSoo —el pelinegro estaba dispuesto a decir lo que le venía carcomiendo el alma poco a poco. Y es que el amor no lo puedes ocultar toda la vida y ChanYeol lo sabía muy bien. — Seré honesto contigo—dijo sin apartar la vista a los ojos del castaño. — Me gustas, me gustas desde el primer día que nos presentaron—vio como KyungSoo abría los ojos más de lo común por lo que había soltado. — Sé que tú no recuerdas muy bien lo que paso aquel día porque bueno, fue hace mucho tiempo—se encogió de hombros en un acto que indicaba que era lo más normal que aquello pasará. — Pero esa no fue la primera vez que nos conocimos, al menos no para mí—.

KyungSoo parpadeo confundido por lo que acababa de decirle ChanYeol. Él sabía muy bien que la primera vez que conoció al pelinegro fue aquella vez que JongIn los presentó entonces ¿Por qué demonios le decía que esa no fue la primera vez?

—¿De qué estás hablando?—preguntó el castaño en un tono de incredulidad.

—¿Recuerdas haber ido a un curso de verano llamado “Oasis”?— le cuestiono ChanYeol quien se puso de pie para posicionarse frente al castaño.

—Sí, fui cuando tenía 14 años pero ¿Qué pasa con ese curso? — KyungSoo se estaba poniendo demasiado frustrado por no entender a donde quería llegar el pelinegro con eso.

—Era un curso de verano de música ¿No? — volvió a preguntar ChanYeol.

—Sí — contesto secamente KyungSoo.

—¿Recuerdas al niño con el que compartiste habitación? — ChanYeol se puso de cuclillas tomando las manos de KyungSoo sobre las propias piernas de este, solo un tacto sutil.

KyungSoo solo pudo abrir los ojos con asombro al ver como ChanYeol se agachaba frente suyo para tomar sus manos en un tacto que se le antojo infantil pero seguí sin entender todo lo que supuestamente el pelinegro le estaba explicando porque más que resolverle sus dudas le estaba enredando más.

—Bueno sí, le recuerdo — le contestó dudoso KyungSoo. — A él le gustaba mucho tocar la guitarra y rapear.

—En cambio a ti te gustaban más las baladas — le interrumpió ChanYeol.

—Sí…— susurro KyungSoo algo sorprendido por que el pelinegro supiera sobre ese gusto tan íntimo, tan personal que poseía.

ChanYeol le dedico una amplia sonrisa a KyungSoo que a este le antojo de lo más tierno que había visto. El pelinegro no dejaba de mirarlo y no había apartado sus manos de las del castaño. Toda aquella atmosfera que se estaba creando entre ellos se sentía tan extraña para KyungSoo pero tan hermosa para ChanYeol.

—Ese curso de verano marco mi vida, Soo — dijo ChanYeol dirigiendo una de sus manos a la mejilla de KyungSoo para proporcionarle una inocente caricia, caricia que hizo que KyungSoo se sobresaltará. — Yo era también un niño de 14 años que le gustaba tocar la guitarra y rapear —el pelinegro aparto su mano de la mejilla del menor para que este no se sintiera de alguna manera acosado. — Ese verano pensé que sería el peor de mi vida porque él día que llegue todos se rieron de mí, todos excepto una persona—. ChanYeol se volvió a poner de pie alejándose del castaño, dirigiéndose hacia la pared y poder recargarse de ahí.— Yo era una jirafa andante combinada con dumbo, eso es lo que me decían—sonrió con nostalgia. —En ese entonces me calaba mucho que se burlaran de mi pero yo siempre sonreía, a pesar de que me dijeran cien mil insultos mi única defensa siempre fue sonreírles—.

KyungSoo podía sentir como su corazón latía a una lentitud que le estaba produciendo miedo será que…

— Mi compañero de cuarto era bastante reservado, lo único que solía decirme era “deberías ordenar tu ropa” —bufó— Pero fue justo al séptimo día que unos compañeros me hicieron una broma…pesada—.

Para ChanYeol a pesar del tiempo que había pasado le costaba mucho hablar de eso pero tenía que hacerlo, tenía que recordarle a KyungSoo como le ayudo a no dejarse nunca más ser la burla de la gente, tenía que recordarle por qué se enamoró irremediablemente de él.

—Era la hora en donde los supervisores se reunían para ponerse de acuerdo sobre las actividades que se iban a realizar así que no había vigilancia alguna en ese periodo—.

ChanYeol se estaba poniendo algo tenso así que camino hacia su cama recostándose en ella, clavando su mirada al techo tomando entre sus manos a un pequeño peluche que para muchos podía serle infantil pero para el pelinegro era el mejor artefacto para calmarse.

— Yo estaba tocando mi guitarra en mi habitación cuando escuché que alguien toco la puerta, pensé que era mi compañero de cuarto pero no—KyungSoo no le miraba, seguía sentado en el borde de la cama, creía que era mejor así. —Justo cuando abrí la puerta sentí como algo impactaba a mi cuerpo, al parecer era mostaza, luego unos niños me tomaron de los brazos sacándome por completo de mi cabaña, me arrastraron lo suficiente lejos de ella y luego—sonrió con tristeza—luego me ataron a un árbol, solo podía escuchar las risas de todos…hicieron una fila y de uno en uno fueron escribiéndome insultos en mi cuerpo, uno hasta me había puesto unas orejas de cartón gigantes—apretó con todas sus fuerzas aquel peluche que tenía entre las manos. —¿Sabes? creo que fue la primera vez que lloré— le seguía contando el pelinegro dejando a un KyungSoo de piedra. —Cuando ellos vieron que empecé a llorar, rieron con más ganas diciéndome “¿Por qué lloras Yedumbo?” “¿No que siempre sonríes?” y yo no podía parar de llorar—aflojo el agarre sobre el peluche levantándose y dirigiéndose de nueva cuenta a un costado del castaño. — Fue ahí cuando llego mi compañero —dijo en lo que para KyungSoo fue un susurro. — Apartó a todos hasta llegar hacia donde yo estaba y empezó a gritarles a todos pero la peor parte se la llevo el que había planeado todo.— soltó una ligera carcajada.— le golpeo tan duro en el estómago que hizo que se cayera de rodillas y después de eso le tomo con ambos brazos el cuello dejándolo algo inconsciente.— rio con más ganas el pelinegro —Después de dejarlo casi inconsciente me desato de aquel árbol y lo que me dijo hizo detener mi llanto.—miro atentamente al castaño— ¿Sabes lo que me dijo?—le preguntó ChanYeol.

Fue ahí cuando algo en la cabeza de KyungSoo hizo “clic”. La adolescencia para el castaño no era algo muy grato de recordar y no por el hecho de que hubiera sufrido algún tipo de trato horrible o hubiera tenido algún momento traumatizante, solo era que prefería no recordar la época en donde tuvo que renunciar a lo que sentía, a lo que verdaderamente era solo para no hacer sufrir a su madre y no avergonzar a su padre. Y ese curso de verano era uno de esos recuerdos que pensó haber olvidado pero no era así.

No ahora.

Todo aquello que le acaba de contar ChanYeol lo recordaba por el simple hecho de que él era la persona con la que había compartido habitación, fue con él con quien experimento lo que podía decirse su primer roce homosexual. Con él descubrió lo que era verdaderamente ser  D.O KyungSoo.

—¿Sabes lo que me dijo? — volvió a preguntarle ChanYeol acercándose más a él.

—Nunca vuelvas a borrar esa sonrisa de tu rostro porque—

—Con ella iluminas al mundo entero—finalizo la frase ChanYeol.

KyungSoo giro su rostro para que sus ojos se cruzaron con los del pelinegro. Era él…estaba de nuevo frente a la persona que su cerebro hizo que olvidará o eso al menos pensó. Nunca pensó encontrarse de nuevo con él y es que aquella vez que JongIn los presentó no le prestó la atención necesaria para que pudiera reconocerle. Odiaba los lugares concurridos y en esa carrera había tanta gente que no pudo concentrarse, ni tan siquiera recordaba exactamente ese día. Pero ahora eso no importaba, no ahora. ChanYeol dirigió su mano a los labios de KyungSoo razonándolos con el pulgar, lentamente, dándose la oportunidad de entreabrirlos. La respiración de KyungSoo estaba empezando a acelerarse y eso ChanYeol lo podía sentir. Se acercó a él hasta quedar a escasos centímetros de distancia.

—No me pidas que no luche por ti…— le susurro— ahora que te he encontrado de nuevo— antes de besarle le dirigió una última mirada a esos ojos enormes que poseía el castaño y lo hizo.

Le besó.

Un roce entre ambos labios, ChanYeol tomo el rostro de KyungSoo con ambas manos mientras no aumentaba la velocidad de aquel beso, no tenía prisa, quería recordar el movimiento, el sabor, la textura, quería recordar cómo se sentían los besos de la persona que quería. Y es que a pesar de que aquella noche de tragos le besó no tuvo la oportunidad de profundizarlo porque el mismo castaño se había apartado justo en el momento que él estaba perdiendo el control. Pero ahora no era así…

KyungSoo sentía como las sensaciones del pasado volvían a resurgir en su interior, recordaba ahora, como se sentían los labios de lo que fue su primer amor. Aquel que le hizo sentir que era la persona más importante para otra, para él, para ChanYeol. Y eso siempre, por lo menos en ese tiempo, le producía las sensaciones más placenteras que jamás pudo imaginar.

ChanYeol dejo de besar la boca de KyungSoo para verle a los ojos y fue ahí cuando lo supo.

Era él y nadie más.

Solo él.

—No quiero…— ChanYeol se acercó a la frente de KyungSoo para besarle— No puedo —le beso el ojo izquierdo—Dejar—Le beso el ojo derecho—Que esta oportunidad—le beso la nariz—se me escapé—y así volví a besar los labios de KyungSoo.

El castaño no podía negar que lo que los sentimientos del pasado volvieran tan veloces apoderándose de todos sus sentidos. Quería no corresponder a cada tacto de ChanYeol pero no podía. Su cuerpo reconocía esas caricias, su cuerpo extrañaba sus caricias. Y eso lo sabía bien ChanYeol pues no era tonto, sabía que si KyungSoo no quería algo se alejaba pero no lo estaba haciendo, al contrario, reaccionaba con cada acción que este hacía, así que, en un instinto de egoísmo se atrevió a más.

Lentamente y aun besando a KyungSoo, el pelinegro paso sus manos hacia los hombros del castaño, empujándolo delicadamente hacia la cama para que la espalda del menor se recargara sobre las sabanas. KyungSoo no opuso resistencia alguna y se dejó hacer por ChanYeol.

 Una de las manos del pelinegro bajo lentamente hacia el muslo del menor, dando una caricia circular a la par que le besaba. KyungSoo sabía que necesitaba de más, quería sentir a ChanYeol. Algo temeroso acerco sus manos al borde de la playera que el mayor llevaba, introdujo ambas manos, una a cada costado, acaricio las costillas del pelinegro y fue ahí donde el control que estaba tratando de tener ChanYeol se esfumó. Justo cuando sintió esa caricia proporcionada por el castaño, en mitad del beso, gimió.

KyungSoo sintió el gemido de ChanYeol introducirse a través de su garganta, bajando a paso veloz hacia el vientre, haciendo que su miembro palpitará dolorosamente, pero a pesar de eso se atrevió a volver a hacerlo…acarició con más intensidad los costados del tronco de ChanYeol. El pelinegro volvió a hacer la misma acción, y es que la sensación de las manos del menor en esa parte de su anatomía le volvía loco. Para algunas personas sus puntos débiles son el cuello, las orejas, los muslos pero para él era justo donde KyungSoo le estaba tocando.

—Aún recuerdas mi punto débil—se atrevió a decir ChanYeol.

—Mi cabeza no pero al parecer mi cuerpo sí— contestó KyungSoo relamiéndose los labios solo para provocar aún más al mayor.

—KyungSoo-ah—susurro con la mirada clavada en esos labios carnosos que poseía el castaño.

Justo cuando ChanYeol iba a volverle a besar se escuchó como en el pasillo se oían pasos que se dirigían hacia la habitación donde se encontraban. Fue ahí cuando KyungSoo volvió a la realidad. Abrió los ojos tan grandes que parecía que en cualquier momento se le podrían salir, con ambas manos empujo a un desorientado ChanYeol para que pudiera ponerse de pie. Trato de no hacer el más mínimo ruido y le hizo una seña a ChanYeol para que el también evitará hacerlo.

KyungSoo se acercó hacia la puerta para poder escuchar más atentamente hacia donde se dirigía JongIn. Escuchó que los pasos del menor iban con dirección a la cocina y su teoría la confirmo cuando escuchó la puerta del refrigerador abrirse y volver a cerrarse en cuestión de segundos. JongIn al parecer había ido a beber un poco de leche fría. Una vez que la sed del moreno se disipo se dirigió de nueva cuenta a su habitación donde KyungSoo al final pudo percibir como este cerraba la puerta de su recamara para volver a dormir. El castaño suspiro con alivio al saber que JongIn no había escuchado que él estaba en la habitación de ChanYeol. Unas manos sobre sus hombros le hicieron brincar del susto y fue ahí cuando se topó de nueva cuenta con la mirada del pelinegro.

—Obtuviste tu respuesta—le decía ChanYeol—Ahora creo que es ahora de que descanses—finalizo abriendo la puerta de su habitación para que el castaño pudiera salir.

KyungSoo parpadeo confuso por la tan repentina acción de “liberación” que le estaba proporcionando ChanYeol pero sin poner alguna replica giro su cuerpo hacia la salida de esa habitación.

—Ey, Soo—le llamo el pelinegro en un susurro.

—hummm—

—Sé que quieres a JongIn pero eso no será un impedimento para mí, yo no quiero que me quieras por el pasado que tuvimos, quiero que me quieras por lo que soy ahora, por lo que podemos tener si así lo quieres—pronunciaba el pelinegro acercándose inconscientemente al menor. — Buenas Noches, enano—. Le dijo besando la mejilla del castaño para girarse y volver a su habitación, cerrando la puerta a su paso.

KyungSoo rozo con sus dedos el lugar donde ChanYeol le había besado mientras miraba el trozo de madera que poco antes de había cerrado frente a él. Todo tenía sentido ahora.

Una parte de él aún no podía asimilar lo que le acababa de ocurrir y es que ¿cómo se supone que te debes sentir cuando te reencuentras con la persona con la que experimentaste…por primera vez el amor?

Suspiro con cansancio dirigiéndose hacia su habitación. Todo de nuevo se le estaba haciendo una tormenta, una tormenta que al parecer…cada día tomaba más fuerza y no podía controlar.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

Quise hacerlo más largo pero por falta de tiempo ya no pude ;A;

 

¿Que tal les pareció?

En realidad habrá más sorpresas, habrá sufrimiento pero a la vez trataré de hacer momentos bonitos y algo humoristicos, bueno todo dependerá por donde mi cerebro crea que es lo mejor (?) 

 

Quizás dirán ¿Cómo que KyungSoo olvidó a ChanYeol si fue su primer amor?

Hay muchas personas que bloquean recuerdos, y esos recuerdos llevan consigo personas y fue lo que le paso ahora a KyungSoo 8( todo porque tenía miedo...en fine era un mocoso de 14 años, era normal que tuviera miedo al rechazo de sus padres y sociedad, en fin. Habrá más explicación de eso en los sig cap!

 

 

Les dejo este vídeo ChanSoo

Y este KaiSoo

 

:9 Denme amor (?) ahque. Enserio dejenme saber lo que opinan n_n 

 

TT TT al rato vuelvo a entrar a la Universidad y a trabajar

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).