Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El color del mar por OlivierCash

[Reviews - 30]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Antes que nada recordar que la obra original fue escrita y dibujada por Masami Kurumada y el Lost Canvas por Shiori Teshirogi

 

Perdón por la tardanza,intentare que los próximos caps sean un poco mas largos :D

Había sido un día larguísimo,pero Asmita lo había disfrutado mucho. Hasta ese momento,cuando se dio cuenta de que tenía a Aspros en la puerta de su casa. En ese momento se dio cuenta de lo cansado que estaba por el día tan largo que había tenido. No se sentía con demasiadas fuerzas para soportar a Aspros y menos cuando se había hecho ilusiones de no saber nada de él durante un día.

 

—¿Qué haces aquí?—preguntó Asmita visiblemente molesto.

 

—Venir a ver a mi prometido—contesto Aspros sonriente y se acercó a Asmita—Esta mañana no respondiste a mi llamada y como tenía tiempo me ha parecido una buena idea venir a verte.

 

Aspros acortó la distancia que lo separaba de Asmita y le dio un cálido abrazo,por su parte,Asmita no correspondió al abrazo. Pero tampoco lo apartó.

 

—Veo que no has pillado la indirecta.

 

La sonrisa se esfumó de la cara de Aspros. Bajó su cara y apoyó la barbilla sobre el hombro de Asmita,asegurándose de que su boca quedara junto a su oreja para que lo escuchara con claridad.

 

—Te recomiendo fingir un poco mejor y más cuando estamos en la calle—dijo muy seriamente—De lo contrario,ya sabes lo que podría llegar a pasar.

 

Asmita se tensó durante un instante. Contó hasta tres y soltó el aire que no sabía que tenía retenido,luego asintió. Aspros había sido muy claro y Asmita prefería tragarse su orgullo antes de permitir que el otro cumpliera sus amenazas.

 

—Muy bien cariño—dijo Asmita.

 

Aspros asintió y cambió de nuevo su cara a la sonrisa que tenía antes. Luego le dio un suave beso en la frente a Asmita y dejo de abrazarlo. Por su parte,Asmita rebusco en su bolsillo para sacar sus llaves y poder abrir la puerta de su casa. Aspros se apartó y lo observo abriendo la puerta,provocando que Asmita se sintiera incomodo al notar en todo momento la penetrante mirada de Aspros. Abrió la puerta y entró en el apartamento sin cerrar la puerta,asi que Aspros lo tomó como una invitación para entrar y paso dentro del piso cerrando la puerta una vez se encontraba dentro.

 

—¿Has cenado?—preguntó Asmita,quien ya se encontraba en la cocina.

 

—No—contestó Aspros desde la entrada—¿Tú?.

 

—Tampoco.

 

Aspros fue a la cocina donde estaba Asmita. Este estaba frente a la nevera,parecía intentar recordar lo que tenía y lo que no para preparar la cena.

 

—Te ves cansado—comentó Aspros.

 

—He tenido un día largo y encontrarte en la puerta de mi casa no ha hecho que mejore.

 

Aspros suspiró intentando ignorar el comentario de Asmita,de todas maneras ya no estaban en un lugar donde pudieran escucharlos y en cierta manera le encontraba un punto interesante a ese odio que le dedicaba Asmita. Se acercó hacia donde estaba Asmita y puso una mano sobre su hombro para apartarlo de la nevera suavemente. Él la abrió para mirar que había en ella,la verdad es que estaba más llena de lo que se habría imaginado.

 

—¿Qué haces?—cuestionó Asmita algo molesto porque lo hubiera apartado.

 

—Mirar que voy a preparar para cenar—respondió Aspros mientras se ponía a rebuscar por la nevera.

 

—¿Eh?—Asmita creyó haber entendido mal lo que Aspros le decía.

 

—Que te vayas a tumbar al sofá o algo,que la cena la preparo yo.

 

Entonces Asmita no había escuchado mal y eso le sorprendía mucho. Así que asintió y se fue a tumbar al sofá un rato. Esa situación se le hacía de lo más extraña,no se imaginaba a Aspros cocinando,ni haciendo nada similar. Pero el que una noche le preparara la cena no hacía que sus sentimientos hacía él mejoraran. Seguía amenazándolo para que se casaran y eso como era obvio,no le hacía ninguna gracia.

 

No le costó mucho a Aspros hacer la cena,acabó haciendo una ensalada y dos pequeñas tortillas de queso. Y de nuevo,para sorpresa de Asmita,él puso la mesa. Así que Asmita lo único que tuvo que hacer fue sentarse y comenzar a comer. Estuvieron un rato comiendo en silencio.

 

—¿Qué te parece?—preguntó Aspros.

 

—Siendo que pensaba que no sabías ni cocinar un huevo frito,no esta mal.

 

Aspros se rió ante ese comentario y Asmita levantó la ceja extrañado por eso.

 

—Te aseguro que se hacer muchas cosas más de las que te imaginas—aseguró Aspros—Aunque ya tendrás tiempo de verlas.

 

—No es algo que me corra prisa.

 

Y de nuevo se quedaron en silencio. Acabaron de comer y Aspros se encargó de recoger y limpiar los platos y la mesa. Por su parte,Asmita le dejo hacer y volvio a tumbarse en el sofa,aunque tenía puesto el oido en todo lo que hacía Aspros,estaba demasiado caballeroso para lo que solía ser. Aspros salió de la cocina y se sento en un pequeño sofá que tenía Asmita al lateral de donde se encontraba este tumbado.

 

—Oye—comenzó Aspros y Asmita le miró para que notara que le estaba haciendo caso— Me gustaría presentarte a mi hermano.

 

—Vale.

 

—¿Vale?¿Es lo único que tienes que decir?

 

—Podría decirte que no,pero me amenazarías de nuevo y bueno,como el que me presentes a tu hermano no me parece algo horrible y que me afecte de manera negativa,no me importa que lo hagas.

 

Aspros estuvo uno instantes cayado,asimilando lo que Asmita le acababa de decir. Apretó un poco el puño y contó hasta diez para calmarse y no responderle de malas maneras. Funcionó.

 

—Bien,me alegra,él tiene ganas de conocerte.

 

—No negare que me da curiosidad conocer a tu hermano.

 

—¿La semana que viene te va bien?—Asmita asintió—Quiero invitaros a cenar a un restaurante,es un sitio precioso. Esta sobre el acantilado y se ve toda la ciudad,con el mar y el puerto,es increíble.

 

—Espero que comprendas que a mi lo de las vistas me da un poco igual.

 

—No es solo por las vistas,es un lugar muy relajante y huele a mar. También se escucha el sonido de los pájaros y del viento. Te aseguro que te gustara—dijo Aspros muy ilusionado.

 

—Vale vale,solo di fecha y hora.

 

—Vendré el viernes que viene a las ocho para recogerte—propuso Aspros—¿Te viene bien?.

 

—Si.

 

Tras esa conversación estuvieron hablando un rato de cosas triviales y por fortuna,Aspros no tocó ningún tema que molestara a Asmita,o al menos que lo molestara mas de lo normal. Paso una hora y finalmente Aspros se despidió con un suave beso en los labios de Asmita y se marchó. Nada mas cerrar la puerta,Asmita se frotó la boca con la manga,en un estúpido intento de borrar el beso de Aspros. Luego se cambió y se fue a dormir,ese había sido un día agotador.

 

Y los días pasaron y poco a poco se iba acercando el viernes. La semana se le pasó volando a Asmita,fue una semana muy normal y sin nada que destacar. Como mucho sus encuentros con Manigoldo,con quien estaba desarrollando una extraña y curiosa amistad. Folian verse todos los días y como las tormentas todavía no pasaban,comían juntos todos los días. De vez en cuando se encontró a Degel,el cual se veía mucho más animado en comparación con la última vez que lo vio. Estuvieron varios días tomando algo juntos en el bar de Seraphina y se volvió una costumbre que ambos desayunaran juntos. Lo último destacable que le pasó es que estuvo cuidando al cachorro,el cual seguía en la casa de Hasgard y una vez que ya se hizo algo más adulto,se lo llevo a casa.

 

El jueves antes de su quedaba con Aspros y su hermano,el primero le llamo para pedirle retrasar el encuentro,había pasado algo en el Ayuntamiento y tendría que quedarse el viernes y todo el fin de semana semana trabajando,por lo que lo retrasaron para el viernes siguiente,pero volvió a ocurrir lo mismo y quedaron para la semana siguiente. Y así paso ese viernes tranquilo y llegó el sábado. Asmita notó que Aspros debía estar ocupado,ese día no le llamó. Pero él no iba a quejarse.

 

Asmita se preparó para salir,había quedado con Degel para desayunar como lo venían haciendo en esos últimos días. Se acercó hacia donde Spica,el cachorro que lo Teneo,Selinsa y Saro le había regalado y le puso la correa para dar una vuelta ya de paso. Para su fortuna,era un perro muy tranquilo y obediente y ahora lo suficientemente adulto como para poder quedarse solo en caso. En cuanto a sus cuidados,los chavales le ayudaron y le indicaron que era lo que tenía que hacer,así que él siguió sus indicaciones al pie de la letra y de momento funcionaban muy bien.

 

Salieron a la calle y Asmita pudo notar el Sol,en esas dos semanas las lluvias había ido cada vez a menos y algunas tardes había salido el Sol,ese día parecía que por fin sería totalmente soleado por fin. Caminó junto con Spica tranquilamente hasta que llegaron a la cafetería de Seraphina,en la terraza estaba Degel sentado,leyendo el periódico mientras le esperaba.

 

Asmita se acercó y se sentó a su lado,Spica se quedo tumbado en el suelo,junto a los pies de Asmita. Saludó a Degel y luego ambos pidieron el desayuno.

 

—Asmita,ahora que las lluvias están cesando,me temo que a las mañanas estaré en alta mar—comenzó Degel— Pero lo de desayunar juntos,lo podemos seguir haciendo todos los fin de semana.

 

Eso era algo que Asmita ya se imaginaba que ocurriría,aunque en el fondo le apenaba un poco,le había pillado el gusto a eso de desayunar con Degel. Por lo menos podría seguir haciéndolo los fin de semana,que ya era más de lo que desayunaba antes acompañado.

 

—Me lo suponía,no te preocupes—Degel asintió a su comentario—¿Cómo te va todo?

 

—Bueno,no me puedo quejar—contestó Degel—Me va todo bien en general,el único problema que tengo es lo de las noches en vela en el puerto y que creo que a Kardia le esta volviendo a dar fiebre—esto último lo dijo algo preocupado—Estoy preocupado por si le da cuando estemos en el mar,pero bueno,procuraré estar pendiente de él a ver si le puedo evitar esta fiebre.

 

—¿Sabes? Siempre que hablas sobre Kardia,parece que nunca vas a poder callar,cuando de normal,casi no hablas—comentó Asmita divertido y la cara que le puso Degel de vergüenza,aun sin poder verla,le divirtió aun más.

 

—Bueno,cosas que pasan,supongo.

 

—No te preocupes,lo comprendo,me hace mucha gracia,pero lo comprendo —Asmita se quedó removiendo su café— Últimamente,me siento rodeado de muchas parejas o líos amorosos en general.

 

—Te has comprometido,seguramente ahora te fijas más en esas cosas—Degel vio como Asmita negó a su respuesta— Además,no se las demás,pero mi relación con Kardia no es la más sencilla—hizo una pausa— aunque no puedo negar lo extraño que me sentiría sin eso.

 

Asmita no podía decirle la verdad,lo deseaba,pero no podía. Noto como Spica se le refrotaba en la pierna,como si estuviera dándole ánimos. Asmita se notaba extraño,por primera vez en mucho tiempo,no se sentía tan solo como lo había estado durante tanto tiempo. Por primera vez en su vida,tenía amigos,amigos que parecía haber aprendido como tratar de verdad y por primera vez en mucho tiempo,sentía que podía ver algo más que las cosas malas del mundo. Y en cierta forma,eso le daba algo de miedo.

 

—Siento que mi relación con Aspros...es..—no pudo continuar,porque no sabía como hacerlo.

 

—Cada relación es diferente,mi relación con Asmita es totalmente diferente a la de Sísifo y El Cid,por ejemplo—continuó Degel,Asmita no sabía si sospechaba algo.

 

Sin decirse nada,decidieron que era mejor cambiar de tema y Degel comenzó a leerle a Asmita los relatos que habían publicado en el periódico ese día. Como en los viejos tiempos,cuando Degel leía para Asmita. Eran tiempos extraños,Asmita había estado rodeado por las mismas personas,pero al contrario de en la actualidad,se había sentido solo. Se preguntaba si era cosa suya,que en esa época no supo llevar el tema de las amistades,o si el viaje que realizó le había cambiado lo suficiente como para apreciar esas cosas. Pero no quería preguntarse más cosas,solo quería disfrutar dell momento y así lo hizo.

 

Después de que Degel leyera los cuentos estuvieron un rato hablando de diversos temas,hasta que se dieron cuenta de la hora que era y cada cual se fue a su por su camino. Asmita fue hacía el paseo marítimo,para que Spica pudiera pasear. El día era muy bueno,por lo que se escuchaba mucha gente por el camino.

 

De repente,Asmita notó como Spica se paraba y parecía juguetear con otro perro. Él se quedó quieto esperando a que acabaran,hasta que una voz familiar,le habló.

 

—Buenos días.

 

Al principió no lo reconoció,haciendo un poco de memoria se acordó de él,era el hombre que se había encontrado en el paseo con su perra y el mismo que había entrado en la panadería y hablado con Dohko.

 

—Buenos días—contestó Asmita.

 

—Han pasado días desde que nos vimos—comentó Defteros y Asmita solamente asintió. Defteros le echó un ojo a Spica y sonrió—No sabía que habías adoptado,a uno de los cachorros de Meb.

 

—¿Tu perra fue la que usaron para entrar en el puerto?—preguntó sorprendido.

 

—Si,ya ves—admitió Defteros algo resignado—Por lo menos los del puerto me ayudaron para buscarle un hogar a los cachorros—se agachó un poco para acariciar un poco a Spica.

 

—En verdad,fueron los niños que viven con Hasgard,los que lo adoptaron para mí,aunque lo hicieron sin que lo supiera,pero bueno,tenían buenas intenciones y no les pude decir que no.

 

—Si te hubiera molestado,no habría pasado nada porque me lo hubieras traído—dijo seriamente Defteros. Luego se levantó del suelo y miró a Asmita—Aun así espero que no te este dando problemas.

 

—No,no me da problemas—hizo una pausa—es más,así me siento acompañado.

 

Defteros asintió sonriente y contento porque Asmita estuviera bien con el cachorro. Miró un momento el reloj y se dio cuenta de que debía irse ya o llegaría tarde a un compromiso muy importante.

 

—Vaya,lo siento mucho,pero debo irme—tiró un poco de la correa de Meb para que dejara a Spica—Me alegra haberte visto de nuevo—comenzó a irse,pero antes,se vio en la necesidad de decir algo—Oye,yo salgo a pasear a Meb todas las mañanas,así que no se,a lo mejor algún día,podríamos salir a pasearlos juntos.

 

Nada mas decir eso,Defteros se sintió como un autentico idiota,ni siquiera comprendió porque le había dicho eso,se esperaba una negativa instantánea por parte de Asmita. Y además,no le veía ningún sentido a eso,por lo que se decía que no era porque Asmita le pareciera especialmente guapo,sino que era para que Meb pasara tiempo con uno de sus cachorros,tenía que ser por eso.

 

—Vale.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).