Deidara y Sasori, veían incrédulos la escena… su profesor mas estricto, ¿preocupado por alguien? Madara de inmediato se apartó de Minato
- Ten más cuidado la próximas vez, torpe -dándole un ligero golpe en la cabeza
- Sí, claro -sobándose el golpecito
- Y ustedes vuelvan a sus actividades
- Si, sensei -al irse Madara- te veo luego, Deidara
Deidara y Minato se veían seriamente
- No es lo que piensas
- Lo se… lo vi todo papá, no te preocupes
- Dime, ¿Cómo van los preparativos?
- De maravilla, ¿quieres venir a verlos?
- Si no te molesta
Ambos rubios se dirigieron hacia el salón el cual estaba en proceso de decorado, por el momento las mesas estaban puestas, unas cortinas semi transparentes eran puestas en las ventanas y había chicos que aún se tomaban medidas o se probaban partes del traje. Todos lo hacían “voluntariamente” con alguna chica detrás de ellos con un abanico gigante
- ¿y qué opinas papá?
- Lo hacen muy bien, ya espero que llegue el festival… ¿y que usaran ustedes hijo?
- Como nosotros seremos los varones, usaremos un pantalón de vestir negro, camisa de manga larga blanca la cual tendrá encima un chaleco negro y usaremos guantes. Los que tenemos el pelo largo lo llevaremos recogido en un chongo.
- Te verás adorable -sonriendo
- Pa… papá…
Minato sonreía zorrunamente, como Naruto y eso alegro a Deidara, tenía mucho tiempo de no ver a su padre sonreír así desde la muerte de Kushina. Mientras tanto, en la enfermería
- ¿hasta cuándo nos tendrán aquí? - pregunto Kisame
- Hasta que tú y Tobi se recuperen - dijo Sasori
- ¿Dónde está Itachi?
- Con Sasuke, creo que Deidara aún no está de buen humor
- Jo… ¿Por qué se enojó el senpai? -dijo Tobi
- Por las burradas que ustedes dos dijeron
- Pero si no insultamos a Naruto-kun
- No, pero decir que como podía ser su hermano, para él es como un insulto, además de llamarlo fiera y esa insinuación de Itachi
- No es para tanto -agrego Kisame- eso último fue solo una broma
- Pero para Deidara no lo fue, así que más cuidado con lo digan
- Si - contestaron los dos
En la sala de maestros, Madara preparaba un discurso de apertura por encargo del director, pero esa cercanía con Minato, lo tenía distraído y más al recordar lo cerca que estaba de esa mirada.
- Ah… estoy muerto
Hashirama, llego dándose golpes en el hombro y dejándose caer en el sofá, cuando vio a su amigo distraído, el cual no se percató de la presencia del pelinegro, al verlo se le ocurrió una travesura. Sigilosamente se acercó detrás del azabache y se acercó al oído dando un leve soplo. Madara al sentirlo se puso de pie y volteo asustado, viendo Hashirama reír
- Idiota, ¿Qué estás haciendo? -viendo que no paraba de reír- deja ya de reírte
- Lo siento, Madara -limpiándose una lagrimita- no me pude resistir -riéndose otra vez
Madara solo ladeo su cabeza tocándose el oído, no le gustaba que las personas le susurraran cosas al oído.
- ¿estás haciendo el discurso?
- Si
- Pero si tienes la hoja en blanco
- Es que no se me ocurre algo aún
- ¿quieres que te ayude?
- No, ni siquiera puedes poner en orden una clase
Se escuchó una campana, Madara suspiro y temiendo voltear, vio a su amigo en su típica depresión
- ¿tienes que deprimirte por todo?
- ¿y tú tienes que gruñir por todo?, por cierto, ¿en quién pensabas?
- ¿Qué?
- Si, cuando llegue te encontré suspirando como una chica o doncel que siente amor por alguien, ¿acaso alguien ha despertado tu interés?
- Eso no te incumbe
- Anda, ¿dime quien es el afortunado?
- Desafortunado, querrás decir
Ambos pelinegros, voltearon a ver al dueño de la voz, Tobirama quien paso de largo para sentarse a descansar
- Tobirama, no seas así, Madara…
- Madara es y será un amargado, dudo que alguien se fije en el -respondió
- ¿Y eso te perjudica en algo? - pregunto Madara
- No… pero hay habladurías en la escuela, dicen que quizás seas
- Soy varón, no doncel ni gay -replico Madara- y esos comentario son hacia mi persona no a la escuela
- Lo que digas
- Y me lo dice el que tampoco tiene pareja
Madara y Tobirama se miraban con ganas de matarse, Hashirama tuvo que intervenir
- Bueno, ya es suficiente, todos tenemos cosas que hacer y hay que estar listos para cuando llegue el festival
Ambos varones solo bufaron y se fueron a sus lugares, Tobirama a descansar y Madara a escribir el discurso. El tiempo pasaba y el azabache, seguía con su labor, cuando estiro sus manos se puso a re leer el discurso y se sorprendió al ver lo que había escrito en una de las líneas: Minato
No se percató cuando escribió el nombre del rubio y de inmediato lo borro, siguiendo con su labor.
En el patio de la escuela
- Dime, Naruto… ¿Dei sigue molesto?
- ¿Tú que crees?
- Esos idiotas -suspiro Itachi- siempre tienen que empeorarlo todo
- Pero para tu desgracia -intervino Sasuke- uno es tu mejor amigo y el otro es tu pariente y que desgraciadamente, también el mío
- Lo se… Naruto, ¿Cómo puedo hacer que tu hermano me perdone?
Naruto puso mano en su barbilla, descansando su brazo derecho sobre el izquierdo.
- Lo tengo, te diré unos de los deseos de Dei, ¿estás dispuesto a cumplirlo?
- Lo que sea
El rubio sonrió zorrunamente y esa noche
- No se cómo me convenciste de venir
- Madara-ojisan, de verdad necesito tu ayuda y tú eres bueno tocando el violín
- Espero que funcione -comento Sasuke- por cierto, ¿Qué hiciste con Tobi?
- Está en un buen lugar -sonrió Itachi
En la casa Uchiha específicamente en un closet
- Hola… ¿Itachi?... ¿Sasuke?... ¿Madara-ojisan?, necesito ir al baño
En casa Namikaze, Deidara terminaba los últimos detalles de los uniformes masculinos, cuando llego Naruto
- ¿Cómo vas?
- Ya casi termino -volteando a ver a su hermano- ¿Qué tanto miras?
- Nada en especial…. Espera y veras -pensando
En eso se escuchó un violín y una melodiosa voz
Mitsu me au sono shisen toji ta sekai no naka
kidu kanai furiwoshitemo yoi wo satora resou
yake tsuku kono kokoro kakushi te chikadu ite
toiki kanji reba shibire ruhodo
arifureta koigokoro ni ima wana wo shikake te
wazuka na sukima nimo sokuseki nokosa naiyo
mie sui ta kotoba dato kun ha yudan shiteru
yoku shitta gekiyaku nara nomihose ru kiga shita
sabi tsuku kusari kara nogare ruatemo nai
hibiku byoushin ni aragau hodo
tatoeba fukai shigemi no naka suberi koma sete
tsunai da ase no kaori ni tada okasa resou
arifureta koigokoro ni ima wana wo shikake ru
wazuka na sukima nozoke ba
tsukama ete
tatoeba fukai shigemi no naka suberi koma sete
tsunai da ase no kaori ni tada okasa reteru
Mientras se escucha la canción
Deidara, Naruto y Minato, se asomaron por la ventana, el rubio mediano se quedó asombrado de ver cantar a Itachi
- Ese pedazo de idiota
- No te enojes, Dei-ni, es su modo de disculparse
Mientras tanto, Minato no podía salir de su asombro al ver que un hombre de carácter y apariencia dura como Madara, pudiera tocar tan bellamente el violín. Este noto que Minato lo miraba desde la ventana y comenzó a tocar con más entusiasmo o así fue como lo noto Sasuke, quien sonrió en secreto. Cuando vio a su dobe, le lanzo un beso con la mano, Naruto se sonrojo y simulo que lo atrapaba.
Cuando Itachi termino de cantar
- Deidara, de verdad lo siento, pero como sabes al escuchar esta canción, tu amor es un veneno que me enloquece y cuando te alejas de mi o no estoy contigo, me mata lenta y dolorosamente
La puerta de la entrada principal se abrió, Sasuke y Madara observaban, salir a Minato y Naruto, detrás de ellos, venia Deidara quien se colocó junto a su padre
- Adelante -sonriendo
Deidara solo asintió y sonrió, Itachi hizo lo mismo
- Idiota
- ¿Qué?
Y sin aviso el rubio de la coleta le dio un abrazo, ante las miradas de complicidad de Sasuke y Naruto, una de ternura de parte de Minato y otra, una sincera de Madara.