Esa noche, todos felicitaban a Madara y Minato, en especial Jiraiya
- Estoy sumamente feliz por ti hijo- dándole un efusivo abrazo
- Gracias papá
- Y tu -dirigiéndose a Madara- sé que cuidaras bien a mi hijo y mis nietos
- Lo hare
Amos estrecharon sus manos, mientras Tsunade suspiraba, aunque también quería expresar su emoción, no le daría gusto al azabache de verla “derrotada”.
- Mamá
- Felicidades hijo
- Tsunade-san -hablo Madara
- Ven aquí “hijo” -dándole un abrazo- si lo haces llorar, lo haces infeliz o lo lastimas… se mil y un maneras de hacer la vida imposible -susurrándole al oído
- Pues se quedara con las ganas, madre
Se pudo sentir una gran tensión entre los dos, por lo que Jiraiya intervino
- Muy bien, querida ya basta o se podría mal interpretar
- Lo siento, es que estoy feliz -soltando al azabache
En eso Deidara y Naruto dieron un paso al frente, el primero serio y el segundo sonriente
- Me alegra que quizá forme parte de nuestra familia, Madara-sensei -expreso Naruto
- Pero no por eso, significará que goces de beneficios - le contesto Madara
- ¿pasa algo Dei? - pregunto Minato
- No, estoy bien - sonriendo- solo que estoy algo cansado. Felicidades, papá; Madara-sensei -estrechando su mano- si me disculpan iré a dormir
- Descansa
El rubio de coleta camino veloz hacia su cuarto, una vez solo, se dejó caer sobre la cama pensativo. Se debatía si hacia mal en no apoyar a su padre o si hacia bien en ser frio con Madara, aunque este no se lo merecía.
Mientras tanto, en la sala, Jiraiya había preparado un banquete para celebrar que su hijo tenía pareja. Mientras se esperaba a que llevaran la comida, Minato no pudo con la curiosidad
- Y ya que están aquí, Hashirama, ¿Cómo conociste a Mito?
- Fue durante una conferencia. Yo daba una conferencia sobre el uso excesivo de plantas medicinales y Mito… bueno -viéndola
- La verdad es que yo me dedico al arte de arreglos florales y al saber de esa conferencia no pude resistir -respondió Mito
**FLAS BACK**
Luego de la conferencia, Hashirama recibía muchos halagos por la investigación que había presentado. Cuando una bella pelirroja con peinado de dos chongos, se acercó a él con una flor
- Senju-san, su trabajo es increíble
- Gracias -recibiendo la flor
Ambos se sonreían mutuamente, para luego separarse. Mientras tanto, tras bambalinas, Tobirama yacía de brazos cruzados esperando a su hermano, luego de ver tan inusual escena
- Pensé que no terminarías
- Lo siento, pero cómo pudiste ver, la conferencia fue un éxito… solo espero que con esto, la escuela de Konoha reciba más fondos y suba su prestigio
- Yo no me refería a eso -viendo a la pelirroja y Hashirama hizo lo mismo
- ¿de qué hablas?... sabes que apenas termine mi relación con Madara
- ¿Y?, eso no te impide rehacer tu vida
- Pero aun no me siento listo -haciendo un puchero
- Como quieras, ya es hora de irnos
Los hermanos, iniciaron su andar, Tobirama vio que Mito no quitaba sus ojos de su hermano, el peli blanco pensó que tal vez si tendría su oportunidad con el azabache, ya que en ese entonces, le gustaba Madara, pero su hermano no lo sabía. Sin embargo, pasaron meses y como si el destino lo quisiera, Hashirama y Mito se frecuentaban más y más. Hasta que formalizaron su relación.
**FIN FLASH BACK**
- Eso sí que es curioso -hablo Jiraiya- es lo mismo que nos pasó a Tsunade y a mi
- ¿en serio abuelo?
- Si Naruto, yo presentaba mi nuevo libro y tu abuela dio una conferencia sobre el tratamiento de la hemofilia -recibiendo un coscorrón
- ¿Por qué no eres más honesto y admites que me conociste en el baño de mujeres según tu para inspirarte para escribir tu nuevo libro?
- ¿hiciste eso papá?
Todos veían al peli gris con una gotita en la frente, mientras Tsunade tenía una venita en la frente. En eso, la comida empezó a llegar, siendo servida por Haydee y 1827
- Haydee
- ¿si, Jiraiya-sama?
- Dile a todos los chicos, que como hoy estamos de celebración, recibirán un bono extra de mi parte y por el excelente trabajo que han hecho
- ¿de verdad?
- Si
- Gracias señor
Haydee y 1827, sonrieron y reverenciaron para darle la noticia a sus compañeros. Luego todos se empezaron a servir, aunque Minato tenía un gesto preocupado, la causa: Deidara. Esto no paso desapercibido para Izuna e Itachi, después tratarían de hablar con él.
La cena consistía en pollo cocido al vapor, acompañado de verduras. De beber, sake y jugo. Todos degustaban el platillo con gusto. Tobirama por su parte suspiro un poco al pensar en la oportunidad que pensó podía tener con Madara, pero luego sonrió para sí, pensando que en realidad, él no hizo mucho para acercarse al azabache. De pronto sus pensamientos fueron interrumpidos
- ¿más puré, Tobirama-san? - Izuna le acerco el tazón
- Si, gracias
Al momento de tomar el tazón, sus dedos tocaron las palmas de Izuna, notando lo suaves que eran y ambos pudieron sentir como una especie de cosquilleo, sin embargo, el azabache solo sonrió al peli blanco para volver a degustar su comida. Cuando Tobirama volvió en sí, se extrañó al no percatarse que Izuna estaba sentado junto a él.
- ¿Qué diablos pasa conmigo? - se preguntó el peli blanco
Mientras tanto, Hashirama observaba a su hermano con una sonrisa, pues había presenciado todo y reconoció esa mirada. En cuarto, Deidara no dejaba de mirar al techo cuando, llamaron a la puerta
- Pase
- Con permiso - era Haydee con una bandeja de comida- Minato-sama, pidió que le enviaran esto - dejándolo sobre una mesita
- Gracias
- Con su permiso
- Espera…
La joven vio al rubio algo curiosa, mientras este miraba al suelo, luego alzo su vista y le hizo espacio en su cama, indicándole que se sentara, Haydee lo hizo
- ¿puedo preguntarte algo?
- Claro
- Pero antes, imagino que debes saber algo de mi situación, ¿cierto?
- Si, Jiraiya-sama nos lo confió
- ¿crees que estoy siendo egoísta al no ser como mi hermano mostrando apoyo a mi padre?
- No -Deidara la vio extrañado- si no hubiera apoyado a su padre, no hubiera dado su consentimiento a Madara-san para cortejar a Minato-sama
- ¿solo eso?
- Bueno, para mi es fácil hablar, pero creo que debería darle una oportunidad a Madara-san, ¿Por qué no intenta conocerlo?
- Lo mismo me ofreció Izuna -respondió el rubio- y creo que le tomare la palabra… solo que aún no estoy listo
- Entonces, hágalo cuando lo este, antes de que sea tarde
- Gracias por escucharme, Haydee -sonriéndole
La joven se puso de pie, reverencio y sonrió para salir del cuarto. Deidara vio la comida y en ella vio una nota que le envió su padre: “Jamás olvidare a tu madre como tú… pero de verdad quiero que le des una oportunidad a Madara. Te quiero, atte. Papá”
Deidara sonrió ante la nota y dispuso a comer, mientras lo hacía pensaba en su decisión de acercarse a Madara, pero antes, le tomaría la palabra a Izuna para conocerlo