La noche era lo bastante larga, jungkook suspiró agotado, le dolía el trasero y apenas sentía las piernas, era un milagro que este de pie, pero el trabajo es trabajo, se adentro en el host club viendo como las damas estaban lo bastante entretenidas con los retos que habían para hoy, y es que esta noche tenían oportunidad de hacer lo que quieran con cualquiera de los anfitriones, claro, si ganaban algunos retos, sigilosamente entra directo a la sala de empleados y se empieza a preparar, tenía que ocultar su cansancio o las mujeres sospecharían.
—Jaque Mate — Dice Jimin con una sonrisa, feliz por haber ganado de nuevo, ya perdió la cuenta de cuantas veces ganó ¿Quince tal vez? Y ganaría otras quince mas con tal de que ninguna vieja roñosa lo bese o haga lo que quiera con el —¿Quién es la siguiente, dulces señoras? —Música con un tono que excitaría a cualquiera, y es que así se sentían las damas que se encontraban cerca de Jimin.
—¡¿De esto se trataba la “noche caliente”?! —Masculla Tae en otro rincón sirviendo bebidas, al lado se encontraba Jin, quien se reía en su cara. Pues claro, no todo es como uno lo piensa, ahí se encontraban las mujeres, reunidas en diferentes mesas con uno o dos anfitriones, habían diferentes juegos, si ganaban, podrían besar al anfitrión o tocarlo donde quisieran, era una oferta muy tentadora para muchas.
—Te la creíste— Dijo Suga quien estaba al lado suyo acomodando unas barajas de cartas con su mirada neutra —Jin es muy malo cuando quiere, hasta engaño a Jimin, míralo, se lo ve bastante relajado. Luego de a verse reído tanto Jin se fue a participar en los juegos, perdería apropósito, total está soltero.
—Siento que puedo respirar en paz —Admite observando como Jungkook sale, otra vez el aire regreso a sus pulmones y se quedó ahí ¿En qué momento vino? Se supone que seguiría durmiendo —Mierda ¿Y si Jungkook pierde? —Taehyung empalideció, sólo imaginarse eso provocaba que se llene de angustia —¡Voy a participar también! ¡Suga encárgate de la barra! —Le dice nervioso, Taehyung quería sacarle todas las mujeres posible, Suga suspiro viendo a los tortoles.
—Suerte campeón —Le dice a V, sabía cómo era Jungkook cuando trabajaba, y una mirada tierna del menor llamaba más la atención que cualquiera, Taehyung la tendría difícil.
Mientras tanto, Jimin se sentía terriblemente mal por dentro, un enorme vacío lo atormentaba. Sí, tenía que alejarse de HoSeok cuanto antes, o si no, no tendría escapatoria, llegará a un estado en que no pueda vivir sin él y está seguro que casi llega a esa etapa. Tenía que calmarse, estaba en horas de trabajo, no podía perder para nada ¡Sentía que su castigad estaba en juego!
“Nadie nos aprueba” Pensé de repente, sacudí mi cabeza y me centré en el juego, joder, casi me comen al caballo, me estaba distrayendo demasiado, la mujer ya podía oler la victoria y todas la miraban impresionadas. Después de unos minutos dándole la vuelta al juego, por fin pudo ganar.
—¡Casi! —Gritó la mujer, Jimin con una “sonrisa” en los labios se acercó a ella y la besó en la mejilla.
—Suerte la próxima, mi reina—Le susurró en su oído provocando que la rubía de enormes pechos operados casi se desmaye ahí mismo, se levanto sin salir del trance y unas amigas la ayudaron a irse.
“¿Por qué reaccionan así? Ni que fuera perfecto” Pienso desanimado, sólo era un nerd que se la pasaba en la biblioteca, no tenía vida, sólo se arreglaba para venir aquí, cuando en realidad apenas cuidaba la piel de su rostro y su cabello... si no fuera por V seguiría igual de desaliñado.
—¿Quién sigue? —Pregunta ordenando el tablero, odiaba perder, y ahora más que nunca necesitaba ganar.
Mientras tanto Suga seguía atendiendo la barra mientras interactuaba con algunos clientes, NamJoon lo observaba de lejos, Suga se dio cuenta de eso y NamJoon al verse descubierto fue hacia sin ningún tipo de vergüenza.
—Deja de mirarme en el trabajo —Murmuro fijando toda su atención en las copas que estaba fregando.
—Eso es imposible, me gusta verte así —Dijo con una sonrisa apegándose a el, Suga se encogió de hombros y retrocedió al instante. —Estas interactuando mas con las clientas, eso me agrada, antes sólo unas pocas sabían tu nombre —Dice, Suga se relame sus labios secos y se talla los ojos, tenía sueño.
—No me fijé en eso —Admite, aunque por dentro sentía que había avanzado.
—Incluso estas dejando el alcohol, mírate, estás atendiendo la barra con normalidad —Le dice acariciando su mejilla, a Suga le agarra un ligero temblor al sentir su cálida mano en su fría y tersa piel.
—Aún me cuesta contenerme…— Y por que nada era fácil, le picaban las manos cada vez que veía alcohol en un vaso y sentía la garganta seca, hubo muchas veces en la que Jin tuvo que reemplazarlo al sentir que iba a explotar, es difícil, pero nada es imposible.
—Oigan —Voltearon sus miradas y vieron a la persona menos esperada —¿Dónde está Jimin? ¿Por qué hay más gente de lo normal?
—HoSeok… pensé que estabas enfermo —NamJoon frunció el ceño —Te voy a despedir —HoSeok se rió de manera estruendosa, golpeando la mesa de la barra con el puño.
—¡Sabes que no sirvo para esto NamJoon! —Dijo entre risas —¿Dónde está Jimin? Mierda, hay demasiada gente, tenemos que hablar seriamente ¿Y mi amigo? —Tampoco veía a Taehyung.
—Taehyung esta ayudando a Jungkook a que no pierda ninguno de los juegos y Jimin, como siempre, arreglándoselas solo— Dijo NamJoon, HoSeok lo miro extrañado sin entender.
—Hoy es un día especial— Empezó a decir YoonGi aclarándose la garganta. — Cada clienta que viene tiene la oportunidad de retar a uno de los chicos a un juego que esté disponible, si uno de los anfitriones pierde, este tendrá que dejarse tocar o besar por la mujer, estará a su merced y nadie lo podrá ayudar, en cambio, si gana el anfitrión, la chica sólo podrá recibir una foto de él ¿Me explico?
En su boca se formo una “o” y asintió lentamente, era muy interesante y original, además tentador para la mayoría, luego su cara cambió a una mueca nada divertida y sintió su corazón encogerse.
—¿Jimin perdió?— Preguntó urgente, el menor no le había dicho nada de esta noche, iba a hablarle al respecto.
—Pff… ese niño es bastante inteligente, hasta ahora lleva una racha de victorias impresionante, nadie le gana —Aseguró NamJoon, HoSeok se cruzó de brazos y arqueó una ceja.
—¿Me lo podré llevar si gano?— Preguntó, eso sería una buena excusa, sabía que Jimin no quería hablar con él, pero tenía algo para decirle y pedirle disculpas por el comportamiento de su madre. Suga miró a NamJoon y suspiró, en cambio el menor tomo una bocanada de aire.
—Por supuesto que sí—Dijo rascándose la cabeza— Ahora vete, quiero estar con Suga —Abrazó al mayor por detrás y no pudo evitar soltar un quejido al sentir el golpe que le propinó en su estomago, le había dado un codazo.
—No me abraces así, no me gusta —Desvió la mirada y se concentró en limpiar copas ya relucientes. NamJoon sonrió y le propinó un beso en la mejilla antes de volver a hacer papeleo en su oficina.
—¡Toma! ¡Te gane! —Gritó Jungkook en su cara, Taehyung bufó molesto, hacía mucho que no jugaba poker— Bueno chicas… ¿Quién es la siguiente? —Una morena con una exquisita cintura dio paso adelante, Taehyung estaba que desprendía fuego por la boca, perdió la oportunidad de llevárselo lejos, apretó los puños y retrocedió, esperaría su turno otra vez, otra vez a rogar que ninguna quiera llevarse a Jungkook.
—¡No es justo Jimin! ¡Siempre ganas! —Se quejó una mujer haciendo una mueca tierna, o al menos eso fue lo que trató de hacer —¿Eres un alíen o algo? —Dijo preparando su celular y así sacarse una selfie. Jimin fingió reírse a carcajadas.
—Soy sexy, simpático, encantador e inteligente ¿Qué más quieren chicas? —Dijo luego de sacarse la foto, la le dolían los músculos de la boca por sonreír tanto, pero sabía sobrellevarlo.
Las mujeres suspiraron encantadas y no se percataron de que alguien se les adelanto en la fila, a Jimin se le borró la sonrisa en menos de un segundo y una notoria preocupación se notó en su rostro, trago grueso al ver esa mirada llena de satisfacción del contrario.
—Con que Jimin es un genio en ajedrez, no te veía así— Le guiño el ojo, todas las mujeres miraban curiosas la actitud de Jimin, algunas ya sabían que habían entre ellos, pero las nuevas no.
—H-HoSeok… ¿A qué viniste? —Dice arqueando una ceja, tratando de recobrar la compostura, pero HoSeok tenía ojos de águila, eso lo hacía sentir como un indefenso conejo, y como todo conejo tenía que huir antes de ser devorado por el águila.
—Había venido para verte, como hago seguido, pero no espere que hoy tuvieras un evento especial —Dijo viendo como Jimin acomodaba las piezas nervioso —Estas exquisito hoy —No dudo en decir frente a todas, Jimin lo miro acojonado, no pudo evitar sonrojarse y apretar los labios sin saber que decir, si llevaba lo mismo que tenía hoy al mediodía, sólo se cambió el estilo de cabello y se puso otra musculosa más decente para el lugar.
—N-no tenías por que venir —Digo encogiéndome de hombros, empezando, moviendo un peón.
—Iría a cualquier lado con tal de ver tu carita asustada — Jimin trago grueso, sus manos estaban temblando, las mujeres ya estaban empezando a cotillear entre ellas.
—N-no es gracioso, HoSeok —Dijo Jimin cortante, sus manos le sudaban y el ambiente no era el adecuado. —Te ganaré, y te irás —Dijo Jimin con todo el valor que logró juntar. HoSeok largó una risa estruendosa, ya empezó el juego, HoSeok empezó usando su potencial al máximo y debilitar al menor.
—Eso veremos, cachetes — Jimin largó un bufido, sin embargo, le costó ocultar su asombro al ver la Jugada de HoSeok.
Tenía acorralado a su caballo, y si hacía avanzar la torre esta sería comida por ambos lados, sólo le quedaban dos peones y HoSeok tenía cinco, además su reina estaba intacta y aún conservaba sus dos torres sanas. Jimin apretó los labios, la cosa se le había puesto complicada.
—¿Qué pasa Jimin? Vamos, que me aburro —HoSeok largo un bostezo y Jimin no pudo evitar apretar los puños de rabia ¡¿Cómo podía ser tan… tan…creído?! Del enojo movió a la reina sin pensar, gran error.
—JaqueMate — HoSeok alargó su sonrisa y Jimin empalideció, miró a HoSeok con sus ojos agrandados, viendo esa sonrisa oscura. Las mujeres aplaudieron a HoSeok ¡Jimin había perdido! Y de la manera más humillante, la partida había durado poco y el menor se llenó de vergüenza por eso.
—Bueno Jimin, creo que tienes que irte, TaeHyung te reemplazara —Dijo NamJoon, había observado la partida, TaeHyung estaba detrás de el.
—Nos vemos bro —Dijo, viendo como era llevado por HoSeok a la salida, Jimin en ese momento era como un muñeco, no podía moverse del miedo —Bueno chicas ¿Quién quiere jugar conmigo? —Llamó la atención de las mujeres enseguida, ya se encargó de Jungkook, ahora ayudaría a su amigo como siempre hizo.
—H-HoSeok espera…— El sentía que era arrastrado sin rumbo alguno hasta que vio el coche de HoSeok ¿A dónde quería llevarlo? Paró en seco. —¡Q-que esperes digo! —HoSeok volteó con el ceño fruncido, Jimin arqueó una ceja —¿E-estas enajodo?
—Claro que no Jimin —Dijo con un notorio sarcasmo —Mi novio está trabajando en un host, jugando con varias clientas, si gana, se saca una simple foto, y si pierde… —Jimin retrocedía a medida que HoSeok avanzaba, trago grueso hasta que sintió la pared de un local detrás suyo, HoSeok apoyó ambos brazos alrededor de él y los apoyó en la pared, quedando a pocos centímetros del rostro de Jimin. — ¡Tendrá que hacer cualquier cosa que esas viejan quieran! ¡¿Enserio pensaste que iba a dejarte estar ahí?! —Jimin empezó a temblar, HoSeok estaba gritando muy cerca de él y eso lo encogía haciendo que se sienta como una hormiga.
—L-lo siento… —Esta vez no oculto su temor y empezó a temblar, de sus labios sólo salían pequeños balbuceos inentendibles y sus ojos se humedecieron —N-no planeaba perder…iba ganan…—.
—¿Y si perdías qué? No te confíes Jimin, esas roñosas harán lo que sea para tener a jóvenes como tu —Le explicó conteniendo su voz, podía sentir la respiración entre cortada y nerviosa del menor, su corazón vibró —Quiero que dejes ese trabajo — Dijo firme, Jimin negó.
—N-no puedo —Murmuró y apoyó ambas manos en el pecho del mayor —La paga de ahí es buena, n-necesito el dinero —Trataba de explicar —Tu eres rico HoSeok… n-no puedes entenderlo.
— ¿El dinero para qué? —Preguntó acariciando sus mejillas — No pagas alquiler, estas estudiando en una universidad gracias a una beca completa, sólo tendrías que gastar en comida y ropa de vez en cuando, pero viendo cómo vas a la universidad apuesto a que compras ropa en oferta y muy barata. ¿En qué gastas lo demás, Jimin?
Jimin no sabía que decir, es más, no podía decirle nada sobre sus problemas, tenía que salir de ahí.
—N-no puedo decirte… —Desvió la mirada al notar el ceño fruncido del mayor.
—Mírame a la cara cuando te hablo —Dijo irritado sujetando ambas mejillas del menor con fuerza, ya no le importaba que el menor le tuviera miedo, le irritaba el hecho de que le oculte cosas, quería saber todo de Jimin, incluyendo sus problemas. —¿Tienes un problema financiero tan grande como para vender tu cuerpo, putita? —El corazón del menor se encogió.
—J-jamás haría algo así… — Una punzada en el pecho dejo a Jimin como piedra, era un dolor mínimo que iba aumentando a medida que HoSeok seguía hablando ¿Por qué se veía decepcionado?
—Tsk, como sea, dime cuanto es el monto y te lo pagaré, típico de los pobres, se meten en deudas que no pueden pagar después ¿Acaso ni siquiera tienen cerebro o algo? por eso viven su vida llena de hambrunas y miser... — No pudo decir más, un fuerte y certero puñetazo lo hizo callar de golpe, haciendo que se caiga en medio de la vereda vacía.
—N-no digas mas… los pobres tenemos dignidad ¿Sabes? —Jimin se limpió sus lagrimas, le dolía el corazón —¿Tu que sabes de los problemas de la gente pobre? N-no estamos así porque queremos —HoSeok se sobó la mejilla y miró al menor, nunca lo vio enojado — L-lamentablemente nos tocó esta vida llena de dificultades y peligros… ¿pero sabes? Prefiero vivir así, a que ser como los de tu clase —El menor se limpió las lagrimas que le restaban y se volteó dispuesto a volver al host, sintió como HoSeok agarraba su muñeca, pero no volteó, sentía que la punzada en su pecho aumentaría con solo verlo.
—Jimin sé que me pase de la raya, pero no me gusta que trabajes en un lugar así —Jimin se soltó de su agarre sin decir una palabra.
—L-le diré a Jin que me lleve al hospital d-donde se encuentra mi madre —Explicó —Mañana seguiré trabajando, las deudas de mi padre no se pagan solas, p-pero claro tu eres rico, no entiendes de esas cosas. —Jimin se encaminó a la puerta trasera, HoSeok en cambio se quedó fundido en esas palabras que le rondaban en su mente…
“HoSeok, la cagaste” Pues claro, había herido a Jimin.
—Joder, me olvide que es muy sensible —Le dio una fuerte patada a la pared del local en el que habían discutido, no tardó en quejarse del dolor, ahora tenía que arreglar todo, una disculpa sería lo ideal, pero aún le costaba decir esas palabras.