Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EN LA LUZ Y EN LA OSCURIDAD por Sangre Samurai

[Reviews - 135]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Loki regresa transformado en lobo para robar a un Thor sumido en la incosnciencia.

Anneke regresa a su casa definitivamente.

Pasaron varias angustiantes horas... el final de la ceremonia se había tornado una tragedia que envolvía a varias familias: Gurl y Kaysa oraban ansiosamente por noticias de su hija Anneke, Laufey y Farbauti lamentaban el paso del tiempo, con Loki ausente y sin unión, sus esperanzas de tener descendencia bajan a ser casi nulas y finalmente Odín y Frigga, quienes observaban atentamente todo lo que los Sanadores implementaban para salvar a Thor...

El rubio Dios no había muerto... pero todos los esfuerzos por despertarle parecían vanos, el veneno le había hecho caer en una inconsciencia de la cual, no podían hacerle regresar...

-¿Qué es ese estruendo?- exclamó Padre de Todo, alertando a sus guardias, cuando un ruido fuerte y seco los hizo volverse a todos hacia el pasillo, donde la puerta de madera y metal cedió como si fuese de papel ante el empuje de la enorme y atemorizante bestia... el lobo plateado, que regresaba mostrando el brillante pelaje del pecho, así como el hocico manchados de rojo...

-Loki...- murmuró Laufey, reconociendo a su hijo.

El lobo gruñó tan solo para indicar que nadie se acercara, con el pelo del lomo erizado, con los ojos inyectados y mostrando los colmillos, penetró al cuarto de sanación, seguido de las miradas cautelosas unas y rencorosas otras, de los presentes.

Finalmente, se dirigió hasta la mesa donde reposaba Thor... ante su presencia, el lobo se transformó y Loki recobró su apariencia Jotun. Entonces fue el turno de Kaysa, quien no pudo reprimir una exclamación de dolor y un reclamo, observando con atención que las ropas del pelinegro estaban manchadas de sangre.

-¡Maldito Jotun!- gritó, acercándose de prisa al recién llegado- ¿Dónde está Ann? ¿Dónde está mi hija, malnacido? ¿Qué le has hecho a mi hija?

El Rey Odín la detuvo haciendo un rápido movimiento de su lanza Gungnir, colocando una barrera invisible que la mujer no puso traspasar y que le dio tiempo a Gurl de alcanzar a su esposa y retenerla con fuerza del brazo.

-Gurl, cuida de ella... no le permitas acercarse...

-¡Déjenme! ¡Este maldito debe responder! ¿Dónde, Loki Laufeyson, dónde está mi hija?

Loki apenas volvió la mirada de fuego hasta el lugar donde provenían los gritos... todo parecía en cámara lenta para él. Su atención toda se centraba en su amado compañero y se dirigió hacia el lugar donde Thor dormía inconsciente.

-No sueltes a tu hembra- dijo Laufey al troll- A menos que quieras otra tragedia... Les advertí que no deben tocar a Loki... que nadie lo toque, que nadie se atreva a mirarlo siquiera... un Jotun en este trance es sumamente peligroso... incluso para quienes no hagamos nada en su contra...

Gurl, en medio de su rabia, comprendía que el soberano de los Jötnar tenía razón, atenazó a su esposa para obligarla a quedarse quieta y a callar, Kaysa sollozaba desgarradoramente mientras continuaba exigiendo y suplicando a un tiempo por el paradero de su hija Anneke.

-Mi amor...- susurró el Jotun, acariciando los rubios mechones, llenando de besos los párpados cerrados- Te necesito...

Y sin que nadie pudiese hacer nada para evitarlo, Loki desgarró la blanca túnica que vestía su guerrero, dejó descubierto el mínimo rasguño, pero suficiente, por el que el veneno había entrado a su organismo. Sacó una pequeña daga de uru de entre sus ropas, Odín y Frigga exclamaron al ver como la herida era reabierta y agrandada... Loki había cortado limpiamente la tostada piel del brazo de Thor y su roja sangre brotó de inmediato... los Sanadores se miraban impotentes... nadie sabía lo que estaba sucediendo... Nadie excepto el propio Loki y quizá, el Rey Laufey.

Las gotas de sangre no llegaron a rodar hasta el colchón, pues fueron rápidamente lamidas y tragadas por un frenético y extático Loki... el menor pasó su lengua una y otra vez, sin dejar escapar una sola gota, llenándose pronto la boca con el rojo líquido... una vez más... y otra y otra... como si se tratara de un cachorro sediento ante una fuente cristalina... hasta que la sangre dejó de brotar.

-Loki...- murmuró Odín, intentando razonar con su anterior hijo adoptivo- Habla conmigo... No te haremos daño alguno... Explica lo que haces...

-Es tiempo, amor...- dijo el cambiaformas al oído del mayor, sin escuchar a nadie más... su cuerpo se arqueó como si una descarga lo traspasase y fue de nuevo una bestia. Pero ahora su tamaño era realmente correspondiente a un gigante... lo suficientemente grande y fuerte para tomar al Dios del Trueno en sus fauces, tal y como si fuera un muñeco de tela, lo tomó con firmeza, pero sin hacerle daño... miró de reojo a quienes seguían sus movimientos con fascinación y terror... luego salió corriendo de nuevo hasta la puerta, de ahí por todo el pasillo hasta escapar por el mismo ventanal destruido por el que había llegado.

***

-Es mi penoso deber llevarle esta noticia a una madre destrozada...

Esas fueron las palabras de Gurl el Troll, cerrando con todo cuidado el ataúd donde el cuerpo destrozado, exangüe de Anneke, sería trasladado hasta las tierras de la caverna de Gundershelm... Por ahora, todos sus rencores, todas sus ambiciones y todos sus asuntos pendientes con Asgard, con Vanaheim y con Cimmeria, a quienes pensaba confrontar en una guerra sin cuartel, quedaban aplazados. El dolor de perder a su única hija, la bella, la perfecta, la siempre amada Anneke le sobrepasaba.

¿Cón qué palabras le diría a Kaysa que la habían encontrado... muerta a dentelladas de fiera... desangrada por una espantosa desgarradura en el cuello... sin ánima?

-Jamás quise este final- agregó Odín, quien prometió dar todas las facilidades al troll y a su esposa para que llegasen seguros hasta sus posesiones. Debían atravesar Vanaheim sin la presencia del rey Geirrodur, que se habia adelantado ya al regreso, toda vez que la guerra con Cimmeria se había desatado, y se luchaba indistintamente entre los tres reinos, aunque los Vanir aún no se sumaban al conflicto.

-La ambición tiene un precio alto, Padre de Todo- respondió Gurl, con mirada rencorosa- he perdido a mi mayor tesoro, a la hermosa niña que fue capaz de florecer en gracia y belleza a pesar de ser yo su padre... Loki me ha arrebatado por dos a mi familia... primero mató a mi hermano Gandrl, ahora a mi pequeña Anneke... le quitó la dignidad, le robó a su marido y finalmente la asesinó... mi venganza será muy cruel... Díselo a laufey, díselo a Thor si es que lo recuperas... me vengaré de ese maldito criminal...

-No deberías pensar en eso, Gurl... Hay destinos que no se pueden cambiar.

-Veremos si dices eso con tanta tranquilidad cuando encuentren a tu varón... a tu heredero... muerto también por el instinto de fiera de ese Jotun asesino...

A pesar de todo, Odín se estremeció... puso en manos de sus oficiales la escolta de la pareja y el cuerpo de su hija hasta su destino final, donde Anneke sería cremada. Thor, como viudo oficial, debía estar presente y ellos también, él y Frigga, como padres políticos... pero sin la presencia de su primogénito, en realidad todo estaba en medio de la duda, de la incertidumbre.

Incluso Laufey dudaba.

Tampoco el enorme soberano de los Gigantes sabía lo que estaba sucediendo. Tres días antes, Loki había regresado y robado a Thor... igual que había robado a Anneke. El estro continuaba en su clímax y empezaba a declinar, pero al ver truncada la noche de su unión y al haber desatado su instinto asesino... nada podía asegurarse... solo restaba esperar.

Que Loki regresara, que el cuerpo de Thor apareciera o que los Einherjar dieran con su paradero en los bosques o en las montañas de Asgard.

***

Cuando abrió los ojos de zafiro no reconoció el lugar, quiso volverse pero un mareo lo forzó a quedarse quieto... entonces la vista se le aclaró por completo, caía en cuenta que no solo no recordaba aquel sitio, sino que además lo veía todo borroso... pero ahora distinguía claramente las paredes y el techo de roca, escuchó a su costado la caída poderosa del agua y hasta percibió un poco la humedad de la brisa...

La cueva tras la cascada... el lugar favorito para ir a jugar de niño en compañía de su hermano... el escondite perfecto porque nadie sabía de su existencia, ni siquiera su poderoso padre y rey...

El sitio donde robara el primer beso a su hermano... a Loki...

-¡Loki...! –murmuró lastimeramente, cuando hilando los recuerdos el presente le llegaba de golpe- Loki...- repitió, aspirando profundamente para encontrar entre el aroma a piedra, a corriente de agua y a musgo... otro perfume que le embriagaba y le hacía perder la razón...

-¡Cariño!- exclamó el Jotun, arrojando al suelo los leños secos con los que pensaba avivar la fogata. Mantener el ambiente de la cueva tibio era importante, porque le brindaba comodidad a Thor, además de las suaves pieles donde reposaba... y la sopa que hervía desde hacía tres días esperando por su despertar.

Igual que en el cuarto de sanación, Loki corrió a su lado, sonrió con lágrimas en los ojos al verlo despierto y su reacción fue acudir para acurrucarse a su lado, como un cachorro huérfano, rogando por amor...

-Loki... mi corazón... mi amor...- murmuró el rubio, abrazándolo todavía con bastante debilidad, sin atinar a comprender porqué sus brazos se levantaban casi sin fuerza.

-¡Que lo eterno sea loado! ¡Al fin, cariño... al fin despiertas!- dijo el menor ansiosamente, cubriendo de besos el rostro adorado, dejando caer sus lágrimas sobre su rostro y buscando los labios continuar hablando sin dejar de besarlo- Creí que mis esfuerzos estaban siendo inútiles... comenzaba a perder la fé... pero aquí estás, aquí estás… vivo.

Loki se comportaba todavía con la irracionalidad del estro. Había hecho un esfuerzo enorme por concentrarse para ayudar a su compañero, para salvarlo del veneno contenido en la sangre de Anneke... por tres días había provocado sangrías, había lamido y bebido la sangre del rubio porque sabía que en su propia saliva estaba la cura. Se montó sobre la cintura de Thor, restregándose como un gato sobre su pecho, moviendo sus caderas sobre el centro del otro, repasando el cabello enredado, tallando su rostro de tatuajes vivos contra la crecida barba... necesitaba confirmar con cada centímetro de su cuerpo, que Thor Odinson estaba vivo y estaba consciente y aún lo amaba... y temía que dejara de amarlo después de enterarse de todo.

-¿Por qué…?- murmuró Thor, recordando por etapas todo lo sucedido- La daga te hirió... yo me sentí desmayar... pero tú estás bien ¿Verdad, amor? ¿Estás bien? ¿Cómo es que me has curado? ¿Por qué el veneno no te afectó?

-¡Oh, cariño! Esta vez algo debo agradecer a Laufey... a mi padre y a sus brutales torturas... a todos esos meses de agonía que viví en Jotunheim- explicó Loki, recobrando por un instante la calma y secando las lágrimas de su rostro- En plena guerra civil, temíamos morir envenenados... no podíamos confiar ni siquiera en los servidores que se decían leales y que nos preparaban los alimentos... entonces Laufey decidió que nos inoculáramos contra todos los venenos conocidos... uno y después otro… a dósis altas pero nunca mortales... fueron días de dolores terribles, vómitos, desmayos, fiebres... pero sobreviví... y como ellos, como mis padres verdaderos... soy inmune y tengo defensas contra todos los venenos... incluyendo el que te fue infiltrado...

-Ann... ella intentó matarme... y matarte...

-No hables de eso ahora...

-¡Debo saber! ¡Debo reclamarle!

-Primero será lo primero- cortó Loki, desviando la mirada y sin querer revelar la verdad... al menos no todavía- Y primero estamos nosotros...

-El estro...

-La unión del vino en la copa...

-Y tu aroma... ahora lo percibo... sigue fuerte y arrebatador...

-Pero debes recuperar tus fuerzas, amor... tengo un poco de sopa... estoy seguro que te vendrá muy bien... No has comido nada en tres días...

Thor aceptó, con esfuerzo se sentó y gracias a los cuidados amorosos de su adoración, pudo degustar el líquido caliente que le fue ofrecido cucharada a cucharada de las propias manos del Jotun. Tenía un gusto a tomate, a varias verduras y a pescado... obviamente, Loki cocinaba lo que estaba cerca y prefirió no ir de cacería, igual Thor aún no podía atracarse de carne estando tan débil.

Pese a llevar dias inconsciente, Thor se quedó dormido después de comer. Y al siguiente amanecer, el cuidado se repitió... esta vez comió fruta y una manzana dorada, trofeo que Loki había rescatado del cuarto de sanación sin que nadie se diera cuenta.

Una fruta de oro, de los jardines de la Diosa Feyja... la manzana que daba a los aesir su fuerza y su inmortalidad.

Con la manzana dorada, Thor recuperó en forma espectacular la mayor parte de su fuerza y de su mente... se guardó también de cuestionar sobre todo lo que recordaba, incluyendo a Loki en forma de Lobo atacando a Anneke... ignoraba porqué difería conocer el desenlace de todo, pero calculó que se debía a la influencia del período de fertilidad, porque desde esa tarde Loki olía a vainilla como nunca antes.

-Creo que esta noche no podré dormir- le dijo, bebiendo un enorme tarro con leche de cabra que le fue traído por el pelinegro- Pero no debes preocuparte... haré la guardia sentado afuera de la cascada. Tú podrás descansar sin cuidarte de mí...

-¿Sin cuidarme de ti?

-Si, amor... ahora me siento fuerte y además, te deseo... debe ser ese aroma tuyo... es difícil resistirse, recordaré los tiempos en que era yo tu esclavo... y tú, mi caprichoso dueño... y me ordenabas acostarme junto a ti, y me mandabas abrazarte y nada más... también yo he tolerado torturas de ese calibre... creo que puedo soportar tenerte cerca y solo mirarte al menos por esta noche... mañana regresaremos a Valhalla.

-¿Regresar? ¿Sin unirnos?

-Sin unirnos... ¿Recuerdas? Te prometí convencerte de que no eres usado para tener hijos... si un día lo deseas, como yo lo deseo... ya llegarán otros períodos de estro... dentro de diez... veinte... treinta años...

-¡Una maldita eternidad!- exclamó Loki, arrojándose sobre Thor y volviendo a restregar su cuerpo esbelto contra el recio y musculoso cuerpo del rubio- Pierdo la cabeza... no quiero engendrar y no me puedo detener...

-Loki, Loki... no me hagas perder el control también a mí... haz un esfuerzo...

-Te quiero... dentro...- jadeó Loki, quien tan solo con mencionarle el regreso y la decisión de ser castos esa noche, bastó para que sus instintos se dispararan y el trance regresara... no tan intenso como en el clímax del estro, no tan en estado animal, pero con la fuerza suficiente para hacerle desertar de su propósito de no unirse a Thor- Dentro de mí... solo tú... solo tú dentro de mí... ¡Cómo siempre ha sido y será!

Thor rehuyó los besos, intentó separarlo, pero no lo logró... Loki bajó de prisa hasta liberarle el cordón de sus calzas, rompió los restos de la túnica que aún vestía en lugar de camisa y lo obligó a quedarse de espaldas contra el suelo... contra el tacto suave y cálido de las pieles blancas y tostadas sobre las que dormía…

La fogata estaba avivada, el estómago satisfecho y el hambre de Loki despierta.

-Sigue...- gruñó Thor con voz grave, cuando Loki atrapó en su boca su instrumento a medio despertar... apresurado porque el rubio no se resistiera y temiendo él mismo cambiar de opinión, había ido directamente al grano... chupeteó una y otra vez, poniendo en forma aquel falo orgulloso de su tamaño y su firmeza, haciendo que su dueño pusiera los ojos en blanco y se humedeciera en pocos minutos... al mismo tiempo, su mano fue directo a sus propias nalgas, comenzando a introducirse dos dedos para prepararse y no perder tiempo.

Necesitaba consumar la unión y las consecuencias en realidad no le importaban.

-¿Te gusta? ¿Te gusto yo?- jadeó, poniéndose a sudar de deseo.

-Me encantas...- respondió Thor, sujetándolo por los hombros para obligarlo a detenerse. Con un ágil movimiento y dejando sentir que ya sus fuerzas estaban de regreso, Loki fue colocado boca abajo sobre las pieles.

Sintió primero un beso en su nuca... un beso cálido y ávido que lo hizo estremecer... después, un par de manos que lo acariciaron bajo la ropa, haciendolo gemir de placer... esas mismas manos lo desnudaron con delicadeza, mientras se retorcía apurándolo y ordenándole que ya... que lo ensartara de una buena vez, por todos los demonios de Hel... que se estaba derritiéndo de deseo... Thor se recostó sobre él, acomodándose precisamente entre las suaves y redondas nalgas para iniciar a frotarse con desesperante lentitud.

-¡Ya... Thor... ya... penétrame! ¡Hazme tuyo! ¡Hazme tuyo ya!

-Eso haré amor mío... pero eres demasiado amado por mí para que me limite a la cópula... primero te demostraré cuánto te amo... y cuánto me importas...

Aún sobre Loki, aún punteando suavemente para terminar de relajarlo, con toda la calma del mundo en esa noche de amor... Thor buscó los labios finos del Jotun y los unió a los suyos... protestándole su cariño, su fidelidad y su amor.

Protestó que cumpliría con las promesas que había hecho llegar hasta sus manos durante la guerra contra Cimmeria… Casa, comida, calor... amor...

Protestó cuidarlo como un bien precioso, con su vida misma...

Protestó respetar siempre su voluntad...

-Dices cosas tan hermosas...

-¿Soy libre, verdad?- preguntó Thor de pronto, provocando que Loki se pusiera tenso... Thor le preguntaba en llanas palabras si era libre, y eso implicaba ser viudo... Thor sospechaba que Anneke estaba muerta ya y Loki no quería responderle… La tensión no duró, porque justo en ese momento le dijo- Relájate, mi amor... y recíbeme...

Entró de un golpe y con rudeza llegó hasta el fondo, comenzando un vaivén poderoso, un hambre de poseerlo, un impulso redoblado por aquel aroma que lo volvía loco, que lo hacía perder la cordura.

-¡Soy tuyo!- jadeó Loki.

-Dímelo ahora, mi hermoso Jotun... mi adorado hermano... mi dueño... mi amado… ¿Soy libre? ¿No tengo ya ataduras?

-Si te lo digo me dejarás...

-Todo lo contrario... si me lo confirmas... jamás te dejaré ir...

Loki respondió al oído de Thor... y justo con la confesión de la verdad, con la certeza de que Anneke había sido muerta bajo su ira, el mayor explotó... un espasmo supremo y placentero precedió varios más y justo al último instante antes de comenzar a vaciarse, Thor se retiró de Loki, tomó su miembro con la mano y terminó de eyacular fuera.

Era una forma de prevenir un embarazo... una forma que no aseguraba demasiado, pero al menos, esperaba que fuera suficiente de momento.

-Terminaste afuera...

-No lo sé... eres demasiado sensual para contenerse por completo... No estoy seguro Loki... no estoy seguro que no dejé al menos las primeras gotas dentro de ti...

-¡Tanto así me amas! ¡Tanto para complacerme y recordarte de cuidar de mis deseos!

Thor lo recibió contra su pecho y ambos se quedaron muy quietos y silenciosos, sin saber que más decirse, pero plenos de amor.

Notas finales:

Gracias, gracias por sus reviews... son lo mejor...

Gracias a ellos me animo a seguir.

Gracias por leer.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).