- Naruto… Naruto… ¿estás bien?
- ¿Eh? -despertando- ¿Itachi-ni?
- Menos mal –suspiro aliviado- me habías asustado
- Lo siento -viendo a todos lados- ¿Dónde estamos?, ¿Dónde están los otros?
- No lo sé, al parecer nos separamos cuando el piso de abrió
Itachi y Naruto se levantaron, mirando a todos lados, todo estaba oscuro a excepción de unas velas en las paredes, cuando una sombra paso rápido
- ¿Qué fue eso? -Naruto alarmado
- No se… será mejor salir de aquí
Naruto asintió y comenzó a seguir a Itachi, cuando la risa de un bebé se escuchó, el rubio no pudiendo soportarlo más se abrazó al azabache
- ¿estás bien?
- Lo… lo siento Itachi-ni
- Está bien -sonriendo- vámonos
Itachi pasó su brazo sobre el rubio, quien iba aferrado a su playera. Mientras tanto, en una red…
- Estos idiotas, se pasaron
- Lo sé, pero Sasuke, ¿podrías quitarte de encima?
Sasuke y Deidara yacían colgados sobre una red, el azabache encima del rubio, ambos parecían peces recién capturados
- ¿puedes dejar de moverte? - se quejó Deidara
- ¿Qué estás haciendo? - al sentir que el rubio movía su mano
- Busco, una navaja de bolsillo que siempre traigo conmigo -una vez que la tuvo- ahora no te muevas, mientras trato de cortarla
El azabache suspiro y solo espero a que el rubio pudiera cortar la cuerda. Mientras tanto, Lúthien e Izuna, caminaba sin parar
- Esto parece un laberinto - comento la chica
- Y que lo digas - respondió Izuna- ¿puedo preguntarte algo?
- Si
- Dime, ¿Por qué Lúthien?
- Es solo un apodo, según encontré es elfico
- O sea que tiene un nombre normal -la chica asintió- ¿y cómo te llamas?
Antes de que la chica pudiera responder, vieron una figura de pie
- Oye, ¿por dónde salimos?
Al ver que no respondía, ambos se acercaron pero la figura se volteó mostrando a Frankenstein
- Urrrg - gruño el monstruo
Izuna y Lúthien no pudieron evitar correr gritando, buscando la salida. Mientras tanto, Madara yacía solo buscando a sus compañeros, cuando choco con alguien
- Ahora… ¿Minato?
- Madara
Sin aviso el rubio abrazo al azabache, el cual se quedó sorprendido no se decidía su responder o no, pero finalmente lo hizo
- ¿Estás bien?
- Si… menos mal que te encontré, pero los chicos -separándose
- Lo sé, Izuna y la niña también se perdieron. Debemos buscarlos
El rubio asintió y comenzó a seguir al azabache. No supieron cuánto habían caminado, pero, se dieron cuenta que estaban dando vueltas en círculos
- Esto parece un laberinto -comento el rubio
- De hecho lo es… por eso se levantaron esos muros… estos chicos sí que se pasaron
- Pero admítelo, lo hicieron bien
Madara solo bufo, cuando vieron que algo se acercaba, sin darse cuenta, Minato entrelazo su mano con la del azabache, quien hizo lo mismo tomando una postura protectora. Pudieron divisar que se trataba de un esqueleto colgado, los adultos solo se hicieron a un lado, cuando varias puertas se abrieron
- Esas puertas… no las había visto - comento el rubio
De pronto salieron varios zombies, dispuestos a atacarlos, pero antes de que Madara hiciera algo, Minato lo detuvo sujetando más su mano. El azabache decidió correr junto al rubio, cuando el piso se rompió bajo sus pies, cayendo los dos.
Lúthien e Izuna hacían lo propio huyendo de murciélagos verdaderos
- ¿a quién se le ocurrió esto? - pregunto la chica
- Tú solo corre - le respondió Izuna
Deidara y Sasuke seguían colgados, el primero lo lograba cortar las cuerdas
- Es inútil - suspiro el rubio
- Deidara
- Si
- Dime, ¿Por qué Naruto es tan cobarde con estas cosas?
- Bueno, él tenía 5 años, cuando lo llevamos aun parque de diversiones, el cual tenía un cocodrilo como mascota y como sabrás tiene que haber una botarga
- ¿no me digas que una botarga lo asusto?
- Pues… si, sin querer un adulto tiro la cabeza del disfrazar y el pobre tipo de inmediato comenzó a buscarla. Obviamente Naruto se le quedo viendo, al cuerpo sin cabeza y que preguntaba por su cabeza. El tipo se acercó a él y Naruto comenzó a llorar. Y lo peor, es que ese misma noche, papá llevo una película de terror y
- Digamos que sin querer, comenzó a temer a los fantasmas
Deidara sonrió y asintió, Sasuke tenía una expresión pensativa. De pronto la red fue cortada y ambos cayeron al suelo.
- ¿estás bien?
- Sí, pero quien…
Sasuke no termino la frase, cuando vio unas cabezas cercenadas las cuales aún gemían, el azabache y el rubio subieron su mirada hasta ver a un hombre de capa negra con nubes rojas con un cuchillo en su mano izquierda
- ¿Quién quiere ser el próximo?
- Sasuke… corre
Ambos comenzaron a correr del hombre, el cual se reía divertido. Mientras tanto, Minato recuperaba el conocimiento, viendo a un muy asustado Madara llamándole, aunque no podía oírlo. Parpadeo unas tres veces, hasta que dejo de ver borroso y pudo oír al azabache
- Minato, ¿estás bien?
- Si… ¿qué paso?
- ¿seguro?, ¿no estás herido? - pregunto asustado
- Estoy bien -sonriendo
Madara coloco su mano izquierda sobre el hombro del rubio, agachando su cabeza. Minato lo veía extrañado
- ¿Madara?
Y sin aviso, el azabache lo beso, Minato abrió sus ojos sorprendido y sintió su corazón latir con fuerza. Lentamente puso sus manos sobre los hombros de Madara con la intención de separarlo, pero no lo hizo. Cuando termino el beso, el azabache lo abrazo
- Madara… -susurro
- Me habías preocupado… no lo hagas de nuevo
Minato solo asintió, estaba ruborizado a más no poder, aun así se acurro en el pecho de Madara cuando escucho su rápido latir de su corazón
- Kushina, te amo, pero creo que encontré el amor de nuevo - pensó el rubio