Capítulo 27: No es tu culpa **************************** Luego de eso todo se vio negro, el silencio se hizo presente después de el dolor y la agonía de los demás soldados al ser exterminados, calcinados técnicamente el silencio reinó. Fye cayó de rodillas cansado por el poder que uso sudando y respirando agitado.
Sakura se acercó a el abrazándose a su cuello mientras este la miraba sonriendo alegre aunque estaba muy preocupado con el hecho de que Ryuu-on estaba delicado y se estuvo desangrando y Kurogane había sido atravesado en el corazón, a ciencia cierta no sabía si los hijos de Ryuu-on y Shaoran sobrevivirían o no, lo mejor que podían hacer era volver a casa, donde estaba lo que más les importaba, donde había paz y tranquilidad. Con debilidad se levantó lentamente ayudado por la princesa y se encaminaron hacía donde estaban los demás.
Fye:¿Kurogane...?- pregunto asustado de que este ya no respondiera.
Kurogane: F-fye...¿Es..tas....bien? -débilmente pregunto el moreno mientras los otros los veían.
Fye: Sí....¿y tú?
Kurogane: También...-sonrio mientras lo miraba un poco despistado y débil.
Fye, con ayuda de Yukito abrió el portal nuevamente y comenzaron a atravesarlo, Shaoran cargo a Ryuu en brazos quien por culpa de la magia tenía un gran vientre que no regresaría a su mes original. Luego cruzó sakura, después Touya con kurogane en su hombro y ya de ultimo Fye y Yukito.
**************************** Las sabanas blancas teñidas de rojo eran alarmantes, no más de dos minutos en los que tocaron el piso de aquel lugar donde antes de todo habían estado la hemorragia de Ryuu regresó.
Rápidamente fue llevado a un hospital. Al llegar intrigado el doctor miro sorprendido al Ryuu que veía, por lo que calculaba podría tener unos ocho meses cuanto mucho y una hemorragia en el momento.
Shaoran: ¡DOCTOR HAGA ALGO POR FAVOR! -pidió el castaño a medio morirse de la preocupación.
El doctor ni habló, solo movilizó lo que necesitaba y lo llevaron a el área de urgencias intensivas para ver que andaba mal. Nadie sabia la razón y al final lo derivaron como un aborto espontáneo pero luego la hemorragia paro y ya no había ni rastro de ella. Sin explicación decidieron mejor llevar a Ryuu a una habitación monitoreada a todas horas en el área de cuidados intensivos para investigar un poco más y tenerle ahí por cualquier motivo.
Un rato después el doctor salió con ese tipo de expresión donde podías leer claramente la palabra "No se que carajos paso" por todo su rostro.
Shaoran: ¿Esta bien doctor?
-Sinceramente no tengo ni la menor idea de que ocurrió porque cuando investigábamos la causa de la hemorragia esta se detuvo por si sola sin dejar rastro, pero para prevenir decidimos dejarlo en el área de cuidados intensivos por cualquier cosa, puedes pasar a verlo si quieres, la enfermera te va a guiar- informó el doctor.
Cuando Shaoran se hubo ido con la enfermera el doctor miro más serio a los demás quienes captaron que había algo más que no le pudo decir a Shaoran.
-A ustedes se los diré, esto no se lo pude decir a Shaoran pero existe la posibilidad de qué pierdan a los bebés, las condiciones en las que se encuentra Ryuu-on no son nada estables y en cualquier momento tendrá otro aborto espontaneo y ya no lo podremos evitar, no encontraba palabras más débiles para decirle eso a Shaoran pero esta es la cruel verdad, no se que habrá pasado con ustedes que tienen vidas extrañas y llenas de magia y cosas sobrenaturales pero no hay posibilidades de que esos niños sobrevivan, lo siento- el doctor habló por ultima vez antes de retirarse con la mirada baja viendo como el rostro de los demás se descomponía.
Fye estaba más que estático mientras abrazaba a Oliver contra su pecho, no quería imaginarse lo devastados que iban a estar ellos cuando se enteraran por cuenta propia o por alguno de ellos que tenga el valor de decírselo a Shaoran.
**************************** En la habitación Blanca entraba el castaño solamente para ver a lo que mas amaba en el mundo postrado en cama atado nuevamente a un millar de cables transparentes conectados a varias delicadas partes de su cuerpo para que no muriese. Su corazón se aceleró al ver el débil pulso cardiaco de los bebés, se sentía a morir, en su cabeza las preguntas mas duras rondaban por ella. "¿Acaso no merezco ser feliz?" "¿Kami-sama por qué a ellos, por qué no a mí?" y muchas más mientras simplemente dejaba las lagrimas caer con dolor y desesperación marcados por todos los lados de la habitación y de donde estaba él.
Se sentó en aquella fría silla en la que ya había estado antes mientras besaba la mano pálida de su inconsciente pareja.
Shaoran: Lo lamento tanto Ryuu-on, esto es mi culpa,...prometí protegerlos y les fallé, por eso estas aquí, les fallé- estaba llorando definitivamente estaba llorando, su cuerpo empezó a temblar mientras mantenía agarrada la mano de su pareja y las lagrimas las dejaba caer libremente a borbotones mientras hipaba en el regreso del aire a su cuerpo para dejarlo salir nuevamente como un desgarrador gemido de dolor. Sentía que su mundo se estaba derrumbando lentamente y se sentía culpable de haber provocado todo aunque realmente no era culpable de nada pero el no lo quería aceptar.
Sakura quien estaba apunto de tocar la puerta de la habitación decidió escuchar lo que decía Shaoran.
Shaoran: Jamás debí hacer que vinieras conmigo, solo así estarías a salvo, estarías bien y no habría problema de verte de vez en cuando,...yo te ha..hago infeliz ...perdóname..¡Perdóname Bebé por favor! -gritó levemente mientras seguía llorando en su lamentó desgarrador de su pobre alma siendo destrozada por la culpa innecesaria.
Las lágrimas igual salían de sus ojos al escuchar las palabras de aquel castaño al que había amado y perdido sin embargo tenía que apoyarlo aunque de ella ya no fuera nada debía apoyarlo, su corazón estaba sufriendo y ella trataría de hacer que entre ambos se puedan apoyar. Con valor secó sus lágrimas y entró a la habitación donde vio a Shaoran llorando desconsoladamente pidiendo perdón a Ryuu-on a pesar de que no tenia la culpa de nada el sentía que todo había sido su culpa, suya y de nadie más pero estaba siego, porque había sido culpa del destino que eso no lo hayan podido evitar.
Sakura hime: Shaoran-kun....no llores, el va a estar bien, solo confía en que estará bien -pidió amablemente la castaña quien lo miraba a los ojos con algunas lágrimas cristalizando sus ojos verdes avellana.
Shaoran: Es que...todo es ...mi culpa...no lo protegí como debía hacer....el esta sufriendo por mi culpa -le respondió con las lagrimas cayendo sin piedad de esos ojos opacos y llenos se dolor y frustración.
Sakura: No lo es...porque si tu tienes la culpa entonces yo también por no haber podido llegar a tiempo al cuarto -compartió la pena mientras lloraba a su lado.
Shaoran: Sakura....igual tu perdóname....
Ambos se abrazaron mientras compartían el penar que los aprisionaba en sus corazones.
*************************** Fye y los demás esperaban la salida de Sakura del cuarto pero esta simplemente aún no regresaba y se preguntaban que había pasado, rato después mientras ellos discutían con dolor sobre como decirle a Shaoran la noticia Sakura apareció con la mirada llena de pequeños dejes de agua cristalina que caían de ellos y los párpados rojos igual que sus mejillas y la nariz que denotaban que todo ese rato estuvo llorando.
King Touya: Sakura ¿Qué pasó?- preguntó preocupado su hermano.
Sakura Hime: Lo intente ayudar...pero su sentimiento fue más fuerte, el-el siente la culpa, siente que es el culpable de que todo este como este, de que Ryuu este en el hospital nuevamente, de que sus hijos estén tan débiles, por no haberlos protegido -lloró en el pecho de su hermano quien la miraba atónito.
Consorte Yukito: No llores sakura, nada de esto te debe hacer llorar.
Sakura Hime: Es que yo igual tengo la culpa de esto, no entre rápido a la cámara donde estaba Ryuu, no lo salve a tiempo... Es mi culpa -sollozó más.
Fye: No es tu culpa Sakura-chan
La abrazó y así todos pasaron a retirarse para poder regresar mañana a ver como seguían.
*************************** -Shaoran, despierta- dijo alguien con una voz tan suave, tan dulce como el canto de un ángel-despierta- repitió.
Lentamente abrió sus ojos llenos de pequeñas lágrimas restantes y pudo observar a una mujer muy hermosa de cabello largo, lacio y castaño claro con unos ojos color café obscuro que lo miraba con algo de tristeza en sus ojos mientras acariciaba su mejilla.
-¿Quién eres?- preguntó algo confundido
-Hijo mío, has crecido mucho desde que te vi por última vez, me parece realmente triste que yo jamás te haya podido enseñar-
-¿Mamá?- preguntó sorprendido a la mujer que lo veía con cariño.
-Hijo mío, no tengo mucho tiempo, solo te pido que seas fuerte para lo que viene y que espero verte pronto-
-Mamá no te vayas por favor, quiero que me digas porque nunca estuviste conmigo-
-Hijo mío no puedo, eso es muy doloroso de recordar, espero poder decirte en algún momento, pero antes de que me vaya, amor mío tu no tienes culpa de nada de lo que haya pasado para que estemos aquí en este preciso momento. Tu no tienes la culpa Shaoran lee, te quiero mucho hijo mío y me siento orgullosa de la persona en la que te has convertido, hasta pronto hijo mío, te dejo en buenas manos así que me voy feliz-. Dijo y dio por finalizado la mujer que desapareció una vez que Shaoran despertó con los ojos aun llorosos mientras observaba que Ryuu no estaba en cama. Pero de repente oyó algo que le rompió el corazón.
-"¡AYUDA! ¡NO LOS QUIERO PERDER! ¡NO POR FAVOR! ¡ALGUIEN AYÚDEME!" -gritó Ryuu-on desde el baño del área que ahora se encontraba en un charco de sangre rojo vivo que no dejaba de fluir. Shaoran corrió como alma que se la lleva el diablo hasta llegar y su mundo se termino de romper. Ryuu estaba sentado en el piso del baño sobre un charco de sangre mientras lloraba y las enfermeras llegaban a socorrerlo con urgencia sin embargo ya era demasiado tarde, al colocarle la cinta en el vientre todos observaron que los bebés ya no tenían pulsó, los habían perdido para siempre...se sentían los seres mas miserables del planeta. Las enfermeras llevaron a Ryuu a la sala de cirugía para operarlo y poder retirar a los fetos que habían perdido la vida desgraciadamente.
Ryuu después de la cirugía sólo quería dormir, quería creer que estaba soñando todo este tiempo y que cuando despertará estaría bien, sus hijos estarían con el pero la realidad era otra que no solo lo afectaba a el si no que bien podía escuchar los leves sollozos de Shaoran quien seguía repitiendo que era su culpa y entonces recordó lo que le dijo su madre "No es tu culpa" pero simplemente no podía negar que sentía toda la responsabilidad sobre sus hombros que ahora se sentían débiles ante la cruel situación que el destino les había puesto en el camino.
Pero "No es tu culpa".